Mr and Ms Popular

Mr and Ms Popular {EDITANDO}

by stayweirdluke

Ambos eran Mr. & Ms. Popular.

¿Qué pasa si uno tiene que enamorar al otro?

¿Quién será más listo?

"Ambos somos más iguales de lo que crees."

{EN PROCESO DE EDICIÓN}

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Mr and Ms Popular [EDITADO]

¿Qué pasa cuándo se juega con un mujeriego? Siempre terminas enamorándote y con el corazón roto.

¿La chica mala? La que utiliza a todos y no se toma nada enserio, pero tiene algo más que esconder.

Pero, ¿Qué pasa cuándo ambos son iguales? Ambos están cortados por la misma tijera,son tal para cuál, solo hay un problema.

Son mejores amigos.

Ambos se han besado, acostado e incluso celado, pero eso no hace que su amistad se convierta en algo más. No se ven como nada más.

Cuando los amigos de ambos hacen una apuesta con cada uno, todo comenzará a cambiar.

"Enámoralo y después rompe su corazón"

¿Quién será más listo de ambos?

¿Quién romperá el corazón de quién?

¿O se romperán ambos corazones?

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Idiota Popular [EDITADO]

Uno:

-Entonces, ¿Quieres que te quite a Kyle de encima?-Austin estiró sus brazos sobre el pasto.

-Dios Austin, lo haces sonar como alguna clase de maníaco.

-¿Eso es un sí?

-Tal vez, no ha dejado de acosarme desde hace tres días-me recosté a su lado-No entiende que no quiero nada serio.

-Nadie lo hace-me dedico una sonrisa de comercial-Por eso eres mi mejor amiga.

-Yo creo que eres mi mejor amigo porque ya no había otros disponibles-ambos reímos.

-Te lo quitaré de encima, solo quería asegurarme de que ya no querías acostarte con él otra vez-quito el cabello que cubría sus ojos.

-Ya rompí una de las reglas, me acosté con él por toda una semana-fruncí el ceño ligeramente.

-¿Una semana? Y no quieres que crea que lo de ustedes es algo serio-murmuro mientras se sentaba lentamente.

-¿Estas intentando decirme algo?-yo también me senté.

-No lo sé, la regla dos es de la más importantes y la rompiste.

-¿Cuántas veces no la has roto tú?-murmure molesta.

-No se trata de mi esta vez-¿Esta vez? me reí en su cara.

-Discúlpame por ser egoísta.

-No seas sentimental Kate solo fue una respuesta reflejo.

-¿Una respuesta reflejo?-fruncí el ceño ligeramente, cada vez sus explicaciones perdían más sentido.

-Respuestas que tengo listas cada vez que comienzo a discutir con alguien-se encogió de hombros.

-Púdrete Austin-me puse de pie rápidamente, los estudiantes comenzaban a mirarnos a ambos-¿Nunca no han visto pelear?-todos desviaron la mirada rápidamente.

-Estas haciendo una escena-Austin se levantó también.

-¿Escena? Solo les estoy recordando que esto no les importa-respondí ácidamente.

-Vamos Kate, cálmate, sabes que esto es una escena-tomó mi brazo suavemente.

-No me toques-murmure con los dientes apretados-Siempre soy yo el problema ¿Cuándo te darás cuenta de que somos iguales? Tú y yo somos todo lo que el otro odiaría tener en una relación.

-Eres mi mejor amiga Kate, eso es algo-aparte mi brazo bruscamente, siempre decía lo mismo, nunca aceptaba que era exactamente igual a mí.

-Vamos, Kate-Jo tomó mis cosas y me miro pacientemente-Déjalo ir.

Mire a mi amiga, siempre aparecía cuando estaba apunto de pelear con Austin y me sacaba del lugar antes de que hiciera algo de lo que me arrepentiría.

-De acuerdo-camine hasta Jo y ella entrelazo nuestros brazos.

-Vamos a clase-negué mientras me obligaba a regresar a la escuela, no quería ir a clase.

-No quiero ir-me quejé mientras arrastraba los pies.

-Solo evito la tercera guerra mundial-sonrió mientras jalaba mi brazo para guiarme dentro de la escuela.

Había peleado antes con Austin, ¿Por qué decía Jo que la tercera guerra mundial?

-Bien-murmuré mientras Jo caminaba tranquilamente ¿Por qué Austin tenía que ser tan complicado?

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Matthew Daddario es como yo me imagino a Austin solo que con ojos azules, sorry si no les gusta pero para mi así es como es Austin.

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Austin [EDITADO]

Dos:

-¿Crees que puedo dejarte sola sin que provoques una guerra?-Jo me miro mientras se ponía de pie.

-Solo fue una vez y esa chica me había tocado los nervios-me cruce de brazos mientras la miraba.

-Claro, iré a mi casillero por mi libro de física, solo quédate aquí-se marchó rápidamente.

Bufe molesta y mire mi celular, Austin no se había disculpado aún, ese hijo de puta me iba a escuchar. Él se había acostado con chicas por más de un mes, ¿Qué derecho tenía de reclamarme por acostarme con alguien por una semana?

Tan solo de pensar en él me daban ganas de golpear a alguien, ¿Por qué tenía que ser tan complicado? ¿Por qué seguía siendo mi amigo?

-Supongo que no esperas un mensaje de Kyle.

Aparté un mechón de cabello de mi rostro y me cruce de brazos.

-Vamos Kate, no me digas que sigas molesta-lo miré y por un momento quise golpearlo, con Austin tenía que aprender a controlar mi ira o todo iba a salir mal.

-No quiero verte Austin, entiéndelo-murmure tomando mis cosas.

-Kate-su gran mano atrapo mis dos manos, en esos momentos odiaba tener manos pequeñas-Lo siento, se que no podía decirte eso, yo he roto esa regla muchas veces, pero no somos iguales-sabía que Austin no podía aceptarlo nunca.

-Déjame ir Austin-hable fríamente-Si dices que no somos iguales, no se porque sigues siendo mi amigo, ¿Qué quieres? ¿Sexo? Es lo único que puedo ofrecerte.

-No-negó y me miro fijamente a los ojos-Eres mi mejor amiga, la única con la que puedo hablar y puedo

no tener compromisos si nos acostamos.

-Supérate Austin y consigue algo mejor que eso-logré zafar mis manos y me puse de pie rápidamente-Cuando tengas algo mejor que eso, puedes buscarme.

Encontré a Jo en la salida, esperándome y con las llaves del auto en mano.

-Vamos, te llevaré a casa-camine hasta el auto de color azul eléctrico y subí en silencio.

-Enserio, lo lamento, no pensé que no lo fueras a perdonar-Jo rompió el silencio a la mitad del camino-Por lo regular cuando pelean se arreglan en menos de dos horas.

Suspiré y baje el volumen de la radio-No es diferente esta vez-admití-Es solo que comienza a llegar a mis nervios el hecho de que sigue negándose a ver que los dos somos exactamente iguales, yo soy lo que él odiaría tener de novia y él es el chico del cuál mi padre me alejaría y me obligaría a mudarme a otro país.

-¿Enserio es tan idiota?-Jo detuvo el auto frente a mi casa.

-Probablemente-me coloqué el suéter rosa cuello V que mi padre me había regalado para Navidad y me quite las botas negras para remplazarlas con unos zapatos de piso rosas. Baje el espejo y maquille mis mejillas con un color rosado, además de recoger mi cabello en una coleta.

-¿Cuánto más hasta que te sigas cambiando en mi auto?-reí por el comentario de Jo, había hecho esto por años y ella seguía quejándose.

-Tú haces lo mismo-apunte a su montón de ropa en la parte de atrás del auto.

-Solo cuando estoy con mamá-se defendió.

-Claro-abrí la puerta y baje del auto-Gracias por traerme-sonreí y con mi mochila en el hombro, camine hasta

mi casa.

-Llegué-mi padre me recibió con una sonrisa en la cocina y me miró de pies a cabeza.

-Ese te lo di en Navidad-apuntó a mi suéter y sonrió con orgullo-Te queda bien-sonreí forzadamente, era una talla más chica que yo y era un rosado chillón, además de que comenzaba a sospechar de que me estaba provocando una reacción alérgica a la piel.

-¿Qué hay para comer?-desvié el tema de conversación.

-Oh, pues, pensé que habías comido con tu amiga-me miró apenado, mi padre era como un niño pequeño.

-No te preocupes-sonreí débilmente-Es solo que nos quedamos estudiando en la biblioteca después de clases y ella tenía un compromiso con su madre, así que me dejo aquí y se fue.

-Me alegra que te esfuerces en tus estudios-se dirigió a la barra-Aunque debes salir a divertirte un poco, eres joven y hermosa. Nunca me has presentado a un chico-me tendió un sandwich.

-Papá-tomé el sandwich y me senté en una de las sillas de la barra-No soy lesbiana si eso piensas-respondí divertida.

-¡No! ¡Dios! No quería decir eso querida, no tengo nada contra los gays o lesbianas, es solo que algunas veces me preocupa que pases más tiempo estudiando que siendo una chica normal que sabe divertirse.

"Y de que manera" me encogí de hombros y le sonreí a mi padre-No te preocupes, estoy bien-mordí el sandwich.

-De acuerdo, estaré en mi habitación revisando manuscritos, por si necesitas algo-besó mi frente y después subió las escaleras.

No me gustaba cuando mi padre se preocupaba por mi "vida social" tenía suerte de que fuera lo bastante discreta y de que él se la pasará leyendo algunos intentos de libros en su habitación o en su oficina.

De alguna otra manera, ahora estaría en un avión con dirección al lugar más alejado del mundo.

Dejé mi sandwich a un lado en cuánto un mensaje llegó a mi celular.

"Yo invitó la cena, ¿Tú padre esta en casa? Pensé que podíamos cenar y después hablar"

Austin.

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¿Qué ven las chicas en Austin? [EDITADO]

Tres:

Camine con paso tranquilo hasta el apartamento de Austin, el muy hijo de puta vivía solo, un regalo de sus padres por tener la iniciativa de querer irse de su casa, muy bien, ellos solo aplaudían sus pendejadas.

-Me alegra saber que la comida sigue siendo tu llamado-me recibió con una sonrisa en cuanto abrí la puerta, gracias por la llave idiota.

-Mientras tu pagues-me quite el suéter rosa, quedando solo en un brassier negro.

-¿Regalo de tu padre?-señaló el suéter que ahora se encontraba en su sofá.

-Aja-camine hasta su habitación y saqué un playera del primer cajón, para después ponérmela.

-Solo le faltan gatitos y te aseguró que mi hermanita lo usaría-inspeccionó el suéter con ojo crítico.

-Tiene 15 años-le quite el suéter y volví a lanzarlo al sofá.

-Exacto-caminó hasta la cocina-Ordene comida china-salió de la cocina con una bolsa entre sus manos y después acomodó todo en la mesa.

Me senté en silencio y tomé uno de los paquetes de comida para después vaciar el contenido en un plato.

-Así que-Austin se sentó delante de mí-¿Cómo estas "chica buena"?-la ironía estaba más que clara en su voz.

-Muy gracioso-hice una mueca-Papá piensa que estoy en casa de "Jenny" terminando un trabajo de biología, tienes dos horas-murmuré.

-No entiendo porque actúas delante de él-comenzó a comer.

-No lo hago Austin-lo mire molesta-Es mi padre.

-Si, como sea, no te invite a hablar de tu padre-siempre hablaba con la boca llena, ¿así lo haría con las chicas

que conquistaba? Por que bien, eso no era atractivo-¿Sigues molesta?

Pase una mano por mi cara-No Austin-respondí cansada, si no terminaba con esto de una vez, no dejaría de hacer esa pregunta y yo lo terminaría golpeando-Tema superado.

-Bien-su sonrisa creció y yo reí porque tenía comida en los dientes.

-Enserio, no entiendo lo que las chicas ven en ti.

-¿Aparte de esto?-señaló su rostro y su cuerpo y yo reí más fuerte-¿Qué ven los chicos en ti?

Dejé de reír y lo mire ofendida-¿Enserio?-me puse de pie-Tal vez es el hecho de que me veo sexy utilizando cualquier cosa, incluso ese horrible suéter rosa-señalé el sofá.

-¿Cuántos chicos preguntaron por tu número cuando venías?-me miró interrogante.

-Dos, el primero era un nerd y el segundo un estúpido que me quito al nerd de encima.

-¿A quién se lo diste?-una sonrisa divertida estaba en su rostro.

-A los dos, puede ser divertido-me encogí de hombros y volví a sentarme.

-Yo también soy sexy-lo mire esperando su historia-¿Recuerdas el día que perdí la apuesta?

-Claro, me reí tanto ese día que lloré-comencé a reír al recordarlo-Verte fingiendo ser gay por un día entero ha sido lo mejor de mi vida.

-No me lo recuerdes-escondió su rostro entre sus manos, aquel día lo había llevado conmigo a comprar ropa interior, cuándo entramos a "Victoria's Secret" y las chicas se le comenzaron a insinuar y a coquetear con él, no pude más que contener la risa al ver su cara de sufrimiento por no poder corresponder o como él le llama, "socializar" con ellas.

Para que todas supieran que era gay, le pregunté si el chico que estaba con otra chica que parecía ser su hermana era guapo, y era bastante guapo, Austin respondió con un "si" como le había enseñado y al ver la cara de desilusión algunas chicas, animé a Austin a que le pidiera su número, claro que él me estaba matando mentalmente, pero valió tanto la pena ver la cara de ilusión del chico al ver a Austin acercándose, definitivamente era gay, que desperdicio de ojos verdes. El chico le dio su número a Austin mucho antes de que él pudiera terminar de presentarse, mi amigo en verdad tenía suerte con los dos, hombres y mujeres.

-Muy lindo-reí, nunca me cansaría de reírme de él por eso.

-De acuerdo, olvídalo-gruño y volvió a prestarle atención a su comida.

Deje de reír y lo mire curiosa, siempre me había preguntado que era lo que las chicas le encontraban especial, era guapo y estaba bueno, había que darle puntos por eso. Pero sencillamente era tan...Austin, no había otro modo de describirlo, sus cambios de humor, su manera de ver la vida, incluso su manera de comer era tan propia de él.

-Si quieres que nos acostemos solo debes decirlo-reprimí la sonrisa.

-Debo irme, mi padre se preocupará-me puse de pie y me quite la playera de Austin para remplazarla con mi suéter rosa.

-Vamos, te llevaré a casa-tomó sus llaves mientras seguía masticando.

Repito, no se que le ven las chicas.

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La apuesta [EDITADO]

Cuatro:

Mire a la maestra de historia, hablaba sobre la Revolución Rusa. Austin estaba durmiendo en su escritorio mientras que todos se dedicaban a anotar.

Ya me había aburrido, le había sacado fotos a Austin dormido, había ido al baño, había coqueteado con el cerebrito de la clase e incluso había hecho recados de parte de la maestra y seguía aburrida. Prácticamente había resuelto el hambre en el mundo en menos de dos horas y seguía aburrida.

-Los Románov fueron la familia-continué anotando en mi cuaderno, mucha historia del mundo.

-Señorita Poynter, despierte al señor Max-no había sido una pregunta, era una orden.

Asentí y después tire a Austin de la silla, pero aún así no se levantó.

-Lo lamento, tiene el sueño un poco pesado-murmure y me arrodille a un lado de Austin, tenía resaca el muy idiota. ¿A dónde había ido después de dejarme en mi casa? Gruñí y me acerque a su oído-Austin, cariño, eres tan guapo-susurre y pude sentir una sonrisa en sus labios-Ahora despierta para que puedas decirme a donde fuiste anoche sin mí maldito idiota-me separé y lo abofetee fuertemente, provocando que se levantará sobresaltado.

-Juró que fue Marcus-me miró inocentemente.

-Claro que lo fue-me puse de pie y volví a sentarme, de nuevo, molesta con él.

-Señor Max, si no le interesa mi clase, le interesará el trabajo de dos cuartillas sobre la Revolución Rusa que debe hacer por quedarse dormido en la clase, para mañana-la maestra dejó de ponerle atención a Austin y continuó dando su clase.

Austin volvió a

sentarse en su silla maldiciendo en voz baja.

Salí lo más rápido que pude del maldito salón en cuanto la clase termino, no quería ver a Austin ni tampoco soportar sus quejas por el trabajo que tenía que hacer.

Salí al techo de la escuela, el conserje me dejaba esconderme aquí cuando peleaba con Austin o sencillamente quería esconderme de alguien. No era más que un techo, pero la altura nunca me había molestado ni tampoco la suciedad, eran factores que no me importaban.

-Escuché a Austin quejarse-Jo se sentó a mi lado y le dio un trago a su botella.

-Es un poco temprano-le arrebaté la botella y tome un trago-No puedo aguantar sus quejas si sigo dormida.

-Nadie lo aguanta si esta crudo y además esta quejándose-volvió a quitarme la botella.

Reí, ese Austin era mi amigo.

El idiota borracho mujeriego y todo cliché de las historias.

-No se que ven las chicas en él-mire hacía abajo, los estudiantes caminaban tranquilamente a sus clases, todo lucía diferente si lo mirabas desde otra perspectiva.

-¿Tú que crees?-señaló al suelo y pude apreciar a Austin tocándole el trasero a la chica que estaba de intercambio de Australia mientras ella se reía y jugaba con su cabello.

-La creía más inteligente-me encogí de hombros-Entonces, ¿Tú que crees que sea?

-Yo diría que puro físico y si le caes bien tal vez un poco de personalidad.

Continúe mirando la escena-Te apuesto una cena a que la lleva a la oficina de Connor.

James Connor era nuestro psicólogo escolar, el psicólogo más joven que había visto nunca, tenía 22 años, debía

de ser algún tipo de prodigio porque se graduó mucho antes. Era amigo de Austin y lo dejaba tirarse chicas en su oficina, algunas veces Connor se acostaba con chicas ahí también. Austin me había prohibido acercarme a él desde la vez que nos encontró sobre su escritorio.

-No me arriesgaré a perder esta vez-sonreí y mire a mi amiga-Tengo algo más interesante para ti que apostar donde Austin se va a tirar una chica.

-Bueno, si involucra dinero, por supuesto que estoy dentro.

-Involucra más que eso-sonrió-Haré de tu último año algo inolvidable, por cierto, felicidades por Oxford.

Dejé de sonreír-Gracias-aparté la mirada-No iré a Oxford Jo, mi padre no puede pagar más de un semestre ahí, aplicaré para una universidad aquí en California, tampoco quiero presionarlo.

Ir a Oxford era un sueño para mí y mi padre, estudiar Literatura e idiomas era lo que quería igual mi padre, pero mi padre no podía pagarme los años de la carrera, aún con la beca que me ofrecía la escuela, era imposible.

-Creí que tenías la beca.

-Jessica-murmure-Fue con un juez porque dijo que lo que le daba papá no era suficiente para sus bastardos, así que de lo que gana mi padre, más de la mitad va para ella y el resto para nosotros, no podría pagar Oxford ni con la beca.

-Yo puedo ayudarte-la mire, Jo tenía una madre humilde y un padre horriblemente rico, desde que su esposa/amante murió en un accidente de auto, le había dejado todo a él, claro, salía con una maldita modelo. Además de que Jo había conseguido salir con un junior de la escuela, ese chico era bastante tonto.

-No.

-Bien, lo entiendo-suspiro y la mire-Si ganas la apuesta te pagaré la mitad de la Universidad, la otra mitad la pagará tu beca-fruncí el ceño.

-¿Qué clase de apuesta?

-Una que te divertirá bastante-miró en su bolso y sacó su celular-¿Interesada?

Asentí, ¡Iría a Oxford!

-Involucra a Austin-la escuché atentamente-La apuesta consiste en que debes enamorarlo y después romper su corazón ¿Puedes hacerlo?

¿Qué estaba sucediendo? ¿Desde cuándo Jo pensaba de esa manera? Había algo escondido aquí.

-¿Tengo límite de tiempo?-¿Estaba aceptando?

-Hasta el final de año, tienes seis meses-se encogió de hombros.

Enamorar a mi mejor amigo, eso sonaba extraño.

¿Cómo se puede jugar con el jugador?

-¿Aceptas?

Austin era todo lo que yo no quería y yo era todo lo que él no quería.

Si jugaba bien mis cartas, tal vez tenía una pequeña oportunidad.

Vamos, era mi futuro el que estaba de por medio, no podía perder esto.

Podía hacerlo.

Podía enamorarlo.

-Trato-estreché su mano.

Enamoraría al Señor Popular.

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Luke [EDITADO]

Cinco:

Me dejé caer en el sofá, y mire a mi padre que revisaba las cuentas en el comedor.

Sonreí para mis adentros, ¡Iría a la Universidad de Oxford! ¡Tenía un futuro!

-¿Cómo te fue en la escuela?-mi padre lucía cansado.

-Bien-ganaría y conseguiría ese dinero.

-Cariño-mi padre me miro y se quitó los lentes-Escucha, sobre Oxford, lamento no poder hacer mucho por ti, he intentado razonar con tu madre pero ella es tan terca.

Suspiré-Deja de hablar con Jessica, ella no debe importarle lo que quiera hacer con mi vida.

-Lo sé, es solo que hemos hablado de ir a Oxford desde que eras una niña, es nuestro sueño y lamento que no puedas ir.

Apreté los labios-Esta bien papá, déjalo ir.

-No, cariño, escúchame. No habrá más Universidades, ya encontraré una manera de convencer a tu madre.

-Papá-advertí, esta conversación ya la habíamos tenido antes, había más opciones que solo Oxford.

-Vamos Kate, solo...

-Basta-me puse de pie molesta y tomé la sudadera que estaba en el sofá-No puedo con esto ahora mismo-camine hasta la puerta y la abrí, no queriendo mirar atrás, porque si lo hacía, me sentiría culpable-Volveré en un par de horas-fue lo último que le dije antes de salir de la casa.

¿Adónde podía ir? Estaba molesta con Austin por salir anoche sin mí, Jo seguiría hablando de la apuesta y ahí estaban mis dos únicas opciones, genial, necesitaba más amigos.

Caminé sin rumbo, era increíble, llevaba años viviendo en California y solo conocía Disneyland y Venice Beach, no conocía otro lugar.

Teniendo en cuenta de que yo venía de Australia, un lugar relativamente alejado de todo, esta era una gran ciudad para mí.

-¿Tomando una caminata nocturna?-mire al chico que estaba delante de mí, lo había visto un par de veces en la escuela y algunas fiestas de Austin. 

Me encogí de hombros, no quería una plática en ese momento, ni en ningún otro. Al menos, no con él.

-Eres poco conversadora, ya veo-sonrió, tenía aspecto de chico malo, él estaba con los moteros de la escuela, esos chicos que conducen motos y visten de cuero, era un círculo pequeño y nunca me había llevado relativamente bien con ellos por culpa de Austin-Soy Luke, si eso te interesa-la chaqueta de cuero se le pegaba al cuerpo y se veía que estaba bueno, sería mejor comprobarlo.

-Kate-sonreí-Y no soy exactamente el tipo de persona que entabla una conversación.

-Bueno Kate, ¿Dónde dejaste a Max?-me reí, todos creían que siempre tenía que estar con Austin.

-Con alguna chica australiana.

-Lo sé, era mi novia hasta esta tarde-deje de reírme y comencé a maquinar un plan, tal vez Luke quería revancha porque Austin se tiró a su novia o algo así-No te lastimaré-lo mire frunciendo el ceño-Ni siquiera lo había pensado, tal vez quiero golpear a Max, pero tu no tienes la culpa de su estupidez y que no piense con la cabeza, si no con el pene.

-Buena esa-Luke era guapo, ese cabello rubio y sus ojos cafés lo hacían tan normal, pero tan guapo a la vez-Así lo quiero.

-Él se pierde lo que tiene delante-si seguía así me sonrojaría-¿Quieres ir por un café? Al menos que quieras

tomar en miércoles, podríamos ir por unos tragos-negué divertida.

-El café estará bien.

No entendía porque Austin odiaban tanto a los moteros, bueno, Austin era parte de los deportistas sin cerebro populares, así que él y los chicos malos no iban juntos.

-Este lugar tiene el mejor café-Luke me abrió la puerta del lugar. Sonreí en agradecimiento y entré, el lugar era pequeño, pero acogedor, las paredes eran de un rosa suave y parecía una pequeña casita de muñecas.

-¡Luke!-una chica salió de detrás del mostrador y abrazó a Luke, tenía los mismos ojos de Luke, solo que su cabello era pelirrojo.

-Molly-Luke sonrió y abrazó a la chica de regresó-Vengo acompañado-la chica se separó y me vio curiosa.

-Es bonita-me sonroje levemente-Siéntate donde quieras querido, te llevaré café y pastel de cortesía-corrió detrás del mostrador.

-Que agradable-me senté en una mesa cerca de la ventana, los manteles eran de un azul pastel y había todo un juego de té sobre la mesa, era encantador.

-Bueno, es mi hermana, tiene mi carácter-reí, Luke era realmente agradable.

-Que modesto-la chica llegó con una charola llena de cosas y las empezó a colocar en la mesa.

-Este es de vainilla y ese de limón-señaló dos pasteles-Espero que te gusten-me dedicó una sonrisa.

-Gracias-tomé el de vainilla-Por todo-ella asintió y se fue.

-Le caíste bien-Luke tomó el de limón.

-Me cae mejor que tú-le puse azúcar a mi café.

-Auch-ambos reímos-Así que cuéntame, como una chica tan agradable como tú termino siendo mejor amiga de alguien tan estúpido como Austin Max.

-Bueno...En realidad es bastante agradable una vez que lo conoces, además, él fue la única persona que me trató bien cuando llegué a la ciudad, y no en un modo de coqueteo, si no que de verdad bien.

Luke asintió pensativo-Ya veo.

Luke había resultado ser un chico agradable y chistoso, la cafetería era de su hermana y como dije antes, era bastante guapo.

-¿Nos vamos?-me tendió su brazo y yo lo tomé divertida.

-Ahora que se que no eres un asesino, podríamos ir por esos tragos-salimos de la cafetería.

-Podríamos-volví a reír, esa noche me había reído bastante-Eres una buena persona Katherine Poynter. Déjame llevarte a casa-señaló su moto.

Mordí mi labio, solo había ido en una motocicleta un par de veces y en la última Austin terminó en el hospital y yo con el brazo roto.

Mire al frente, ya era tarde para irme caminando.

-Claro-sonreí y tomé el casco que Luke me ofrecía.

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Taco Bell

Seis:

Aquel día Austin no había pasado por mí, así que tuve que correr literalmente a la escuela, porque el muy estúpido no me había avisado.

De no ser porque Luke paso mientras corría por el parque, nunca hubiera llegado a la escuela a tiempo.

-Gracias Luke, enserio-le entregué el casco-Te vas a ir al cielo con todo y chamarra de cuero.

Luke rió, su risa era encantadora-Cuándo quieras Kate-me guiño un ojo y me tendió un papel-Mi numero por si algún día necesitas mis servicios de transporte.

Lo guardé en la funda mi celular, así no lo perdería-Lo tendré en cuenta-caminé dentro del edificio, mi primera clase era economía.

Fruncí el ceño al ver que Austin ya estaba en su lugar, ese hijo de puta me las pagaría, él ya estaba en la escuela mientras que yo tenía que correr.

A ese paso nunca ganaría la apuesta, si seguía haciéndome enojar, el único que ganaría sería Austin y sería una patada en las bolas de mi parte.

Me senté en mi lugar y esperé a que Connor llegará, ¿Quién lo había nombrado capaz de dar una clase de economía? Si apenas y sabía en que salón debía dar clase.

-Hola chicos-Connor tenía una gran sonrisa, seguro se la habían chupado antes de llegar, o estaba drogado, ninguna de las dos me importaba-Hoy tienen clase libre, pueden irse si quieren-se sentó en el escritorio y sacó un cigarrillo-¿Alguien gusta?-un par de chicos, incluido Austin se pusieron de pie y tomaron uno. Oh no, él no...

Escuché el ruido del encendedor y me giré, Austin iba

enserio.

-Eres un idiota-quite el cigarro de sus labios y se lo lance a la chica de adelante-Te lo regalo-ella lo tomó y volvió a girarse.

-¿Qué demonios Kate?-Austin frunció el ceño.

-Tú no fumas-señalé molesta.

-Claro que lo hago-comenzó a jugar con el encendedor.

-No, al menos que sea marihuana.

-Deja de comportarte como mi niñera Kate, que no lo eres-apreté los labios.

-Perdón pero no quiero que mi mejor amigo muera por un estúpido cáncer-me puse de pie y tomé mi bolsa, eran las 7 de la mañana, no pelearía tan pronto.

-¿Qué hacías con Ronan?-me detuve antes de dar mi primer paso y mire a Austin-¿Te acostaste con él?

-¿Qué tiene que ver Luke?

-¿Ya le llamas Luke? ¿Cuándo es la boda?-Austin se estaba volviendo loco.

-Es muy temprano para pelear contigo, cuando dejes de ser un idiota, me buscas-salí del salón, no sin antes tomar un trago de la botella que Connor me ofrecía en su escritorio.

Maldito Austin, malditos todos. Lo único que quería en esos momentos era huir lejos de California, irme a otro lugar del mundo, lejos de todos los idiotas llamados Austin Max que pudiera haber en el mundo, aunque estaba segura de que solo había uno.

Camine al jardín y me acosté, ni siquiera me importo el hecho de que estuviera mojado el pasto.

-¿Café?-Luke se sentó a mi lado y me tendió un vaso de plástico.

Lo mire, ¿No debía estar en clase?

-También tenía la primera hora con Connor, nunca me molesto en entrar a su clase-eso explicaba porque siempre había un lugar vació en su clase.

Me senté y tomé el café

que me tendía, era de la cafetería de su hermana.

-Gracias-le di un trago, estaba delicioso.

Ambos nos quedamos en silencio, era agradable el silencio entre los dos, no como con Austin que siempre estaba hablando o haciendo algún ruido.

-Así que...-Luke me miró y sonreí, lo besaría, sus labios me estaban tentando.

-El café esta delicioso-me acerqué lentamente hasta él.

-Eso es bueno-sonrió y junto nuestros labios, sabía a café y a menta, y sus labios, dios. Besaba casi tan bien como Austin.

¿Por qué lo comparaba con Austin? Fácil, él era la primera persona a la que había besado y el único que sabía besar, no como los otros chicos.

Nos separamos y sonreí, Luke era bueno para más de un rollo de una noche, de eso estaba segura.

-¡Kate!-mi sonrisa se borró y suspire frustrada, no por favor-Saliste de la clase de Connor y ni siquiera pude hablar contigo-Austin, su altura era intimidante, apostaba que a Luke le sacaba unos pocos centímetros.

-Ahora no Austin-mascullé-Estoy ocupada.

Si me iba a salir con estupideces, podía irse a la mierda el niño.

-Ronan-su voz era desprecio y desagrado, ¿Enserio Austin? ¡Te tiraste a su novia!-¿Cómo esta Rachel?-No, Austin seguía pensando con el pene como siempre.

-De seguro arrepentida-Luke se encogió de hombros-Digo, termino en tu cama. Pobre, de seguro ya tiene alguna enfermedad sexual. Gracias por transmitírsela.

Quise reír, pero sabía que estallaría una guerra si lo hacía, así que me mordí el labio.

-Claro, por eso estas con Kate, eres patético-Lo repito, huir de este lugar.

Luke frunció el ceño y se puso de pie, oh, eran casi de la misma estatura.

-Vamos Max, te tiraste a mi novia, Kate puede quedarse fuera de esto-Se me antojaban unos tacos,mmm, Taco Bell sería bueno.

-¡A ella no la tocas!-me puse de pie en silencio y me dirigí a buscar a Jo, de seguro ella también quería tacos de desayuno.

Esos dos podían quedarse arreglando sus problemas de "Yo soy más macho que tú, yo me quedo con la chica" y yo me iría a tomar un buen merecido desayuno, odiaba el drama.

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Luke esta buenísimo

Siete:

Mire a mi padre, estaba intentando cocinar desde hace una hora, lo cual no era algo normal en él.

-¿Dijiste que saldrías hoy?-fruncí el ceño, nunca me prestaba atención cuando le decía que llegaría tarde.

-Sí, ¿por qué?

-Nada, dame la pimienta-le tendí el frasco y continué mirando.

-¿Por qué cocinas?

-Umm-mi padre era un pésimo mentiroso-Unos compañeros del trabajo vendrán a cenar-asentí poco convencida, esa era una cena pequeña, dos o tres como máximo.

Si algo me había enseñado el idiota de Austin era a saber cuando alguien me mentía.

-¿Te molesta si me quedó en la casa de Jo?-espero que no escondas nada.

-Para nada, solo recuerda que mañana es día familiar-era viernes, los fines de semana eran familiares, según mi padre.

Salí de la cocina en cuanto vi las luces afuera de la ventana.

-¡Nos vemos!-tome mi chaqueta del perchero y corrí fuera de la casa, no quería que mi padre viera la moto de Luke o estaría en graves problemas-Arranca y después te beso-ordené subiendo a la moto y agarrando a Luke.

-De acuerdo-Luke arrancó, comenzaba a agradarme andar en moto-Ahora puedes besarme-se detuvo en el parque donde me había recogido aquella vez.

Sonreí y lo bese, Luke era demasiado bueno besando, debería ser ilegal.

-A mi padre la daría un infarto si me viera-reí, Luke iba todo de negro, junto con su chaqueta de cuero, mientras que yo, utilizaba unos shorts y una camisa semi transparente, estaba tan concentrado cocinando que ni siquiera le puso atención a mi vestimenta-Y probablemente

te asesinaría-mi padre siempre había odiado las motocicletas decía que eran para gente irresponsable y vagos.

-Supongo que nunca conoceré a tu padre-reí y Luke también, cuando Luke reía, su nariz se arrugaba junto con su piercing. Debía admitirlo, el piercing en la nariz lo hacía irresistible.

-Vamos, no quiero quedarme sin alcohol-volví a subir a la moto y Luke arrancó.

La fiesta era de Alex, un amigo de Austin. Pero era ese tipo de fiestas donde todos estaban invitados, no importaba si te caía mal o no, incluso había gente que no era de la escuela, al fin y al cabo, era Alex quien limpiaba.

-¿Cerveza o vodka?

-Cerveza-Luke se perdió entre la gente. Había más gente de lo que había pensado, tal vez el doble que la vez anterior.

-¡Kate!-Jo brincó en mis espalda y beso sonoramente mi mejilla, genial, aún no era medianoche y ya estaba ebria-Viniste con Luke Ronan, ¿Desde cuando eres amiga de los moteros?-cuando estaba ebria se ponía en plan entrevistadora.

-Desde que Luke esta terriblemente bueno-tome de su vaso, tequila.

-Siempre ha estado bueno-me tendió un limón-¿Qué pasa con nuestra apuesta? Austin estaba arriba la última vez que lo vi.

-Lo haré, pero antes necesito un poco de diversión-pude ver a Luke abriendose paso entre la gente-¿Dónde esta Matt?

-Arriba-repitió y me quito el vaso-Con Austin, Derek trajo de la buena y querían probarla, esperaba que estuvieras con ellos-Luke me tendió una botella de cerveza y yo la tome.

-Iré más tarde, no creo que la terminen en una hora-tome un sorbo de la botella.

-Les diré

que te guarden-caminó torpemente hasta las escaleras.

-¿Amiga tuya?-la gente saludaba a Luke como si lo conocieran de toda la vida, algunos lo ignoraban, otros lo miraban con miedo y otras con ganas de desnudarlo ahí mismo. Pero a él parecía no importarle.

-Podría decirse-mordí mi labio, Luke estaba buenísimo.

-¿Qué dices si subimos?-Luke me acercó a él y beso suavemente mi cuello-Y terminamos con esto-sonreí y enrede mis piernas en su cadera.

-No se que esperas-ambos nos besamos y Luke comenzó a subir los escalones torpemente, las escaleras estaban llenas de gente, pero el segundo piso estaba relativamente tranquilo-Al fondo, a la izquierda, dos puertas, la blanca-comencé a quitar su chaqueta. Esa era la habitación en la que nunca había gente, siempre terminaba llevando a Austin ahí cuando estaba demasiado borracho.

Luke siguió mis instrucciones y nos metió a ambos al cuarto, cerrando la puerta con seguro detrás de él.

-Luke, espera-lo separé y tome su cara entre mis manos, debía decirle lo que siempre le decía a todos-Entiendes que esto no es algo serio ¿verdad?

Luke asintió y me apretó más a él-Podemos hacer de esto algo casual.

-No somos pareja, no somos nada más-aclaré.

-Lo se, todos lo saben-ahora que todo estaba en buenos términos, podía seguir con Luke.

-Espera, Kate, hay otra cosa-fruncí el ceño-¿Estas segura de que Max no me golpeará?

-¿Por qué Austin te golpearía?

-Porque eres su mejor amiga.

Asentí poco convencida, tal vez Luke pensaba que si me acostaba con él me olvidaría de Austin y me uniría a los moteros.

-¿Qué tiene que ver eso Luke?-reí un poco para aliviar la tensión que empezaba a formarse.

-Si esto sigue-se zafó de mis manos y beso mi cuello-Y Max se entera, entonces me golpeará-sus labios eran suaves-Entonces, creo que debería aprovechar-sus manos pasearon por mis piernas.

-Creo que deberías-sonreí y lo bese.

No me importaba si Austin se enteraba, en esos momentos Austin no me importaba.

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Nunca cambiaría a Austin por nadie

Ocho:

Luke me llevó hasta mi casa en la moto, la noche anterior nos habíamos ido de la fiesta y había pasado la noche en su casa, ahora utilizaba la ropa de su hermana y estaba recostada en su espalda, habíamos pasado de largo mi casa, no quería llegar aún después de ver un auto bastante conocido fuera de mi casa.

-¿Quieres comer algo?-asentí y me acerqué más a Luke.

Ahora entendía porque siempre utilizaba la chaqueta de cuero, era cómoda y estaba calientita, además de que tenía su loción.

Luke se detuvo en la cafetería de su hermana y ambos bajamos de la moto, aún seguía medio dormida, así que no puse objeción en cuanto entrelazo nuestras manos, incluso puse mi cabeza en su hombro, cualquiera que nos viera pensaría que éramos una pareja, más si yo utilizaba su chaqueta.

Ambos nos sentamos en un gabinete y Luke le hizo unas cuantas señas a su hermana, a las cuales, ella asintió con una sonrisa.

Así, junto a Luke, me sentía cómoda, incluso me motivaba a volver a dormir.

-Café y pan tostado-Molly dejó todo sobre la mesa y me dedico una sonrisa, para después alejarse.

Luke y yo nos movimos perezosamente para alcanzar todo y empezar a comer.

Ambos comimos en silencio, creo que ambos todavía estábamos hechos polvo por la noche anterior.

-¡Eso no fue lo mejor!-un grupo de chicos ruidosos entró a la cafetería, ¿Ellos no tenían resaca o algo parecido?

-¡Viste a la rubia!

Todos parecían chicos de primero, pobres perdedores,

estaba segura de que no habían tomado y solo alardeaban entre ellos.

-¿Si? Pues yo tendré a Katherine Poynter en mi cama-me atragante con el pan y fruncí el ceño, eran de primero.

-Ella no se acuesta con cualquier idiota-bien, al menos uno de ellos usaba una neurona.

-Austin Max te matará si se entera-dos estaban usando sus neuronas, debería darles una medalla.

-Anoche la vi con Luke Ronan, ¿A quién creen que matará primero?-esos chicos parecían chicas chismosas.

-¿Creen que dejará a Max por el chico malo?-tomaron asiento en una mesa y siguieron hablando.

-Y luego dicen que las chicas somos las chismosas-reí, pero Luke mantenía el ceño fruncido-¿Qué sucede?

-¿No te molesta que hablen así de ti?-me encogí de hombros.

-Austin siempre se ha encargado de los chicos que hablan de esa manera, puedo manejar a las chicas.

-No siempre va a estar Austin ahí-deje la comida en la mesa.

-¿A qué quieres llegar Luke?

-Tu vida gira alrededor del idiota de Austin Max-fruncí el ceño-No siempre tienes que estar besándole los pies, aprende a ser independiente Kate.

-¿Y luego qué? ¿Me largo contigo y ahora dependo de ti?-replique sarcásticamente.

-¡Podría ser!-el tono de voz de Luke había subido y ahora todos nos veían, igual que las viejas chismosas que habían detenido su conversación y nos observaban sorprendidos.

-¡Solo fue una noche Luke! ¡Hablamos de esto antes de tener sexo!-grite exasperada y me puse de pie-¡Maldita sea Luke!

-¡Deja de pensar en Max por un momento y ve por ti misma!-Luke también se puso de

pie.

-¡No correré a tus malditos brazos o a los de ese idiota!

-¡Tal vez quiero que corras a los míos!

-¡No quiero nada contigo!-me quite su chaqueta y la lance a la silla-¡Nada!-comencé a sacarme la ropa, de todos modos, era de su hermana y yo no pensaba conservarla.

-¡¿Qué estas haciendo Kate?!

Deje la ropa sobre la silla-¡Vete a la mierda Luke!-salí de la cafetería con la mirada de todos, era buena dando espectáculos ¿no? Años de practica con un idiota como mejor amigo.

No era como si las personas de la escuela nunca me hubieran visto en ropa interior, había perdido apuestas y sido víctima de suficientes bromas como para que estuvieran acostumbrados a verme de esa manera.

Estaba molesta, Luke no había entendido en su linda cabezita rubia, que yo no quería nada serio. Era un rubio tonto.

¿Cómo coños iba a entrar en mi casa? No podía simplemente tocar el timbre y ya.

-¿Mala noche?-reí y negué.

-Siempre me encuentras en mis mejores momentos-el sarcasmo me hacia feliz y a él no le molestaba.

-Ten-me tendió su chaqueta y yo la tome, para después ponerla sobre mis hombros.

Él también tenía resaca, nadie nunca utilizaba lentes oscuros a las diez de la mañana en una mañana nublada.

-¿Te llevo a casa?-negué-¿Auto conocido?-asentí, Austin suspiro-Sube al auto, veré que puedo hacer-señaló su auto con una sonrisa y yo volví a reír.

-Eres el mejor-bese su mejilla y camine hasta el auto.

Su auto era un lugar sagrado para Austin, hasta donde yo sabía, yo era la única chica permitida en este, siempre apestaba a perfume de

Austin y era su bebe. Lo cuidaba más de lo que se cuidaba a si mismo.

-¿Noche larga?-asentí, noche y madrugada, apenas había dormido-¿Gustas explicar?-me señaló con una mano-¿Huiste de su cama o algo parecido?

-No, es solo que...bueno, no entendió que no era nada serio. Espero que no te incomode mi casi desnudes-murmure divertida.

-¿Hace cuánto tiempo que no nos acostamos?-comencé a hacer cuentas mentales, la última vez había sido en el laboratorio de química, así que...

-Poco más de un mes.

-Bien-¿Ya había mencionado que Austin era un peligro al volante? Nunca respetaba las reglas e incluso, si había mucho tráfico, se subía por la banqueta, no entiendo quien le dio la licencia de conducir.

-¿Bien?-levanté una ceja divertida-Tal vez, este bien-sonreí y me quite la chaqueta de Austin y baje el vidrio-¿Cómo estuvo tu noche?-dejé que el aire de la mañana entrará.

-Bien, nunca apareciste arriba, estaba buena-¿Ya mencione que no estaba viendo por donde manejaba?

-Supongo-me aferré al cinturón-Maldita sea Austin, si me quieres follar llegando a tu apartamento, al menos primero llévame ahí con vida-murmure irritada por sus pocas habilidades tras el volante.

-Llegamos-sonrió y en un rápido movimiento comenzó a besarme, vamos, aún no me quitaba el cinturón.

Ambos bajamos de su auto y entramos a su edificio, entre besos y tropezones, reímos cuando ambos nos estrellamos contra los botones del elevador.

-Tu aún tienes toda la ropa, no es justo-murmuré comenzando a subir la camisa de Austin.

-Tarda mucho el elevador-reímos y seguimos

besándonos-Oh, llegó-rió y me jaló dentro del elevador.

Las manos de Austin bajaron a mi trasero y yo reí, siempre era lo primero que hacía.

-Oh Albert, ayúdame con estas bolsas antes de que se cierre el elevador-Austin y yo nos separamos y vimos como una pareja de ancianos peleaba con los cinco escalones para llegar al elevador.

-Deberíamos cerrar las puertas-cerré la chamarra de Austin.

-No, eso es de mala educación-murmure y Austin me abrazo, solo nos había pasado esto una vez, pero yo estaba completamente vestida. Supongo que ahora nos cubríamos mutuamente.

-Gracias por esperar-la anciana sonrió amablemente y Austin ocultó su rostro en mi cuello, reí suavemente mientras dejaba pequeños y disimulados besos en mi cuello.

-Recuerdo cuando tenía esa edad, Albert, tú me llevaste al Gran Cañón-la anciana le sonrió a su, yo espero, esposo-Son adorables-me sonrió.

¿Cuánto faltaba para llegar? Maldito seas Austin y el maldito piso diez.

Le sonreí amablemente y el elevador se detuvo en el piso cuatro.

Supongo que los ancianos se bajaban aquí. Las puertas se abrieron y una familia de cuatro entró al elevador, ¿Me estaban jodiendo?

Este subía, que se subieran a uno que bajaba, al menos que fueran a la terraza.

Austin gruño y yo lo compadecí, al menos él no estaba en ropa interior, pero al menos, yo no tenía una vergonzosa erección.

-Oh Maggie que bueno verte-la mujer le sonrió a la anciana.

Lo que me faltaba, que se pusieran a conversar sobre sus vidas.

¿No querían tomar mejor el té en el elevador?

-Mira a Dan, esta tan grande.

Claro, ¿Cómo esta el perro? ¿Tú esposo sigue tomando Viagra? A la mierda malditas viejas chismosas.

Austin volvió a gruñir, ¿Tanto le dolía?

Baje mi vista a mi cuello y Austin me apretó más a él.

Oh, ahora entendía. Moví mi vista por todo el elevador y encontré a uno de los chicos de la familia de cuatro, mirándome.

Lo único que me faltaba era que el maldito elevador se detuviera, eso sería simplemente perfecto.

Los ancianos se bajaron en el piso siete, pero la familia seguía ahí, mirándonos con una sonrisa. Tres pisos más.

-¿Son nuevos?-me removí incómodamente en los brazos de Austin.

-No-mordí mi labio, dos pisos. Vamos, deberíamos tener algo de diversión.

-Mi novia y yo vivimos en el piso diez, así que si nos permiten, nos gustaría disfrutar mientras todavía hay amor-Austin sacó su cara de mi cuello y me beso, sonreí, sabía lo que estaba haciendo.

Subí mis piernas a su cadera y él me sujeto fuertemente, para después estrellarme con la pared del elevador.

Intentábamos incomodarlos, era divertido.

El elevador se detuvo y Austin salió conmigo en brazos, mire a la familia. Los padres se habían puesto pálidos, el hijo más pequeño lucía avergonzado y el otro parecía tener un "problema" con sus pantalones. Reí divertida y me despedí con la mano.

-Eso nunca se vuelve viejo-Austin me llevó hasta su apartamento.

-Eres un idiota.

-Soy tú idiota-volví a reír, porque tenía razón.

Sin duda, nunca cambiaría a Austin por nadie.

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River y el periódico escolar

Nueve:

Baje del auto de Austin y suspire, lunes, no eran mi mejor día.

Austin puso su brazo sobre mis hombros y me acercó a él. Ambos caminamos a la escuela, nuestro horario era el mismo, lo habíamos hecho juntos.

Caminamos hasta la clase de física, si querías alcanzar lugar en esa clase, debías llegar temprano, por alguna razón, siempre faltaban bancas en ese salón.

Austin y yo nunca nos molestábamos en llegar temprano, alguien siempre le cedía el lugar a él y yo me sentaba en sus piernas o sobre su mesa. Al maestro no le importaba, era el hermano de Connor, bueno, no de sangre, pero ambos eran unos idiotas.

T. Sullivan, todos le decían T. cuando su verdadero nombre era Timothy, pero vamos, a nadie en su sano juicio le gustaría ser llamado así, ni menos Timmy, y menos si tienes 28 años.

El salón estaba lleno, solo que estaba vez noté algo diferente. Un grupo de tres moteros estaban en la clase, incluyendo a Luke.

Una chica rubia le cedió su lugar a Austin y yo me senté en la mesa, mientras que Austin recargaba su cabeza en mis piernas.

-¿Desde cuándo ellos están en esta clase?-Ralph señaló a Luke y a los otros.

-Es un país libre-Austin gruño.

Mire a los tres, Luke parecía ausente mirándome, los otros dos hablaban animadamente entre ellos.

-Kate-me gire para ver quien me llamaba, Vincent Mullins, era buen chico y el nerd de la clase.

-¿Qué pase Vince?-comencé a jugar con el cabello de Austin.

Miro hacía todos lados, como si no quisiera que nadie lo viera y después me tendió un pedazo de papel, el cual

tome.

"La perra más fiel: Katherine Poynter"

Salía yo besandome con Luke en la fiesta del viernes y después nosotros en la cafetería, nuestras manos entrelazadas y mi cabeza en su hombro.

"Parece que Austin Max es todo para las señoritas, Katherine ha roto la línea entre los moteros y los populares"

Bien, eso era todo, alguien iba a morir hoy.

Aparte la cabeza de Austin de mis piernas y camine rápidamente hasta ese idiota rubio.

-¿Hiciste esto?-estrellé el maldito volante en su pecho.

-Venía aquí a decirte eso, pero no puedo acercarme si estas con Austin-apartó gentilmente mi mano de su pecho.

-A la mierda las reglas-murmure-Austin te aplastará y después me matará, propongo que salgamos por la ventana, los pasillos no son lo más seguro.

-No Kate-gruñó Luke, era la primera vez que lo veía molesto-Encontraremos a la maldita zorra que escribió esto y le darás una lección.

Suspire frustrada-Tenemos que detener la circulación de esto.

-Mi grupo se encargó de eso, están quemando las cajas y todo lo relacionado a esto, lo que no podemos detener son los mensajes de texto.

Mordí mi labio-Si podemos-saqué mi celular y encontré la foto, sabía que algún día sería útil-Busca a alguien que haga que esto circule, esto distraerá a la gente hasta que encuentre al maldito y lo asesine.

-¿Maggs y Robbin?-me encogí de hombros, eso era lo que menos esperaba la escuela.

Nuestra capitana de porristas era lesbiana, ese era la clase de chisme que necesitaba para retener un poco la tercera guerra mundial

que se acercaba.

Salí del salón y me puse a repasar quien podría ser la maldita que haría todo eso, mucha gente me quería lejos de Austin, pero seguía sin encontrar a alguien quien realmente valiera la pena matar, así que opte por lo más fácil, el periódico escolar.

-River-entré al salón donde todas esas cosas aburridas se llevaban acabo.

-¿Qué trae a Katherine Poynter aquí? Nunca nos has querido dar exclusivas-si, era un chico guapo, pero asquerosamente insoportable y chismoso.

-Se lo de la noticia, así que cortemos la amabilidad.

-¿Me darás la exclusiva?-negué.

-Tengo algo mejor-me senté en su regazo-Tu eliminas esa noticia mía, erradicas el maldito rumor, calmas las cosas y yo te doy una exclusiva.

-¿Qué clase de exclusiva?-vamos, tenía que pensar, River Collins era la única persona que podía borrar un rumor para siempre y hacer ver al que lo inició como un maldito mentiroso.

Suspire y enredé mis manos alrededor de su cuello-Sobre mi nueva relación con el presidente del periódico escolar.

River sonrió, por alguna razón siempre había querido que saliéramos. Asco.

-Oh linda-sonrió y acarició mi mejilla-Quiero más-murmuro.

A la mierda, que esparciera el rumor, yo no tenía más que darle. O tal vez si.

¿Enserio valía la pena tantos sacrificios ese estúpido rumor mío y de Luke?

Por Austin, sí.

-La exclusiva como me acosté con Austin Max y la promesa de que...-apreté los labios, debía decirlo-Dejaré la mesa de los populares y me uniré a la del periódico-quería que el infierno me llevará en esos momentos.

River apretó un botón y un chico llego corriendo-El rumor sobre Luke Ronan y Kate Poynter es totalmente falso, destruye al idiota-el chico asintió y se fue, River me miró sonriendo-Sabes donde es nuestra mesa.

Me puse de pie rápidamente y salí del salón.

Prácticamente acababa de hacer un trato con el diablo.

Supongo que ya no podría completar la apuesta con Jo, bah, debería decirle, una Universidad pública no estaría mal.

Me recargué en los casilleros, ¿Enserio saldría con River Collins?

¿Enserio le daría una exclusiva sobre Austin?

Agh, me sentía enferma y disgustada conmigo misma.

Había vendido mi amistad solo por cubrir un pequeño secreto que pronto saldría a la luz.

Supongo que al final siempre tuve razón, Austin y yo éramos realmente parecidos, al final del día, ambos éramos: Mr y Ms Popular.

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River VS Austin

Diez:

La cafetería era extraña si la veías desde otro punto de vista, al parecer River tenía las mismas horas libres que yo, raro.

La mesa del periódico estaba céntrica, desde un punto donde podías ver a todos, en cambio, mi vieja mesa estaba en una esquina, una esquina donde nadie te escuchaba.

-Nuestra relación se hará pública en el numero de mañana-volví a la realidad y vi a River, era guapo, pero demasiado cliché, rubio y de ojos verdes, aburrido.

-¿Cuál es la historia?-si iba a fingir una relación, al menos debía saber la historia.

-Me diste una exclusiva y te invite a salir, claramente no fue fácil, pero al final aceptaste.

Mordí mi labio-¿Cuándo quieres lo de Austin?-River sonrió.

-Para la siguiente semana, será el aniversario de cuando se conocieron ¿cierto? Ese día saldrá el articulo-quise vomitar de nuevo, adiós Austin.

-¿Alguna vez sostuvieron una relación más allá de amistad?-mire a Alice, era la reportera a cargo de mi artículo.

-No, solo...sexo casual-me incomodaba hablar de eso con alguien más.

-¿Ha engañado a sus novias contigo?-fruncí el ceño.

-Las chicas que salen con Austin saben a lo que se enfrentan.

-¿Austin es bueno en la cama?-asentí, ¿Qué le importaba eso al mundo?-¿Cómo lo convenciste de que se acostarán?

Reí mientras Austin me cargaba en su hombro.

-Disney fue divertido.

-Goofy no me dio buena espina-volví a reír y me deje caer en la cama de Austin.

-Gracias

por golpear a Dylan, ese idiota quiso algo más que solo mis bragas-murmure y Austin se acostó mi lado.

-Siempre te protegeré Kate, no puedes perder algo tan importante con un idiota como él.

-No quiero ser siempre virgen Austin-confesé-Pero tampoco quiero que sea cualquiera.

Austin asintió y beso mi frente-Tal vez...¿Con tu mejor amigo? Juro que nunca te lastimaría Kate.

Sonreí y lo besé-Confió en ti.

Aclaré mi garganta-Eso, es...personal. Puedes poner eso ahí-apunte su libreta.

-No me das mucho para trabajar-gruño la chica, que amable era.

-¿Kate?-levanté la mirada y vi a Austin-¿Por qué no estas en la mesa?

-Yo...-me removí incomoda.

-Ella esta conmigo Austin, ahora es parte de esta mesa-mire a River, cinta en su boca era lo que necesitaba urgentemente.

-¿Qué?-Austin se rió como si fuera una broma, poco sabía él-¿Adelantaste la semana de las bromas? Ay Kate, eres épica-me encogí más en mi lugar. Austin dejó de reírse al ver que no me unía a su risa-¿Es verdad?-asentí y pude jurar que toda la cafetería se quedo en silencio. Malditos chismosos.

Una mueca se instaló en su rostro, él sabía que no saldría con River Collins al menos que quisiera ocultar algo o deshacerme de algo.

-No pienso contestar otro interrogatorio-murmure y comencé a recoger mis cosas rápidamente, necesitaba salir de la cafetería, tal vez encontrar a Luke y resolver la situación juntos.

-¿Seguirás siendo mi equipo en la semana de las bromas?-el baile por Halloween se acercaba y en cada baile debíamos hacer bromas.

-Siempre-mascullé y bese rápidamente los labios de River-Seguimos luego.

Era buena huyendo de la gente, pero con Austin era diferente.

Era como si siempre supiera que quería, lo que haría, me conocía mejor que yo misma.

-¿Qué fue todo eso Kate?-maldita sea, Austin debía dejar de meterse en lo que no le importaba.

Además, estar con River era mucho poder, hasta ahora había borrado algunas cosas que no quería que salieran a la luz y Austin, bueno, alguien tenía que salir perdiendo.

-Seguimos luego-imitó mi voz y después un sonido de un beso, debía detenerlo.

Me detuve y camine rápidamente hasta él, para después besarlo, tal vez podía seguir con la apuesta después de todo.

-Austin-me separé y le sonreí dulcemente, él amaba cuando hacía eso-Todo esta bien.

Austin asintió y volvió a besarme, por alguna razón se sintió diferente. Algo en ese beso me aseguraba que no importaba lo que hiciera, Austin nunca se iría de mi lado.

-Debo ir por algo con Connor-murmure separándome.

-De acuerdo-Austin sonrió y camino de regresó a la cafetería.

Camine hasta la oficina de Connor, mientras que una chica salía de esta. Un diez no se lo ganaría si eso esperaba, tal vez ganaría herpes.

-¿Qué puedo hacer por ti Kate?-Connor terminó de subirse los pantalones.

-Sabes por lo que vengo-señalé su escritorio.

-Tengo una lista-me la tendió.

-¿Es todo?-volví a leerla.

-Lógralo y lo demás esta asegurado-se encogió de hombros.

-Algunas veces utilizas esas pocas neuronas-sonreí y guarde la lista-Deberías hacerlo más seguido.

Salí de su oficina y camine hasta la cafetería de nuevo, tenía asunto con River.

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Ms Popular & Mr Bad Boy

Once:

Hoy era el día, hoy saldría el reportaje de Austin.

O se suponía que así era.

Caminar de la mano con River no era cómodo, todos nos miraban, pero nadie murmuraba. Era peor que estar con Austin. Dentro de poco el número se publicaría y yo podría caminar libre.

-¿Y esa sonrisa?-River me besó.

-Nada-me encogí de hombros-Iré con Austin antes de que todo explote-River asintió y yo fui directo a Austin.

-¿Vienes a pedir chismes?-reí sarcásticamente mientras veía a Hayley colgarse del brazo de Austin.

-Eso sería para el equipo-señalé a los chicos-Pero no-mire a Austin y saque la cajita de mi bolsa-Feliz año tres-murmure y se la tendí.

-¿Es hoy?-asentí y se la deje en la mano.

-Siempre recordándolo-di media vuelta y me aleje de ellos.

Camine de regreso a River y entrelace nuestros dedos.

-Tengo que ir a ver el periódico, ¿te veo en la hora libre?-asentí y River me besó para alejarse.

Bien, era hora de poner el plan en marcha.

Ojalá Austin entendiera el mensaje.

Corrí hasta la oficina de Connor, Luke ya debía haber llegado.

-¿Lo lograste?-le tendí la hoja a Connor.

-Mejor que nunca-sonreí y mire a Luke-¿Todo listo?-él asintió, podía saborear mi libertad y no tenía nada que ver con River.

-¿Segura que todo saldrá bien? La moto esta lista por si acaso-no le di importancia y mire por la ventana de la oficina.

Mordí mi labio, Austin no estaba por ningún lado. Eso no era bueno.

-¿Un trago?-esta vez negué, quería estar segura de que todo saldría bien.

-Es hora-mire a Luke y sonreí, debía sonreír si quería que todo saliera bien.

-Iré a mi lugar-Connor salió junto con nosotros y fue a su lugar, todo estaba listo, entrelacé mi mano con la de Luke y ambos caminamos al lugar donde comenzaban a repartir el periódico, todos estaban murmurando ¡Al fin!

Mire uno de los periódicos y sonreí: 

"Ms Popular & Mr Bad boy: El fútbol conoció al cuero"

Luke hizo una seña y todo su grupo comenzó a moverse.

-¿Lista?-pude ver a Austin entré la multitud, asentí y Luke me guió entre las personas para llegar hasta el frente.

Tomé uno de los periódicos y comencé a leerlo mientras Luke se abrió paso entre la gente.

"Katherine Poynter y Luke Ronan, ¡Vaya sorpresa!

Al parecer su reciente relación con nuestro presidente, River Collins, no pudo ser más que una farsa, según confirma Kate.

Lo que un cuerpo sexy y una bonita cara pueden hacer, ¡Estos dos son una combinación explosiva!

Además de unos cuantos tragos y una gran fiesta, Luke y Kate terminaron acostándose y posteriormente creando controversia..."

Dejé de leer en cuanto llegamos al frente, todos nos miraron, suspire y tome el megáfono que estaba en la mano de Luke.

-Hola compañeros-hable animadamente, Luke mordió su labio divertido-Veo

que todos han leído el artículo, tiene muchos adornos en mi opinión.

Austin se abrió paso al frente de la multitud, Hayley colgaba de su brazo, su ceño estaba fruncido.

-¿Luke y yo? La respuesta es si-sonreí-Pero eso no les importa-le quite importancia-Vengo aquí con cosas más importantes.

Luke hizo otra seña y los chicos comenzaron a moverse de nuevo, esta vez, incluido el equipo de fútbol.

Vi a Connor salir de la escuela y me dio un pulgar arriba.

-¡Feliz semana de las bromas!-grite y todos fueron atacados por globos con agua, harina, pintura y la mezcla extraña del equipo-¡Y novatada para ustedes!-señalé a los chicos que eran de primero y me reí en cuanto fueron cubiertos por la masa azul que Vincent me había proporcionado, gracias a Dios por los nerds.

Apagué el megáfono y solté la mano de Luke-Y para la zorra que quería vender la historia-sonreí y saqué una bolsa de mi chaqueta-Feliz último día con una buena reputación-mire a Hayley y vacíe el contenido de la bolsa en su cabello, también, cortesía de Vincent.

Austin y Luke rieron mientras que Hayley miraba su cabello-Es un tinte, cambia de color con el sol-sonreí emocionada.

-¡Yo no hice el trabajo sola!-chilló.

-Lo se-me encogí de hombros-A los otros ya les tocó su merecido.

Hayley se alejó de nosotros mientras intentaba sacar la cosa de su cabello.

Mire a Luke y a Austin-Me largo, al parecer todo salió bien-Luke besó mi mejilla y caminó en otra dirección.

-¿Para esto tanto misterio?-asentí alegre y abracé a Austin, había extrañado a mi amigo, estar con River era horrible.

-Ya sabías de Luke-me encogí de hombros-O lo dedujiste y bueno, ¡Feliz tres años!

-En el primer día de la semana de las bromas-sonrió orgulloso.

-O si-sonreí y me aleje de Austin-Sobre eso...¡Chicos!

Austin fue cubierto en pintura verde y blanca.

-¡Feliz inicio de temporada!

Austin rió y quito la pintura de su cara.

-Patearemos el trasero de Monroy High este año-todo el equipo celebro.

-Estoy segura de eso-sonreí y me aleje más pasos de Austin, no quería que me llenará de pintura.

-¿Cómo lograste que ningún maestro estuviera aquí?

Me encogí de hombros y mire a Connor tomandolé fotos a las porristas que estaban mojadas.

-Estar con River me daba poder, Connor pidió que algunas cosas desaparecieran, lo hicieron y ¡PUM! la broma fue completada.

-¿Y River?-sonreí y negué.

-Bastante ocupado.

-Yo sabía que no me dejarías por ese idiota.

-Tu gran ego ha regresado-mascullé y mire a Luke que reía junto con su grupo, después de todo, no hubiera sido tan malo estar con él.

-Deberías quitarte eso Max, se seca-reí por el comentario de Blake hacía Austin.

-Salgamos de aquí antes de que algún profesor nos atrape.

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Home

Doce:

Grite el nombre de Austin junto con la multitud, no sabía mucho de deportes y menos de fútbol americano, pero cuando debía animar a Austin, lo hacía hasta que la garganta me dolía.

Austin corría hacía un lado de la cancha con el balón entre sus manos, el equipo contrario estaba a unos cuantos pasos de él, Austin tenía suerte de tener piernas largas.

Las porristas estaban haciendo sus rutinas y animaban al equipo, mientras que los chicos a mi lado, gritaban cosas sobre el deporte y agitaban sus banderines, además de que de vez en cuando lanzaban sus cervezas.

-¿Cómo va la apuesta?-mire a Jo que estaba sentada a mi pintando sus uñas. ¿Cómo hacía eso?

-Bastante mal, no la he empezado-me encogí de hombros-Ya ni creo hacerla.

-¿No quieres ir a Oxford?-me senté en mi asiento y tome un sorbo de agua.

-Si quiero, es solo que ¿Austin? Vamos, mejor dame a Luke-intenté negociar.

-Menos mal que no estudiaras negocios.

-Bien-gruñí y continúe mirando el partido.

-No entiendo el deporte, solo los veo correr de un lado a otro, ¿Enserio tienes que venir a todos los partidos?

Asentí, también me frustraba no entenderlo, pero me conformaba con ver a Austin feliz y pensando por una vez en su vida.

-¿Lo entiendes?-Luke se sentó a mi lado y beso mi mejilla, ¿Mencione que tal vez lo había visto por un par de noches?

-No, pero es mi mejor amigo el que juega-me encogí de hombros y deje que Luke pasará su brazo por mis hombros-¿Tú lo entiendes?

Luke negó-Soy más el tipo de arreglar un auto o una moto,

los deportes no son lo mío.

Asentí, Luke era lo opuesto a Austin.

-¡Si! ¡Ganamos!-mire a los chicos celebrar detrás de mi, ¿Ya había terminado?

-Te veo luego-Luke volvió a besar mi mejilla y se alejo, yo me puse de pie junto con Jo y ambas saltamos la barda al campo para poder abrazar al equipo.

-¿Viste mi anotación?-Austin estaba emocionado, lucía como un niño en la mañana de Navidad mientras me abrazaba-Era para ti.

Reí, era un idiota-Claro que la vi Austin-bese sus labios, me gustaba besarlo después de los partidos, me gustaba verlo con esa emoción y energía con la que solo se le veía después de un partido o de escuchar una canción que le encantaba.

-¿Me esperas en el auto?-negué y Austin me miro confundido-¿Irás con Ronan?-negué de nuevo-¿Con Jo?-otra negación.

-No iré a la fiesta-murmure y todo el equipo guardo silencio y me miro.

-¿Qué?-puedo jurar que podías escuchar hasta como se rompía una ramita con todo el silencio en los vestidores.

-No iré a la fiesta-repetí y mordí mi labio.

-Pero es tradición-Austin lucía confundido.

-La romperé esta vez-comencé a formular mi plan de escape.

-¿Por qué?-me encogí de hombros y comencé a correr.

-¡Te mandaré una postal con la explicación!-grite mientras subía las escaleras rápidamente y me recordaba mentalmente no volver a faltar a Educación Física, estaba fuera de forma.

-¿Fue divertido?-mire a mi padre mientras subía al auto.

-Espíritu escolar-me encogí de hombros.

-De acuerdo-mi padre asintió y manejo de regreso a casa-Todo esta en tu habitación.

Asentí y corrí escaleras arriba, botes de pintura y brochas me esperaban. Me sentía como una niña en Navidad, mi padre quería pintar la casa y yo estaba más que encantada de hacerlo.

Había comprado tantos colores que esperaba que la casa no terminará como un dulce. Tal vez sonará tonto, haberme perdido una fiesta para pintar mi casa.

Pero después de todo, seguía siendo parte de los artistas en la escuela. Ser popular no era lo mío.

Eran momentos como estos en los que era yo misma, no alguien que las personas esperaban que fuera y me gustaba.

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Conociendo un poco más a Ashley Max

Trece:

-¿Entonces es 3?-asentí y Luke sonrió, había comenzado a darle asesorías desde que me dijo que estaba fallando en química.

-Y el compuesto es el nitrógeno-señalé el libro, la biblioteca no era divertida cuando tenías que estudiar, claro que Luke y yo habíamos hecho otras cosas antes de sentarnos y estudiar.

-¿No podemos volver a buscar otro libro?-pregunto acercándose más a mi.

-Luke, el examen es la próxima semana y estas peor que yo en matemáticas-murmure.

-Siempre puedo copiar-se encogió de hombros y beso mi mejilla.

Reí y cerré el libro-¿Entonces porque pierdo mi tiempo intentando enseñar?

-Por que la biblioteca no es solo para estudiar.

-Eres un tonto-comencé a recoger mis cosas-Debo irme, Austin tiene practica y se pone como chica si no voy.

-¿Ni siquiera un rapidito?-reí de nuevo y bese a Luke.

-Tienes hasta que la señora sospeche que estamos haciendo algo más-murmure y ambos corrimos al fondo de la biblioteca.

Corrí hasta el gimnasio, el otoño traía la brisa fría y el coach no quería que el equipo se enfermará, lo cual era tonto si los hacía correr bajo la lluvia.

Austin se encontraba lanzando el balón a sus compañeros mientras el coach gritaba algo en lenguaje deportivo que yo no entendía.

Sinceramente era el primer coach delgado que veía, aunque era una tortura su clase, correr 5 km dos veces por semana y una rutina de ejercicio, no era lo mío. Los deportes tampoco eran lo mío, yo iba más por el lado artístico, la pintura y todas esas cosas normales. Cosas que no involucraran sudar.

Por

suerte, siendo la mejor amiga de Austin Max tenía sus ventajas. El coach me dejaba faltar a su clase, siempre y cuando Austin estuviera motivado para el juego.

-¡Vamos Max! ¡Park más fuerte! ¡Blake eres una maldita niña!-me senté en las gradas y mire como todos sufrían.

Cuando la temporada iniciaba, esta era mi rutina diaria, claro, sin la parte de Luke. Veía a Austin entrenar de lunes a viernes y algunos sábados, después me acostaba con él regresando a su apartamento, ah, mi vida tan ocupada.

-¿Intentando entender?-mire a Dean, era uno de los amigos más cercanos de Austin y probablemente el único que no era un idiota.

-Deje de intentarlo hace mucho tiempo-murmure y saque mi sketch para dibujar.

-Yo tampoco lo entendería de no ser por mi padre-me brindó una sonrisa. El padre de Dean era un macho completo y había obligado a su hijo a jugar americano desde que pisó la escuela primaria-Pero siempre puedes mirar repeticiones de Sobrenatural.

Reí-Me gusta esa serie.

-Lo se, y a mi me parece demasiado mala.

-La ves conmigo-fruncí el ceño.

-Es tan mala que no puedes dejar de verla-los dos reímos-Además, me llamó como el personaje principal y debo decir, que ambos somos igual de guapos.

Lo golpeé suavemente en el brazo-Vamos por la sexta temporada, faltan cuatro.

-Creí que eran nueve-Dean lucía confundido.

-La nueva se estrena dentro de poco, creí que lo habías aprendido cuando te rogué que fuéramos a la Comic Con y casi consigues que nos corrieran.

-Si-sonrió recordándolo-Fue un buen momento. Pero

debes admitirlo, tú disfraz tampoco era el mejor.

-Era más creativo que ser una bolsa de té-me defendí y Dean hizo una mueca.

-Una playera negra que dice "Mi alma" no es un gran disfraz-reí.

-Mejor que mi disfraz de Halloween si es.

-¿Cuál es tu disfraz este año?

Me encogí de hombros-Una playera blanca que dice "Mi disfraz"

-Inspirador-adoraba a Dean, siempre me ponía de buenas hablar con él.

-¡Michalak regresa o limpiarás tu sudor con el trapeador después de clases!-Dean besó mi mejilla y bajo rápidamente por las gradas.

-Ser amable no es su fuerte-mire a la hermana de Austin.

-¿Qué haces aquí?-no era por ser ruda, pero su hermana casi nunca aparecía en las practicas al menos que fuera algo importante.

-Vengo a hablar contigo.

-Oh, de acuerdo-guarde mis cosas en mi bolsa y me gire para quedar de frente a Ash-¿De qué quieres hablar? ¿Austin?-Ash negó y algo me decía que la respuesta era un tema del que no quería hablar.

-Necesito un favor.

-No comparé alcohol si esa es la pregunta.

-No-negó y suspiro-Necesito que seas mi novia.

-¿Qué?-me sentía muy confundida-¿Qué?-repetí.

-Si-esto era realmente incomodo-Hay un chico que no quería dejarme en paz, le dije que era lesbiana y digamos que tal vez, solo tal vez, le mostré un foto tuya diciendo que eras mi novia.

-¿Qué?-parecía que solo podía decir eso.

-Y digamos que él extendió el rumor por toda la escuela y ahora tengo que ir con mi "novia" a una fiesta o todos sabrán que es mentira.

Debía admitir que me había perdido después

de la palabra novia. Aunque también debía admitir que era listo por parte de Ash decir que era lesbiana para quitarse a un idiota de encima, pero para eso tenía un hermano mayor y aún más idiota.

-¿Serías mi novia falsa?-la mire, me miro con ojos de súplica, los mismos ojos que hacía Austin cuando quería que le diera algo.

La idea sonaba bastante divertida, pero si Austin se enteraba le daba algo y no exactamente una erección.

Suspire, podía ser divertido-¿Cuándo es la fiesta?

-¿Estas aceptando?-lucía realmente impresionada.

-Puede ser divertido-me encogí de hombros.

-Hoy-bien, definitivamente a Austin le iba a dar un ataque.

-A Austin le va a dar algo si se entera-tome mis cosas.

-Lo se-ahora ella se encogió de hombros-Vale la pena correr el riesgo.

Negué lentamente-Vamos, tenemos mucho que practicar si vamos a fingir una relación.

-¿Cómo que?-pobre niña.

-Besarnos-masculle saliendo del gimnasio.

-¿Qué?-su cara se puso del color de su mochila, roja.

-No puedes tener una relación sin besos, el idiota te pedirá que me beses y si te pones roja como ahora o titubeas, sabrán que es falso-explique mientras caminaba.

-¿Alguna vez has besado a alguna chica?-negué, siempre había una primera vez para todo.

-Será la primera vez para las dos-sonreí y empuje la puerta para subir al techo-Además, he besado suficientes veces a tu hermano, no debe de ser tan diferente contigo.

-¿Tenemos que practicar algo más?-sonaba asustada, pobre.

-No creo, solo tenemos que establecer unas cuantas reglas-lance mis cosas al suelo y la mire.

-Claro-asintió y se sentó en el suelo.

-La primera y la más importa, no le digas a nadie, no a Amelia, no a Austin-asintió rápidamente-Dos, no tomar-comencé a enumerar con mis dedos-Y tres, divertirnos-reí y me senté frente a ella-¿Alguna vez has besado a alguien?-negó, era una chica una de 17 años y todavía no había tenido su primer beso, no la juzgaba-Bien-suspire.

-Mi primer beso no fue exactamente un beso-explicó.

-De acuerdo, no hay necesidad de describirlo.

-Es solo que me estornudo y luego...

-Ash, sinceramente no me importa-la corte-Te enseñaré lo básico, pero solo te tienes que dejar llevar ¿okay?-asintió y me acerqué lentamente hasta su cara-Relájate-murmure y me incline más.

-Estoy relajada-murmuro.

-Piensa que soy Ashton Irwin-murmure y cerré los ojos.

-Lo intentaré-y entonces nuestros labios se juntaron.

Debía admitirlo, era raro besar a una chica y no a cualquier chica, estaba besando a la hermana mayor de mi mejor amigo.

Ashley Max no besaba mal, pero no era igual de buena que Austin, y también estaba el hecho de que era una chica.

Me separé después de unos momentos-¿Crees poder hacerlo en la fiesta?

Abrió los ojos y mordió su labio mientras sus mejillas enrojecían-Uh, supongo.

-El rubor en tus mejillas tiene que desaparecer-pase mi mano por su mejilla-No puedes ser tímida si le acabas de decir a tu escuela completa que eres lesbiana.

-Yo no dije...

-Seguiremos practicando-la corte-Y después iremos a esa fiesta para alejar a los idiotas-reí y me incline de nuevo-¿Lista Ash?-junte nuestros labios por segunda vez.

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I like you Kate

Catorce:

-Linda fiesta-los dormitorios de los chicos no eran los más agradables, pero no podía quejarme, era bastante linda.

-Supongo-Ash se encogió de hombros y apretó mi mano.

-Todo saldrá bien-sonreí dulcemente-Tu puedes Ash.

Asintió y ambas entramos al centro de la fiesta, donde la gente estaba reunida y estaban las bebidas.

-Pero miren quien llego-un chico de cabello castaño sonrió y alejo a Ash de mi-La chica que dice ser lesbiana después de que la invitó a salir.

-No vengo sola Taylor-y en esos momentos era como si la fiesta entera hubiera decidido guardar silencio y mirarme, bueno, no era lo más cómodo, pero no podía quejarme.

-¿Ella?-Ash asintió y el chico que respondía al nombre Taylor se acerco lentamente hasta mi-Eres linda-me miro de pies a cabeza-¿Cuánto te pago?-reí secamente, idiota.

-Lo mismo que a ti tu madre para dejar tu cerebro en alguna cama-camine hasta Ash y bese su mejilla para después entrelazar nuestros dedos.

-Vamos Ashley, todos sabemos que solo finges-apreté los labios, esto no estaba saliendo bien-Acepta salir conmigo y te ahorras muchos problemas.

-¿Por qué no te alejas de mi novia y vas a revolcarte con tu maestra para pasar?-murmure y pude sentir a Ash tensarse.

Taylor sonrió en mi dirección-¿Sabes Ashley? Creo que ya no me interesas, tu novia luce más como un reto que tú.

-Un reto que nunca podrás pasar-respondí ácidamente-¿Vamos por un trago?-le sonreí dulcemente a Ash, estaba pálida la pobre.

-Sí-asintió lentamente y ambas caminamos bajo la mirada de toda la fiesta.

-¿Qué

nunca han visto a dos chicas juntas?-gruñí-¡Sigan con la puta fiesta!-la música volvió a sonar fuertemente y todos fingieron dispersas su atención de nosotras, aunque sabíamos que eso era mentira, seguían mirándonos.

-Supongo que por eso Austin pasa tanto tiempo contigo-serví un vaso de cerveza y lo tome de un sorbo.

-¿Por qué lo dices?-pregunte rellenando el vaso.

-Eres tan...-negó divertida-Oh Austin-sonrió.

-Pretenderé que te entendí-esta vez tome lentamente el contenido del vaso y suspire-Ashley-le llame y en cuanto me miro la bese.

-¿Por qué fue eso?-pregunto en cuanto me separé.

-Todos nos miran-me encogí de hombros-Y porque debo irme-me aleje rápidamente para acercarme al individuo que había visto.

-Debo admitir que eso fue sexy-paso un brazo por mi cuello.

-Es la hermana de Austin-murmure.

-Sigue siendo sexy-reí y lo bese-Podemos ir a mi casa.

-¿No te basto con la biblioteca?-reí nuevamente.

-No-negó.

-¿Tomaste?-volvió a negar-Bien.

Ambos salimos de la fiesta y subí al auto de Luke.

-¿Y la moto?

-Se la cambie a Molly solo por hoy-asentí y prendí la radio-Kate-Luke rompió el silencio después de que una canción realmente mala sonará de fondo.

-¿Mmm?

-¿Quieres a Austin?-reí fuertemente.

-No Luke, es solo mi mejor amigo.

-Pero se acuestan-frunció el ceño.

-Es como contigo, sexo sin compromiso.

Asintió y mordió su labio-Me agradas Kate.

-Tú también me agradas Luke-sonreí.

-No me había acostado tanto con una chica nunca, eres la primera que conoce a mi hermana.

Mi sonrisa desapareció-¿Gracias? Supongo.

Luke tomó aire-Me gustas Kate y no como un rollo de una noche-bien, esto era incomodo.

-No se que esperas que diga-murmure-Sabes la respuesta.

-Lo se-sonrió derrotado y estacionó frente a su casa-¿Podemos olvidar que me acabas de rechazar y subir a mi habitación?

-Me sentiría un poco hipócrita al respecto.

-Entonces no sientas Kate-Luke me beso.

-¿Cómo es que sigues queriendo después de que te rechace y con mi reputación?-pregunte separándome lentamente.

-A las personas no se les puede definir por su historia, pero ahora estás tomando la decisión de quedarte en el auto conmigo, eso puede ser una pequeña esperanza-sonrió y por un momento quise que me gustará de la misma manera que yo a él-Vamos, mi cuarto es más cómodo que este auto-bajo del auto y lo seguí, definitivamente quería quererlo.

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Late night talks

Quince:

Tome mis zapatos y salí rápidamente de la casa de Luke. Era momento de terminar las cosas con él, era la regla cinco.

Caminar a casa era mi única opción, además de que lo necesitaba.

Esto me recordaba a Michael, me había convencido de acostarme con él y cuando desperté, ya no estaba. Austin y yo lo buscamos por días, pero sencillamente no aparecía por ningún lado, nos dimos por vencidos.

-¿Qué haces caminando sola en medio de la calle?-sonreí levemente, ¿Cómo es que siempre me encontraba en los peores momentos?

-Tomaba aire.

-Son las dos de la mañana Kate.

-Lo se-me encogí de hombros.

-¿Qué sucedió?

-Recordaba cosas-nunca más hablamos de Michael y no podíamos mencionarlo-Pensaba sobre la vida.

-Creo que es hora de que te vayas a casa Kate-Austin me guió suavemente hasta su auto.

-Puedo caminar Austin, ya estamos cerca de mi casa-murmure.

-Yo también estaba pensando-me ignoró.

-No creo que estuviéramos pensando en la misma persona.

-Estaba pensando en mamá-asentí, al menos, Michael no iba a salir en esta conversación.

-¿Qué hiciste ahora Austin?-pregunte recargándome en su auto.

-Discutí con ella por mi padre-se encogió de hombros-Dicen que la Universidad estatal me acepto.

-¿Eso es bueno?-hace mucho que no me hablaba de su familia, no sabía que decir.

-No, no lo es Kate-apretó los labios-Para mis padres es maravilloso, pero no para mi.

-¿Qué quieres hacer entonces?-pregunte, eran las dos de la mañana y ni siquiera estábamos dentro de

su auto.

-Esperaba que tú me lo dijeras, me dirigía a tú casa.

-Bueno, ya no necesitas entrar por mi ventana y esconderte en mi armario-sonreí levemente-No puedo decirte que hacer Austin.

-Claro-sonrió y supe que se estaba preparando para lanzar un ataque-Porque tu padre escogió la Universidad por ti, debí suponerlo.

-No es el momento ni en el lugar-murmure, no en medio de la calle a casi las tres de la mañana.

-¿Cuándo será el momento Kate? Ambos sabemos que no quieres ir al horrible frío de Inglaterra para estudiar algo que es basura-gruñó.

-¡Es mi problema!-grite molesta-¡Es mi vida! ¡Metete en la tuya!

-¡No lo es! ¡Estas dejando que escojan por ti!

-¡Al menos tengo una pequeña idea de lo que quiero hacer con mi vida!

-¡Tú no quieres hacer eso con tú vida! ¡Eso es lo que tú padre quiere que hagas!

No quería decir nada más, Austin y yo siempre podíamos decirnos de todo para lastimarnos. Era lo que odiaba de Austin, no sabía cuando cerrar la boca ni cuando controlarse.

-No voy a pelear contigo a las dos de la mañana Austin-baje mi tono de voz-Y menos en medio de la calle.

Comencé a caminar en dirección a mi casa, necesitaba tranquilizarme y dormir un poco, necesitaba alejarme de Austin.

-¡Lo estas haciendo!-me detuve y lo mire-¡Siempre que saco el tema de la Universidad tú huyes!

-Detente Austin.

-¡¿Por qué Kate?! ¡Elige por ti misma!

-¡No es sobre mi! ¡Esto empezó porque te aceptaron en la estúpida Universidad estatal y estas haciendo un berrinche sobre

ello!-bien, la idea de tranquilizarme se había ido a la basura.

-Vi que te aceptaron en Nueva York-ahora él había bajado su tono de voz.

-Eso no importa Austin, no voy a ir-comencé a caminar de nuevo.

-¿Por qué?-me detuvo tomando mi muñeca suavemente, podía soltarme si quisiera, pero quería contestar a su pregunta.

-Porque el arte es estúpido-repetí las mismas palabras de mi padre cuando le dije que tenía la opción de estudiar arte.

-No lo es, es lo que te gusta y lo sabes-negué lentamente.

-Escucha Austin, esta conversación no es sobre mi. Siempre logras que ambos discutamos por las cosas más estúpidas. Estamos hablando de nuestro futuro, no puedo jugar con eso y tú tampoco, así que deberías madurar un poco y decirle a tú padre-zafe mi muñeca y sin mirarlo retome mi marcha.

Sabía que se iba a quedar ahí, no tenía una respuesta lo suficientemente inteligente para eso, no podía discutirme lo que le acababa de decir.

Detestaba que Austin tuviera razón, también lo detestaba por hacerme gritar a las dos de la mañana y montar una escena en medio de la calle.

Suficientes problemas tenía con haber dejado a Luke como para ahora lidiar con Austin molesto conmigo por decirle la verdad.

Mire la ventana de mi habitación, había salido tantas veces por ahí para salir con Austin que había perdido la cuenta. Así que ahora había optado por la opción de la puerta trasera, mi padre tenía el sueño pesado y estaba segura de que estaba demasiado cansando como para molestarse en revisar el ruido que provenía de la cocina.

Mire mi habitación, tantas veces había querido cambiar la pintura rosa de las paredes y ahora que lo había hecho, se sentía extraña, como ajena.

Camine a mi escritorio, Austin siempre dibujaba o escribía en este. Me detuve en su último dibujo, era Nueva York, según él y ambos estábamos en él. Él con su música y yo con mi arte.

Sonreí levemente, la última vez que había estado en mi habitación había sido hace un par de semanas, había llevado su guitarra y había cantando "Hey there Delilah", había dicho que era nuestra canción.

Intente recordar más de aquella noche, no quería estar enojada con él. Era mi mejor amigo y era estúpido.

Recordé los besos, las risas, la película mala, Austin escondiéndose en el armario porque mi padre apareció, Austin saliendo por la ventana, todo.

Así que con ese buen recuerdo me quede dormida. 

Con Austin sonriendo tanto que su sonrisa se torcía, simplemente siendo Austin.

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Sawyer Thompson y Monroy High

Dieciséis:

Ese día en la escuela decidí alejarme del mundo, me escondí en la sala de arte y comencé a ayudar a los chicos con el mural para el baile escolar de Halloween, ¿Quién hacía un baile por Halloween? Al parecer solo esta escuela.

-¿Crees que deberíamos ponerle más rojo?-Sawyer se paro junto a mi y miro el mural.

Sawyer Thompson era el líder de los artistas de la escuela, era demasiado amable para su propio bien y se había ganado una beca para estudiar arte en Florencia.

-Creo que necesita amarillo para que no se pierda con el fondo azul-murmure, me gustaba venir a la sala de arte, había gente que hablaba el mismo idioma que yo. Austin se confundía si le hablaba de los pinceles de abanico que quería.

-Tienes razón, ¿Dougie dónde esta la pintura amarilla?-el chico pelirrojo de nombre Douglas, le tendió un bote a Sawyer y continúo pintando los detalles blancos.

-¿Te importa poner los de arriba? Aquí esta la escalera-asentí y subí la escalera, para empezar a seguir el patrón que estaba previamente dibujado con lápiz.

-¿Te unirás a nosotros en la semana del arte?-la semana del arte era algo legendario para la escuela después de la temporada de fútbol.

Diferentes artistas de diferentes escuelas venían y competían, desde teatralmente hasta quien maquillaba mejor. La escuela entera se involucraba, incluso los populares competían y cuidaban los trabajos para asegurarse de que ningún contrincante pudiera destruirlo o arruinarlo.

El año pasado había pintando con todo lo que había encontrado que pudiera hacer

un color, desde maquillaje hasta dulces con demasiado colorante. Había sido un cuadro muy bueno, lamentablemente un imbécil de Monroy High lo había destruido.

Claramente Austin le había dado su merecido y lo había obligado a disculparse conmigo. Los artistas de la escuela éramos buenos, manteníamos el titulo en la semana del arte siempre, pero esta vez no me sentía con las ganas de participar.

-No lo se-me encogí de hombros-El año pasado destruyeron mi trabajo-dejé de pintar, casi perdemos por eso.

-Pero a ese tipo le toco más de lo que debió-Sawyer era un pacifista de primera.

-La semana de las bromas viene y tengo que planear todo-mascullé.

-¿Cuál es tú verdadera excusa Kate?-baje de la escalera y deje el bote de pintura sobre uno de los escalones.

-¿La verdad?-me encogí de hombros-No lo sé Sawyer. No siento que este año tenga algo que pintar, siempre puedo cuidar tú trabajo, al final del día yo debería hacerlo, no pintarlo.

-Eres una artista Kate y lo sabes-puso una mano llena de manchas de pintura seca en mi hombro-El hecho de que estés con otro grupo no cambia eso.

-Y tus trabajos son magníficos-le sonreí a Dougie y mire a Sawyer.

-Te diré que haremos-Sawyer me dedico una sonrisa-Si no pintas o dibujas algo para una semana antes de la semana del arte, entonces puedes cuidar mi trabajo, pero si pintas algo, no importa si es pequeño, eso lo presentaremos.

-Estás poniendo mucha fe en mi-mordí mi labio.

-Eso hacen los artistas, confían entre ellos porque saben que pueden hacerlo.

Abrí la boca para agradecerle a

Sawyer, pero unos aplausos me interrumpieron.

-Pensé que estaba en la sala de arte no en el teatro-aparte suavemente la mano de Sawyer de mi hombro.

-Austin Max, una gran visita como siempre-Sawyer le dedico una sonrisa-Piensa en lo que te dije Kate-Sawyer se giro y siguió pintando.

-¿Podemos hablar?-asentí.

-Se ve bien el trabajo chicos, sigan con ello-tome mis cosas y salí junto con Austin de la sala de arte.

-Si la gente te ve saliendo de aquí llena de pintura pensarán que ya no quieres estar con los populares y te convertirás en una artista-saqué un espejito de mi mochila y comencé a quitar las manchas de pintura que tenía en la cara-Aquí, te cubrirá la blusa-tome la chaqueta de Austin y me la puse.

-Deberíamos decirle a la gente que no pinto solo para la semana del arte, pero que estoy con los artistas-sugerí mientras me amarraba el pelo.

-Ni loco. Me gusta que estés a mi lado.

-¿No hay pintura?-Austin inspeccionó mi rostro y negó-Bien, ¿De que quieres hablar?

-Sabes de lo que quiero hablar Kate.

-¿De cómo le dijiste a Sawyer de que no me hablará en los pasillos porque la gente pensaría que estoy con ellos?-pregunte cruzándome de brazos.

-Ese es otro tema y de ese no quiero hablar-esquivamos a la gente.

-¿Te vas a disculpar?

-Ni un poco cerca Kate.

-Se me acabaron los comentarios sarcásticos, habla Austin.

-La semana de las bromas. Este año es más grande.

-¿Qué?

-Monroy High se involucro este año.

-¿Quién los invitó?-pregunte bruscamente.

-Ellos solos, al parecer

la semana de las bromas es algo popular en este sitió.

-No pienso competir contra Monroy High-me negué.

-¿Por qué?-Austin lucía emocionado.

-Porque Monroy High no juega limpio en ningún modo.

-No es para tanto-Austin intentó quitarle importancia.

-Le rompieron tres costillas a Duck-Duck era la vieja mascota escolar, los de Monroy High lo secuestraron para molestarnos y cuando volvimos a ver a Duck, tenía tres costillas rotas y una nariz sangrante.

-Eso le pasa a todas las mascotas escolares.

-Tuve que golpear a un chico porque intentó besarme para distraerte en el juego ¿lo olvidas?-Austin apretó la mandíbula-¿Recuerdas los vestidores?

-Bien, suficiente-esos eran malos recuerdos para ambos-Por esa razón no te separas de mi lado.

-Puedes decir que no-me limite a decir.

-No puedo.

-¿Por qué?

Tomo mi mano y me guió hasta el estacionamiento, esto no era bueno, por favor que a su auto no le haya pasado nada.

-Aquí esta el porque-mire el auto de Connor, estaba pintando de un verde realmente horrible y Connor estaba atado en el interior de este con una bandera de la escuela hecha pedazos.

-Esto no es una broma, es un secuestro-murmure acercándome al auto, el cual estaba rodeado por los chicos del equipo de fútbol.

-Para ellos es gracioso-mire a Dean, tampoco lucía feliz.

-¿Qué más hicieron?-pregunte, en realidad no quería saber la respuesta-¿Le tatuaron el logo de Monroy High en la frente?

Los chicos negaron-Al parecer lo torturaron mirando vídeos sobre abstinencia-mire a Connor que estaba

hecho un ovillo en su asiento trasero.

-Dios-mire a Austin-Eso no es gracioso.

-Como puedes ver, al parecer no podemos rechazar la semana de las bromas esta vez.

-¿Está bien?-Blake asintió.

-Estaba desmayado cuando lo encontramos.

-¿Hace cuanto lo encontraron?

Dean miro su reloj-Una media hora, estamos buscando una manera de arreglar esto sin que los estudiantes vean la primera broma de Monroy High, primero tenemos que motivarlos.

-¿Por qué no empiezan por sacar a Connor?-hombres tenían que ser, abrí la puerta y moví suavemente a Connor-Y llamen a Sullivan.

-Vayan por T-murmuro Austin y Blake fue el que se movió.

-Connor-murmure suavemente.

-¿Tienes algo en mente?-mire a Dean.

-Puedo trabajar en algo-Austin sonrió.

-Podemos-le sonreí también.

-¡Jet! ¡Jet! ¡Jet!-gritaron los del equipo el nombre de la escuela.

-¡Juro que uso condón!-Connor nos miro a todos confundido-Hola Kate-me sonrió y dejo caer su cabeza de nuevo en el sillón.

-Esta semana será épica.

Mire a todo el auditorio, habían logrado juntar a toda la escuela en menos de una hora y convencer al director de dejarnos hacer una asamblea, no es como que la director le importará mucho.

-Compañeros-Austin sonrió desde el escenario-Todos sabemos que la semana de las bromas es algo legendario en Jet High-todos hicieron diferentes ruidos-Pero este año, Monroy High ha decidido involucrarse. ¡Nos han atacado! ¡Han atacado a uno de los nuestros! ¡Y han roto nuestra bandera!-una porrista paso con la bandera hecha pedazos en sus manos-¡Los humillaremos!

-¡Sí!-gritaron todos los estudiantes al mismo tiempo.

-¡Los venceremos!

-¡Sí!

-Y por eso compañeros, la semana de las bromas contra Monroy High, esta oficialmente, inaugurada. Todos tengan cuidado.

La audiencia estuvo de acuerdo con Austin y eso solo me hacía preocuparme más por el futuro de la escuela.

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Cameron Jones y Monroy High

Diecisiete:

-Nuestra broma esta en boca de todos-Austin chocó los cinco con un chico en el pasillo.

Asentí, las bromas se estaban excediendo, ya no estaban en mis manos para controlarlas.

La noche anterior nos dedicamos a redecorar Monroy High, por dentro, claro esta. La mitad de los trofeos desaparecieron y su gimnasio fue terminado con nuestro hermoso logo escolar. Austin me había obligado a pintar los casilleros de todos. La escuela era un desastre, desde las escaleras hasta los baños. A mi no me parecía gracioso, yo solo había sugerido lo del gimnasio.

-Debemos planear la siguiente-todos lucían felices, incluso los nerds estaban orgullosos. Pero había alguien que faltaba, los artistas, ellos no se involucraban de ninguna manera y envidiaba eso.

-Deberíamos hacer una tregua, estamos a mano-me detuve frente a la oficina de Connor.

-¿Les tienes miedo Kate?-Austin me estudio el rostro por unos momentos.

-Se nos va a ir de las manos Austin, las bromas son demasiado grandes, incluso para nosotros-murmure, no quería que nadie me escuchará motivando a terminar la semana de las bromas.

-¿Por qué tienes tanto miedo Kate?-Austin frunció el ceño.

-Por que ambos sabemos su broma final-masculle.

-Puede solo haber sido una trampa-le intentó restar importancia.

-No lo es y lo sabes Austin, conoces a Cameron.

Cameron Jones, el Austin Max de Monroy High. Él y Austin habían sido amigos, Cameron le propuso una broma, decía que tenía la cosa más épica en toda la historia, Austin escucho su idea y se negó, al menos su sentido común aún estaba

ahí. La broma de Cameron nunca se realizó, pero ambos sabíamos que iba a terminar con ella.

-No puedes saber si funciona.

-Va a lastimar a muchas personas-solo quería que Austin me escuchará y terminará con esto de una vez.

-No seas tan paranoica. Cameron no ganará ¿Entiendes Kate?

Fruncí el ceño al escuchar como algo se estrellaba contra una ventana, abrí la puerta de la oficina de Connor y me sorprendí al ver su ventana llena de pintura.

-¿Qué demonios?-mire por la ventana limpia, nos estaban atacando, no solo a la escuela, si no también a las personas-¡Es pintura maldita sea! ¡Austin has algo!-mire como se lanzaban contra Vincent y los nerds, ¿Dónde estaba Luke? No lo había visto desde que lo deje a las dos de la mañana.

-¿Qué quieres que haga?-negué y salí rápidamente de la oficina, estaba segura de que Cameron iba a estar aquí para contemplar su obra.

Quite a mucha gente del camino y podía apostar a que el del auto amarillo era Cameron, la C gigante de la placa lo delataba.

Toqué el cristal violentamente, por mi podía romperse y no me importaba.

-Katherine Poynter-Cameron me regalo una sonrisa que estaba segura que derretía a muchas chicas.

-Cameron Jones-imité su sonrisa.

-¿No tienes miedo de que te vaya a dar un globo?-la sonrisa no se iba de su cara.

-Estoy segura que mientras este cerca de tú auto nada me podrá dar-me cruce de brazos.

-Chica lista, ¿Qué puedo hacer por ti linda?-podía empezar por marcharse y ponerle fin a esta estupidez.

-Puedes empezar por bajarte del auto y hablar

conmigo a la cara-me aleje unos centímetros, sabía que le molestaba que le diera ordenes y por eso se iba a bajar del auto.

-No me provoques Kate-se bajo del auto y se puso delante de mi, era alto, casi de la altura de Austin y Luke, pero no iba a dejar que eso me intimidará.

-¿O qué? Las bromas son para todas las personas en la escuela-me encogí de hombros.

-Eres demasiado lista Kate, deberías ser parte de Monroy High-quise reírme en su cara.

-Un paso a la vez Cameron.

-Entonces dime, ¿Qué quieres? No te arriesgas a que te llenen de pintura al menos que quieras algo.

-La pintura no me molesta-además de que a Cameron nunca lo llenarían de pintura-Vengo a hablar de una posible tregua.

-No.

-¿Por qué?-fruncí el ceño.

-Esto va más allá de las bromas Kate, me lo estoy tomando personal.

Tome aire-¿Qué te hizo Austin?

Cameron sonrió, pero una sonrisa falsa-Nada que no se pueda arreglar-me quede callada, eso sonaba como Austin.

-Eso es algo no muy claro-intenté restarle importancia.

-Con Austin todo es diferente.

-El rencor te da cáncer-era el momento perfecto para alejarme.

-No le tengo rencor a Austin-me tomo de la muñeca, a veces me preguntaba como podía ser tan lista para meterme en tantos problemas-Solo tengo que ser mejor que él.

-Bien por ti. Tienes la mente de un líder emprendedor-moví mi mano para que la soltará.

-Oh no Kate-negó divertido y podía imaginarme a Austin golpeándolo-Tú me vas a ayudar.

-Yo estoy fuera de las bromas-anuncié-Se cual es tú broma final Cameron, déjame

fuera de ella.

-¿La sabes?-rió-¿Tengo que silenciarte?

Negué-No le diré a nadie.

-Pero la sabes y apuesto a que también Austin.

-Austin no es tan listo y lo sabes-murmure, claro que Austin lo sabía pero se negaba a pensar en que pudiera hacerla.

-Puedes ayudarme-quise golpearlo en la cara.

-Dije que estoy fuera.

-Te pagaré-apreté los labios-¿Cuál es tú precio Kate?

-No tengo precio y ahora suéltame antes de que desespere.

-Bien, serás la siguiente broma-comenzó a arrastrarme hasta su auto, debí imaginarlo.

-¡Cameron no!-grite, por favor que alguien me escuche-¡No terminaré como Connor!-pegué los pies al suelo, iba a ser más difícil jalarme de esa manera.

-No me hagas cargarte Kate-jale mi mano, los hombres de esta escuela eran inútiles.

-Entonces suéltame-respondí ácidamente.

-Ya te dije que serás la siguiente broma.

-¿No escuchaste? Quiere que la sueltes-Cameron dejo de jalarme y caí al suelo.

-Estamos en medio de algo-gruño Cameron.

-Regresa a tú escuela para niños ricos Jones antes de que te parta la cara-mire a Luke, no lo lucía feliz.

-¿Eres el chico malo?-volví a sacudir mi mano, iba a quedar roja por culpa del idiota de Cameron.

-Lo soy si necesito romperle la cara a algún idiota que no deja de molestar chicas-Luke se cruzo de brazos y pude ver como Cameron se intimidaba un poco.

-Volveré por ti Kate-Cameron soltó mi mano bruscamente y subió a su auto para luego arrancar.

-Arriba-Luke me puso de pie como a una muñeca de trapo.

-Gracias Luke-mire mi muñeca, roja, el rojo no era mi color.

-No hay de que Kate, deja de buscarte problemas con ese chico, de esta semana no sale nada bueno-me dio una media sonrisa.

-Lo tendré en cuenta-quite la suciedad de mis pantalones. Esto era incomodo.

Luke suspiro-No estoy molesto Kate, es más, te entiendo...solo necesito...mantener mi distancia-asentí-Se que es difícil, pero no te busques problemas.

Reí un poco-No prometo mucho.

-Nos vemos Kate-Luke camino en dirección a la escuela y yo me quede de pie en el estacionamiento.

Si mis cálculos no eran malos, acababa de hacer molestar a Cameron y eso no era bueno, solo esperaba que Austin pudiera protegerme de esta.

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La última broma

Dieciocho:

Era el día final de la semana de las bromas y podía decir que la escuela se estaba preparando para la guerra. Austin había pasado noches en vela planeando esta estúpida broma.

Yo solo quería irme a dormir de una maldita vez, nunca había odiado tanto la semana de las bromas.

-¿Te sientes bien?-Austin quito la atención de su comida-¿Estás cansada?

Negué-Logre tener unas cuantas horas de sueño.

-¿Entonces? Dime que no te sigues preocupando por la estúpida broma de Cameron.

Deje la comida a un lado-Déjame en paz Austin.

-¿Es por eso Kate? No va a hacer nada, esa es su broma, todo es psicológico.

-¿Cómo la tuya?-respondí, ya no tenía hambre.

-La mía es demasiado buena.

-Te estas dando muchos aires.

-Y los tengo.

-Lo que digas-tome mi mochila, hoy no soportaba a Austin.

-¿A dónde vas? Tenemos que afinar los últimos detalles de la broma.

-Lejos de la broma-respondí y salí de la cafetería. Los pasillos estaban vacíos, ¿por qué estaban todos en la cafetería? Era lo más estúpido que podían hacer si esperábamos una broma final.

Entré a la sala de arte y quise gritar en cuanto vi el mural para el baile totalmente arruinado, el baile era esta noche. Mire como habían salpicado pintura sobre este, tenía insultos escritos con plumón permanente y habían rasgado las orillas, me iba a dar algo.

-Esta mejor así-ni siquiera me moleste en contestarle a Cameron, quería llorar, habían destruido nuestro trabajo. Y digo nuestro porque también trabaje en el en algunas horas libres y antes del

entrenamiento de Austin-No son tan buenos artistas como creen que son. Sus trazos eran muy malos y también su técnica de pintura.

-¿Es alguna clase de broma?-fue todo lo que pude articular. Los murales para los bailes eran algo importante para la escuela y más para los artistas, se reconocía su trabajo y no se les veía como raros por una vez en la vida.

-Solo lo mejoramos un poco-se encogió de hombros y colocó su brazo en mi cintura.

Maldita sea-¡Eres un imbécil Cameron!-reaccione y golpeé su pecho con mi puño-¡Eres un maldito hijo de puta! ¡Lo arruinaste! ¡Y todo por una maldita semana donde los niños se hacen estúpidas bromas!-grite y continué lanzando golpes con todas mis fuerzas, aunque parecía que le hacían cosquillas-¡Te odio! ¡Lo arruinaste! ¡Trabaje en esta cosa y tú lo arruinas! ¡Hiciste lo mismo con mi trabajo en la semana del arte! ¡Te dije que estaba fuera de la maldita semana de las bromas! ¡Lo arruinas todo! ¡Te odio!-quería llorar, pero no enfrente de Cameron.

-Kate...

Al parecer algo en mis palabras no le había gustado-¡Vete al diablo!-salí rápidamente de la sala de arte.

Estaba molesta y quería llorar, además de golpear a alguien en la cara.

-¿Estas bien Kate?-mis pies me habían llevado hasta donde suponía que Luke estaría.

Negué-Odio la semana de las bromas-suspire y pase una mano por mi rostro, no me importaba si el maquillaje se arruinaba.

-¿Quieres hablarlo?-Luke limpió sus manos, estaba trabajando en su motocicleta.

Había un pequeño taller en la escuela, normalmente lo utilizaban los chicos de robótica cuando tenían que

armar el robot, pero los moteros lo tomaban para arreglar su motocicletas.

-Lo arruinó-murmure y me senté en uno de los bancos.

-¿Austin?-negué.

-Monroy High destruyó el mural en el que trabajamos para el baile de esta noche.

Luke se tardo unos segundos en comprender y después asintió-¿El de la sala de arte?

-Sí, el de la sala de arte. Son unos idiotas-pase mi mano otra vez por mi cara, no quería morderme las uñas, ya estaban creciendo-Solo quiero que hagan su maldita broma, todo esto me esta dando dolor de cabeza.

Luke se sentó a mi lado-¿No tienes un plan B?-negué, todos los artistas pusimos nuestra fe en ese mural-¿Algo en lo que pueda ayudarte?

Reí un poco-No lo creo Luke-mire a su moto-¿No te preocupa que le puedan hacer algo con todas las bromas?

-Se que no se meterán con ella, saben que los aplastaré si lo hacen-reí, me gustaba estar con Luke.

-Supongo que al final no puedo darte espacio.

-Esta bien.

-Enserio quisiera que me gustarás de esa manera Luke.

-Esta bien Kate.

Sonreí un poco y entrelace nuestras manos-Debo admitir que esto no es como lo pensé.

Luke río-Yo también.

-Kate-la puerta se abrió y puedo jurar que le iba a lanzar una de las herramientas de Luke a la cabeza si no se marchaba.

-Largo Cameron.

-Kate, quiero hablar contigo.

Luke me miro, él sabía que tenía un buen juicio y que no era estúpida. También conocía a Cameron y sabía que estaba preocupado por

mi. Además de que él no iba a responder por mi, no era como Austin.

-Tienes dos minutos exactos-murmure y le sonreí a Luke-Estaremos afuera, gritare si necesito tú ayuda-Luke beso mi mejilla y yo salí junto con Cameron-Tú tiempo comienza ahora-puse el tiempo en mi celular y lo mire.

-Kate, no sabía que te ibas a poner así por un mural. Y quiero que sepas que el idiota que arruino tú trabajo en la semana del arte no fui yo, ni siquiera sabía de eso hasta que me lo gritaste. No era mi intención arruinar el mural, bueno si, pero no sabía que tú habías trabajado en el, con eso de que Austin no quiere que nadie sepa que eres una artista, si lo hubiera sabido no lo hubiera destruido-paso la mano por su cabello, le quedaba un minuto-Así que si quieres estar fuera de la semana de las bromas, te recomiendo que te vayas con el rubio antes de medio día.

Pierce The Veil sonó señalando que el tiempo había terminado.

Suspire-¿Cuál es la broma Cameron?

-No puedo decírtela-mordió su labio, sabía que quería contármela.

-¿Es la que pienso?-Cameron negó.

-Los chicos tuvieron una idea y la cambiamos ayer.

-Cameron...

-Te la diré a cambio de algo.

Asentí-¿Qué quieres?

-Quiero que hagas tú decisión-fruncí el ceño.

-No se a que te refieres.

-Lo sabrás cuando te cuente la broma.

-De acuerdo-no tenía ni idea en lo que me estaba metiendo.

-La broma final es humillar a Austin Max.

Y vaya que no hubiera querido meterme.

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NOTA DE LA AUTORA:

Antes que nada, quiero agradadecerles a las personas que leen la historia.

Se que nunca escribó nada o les agradezco, pero enserio, muchas gracias por leer y votar, no tienen idea de lo mucho que me emociona ver que a la gente le gusta la historia y lo sigue.

Así que me presentaré rápidamente, mi nombre es Michelle, tengo 16 años y soy de México. Gracias por su apoyo y pronto subiré un nuevo capítulo.

Cualquier pregunta o si quieren hablar, pueden dejar un comentario o mandarme un mensaje.

Gracias xx.

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¿Humillar a Austin Max?

Diecinueve:

Mire el reloj, faltaba media hora para medio día. Cameron no me había dicho como planeaban hacerlo, solo que iban a hacerlo a medio día en el campo de fútbol.

Estaba frustrada, había pasado una hora junto con Luke intentado adivinar que harían exactamente, pero no se nos ocurría nada que pudiera humillar a Austin.

-¿Quieres ver la broma?-quería largarme, pero no podía abandonar a Austin.

Luke y yo caminamos al campo de fútbol y entonces pude ver como la gente ya estaba sentada en las gradas. Luke y yo encontramos lugar al frente, junto a Jo.

-¿Tienes alguna idea de por que Austin nos llamó a todos?-Jo lucía realmente aburrida.

-¿Austin los llamó?

-Sí, fue un mensaje-me mostró su celular y de inmediato supe que ese no lo había enviado Austin, tenía una ortografía horrible.

Austin era estúpido, pero tenía una grandiosa ortografía, le molestaba que la gente escribiera mal, ese mensaje no lo pudo haber mandado él sin haber sufrido algún ataque.

El tiempo salió en el tablero, marcaba exactamente los minutos que faltaban para medio día e iba en retroceso.

-Hola gran gente de esta patética escuela-Cameron salió con un micrófono entre sus manos y todos los abuchearon, incluso Jo-Lo se, me aman, tanto como lo aman a él.

Dos chicos salieron sosteniendo a Austin, sus manos estaban atadas y lucía como si lo hubieran intentado golpear pero fracasaron.

Por fin entendía las palabras de Cameron, viendo a mi mejor

amigo ahí parado en medio del campo y a los de Monroy High caminando hacía él.

Sabía el mensaje que me había dado Cameron. Él o tú.

Lo humillamos a él o te humillas tú.

Suspire, sabía que Austin nunca haría algo así por mi, pero yo no era mala persona y no podía dejar que le hicieran eso a mi mejor amigo.

Cada vez se acercaban más y Cameron sujetaba a Austin frente a todos.

Cinco minutos era todo lo que me quedaba, o eso decía el reloj.

Un minuto para tomar mi decisión.

Dos para ponerme de pie.

Tres para que Cameron soltará a Austin y me mirara.

Cuatro para tomar el lugar de Austin.

Cinco para destruir mi vida y salvar a Austin.

Cameron pateó a Austin y dos chicos lo sostuvieron, obligándolo a mirar.

-¿Qué estas haciendo Kate?-podía notar el pánico en la voz de Austin.

Mire a Cameron-Tome mi decisión.

-¿Puedo saber cuál es?

-Sabes cual es, termina con esto de una vez-murmure, no quería pelear, había sido un día realmente estresante y si ayudar a Austin implicaba suicidio social, no me importaba.

-Él no haría lo mismo por ti Kate-asentí.

-Por eso lo hago Cameron-deje que otro chico atará mis manos-No saldré corriendo-mire al chico que no sabía si amarrarme los pies también-Tengo poco equilibro.

-Kate-Austin, solo cállate y deja que todo termine.

-Cállate Max-Cameron escupió las palabras y ese simple gesto fue lo que hizo que todo encajará, no podía humillar a Austin con nada, porque no había nada humillante sobre Austin que la gente no supiera. Solo una persona podía humillar a Austin y esa persona estaba en el campo de fútbol, haciendo todo mal. Esa persona era yo, yo iba a humillar a Austin.

Mire a Austin y él pareció entender mi mirada porque su cara se llenó de preocupación.

-Sabes mi decisión Cameron-repetí e intenté recordar la palabra que Austin me había dicho que iba a ser la clave para que nuestra broma comenzará-No le dices a nadie tú broma si no esperas que se queden.

-Tú procesamiento fue un poco lento-Cameron sonrió.

-No tanto como tú intentando entender una clase de historia-historia era la materia más odiada por Austin, así que por eso lo había escogido.

-¿Qué tiene que ver una clase?-pregunto confundido.

-Oh, no tienes idea Cameron-mire como el equipo de fútbol se colocó detrás de los idiotas de Monroy High-Tú no te metes con mi escuela o con mi mejor amigo, menos conmigo.

-¿Qué me vas a hacer?-sonreí.

-No tienes idea-el equipo básicamente lleno a todos de la masa de Vincent. Esa era nuestra broma, la primera broma que fue lanzada en la semana de la semana de las bromas era la final, cosa que Monroy High no sabía.

La broma que yo le había hecho a Austin iba a ser la última, pero esta vez con un toque diferentes la masa, esta vez se endurecía y se pegaba al cabello.

-Vete al diablo Cameron Jones-reí mientras que Austin le lanzaba la masa encima.

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El baile no perfecto

Veinte:

Mire el mural, era básicamente imposible volver a hacerlo todo, con Sawyer habíamos intentado pensar en algo o dibujar algo más, pero era imposible, no teníamos materiales ni tiempo.

-¿Kate?-Austin entró a la sala de arte y miro el lienzo vacío.

-¿Qué sucede Austin?-pregunte cansada, Sawyer estaba en una crisis en la esquina de la sala con Dougie intentado calmarlo.

-¿Cómo va?-pregunto.

-¡Malo! ¡No hay manera de hacerlo!-grito Sawyer y yo reí levemente, nunca lo había visto en crisis, era divertido si quitabas sus lágrimas.

-Creo que puedo ayudar-Austin sonrió levemente.

-No eres un artista Austin, al menos, no de la pintura-intenté no sonar muy dura con Austin.

-Lo sé-se encogió de hombros-Pero pensé en traer todo un equipo-abrió la puerta y pude ver a todo el equipo de fútbol y a algunas porristas afuera.

-¿Qué hacen ellos aquí?-preguntó Dougie dejando a Sawyer.

-Tomando en cuenta de que nosotros somos los causantes de que el mural no este listo, supusimos que sería bueno ayudarles-sonreí y abrace a Austin.

-¿Saben sostener un pincel?-Sawyer se levantó del suelo de un salto y tomó su posición como líder de los artistas.

-Por supuesto-Blake sonrió y Dean mostró los pinceles que traían en las manos-También pensamos que necesitarían pintura-el resto del equipo levantó un bote con pintura de diferente color.

-¡Chicos!-grito Sawyer y el pequeño grupo de los artistas se puso de pie-Tenemos trabajo que hacer-sonrió-Tenemos un mural que pintar.

Alise el vestido rojo con mis manos, el tema del baile

había sido un baile en el infierno. Así que los únicos colores permitidos eran rojo, dorado, amarillo y naranja para las chicas, y negro para los chicos.

-Me preguntó si habrá fuego de verdad-reí y tome el brazo de Austin mientras caminábamos a la escuela.

-No tenemos un presupuesto tan grande Austin.

-Por eso deberías ser presidenta, sabes los problemas que tenemos-lo golpeé suavemente en el brazo.

-Odio cuando sugieres que haga algo que involucra ayudar a los demás.

-Amas a ayudar a los demás-Austin besó mi mejilla.

-Tal vez-me encogí de hombros.

-¿Enserio Kate?-asentí-Podemos solo pasarlos y ya-negué divertida.

-Formemonos en la fila como las personas normales que esperan su turno, el hecho de ser popular no quiere decir que siempre te saltarás las filas.

-Nunca puedo discutir contigo-Austin se puso a mi lado y yo enredé mis brazos alrededor de su cuello.

-Por algo soy tu mejor amiga-bese a Austin, la fila no era tan larga, había convencido a Austin de llegar relativamente temprano. Aunque yo era la que siempre llegaba tarde, mi sentido del tiempo apestaba.

Me gustaba convencer a Austin de hacer cosas de gente normal, como esperar en la fila, era un paso a la vez con Austin.

-La fila esta avanzando-la chica de atrás habló molesta.

-Tranquila cariño, todos van a entrar-Austin le dedicó la sonrisa que le encantaba a las chicas-¿Podemos solo caminar al frente?-Austin me miro, siempre que quería algo ponía esos ojos, los había aprendido

de Sam de Supernatural y yo lo odiaba por eso.

-Bien-reí y tomo mi mano para caminar hasta el frente de la fila y sencillamente entrar.

-Me preguntaba cuánto te iba a tomar esta vez-Dean era el que recibía a la gente y a sus boletos, todo lo hacía por Hannah, la chica era la presidenta escolar y organizaba todo esto, así que a Dean no le quedaba más que ayudarla. Había hablado con ella un par de veces, era buena persona y una perfecta presidenta, yo misma había diseñado sus volantes y pósters para su campaña.

-Menos de lo pensando amigo-Austin le dio una palmada en la espalda.

-¿Te dio los ojos de Sam?-asentí y Dean río-Siempre funciona, en fin amigos, disfruten el baile, el alcohol esta debajo de la mesa por si gustan.

-Gracias Dean-Austin volvió a jalar de mi mano y entramos al gimnasio. Era el infierno, muy literal, o al menos, el infierno que te pintaban en las películas.

-Vayamos por nuestra foto-asentí y caminamos hasta el fotógrafo, en este caso era Sawyer, tenía un talento para todo tipo de arte.

La tradición entre Austin y yo se basaba en ir a todos los bailes juntos, ninguno podía dejar al otro solo ni tampoco ir con otra persona. Las fotografías de nosotros tenían que tener dos copias, para celebrar el fin de las bromas.

-Sonrían-Austin me tomo de los pies y me cargó al estilo nupcial mientras yo reía por su repentina acción-Hermoso chicos, sus dos copias serán entregadas a ustedes la próxima semana.

-Gracias

Sawyer-Austin y yo nos dirigimos a donde la fiesta se estaba desarrollando.

-Parece que se divierten-asentí, ya me había acostumbrado a que todas las chicas vieran a Austin como un trofeo e intentaran ser mis amigas para terminar con él, incluso podía decir que Jo quería a Austin. Pero eso era tonto si ella me había ofrecido dinero para enamorarlo...¡rayos! Me había olvidado de la apuesta, pff, debería darme por vencida, no sabía como actuar con Austin para enamorarlo.

-¿Estas bien? ¿En que piensas Kate?-Austin beso mi mejilla.

-En lo guapo que te ves en traje-sonreí encantadoramente.

-Me veo mejor sin el-reí, Austin no sería Austin sin sus comentarios.

-Lo sé.

-Podemos irnos y puedes verlo por ti misma.

-¿No quieres tú corona?-Austin siempre ganaba rey en los bailes y Meredith ganaba como reina, yo me rehusaba a participar y la escuela lo sabía.

-No porque tú nunca estás ahí para ser mi reina-por un momento no supe que responder, ese tipo de comentario nunca lo había hecho Austin.

-Claro-murmure, sinceramente me había incomodado un poco.

-Es la verdad Kate-Austin acarició mi mejilla.

-Iré por algo de tomar-me aleje de Austin y camine hasta la mesa de bebidas.

-¿Qué fue eso que acabo de ver? ¿Te alejaste voluntariamente de Austin sin haberle gritado?-Jo apareció a mi lado en segundos.

-Supongo-me encogí de hombros y saque el vodka de debajo de la mesa.

-¿Es por la apuesta?

-Sobre eso-serví un vaso y lo tome-Ya no hay apuesta.

-¿Qué?-serví otro vaso y se lo tendí a Jo.

-No puedo hacerlo, no se como actuar para enamorarlo, es estúpido, pienso que no tiene sentimientos-ella tomó el vaso y yo serví otro para mi.

-Creí que querías el dinero-volví a dejar la botella debajo de la mesa.

-Lo quiero-afirme-Pero lo de la apuesta es algo realmente tonto-murmure.

-¿Segura?-asentí-Bien, porque al parecer tienes razón respecto a Austin.

-¿Razón de qué? Digo muchas cosas sobre él.

-En que es estúpido y sin sentimientos-señaló en la dirección donde había estado antes y me encontré a Austin besando a una chica-¿Auch?

Fruncí el ceño-Auch-repetí en voz baja.

-Creí que en los bailes estaba prohibido eso.

-Lo esta.

-¿Vas a hacer algo?-negué.

-Hoy ha sido un día realmente estresante, pensé que él no iba a arruinar esta noche, siempre las arruina-murmure.

-Creí que sus bailes siempre terminan con ustedes en la cama-negué.

-El baile pasado Austin terminó tan borracho que tiró alcohol sobre mi vestido, por lo regular terminan con él tan borracho que me dedico a cuidarlo.

-No lo sabía Kate-tome el resto de mi vaso y lo deje sobre la mesa.

-Nadie lo sabe-aclaré mi garganta-Bien, con esto daré por terminada nuestra apuesta Jo, gracias por el ofrecimiento del dinero.

-De acuerdo-Jo asintió-¿Quieres que te lleve a casa?-asentí, estaba demasiado cansada como para discutir con Austin-Bien, vamos.

Y pensar que había pasado horas arreglándome y poniéndome une estúpido vestido para que mi noche terminará así.

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Papá

Veintiuno:

-Llegas temprano-mi padre dejo la cena a un lado.

-Mi cita nunca apareció-me encogí de hombros.

-Es un idiota por dejarte plantada-reí.

-No tienes idea-murmure y deje los tacones en el suelo, junto a las escaleras.

-¿Vas a llorarlo en tu habitación?-negué-Genial, sabes que odio verte llorar-sonreí, mi padre entraba en pánico cuando lloraba cualquier persona.

-Es bueno saberlo papá-estaba cansada.

-¿Ya te vas a dormir?

-¿Tienes algo en mente?-me recargue en el marco de la puerta.

-Hace mucho que no paso tiempo contigo, así que sí-sonreí.

-Me pondré unos zapatos.

-¡Lleva el vestido!

Entramos a la heladería, Dios, amaba este lugar y mi padre también.

El lugar tenía tantos recuerdos y todos eran bastante buenos.

-Iré a la mesa-mi padre asintió y camino hasta Brandon, eran viejos amigos, mi padre y yo habíamos sido unos de los primeros clientes en este lugar.

La heladería no tenía nada especial, era como cualquier otro lugar y el sabor de los helados era normal, no fantástico ni malo, normal. Eso me encantaba de este lugar, era normal.

-Vainilla para la chica de vestido largo y fresa para su padre-reí nuevamente, mi padre siempre podía hacerme reír con lo más estúpido.

-Gracias papá.

-Cuéntame ¿Quién es este idiota que debo golpear?-lleve una cucharada de helado a mi boca.

-Es solo un chico de la escuela, me invitó al baile y me dejo plantada.

-¿Jo te trajo?-asentí-Debería conseguirte tú propio auto-sonreí, el recuerdo era bueno. Austin había intentado enseñarme a conducir con su auto, casi le da un infarto cuando casi lo chocó con una señal de tránsito. Primero se preocupo por el auto y después me obligo a moverme del asiento de conductor.

-No creo ser muy buena conductora.

-Tienes mi coordinación Kate, te va a llevar tiempo aprender-mi padre y yo teníamos la coordinación de un niño de dos años, perdíamos el equilibro, nuestro sentido del tiempo era pésimo y también el de la orientación, solo podíamos hacer una cosa a la vez y ni hablemos de manejar.

-Supongo.

-¿Algún chico con el que deba hablar?-negué divertida.

-Mejor hablemos de ti papá, no quiero hablar de mi hoy.

-De acuerdo-mi padre sabía cuando debía parar de hablar y lo quería demasiado.

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Orgullo y Prejuicio

Veintidós:

-Kate-mire a Sawyer-Ten-me tendió el sobre-La otra ya la entregué.

-Gracias Sawyer-sonreí-¿Cuánto te debo?-pregunte.

-Oh nada, Austin ya me la pago-apreté el sobre.

-De acuerdo, nos vemos-Sawyer asintió y yo comencé a caminar en dirección a Literatura.

Austin no se había presentado a ninguna de las clases anteriores y a mi no me importaba, no estaba molesta con él, solo dolida.

Dolida de haber pasado una hora quitando la pintura de todo mi cuerpo, dolida de haber escogido un vestido con emoción, dolida de haber pasado media hora trabajando en mi maquillaje, dolida de haber peinado mi cabello y dolida por haberme puesto tacones solo para que Austin lo hubiera terminado arruinando.

-¿Estás bien?-Jo tomó el puesto que normalmente Austin tenía en literatura.

-Estoy cansada, anoche no pude dormir-murmure sacando mi libro.

-Ayer fue domingo-Jo frunció el ceño.

-Lo sé-fue todo lo que dije.

-¡Poe fue uno de los grandes!-Rebecca Tomlinson llego al salón de clases con su típica entrada dramática que siempre hacía-Cuentos de terror demasiado reales-la mitad de la clase estaba durmiendo-¡Señor Michalak!-Dean brincó en su lugar y miro confundido a todos lados hasta que su mirada aterrizo en Rebecca-Díganos ¿Cuál fue su cuento favorito de Poe?

-Pues...bueno-rascó su nuca-El cuervo, me gusta-sonrió-Un asesino, ¿Quién lo hubiera imaginado?

-Para la próxima evite ver la película señor Michalak y lea en el libro-murmuro Rebecca

y todos rieron.

-Sí señorita Tomlinson-Dean estaba maldiciendo en su cabeza.

-Señorita Poynter-me encorve ligeramente, detestaba cuando los profesores ponían su atención en mí. Normalmente Austin hubiera hecho una broma y hubiera distraído a todos-Se que usted no es gran fan de Poe-me encogí de hombros, no tenía nada en su contra, era bueno-Cuénteme sobre el último libro que leyó.

-Fueron los hermanos Grimm señorita Tomlinson-murmure esperando que eso terminará con su interés por mí.

-¿Qué cuento fue?

-Cenicienta-mi cuarto estaba lleno de libros, incluso había libros en el suelo, pero iba más por el arte. Mi cuarto era un desastre en pocas palabras.

-Lindo, ¿Quieres compartir tus sentimientos al leer la historia?-sacudí la cabeza-Bien, en ese caso supongo que no le molestará pasar y recitarnos su frase favorita de Orgullo y Prejuicio.

-Solo se de la película, no he terminado el libro-me excuse.

-La película me encanta, por favor señorita Poynter.

Me puse de pie y me pare delante del salón, odiaba hablar en público, la voz me temblaba y nunca podía ver a nada que no fuera la pared.

Tome aire, esta frase me recordaba a Austin-¿Es muy orgulloso Sr. Darcy? Y dígame, ¿considera el orgullo un defecto o una virtud?

-No podría decirle-fruncí el ceño y vi como Austin entraba lentamente al salón.

Austin sabía que Orgullo y Prejuicio era de mis películas favoritas, la habíamos visto las suficientes veces juntos para saberla de memoria.

-Porque nos estamos esforzando en hallarle un defecto-me

cruce de brazos.

-Quizás esa es la razón por la que encuentro difícil perdonar a otros, o sus ofensas y fallas en mi contra. Mi buena opinión una vez perdida lo está para siempre.

-Oh, no puedo bromear sobre. Es una lástima ya que me encanta reír-camine hasta mi lugar sin esperar la aprobación de Tomlinson.

-Magnifico-Rebecca sonrió como una loca-Señor Max, me alegra que se nos una.

-Es bueno verte Becca-Austin sonrió y frunció el ceño levemente al ver a Jo en su lugar.

-¿Tal vez puede recitar otra cosa? He escuchado que es un gran fan de Cumbres Borrascosas.

-Los clásicos no son lo mío-se disculpo Austin y me miro, los clásicos eran lo mío, él solo era arrastrado por mí a ellos.

-Oh...¿Alguna otra frase que sepa?

-Le conté la historia de dos personas. Dos personas que no deberían haberse conocido y que al principio no se cayeron demasiado bien, pero que descubrieron que eran las únicas dos personas en el mundo que podrían comprenderse-fue todo lo que dijo Austin antes de sentarse en el fondo de la clase.

-Y le conté de las aventuras que compartieron, los lugares que visitaron y las cosas que vi y no esperaba ver-completé el párrafo del último libro que había leído.

-Le conté algo bueno-Austin se saltó hasta el final.

-¿Seguimos?-la señorita Tomlinson lucía un poco incomoda.

-Seguimos-murmure, no quería seguir diciendo frases para darle indirectas a Austin.

La clase paso más lento de lo que hubiera

querido y eso solo me dio tiempo para pensar y darme cuenta de que en realidad estaba furiosa con Austin.

Camine lo más rápido que pude por los pasillos para no encontrarme con Austin, juro que podía darle un puñetazo en la cara y no me importaría. Probablemente le terminaría dando una exclusiva al periódico escolar si no me cuidaba.

Todo el mundo seguía confundido sobre el porque no había estado ahí para aplaudirle a Austin en cuanto ganó rey del baile y porque no había hecho un comentario sarcástico sobre Meredith ganando como reina del baile.

Al parecer todos se estaban dando cuenta de nuestros malditos problemas y el periódico escolar quería una maldita exclusiva sobre eso. Tenía reporteros pisándome los talones y aturdiéndome con preguntas sobre Austin.

-Sin comentarios-murmure al cuarto chico que se me había atravesado con una libreta en la mano.

Podía matar a cualquiera y me sorprendía de no haberlo hecho aún.

-Bueno, pero eres una cabeza dura-River apareció delante de mi, cortándome el paso.

-Y tú el segundo idiota más grande de la escuela-escupí molesta, no estaba de humor.

-Me alegra saber que Max sigue teniendo el primer puesto-se rió como si le hubiera contado un chiste ¡Un maldito chiste!

-No daré una exclusiva River-murmure, esto comenzaba a cansarme y solo quería dormir hasta que el maldito mundo no existiera más.

-Sería un gran titular, pero no vine por la exclusiva. Al menos, no por esa.

Me cruce de brazos-¿De que exclusiva hablas?-había tantos rumores sobre mi que no estaba segura sobre cual quería hablar.

-No es exactamente sobre ti-se estaba tardando demasiado y juro que el golpe que llevaba queriendo darle a alguien todo el día, iba a ser para él.

-Escúpelo de una vez, no tengo todo el maldito día, tengo cocina.

-¿Te suena el nombre Ryan Donovan?-apreté los labios-Sabía que sí-sonrió, odiaba su sonrisa engreída-Tú medio hermano me ha dado el dato de que tú y cierto individuo relacionado con Austin Max salieron.

Había pocas cosas que me sorprendían en la vida y esta debía ser una de ellas-¿Cómo conoces a Ryan?-pregunte rápidamente.

-¿No lo sabías? Tú hermano es parte de esta escuela-esa era otra sorpresa que no esperaba hoy-Era basura escolar, lo saque de ella cuando me di cuenta de que tenía material para ser reportero, es de los mejores debo decir-y sin decir más, mi puño salió disparado a su nariz, ignorando el horrible crujido y la sangre saliendo de ella, sonreí.

-¿Dónde esta Ryan?

-¡Eres una puta!-grito tocando su nariz, algunos chicos en el pasillo se detuvieron y nos miraron interesados.

-¡¿Dónde esta Ryan?! No me obligues a dejarte un ojo morado River-amenace, aunque probablemente era mala idea, considerando que él era dos veces mi masa muscular.

-¡No lo sé bruja!-grito y pude ver a Austin entre la gente, oh no, mi enojo con él ya no estaba presente.

-¡Mantén la maldita boca cerrada Collins!-empuje a la gente para comenzar a buscar a Ryan Donovan, ese idiota debía mantener la boca cerrada o algo malo iba a pasar un día de estos.

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Ryan Donovan, Michael Max y Arreglando Errores

Veintitrés:

-Kate es una sorpresa...

No lo deje terminar, mi puño ya estaba en su cara.

-¡Quédate en tus jodidos asuntos Ryan y no te metas en los míos!-grite molesta.

-¡Estas loca!-sabía que mi puño no le había hecho mucho daño, había perdido fuerzas después del golpe a Parker y mis nudillos ya estaban lastimados.

-Hablo enserio Ryan-intente calmar mi tono de voz, aún había algunos chicos en las oficinas del periódico y no quería tener que dar más exclusivas de las que esperaba después de golpear a River Collins-No puedes hablar de mi vida como si tú fueras parte de ella, no sabes ni la mitad de la basura que le dijiste a River-me senté en una silla, estaba exhausta.

-Soy tu hermano Kate.

-No, no lo eres-murmure.

-Medio hermano-corrigió sus palabras.

-Sigo sin quererte en mi vida, aún sigo sin saber como te conté sobre él-ese nombre, no podía decirlo.

-Necesitabas a alguien con quien hablar y sabías que Austin no iba a escucharte-se sentó en otra silla.

-Entonces deberías saber que no es tu jodido asunto como para que andes hablando de ello-la adrenalina que llevaba, se estaba bajando rápidamente, como si solo quisiera quedarme dormida.

-No dije nada de Michael, solo River me pregunto si alguna vez habías tenido algún novio de verdad y yo le dije su nombre, solo eso, no su apellido, él debió de haber asumido todo-mire a Ryan, su estúpido cabello rubio como el de Jessica me volvía loca y más ver el mismo color de mis ojos en los suyos.

Papá siempre había dicho que Ryan y yo éramos muy parecidos, no físicamente, pero

sí en la manera que actuábamos, los dos éramos cabeza duras y unos orgullosos de primera. Pero ambos sabíamos cuando debíamos ser sinceros y decir la verdad, incluso podíamos admitir nuestros errores.

-No sabía que estabas en la escuela-cambie el tema.

-Eso supuse-me dio una sonrisa, no era tan malo-Veo que eres toda una noticia aquí, ¿Cómo es eso posible?

-No contestaré preguntas-reí un poco.¿Por qué no me dijiste que eras basura escolar?

-¿Qué hubieras hecho al respecto?-note como su mano jugaba con una pluma, sabía que se moría por preguntarme cosas sobre lo que todos los reporteros se morían por saber, pero no iba a preguntar hasta que yo dijera algo.

-Tal vez ayudarte a no serlo-me encogí de hombros, claramente lo hubiera ayudado.

-¿Haciéndome popular? He visto como es tú vida, me gusta la tranquilidad, gracias.

-Tienes razón, no tienes lo que se necesita para estar en la cima-Ryan rió.

Ryan no era guapo, para mí era un chico que se veía igual que el promedio, no había nada especial con él. No era como Austin que lo veías y te atrapaba, tal vez eran sus ojos, demasiado azules para ser verdad o la manera en la que nunca peinaba su cabello y aún lograba verse como si hubiera pasando horas trabajando en él, pero Austin era un misterio andante.

-Se que hubieras hecho algo Kate, pero quería intentarlo por mí mismo ¿Sabes? Ver como funcionaba y a que pertenecía en realidad-señaló a su alrededor-He notado que tú tampoco has encontrada

a que perteneces en realidad-sonreí levemente.

-Lo he encontrado Ryan, es solo que las personas se niegan a verlo.

-¿Los artistas?-asentí-¿Puedo tener la exclusiva?

-Si algún día decido abandonar a mi mejor amigo y renunciar a todo, por supuesto que sí Ryan, serás el único-esperaba que ese día estuviera cerca-Incluso, podrías quitarle a River el puesto como Presidente del periódico-sugerí.

-Si me das algunas exclusivas, podría arriesgarme a hacerlo.

Me puse de pie y lo despeine-Un paso a la vez. Ponte hielo en la cara, comienzo a ver rojo-salí de las oficinas del periódico escolar.

Mi siguiente movimiento fue ir a la oficina de Connor, necesitaba hielo y un trago. Y eso fue lo pude obtener en su oficina.

-¿Sabes que le director te enviará con el consejero escolar después de haberle dado un buen golpe a ese idiota?-reí y tome de mi cerveza.

-Eso es lo que hago aquí, hablo con mi consejero.

-¿Tú consejero es tan guapo como yo?-los dos reímos.

-Algo así.

-¿Dónde está?-Austin entró a la oficina de Connor y tomó mi cara entre sus manos-¿En que problema te metiste ahora Kate?-dejó mi cara y tomo mi mano, examinando mis nudillos y quitando el hielo que había puesto sobre esta.

-En nada Austin-no iba a decir Michael, Austin explotaría si se enteraba.

-No por nada le pegas a River-sacó de su mochila un frasco, era ese que tenía consigo en los entrenamientos y el mismo

que ponía en su espalda cada vez que terminaba partido, era pomada.

-No quiero hablar de eso-murmure en cuanto comenzó a untarla sobre mis nudillos.

Suspiro-Bien-comenzó a vendar mi mano, ¿Qué acaso llevaba un botiquín en su mochila?

-Bien-repetí y mire como sus largos dedos se dedicaban a vendar mi mano.

-¿La jodí esta vez?-asentí y Austin sostuvo mi mano por unos momentos después de haberla terminado de vendar.

-Demasiado.

-Lo lamento.

-Está bien-respondí distraída, no estaba bien, pero no quería decir nada más

-¿Por qué siempre me perdonas tan fácilmente?

-Eres mi mejor amigo-fue lo único que pude decir.

-Eres demasiado buena para mí Kate y lo sabes-Austin soltó mi mano.

-Suenas como si estuviéramos saliendo-una emoción se instaló en los ojos de Austin, pero no podía decir que era. Había desaparecido demasiado rápido.

-Eres mi mejor amiga-fue ahora su respuesta.

-Bien-repetí.

-¿Sabes que lo lamento mucho?-asentí, era la misma respuesta todo el tiempo-¿Puedo compensarlo?-volví a asentir.

-¿Cena?

-Pensaba llevarte a ese Bistrot francés que tanto amas.

Sonreí-Odio que me conozcas tanto.

-¿Paso por ti?-negué.

-Le diré a mi padre que me lleve, tengo que comprar algo antes.

-Bien-Austin se puso de pie-Nos vemos a las ocho ahí.

-A las ocho-después de todo, Austin no era tan idiota.

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Gracias a las que han leído.

Y si les interesa, hice un playlist en spotify. Son canciones que me inspiran mientras escribo los capitulos, que cuentan algunas partes de la historia y que las ayudaran a enteder un poco más.

Mi nombre en spotify es mich_luna1 y el playlist se llama K&A. 

Es opcional, otra vez, gracias por leer.

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Ms. Brightside

Veinticuatro:

-Diviértete cariño-mi padre sonrió y yo me baje del auto, le había dicho que iba a salir con Jo y probablemente me quedará a dormir en su casa, a él no le había importado ni había hecho preguntas sobre mi ropa, debía admitir que me había esforzado por verme bien. Salir con Austin siempre era un reto.

Pedí una mesa para dos y me dedique a ver el menú por media hora, eran las ocho y media, Austin odiaba llegar tarde a todos lados, así que me sorprendía que no hubiera aparecido o me hubiera llamado, un maldito Whatsapp estaría bien.

A las nueve pedí de cenar, decidí que si Austin llegaba, no le iba a molestar.

A las nueve quince revisé mi celular, nada.

A las nueve veinte volví a revisarlo, nada.

A las nueve y media me dedique a jugar con la vela de la pequeña mesa.

A las treinta y cinco le llamé a Austin, nada.

A las nueve cuarenta volví a llamarle, otra vez nada.

A las nueve cuarenta y cinco me terminé mi comida y rechacé el postre.

A las nueve cincuenta le llame a Austin, nada.

A las diez pedí la cuenta y me marche.

Camine hasta casa de Austin para asegurarme de que estuviera bien, tal vez sus padres habían llegado de sorpresa, esa era la única respuesta al porque me había dejado plantada durante dos horas.

Decidí tocar la puerta por si sus padres estaban dentro, no me vieran entrar como Juan por su casa.

Esperé unos momentos a que la puerta se abriera y preparé mi mejor sonrisa para la señora

Max, pero esta se desvaneció en cuanto la puerta se abrió completamente.

-¿Puedo ayudarte?-pregunto la chica, no la había visto en mi vida, estaba segura que era de Raymond High, ese bronceado no se conseguía en cualquier lugar.

Pude ver las marcas rojas en su cuello, mi camiseta favorita de Austin en su cuerpo, su cabello desordenado, sus labios hinchados y las marcas de los largos dedos de Austin en sus muslos.

-Creo que me equivoque de apartamento-murmure.

-Oh bueno, este lugar es enorme, yo también me perdí muchas veces-me ofreció una sonrisa amable.

-¿Cuántas veces te tomó dejarte de perder?-pregunte.

-La cuarta vez puede ser-la sonrisa no desaparecía su cara-Puedo ayudarte si me dices el número.

It was only a kiss, it was only a kiss

La voz de Brandon Flowers comenzó a sonar en mi cabeza.

-Gracias, supongo que llamaré y preguntaré.

-De acuerdo, adiós-la chica cerró la puerta.

Now they're going to bed

And my sotmach is sick

Caminé hasta el elevador, iba a vomitar y esta vez era enserio.

And it's all in my head

But she's touching his chest

Now, he takes off her dress

Now, letting me go

Maldita sea Austin, me había plantado por acostarse con una chica, en su apartamento. Él nunca llevaba nadie a su apartamento, era casi tan estricto como con su auto. Decía que era su lugar de chico y que podía estar tranquilo ahí.

And I just can't look it's killing me

And taking control

Austin había roto la regla número uno, eso significaba que había roto la amistad. Nunca había roto la regla número uno.

No sabía que hacer a continuación cuando llegué a la calle, llorar o regresar y matar a Austin. Era todo un dilema para mí.

Quería llamar a alguien y contarle todo, pero al mismo tiempo quería dejar lo que pasaba entre Austin y yo como un secreto.

Regla número uno: Nunca cambiar o abandonar a un amigo por una chica o un chico. La amistad termina automáticamente al romper esta regla.

Había escrito Austin en una nota en celular y después me la había enviado por mail.

Hice la única cosa que se me ocurría en esos momentos, me fui a casa. Mi padre estaba trabajando en la oficina hasta tarde o eso había dicho.

Hice caso al consejo de Sawyer y me dedique a dibujar, tenía un lienzo en blanco de tamaño mediano, lo había estado reservando para algo.

Hice lo primero que se me vino a la mente, un par de ojos y aunque solo tuviera un lápiz en la mano, podía imaginar lo difícil que sería hacer la mezcla para que quedará de un azul tan profundo y extraño.

El siguiente paso fue hacer la mezcla, me la pase mezclando azules con blanco, incluso probé con un rosa, pero nada se comparaba a sus ojos. Así que lo pinte con el color que más se acercaba.

Mi celular vibró, era una llamada de Jo. Decidí ignorarla, no quería hablar con ella, no quería hablar con nadie.

Decidí que el cuadro se llamaría "Mr. Brightside" solo porque

había sido la primera canción que se me vino a la mente y me había estado siguiendo desde el momento en que deje el apartamento de Austin.

-Un beso y sexo-murmure después de escuchar la canción un par de veces.

Esa chica estaba ahora con Austin, en su cama, utilizando mi camiseta favorita y besando a Austin.

-¿Cómo termine así?-podía decir la canción de memoria a estas alturas.

Quería ignorar el hecho de que Austin había roto la regla número uno, el hecho de que la había jodido dos veces seguidas, que siempre la jodía y y que yo siempre terminaba limpiando su desastre. Pero no podía, algo me lo impedía y eso se llamaba respeto por mí misma, me tenía el suficiente respeto como para no volver corriendo a los brazos de Austin y esperar a que la jodiera de nuevo.

Quedarme ahí y esperar a que Austin me necesitará, era patética. Con razón la mayoría de la escuela me ofrecía un consejo cada vez que alguien me veía en los pasillos sin Austin.

No me moleste en cubrir las ojeras al día siguiente, no había podido dormir y no quería esconderlo. Mi padre se había marchado temprano, así que decidí que caminaría, Austin no me había mandado el mensaje de siempre diciéndome que estaría en mi casa en cinco minutos. Así que asumí que debía caminar.

En el camino algunas personas lo suficientemente amables, se ofrecieron a llevarme, pero me dedique a negarme amablemente. Al llegar pude ver el auto de Austin en el estacionamiento, pero no me molestó,

estaba harta de siempre estar molesta con él, no recordaba un solo momento de los tres años en que nos conocíamos, que no me hubiera molestado con él. Si él quería joderlo, por mí estaba bien, que hiciera lo que quisiera, pero que no me metiera en eso. Como diría Taylor Swift, está es la última vez.

Por primera vez en todo el tiempo que llevaba en la escuela, baje la cabeza. No tenía la fuerza para enfrentar a Austin y a la escuela al mismo tiempo.

Todos murmuraban y no estaba segura de si era porque llevaba la cabeza baja o porque no estaba con Austin o porque alguien había muerto o por mis horribles ojeras. Cualquiera que fuera, no me importaba en lo absoluto.

Iba a dirigirme a la sala de arte, pero algo captó mi atención antes. Vincent estaba siendo golpeado por uno de los supuestos amigos de Austin, no de los chicos del equipo de fútbol, era un niño rico que se había unido de la nada a los populares. Como si fuera una sorpresa, nadie se preocupaba por él, maldita escuela cliché y estúpida.

Camine furiosa hasta ellos y empuje a la gente que se acumulaba en alrededor de ellos. Ignore las miradas de advertencia de algunos chicos del equipo de fútbol y esquive la mano de Dean que intentó detenerme.

-¡¿Qué crees que haces?!-jalé la camisa del chico con todas mis fuerzas y este soltó a Vincent, tambaleando un poco al momento de hacerlo.

-Kate-podía reconocer esa voz, era William no se que, me importaba poco, pero recordaba a la gente por la forma en que sonaba su voz-¿Qué crees que haces?-preguntó claramente sorprendido.

-¡Evitar que lastimes a alguien!-grite, claramente

no iba a calmarme esta vez.

-¿Qué?-todo el mundo tenía cara incrédula, creo que también habían llegado los del periódico escolar y estaban tomando fotos.

-¡No puedes andar golpeando gente porque se te pega la gana!-me cruce de brazos molesta, no me importaba porque lo había golpeado, solo quería terminar con esto.

-¿Lo estas defendiendo?-William comenzó a reír y yo supe que estaba apunto de terminar.

Mire a todos los que nos miraban, los del equipo de fútbol tenían la cara llena de preocupación, pero no decían nada. Finalmente pude ver a Austin, sería difícil no verlo, su expresión no revelaba nada, estaba segura de que no le importaba.

-Sí.

-¿Sabes lo que eso significa? ¿No?-tome aire, claro que lo sabía.

Austin apartó la mirada y supe que no le molestaría. 

Mire a William, poniendo la mayor seguridad que podía aparentar en mis palabras-Sí.

-Bien, entonces supongo que puedo hacer esto-empujo a Vincent lejos y me tomo del brazo para después besarme y separarse rápidamente-¡Katherine Poynter!-Dean cerró los ojos y supe que no quería escuchar esto-Espera, esto lo tienen que hacer oficialmente. ¿Austin?-mordí mi labio, por supuesto que solo Austin podía hacerlo-Por favor amigo, haz los honores-Austin se abrió paso entre la gente y me miro, su mirada estaba llena de molestia y algo más, de seguro odio y todo para mí. ¡Yupi!

It started out with a kiss

-Katherine Poynter-habló Austin, su voz era autoritaria, pero yo solo me dedique a mirar sus ojos, quería intentar adivinar que tono de azul eran-A partir

de este día ya no eres parte del grupo de los populares-su voz era dura y eso no hacía nada más que hacerme querer ver a Austin sonreír tanto, que su sonrisa se torcía-Todos te desconocemos y eres una más del montón.

How did it end up like this

Todos seguían en silencio, podía sentir la tensión por lo que estaba por venir.

-Eres parte de la basura escolar-Austin desvió la mirada, cobarde.

-Bien-quite mi brazo bruscamente del agarre de William-Gracias por su tiempo-le hice una reverencia a Austin-Su majestad-estaba dispuesta a salir de ahí, pero la voz de Austin me obligo a quedarme en frente de toda la gente.

-Quiero mi ropa devuelta-quería pegarle un puñetazo mientras todos los recuerdos de ayer llegaban a mi mente.

-Bien-repetí.

-Ya puedes irte-¿Me acababa de dar una orden? Me importaba un comino que fuera mi mejor amigo, lo iba a golpear.

Gire dispuesta a golpearlo, pero Sawyer y el cabello rojo de Dougie me detuvieron.

-¿Algo que se les ofrezca?-pregunto secamente Austin.

-Queremos decir algo al respecto de todo este asunto-solo Sawyer podía ser amable con alguien que le hablaba de esa manera.

-¿Qué quieren decir? Es basura escolar-las palabras de Austin en cierto modo me afectaron, pero no me moví.

-Sobre eso-Dougie me sonrió y entrelazo nuestros brazos.

-Ella no es basura escolar-completó Sawyer.

-¿Disculpa?-Austin estaba ofendido, alguien traiga a su madre.

-Los artistas tomamos a Katherine Poynter como una de nosotros-Sawyer me sonrió y quise abrazarlo-Eres una de nosotros-repitió mirándome.

Austin hizo una mueca-Bien, hagan lo que quieran-se dispuso a salir, pero esta vez lo detuve yo.

-Anoche te esperé por dos horas, espero que el sexo con esa chica hubiera valido la pena.

Y esta vez salí junto a Dougie y Sawyer, lista para dejarlo atrás.

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La exclusiva

Veinticinco:

-Cuando dijiste que me darías la exclusiva si esto pasaba, no esperaba que fuera verdad-Ryan se sentó en el banco.

-Ya ves-me encogí de hombros y quite las pocas cosas que quedaban en la mesa de trabajo-¿Qué quieres saber?-pregunté sentándome.

-¿Por qué?-fue la primera palabra que salió de su boca y yo reí suavemente.

-La vida de los populares no era para mí-respondí sinceramente.

-¿Por qué? Digo, parecía que te iba bien.

Negué-Las cosas se complican más de los crees. No todo es salir de fiesta y mantener una imagen. Crees conocer a las personas, pero todos hablan de ti. Es peor que Juego de Tronos y todas las traiciones.

-¿Ellos son los Lannister?-asentí-¿Qué pasa con Austin? Mucha gente se muere por saber eso.

Suspire, hace una semana de eso y la gente seguía hablando sobre ello, había tenido reporteros esperando afuera de mis clases solos para preguntar todo esto, pero yo se lo había prometido a Ryan.

Siendo parte de los artistas, tenía un nuevo horario. No sabía como funcionaba esto, pero tenía más tiempo para venir a la sala de arte y además llevaba un nuevo taller de pintura y dibujo, era genial. La única clase que seguía compartiendo con Austin era Literatura, pero había cambiado mi puesto, Jo seguía hablándome, no le importaba lo que otros dijeran sobre ella e incluso había visto a Dean sonreírme mientras cargaba material hacia la sala de arte.

Luke al parecer estaba orgulloso de que finalmente me hubiera librado de algo con lo que no era yo misma o eso había dicho su

nota sobre la caja de pinturas.

Y podía asegurar que el miércoles los chicos del equipo de fútbol no habían venido a limpiar a la sala solo porque el entrenador los había obligado para cambiar su comportamiento, en ese caso, Austin hubiera aparecido. Por supuesto no dije nada, me dedique a silenciar quejas por parte de ellos y ellos se dedicaban a bromear, justo como si nada hubiera pasado, claro que eso solo fue dentro de la sala y nadie lo sabía.

-Nada, no pasa nada con Austin-hable finalmente-No somos amigos, no somos conocidos, ni siquiera somos extraños que se encuentran e intercambian frases absurdas. Nada.

La mirada de Ryan cambió y pude ver que no estaba feliz, después de todo, éramos medio hermanos.

-¿Después de tres años de amistad?-no quería pensar en ello, tenía la teoría de que si no pensabas en algo, nada pasaba.

Por ejemplo, si no pensabas en algo que te causara dolor, no te dolería.

Si no pensaba en que Austin había tirado tres años de amistad a la basura, no me importaría ni me dolería.

-Es su decisión. Todos alaben al Rey de los idiotas-murmure, todos hagamos lo que Austin quiera, no importa si es la cosa más estúpida del mundo.

-¿Eres feliz Kate?-lo pensé por unos momentos y asentí.

-Hago algo que me gusta y no me arriesgo a que la gente me odie o me de comentarios por cosas que no he hecho, por primera vez Ryan, no soy el centro de atención...y eso me agrada-susurre lo último como si fuera un secreto.

-¿Has preparado algo para la semana del arte?-pregunto después de que una gran sonrisa apareciera en

su rostro.

-Ya casi está terminado, aún tenemos una semana más, pero ya casi todo está listo.

-¿Es cierto el supuesto romance entre Sawyer Thompson y tú?-reí, los rumores no tenían fin.

-No, solo somos amigos.

-Supongo que terminamos-se puso de pie.

-¿Eso es todo lo que querías saber?-pregunte confundida, creí que se pondría en plan investigador privado y me haría revelarle todos mis secretos.

-Sí, vive tu vida Kate. No dejes que otros se enteren de lo que haces.

-Deberías ser psicólogo Ryan.

-Eres mi hermana aunque lo niegues Kate, te conozco-sonreí-Solo una cosa más-Ryan me miro, esperando mi aprobación.

-Claro, dispara.

-¿Sobre qué fue lo último que le dijiste a Austin ese día?

-Tenía la sensación de que ibas a preguntarlo-me aclare la garganta-Austin me invitó a cenar pero nunca apreció, cuando fui a su apartamento para preguntarle, estaba ocupado con una chica. Fin de la historia, rompió la primera regla, así que yo rompí la amistad-toda la escuela estaba enterada de las reglas entre Austin y yo, incluso habían sido publicadas en el periódico escolar, así que iban a saber de que hablaba.

-¿Por eso defendiste a Vincent?

Negué-Debo admitir que Vincent fue la salida que buscaba, pero también lo defendí de un idiota con menos de un cuarto de su cerebro en funcionamiento. Nadie merece ser tratado mal por nadie.

Ryan me dio un beso en la mejilla-Me aseguraré de que te den una copia del ejemplar-salió por la puerta donde esperaban algunos de sus compañeros del periódico escolar, los cuales comenzaron a llenarlo de preguntas y a seguirlo, además de unos cuantos chicos del equipo de fútbol, los cuales sus casilleros quedaban frente a la sala.

-¿Todo bien cariño?-Dean entró a la sala cargando una caja con lo que parecía ser material.

-¿Qué haces aquí? Podrían verte-murmure poniendo todo de regreso a la mesa.

-Puede que sea parte del equipo de fútbol, pero me ofendes al llamarme idiota-sonreí, Dean no era un idiota.

-Creo que formulé mal la pregunta ¿Qué puedo hacer por ti?

Dean sonrió-Hannah lo manda-señaló la caja que acababa de dejar en la mesa.

-¿Qué son?-pregunte abriendo la caja.

-Dijo algo sobre las muestras para los colores del baile y algo sobre carteles-reí, Dean y su manera de memorizar cosas.

-De acuerdo.

-Le diré que los recibiste.

-Dean-se detuvo antes de salir-¿Puedes?-señalé la caja que llevaba en la esquina desde esta mañana-Ya sabes ¿Dársela?-había terminado de juntar todo lo que tenía de Austin y por más que quisiera ir y lanzársela a la cara, me preocupaba mi seguridad.

-Claro-Dean fue a recogerla-Vendré cuando Hannah mande algo más-sonreí.

-Procura hacer una lista de lo que quiere.

-Siempre-besó mi mejilla-Adiós Kate-salió finalmente de la sala de arte.

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Blue Eyes

Veintiséis:

Mordí mi labio ansiosamente, la semana del arte había llegado más rápido de lo que pensaba. No me sentía segura sobre mi trabajo e incluso planeaba destruirlo.

-Quiero que todos sepan que hicieron un gran trabajo este año y quiero que sigan esforzándose, tienen una gran mente-Sawyer aplaudió ante su propio discurso y todos los demás lo siguieron-No importa si perdemos, seguimos siendo ganadores.

Comenzaba a odiar tanto entusiasmo por parte de Sawyer y debía agregar, que la escuela se había vuelto loca en cuanto leyeron el articulo de Ryan y digo loca, porque nunca hubo un articulo, Ryan no había publicado la entrevista y me sentía agradecida con él.

-Ahora, todos busquen al popular que cuidará su trabajo y buena suerte-Sawyer bajo de la silla y se perdió entre toda la gente que estaba en la sala de arte.

-¿Alguien pidió seguridad personal?-reí mientras Dean se quitaba los lentes de sol.

-¿Eran necesarios?-pregunte señalando los lentes.

-Soy tú guardaespaldas por hoy-se encogió de hombros-Eran sumamente necesarios.

-Eres un perdedor-reí.

-Lo que digas linda. ¿Dónde está tú trabajo?-pregunto y yo tome su muñeca para guiarlo a la oficina de Connor.

-Oh Dean, te estábamos esperando-Blake y James se quitaron los lentes de sol.

-¿Qué hacen aquí?-pregunto Dean.

-Pensamos que la señorita Poynter necesitaría más que un solo chico para cuidar esta obra de arte-James señaló mi trabajo, el cual estaba cubierto por un sabana.

-Además no olvides que se ganó a varios enemigos durante la semana de las bromas-completó Blake.

-Bueno, ustedes hubieran traído a todo el equipo de fútbol-me cruce de brazos.

-Lo pensamos, pero no queríamos dejar a los otros artistas solo con porristas, niños ricos y moteros-los cuatro reímos-¿Podemos ver tú trabajo?-pregunto Blake como un niño que le pregunta a su madre si le da una paleta, adorable.

-De acuerdo-camine hasta mi trabajo y quite la sabana, para después mostrárselos.

-Es increíble Kate-Dean fue el primero en hablar.

-Tienes talento-James levantó los dos pulgares en señal de aprobación.

-Yo diría que más que Sawyer.

-No es para tanto-murmure intentando quitarle importancia-Solo es una pintura.

-Una pintura genial, debemos asegurarnos de que nadie la toque chicos-los otros dos estuvieron de acuerdo con Dean.

-Es hora de salir, James la pintura, Blake atrás de James y Kate atrás de mi-Dean dio las ordenes y nos pusimos en ese orden-Lleguemos al gimnasio completos chicos-los tres se pusieron los lentes de sol y yo simplemente negué con la cabeza, amaba a estos chicos.

Los cuatro caminamos pos los pasillos llenos de gente, Monroy High y Jet High volvían a encontrarse. Nos empujaron a los cuatro varias veces, principalmente a James, pero llegamos completos al gimnasio y mi trabajo no había sufrido ningún daño.

-Llamé a Kevin, nos traerá pizzas a todos-dejamos mi trabajo en su lugar.

-Suena genial-Blake jaló una silla y sentó a un lado del trabajo.

-¿No te olvidaste de las sodas?-pregunto

James jugando con su Nintendo DS.

-Pedí lo de siempre-Dean se recargó en la mesa-¡Déjame jugar James!

-Saca tu Game Boy-James ignoró a Dean.

-No tengo pila-Dean hizo un puchero.

-Rayos chicos, suenan como ancianos hablando de videojuegos tan viejos-Blake les hizo burla.

-Cállate Blake he visto el tamagotchi al fondo de tu bolsa de entrenamiento-respondió Dean.

-¡No metas a Juanito en esto!-amenazó Blake-Lo he tenido desde los 6, me sorprende que aún no muera. Eso quiere decir que seré un gran padre-reí.

-Los dejaré discutir, iré por mi bolsa, la deje en la sala de arte. Espero que lo cuiden con su vida-señalé el cuadro.

-Por supuesto capitán-respondieron los tres al mismo tiempo y prosiguieron a golpearse los unos a los otros por haberlo dicho al mismo tiempo.

Salí riendo del gimnasio, nunca sabía que esperar con esos chicos, eran especiales a su manera. Me sentía como una madre viendo crecer a sus pequeños. Aunque no tenía idea de como se sentía eso, no había tenido a una madre para que me lo dijera.

-Kate, escuche de tu degradación ¿Cómo se siente?-Cameron comenzó a caminar junto a mí.

-No tan malo como el hecho de que ustedes perdieron en la semana de las bromas-respondí girando en el pasillo para poder ir a la sala de arte.

-Fue una gran noticia, todos en Monroy High estábamos sorprendidos-ignoró mi comentario-Tu mejor amigo, eso debe doler-me detuve en medio del pasillo y mire a Cameron.

-¿Qué quieres Cameron?

Se que no me vas a hablar de Austin todo el día, así que suéltalo.

-¿Sabes quien era la chica por la que Austin te dejó plantada?-pregunto, lucía cansado.

-Tomaré una respuesta lógica y diré que tú novia-Austin siempre se metía con las novias de otros, teníamos a Luke de ejemplo.

-Es mi prima.

-Cerca-me encogí de hombros-Dile que tiene un gran bronceado, considerare ir a Raymond High solo por ese bronceado-volví a caminar.

-No puedo destruir tú trabajo, no sería ético de mi parte, pero puedo presentarte a la persona que esta furiosa contigo-volví a detenerme.

-Ya no tengo nada que ver con Austin o los populares.

-Fuiste su mejor amiga por tres años, nadie olvida tan fácil.

-Él sí-argumente.

-Kate, te presentó a Serena Jones-la chica que estaba en el apartamento de Austin esa noche apareció delante de mí, era alta, más alta que yo y esa falda hacía ver a sus piernas espectaculares.

Rayos, ahora entendía porque le había encantado a Austin esa chica. Su cabello completamente negro, contrastaba con sus gruesos labios pintados de un rojo intenso y esos ojos verdes que lucían astutos y encantadores al mismo tiempo. En cierto modo me recordaba a Isabelle Lightwood y eso me aterraba, pero me fascinaba, todo al mismo tiempo.

-¿Sigues perdida?-su tono era ácido.

-Un poco-me encogí de hombros-Mi sentido de la orientación apesta.

Hubiera podido ser Blancanieves si no tuviera ese bronceado, me gustaría verla

con piel pálida.

-Si se me permite-volví a hablar-¿Por qué estas tan molesta conmigo?

-Austin terminó conmigo, no me dio razones, solo me corrió de su apartamento-frunció el ceño, no se veía linda frunciendo el ceño.

Esperen...dijo ¿terminó? Para terminar se necesitaría una relación...oh. Me quedé callada, no tenía idea de que Austin tuviera novia.

-¿Cuánto tiempo llevaban saliendo?-pregunte inocentemente.

-Después de que la temporada de fútbol diera inicio-oh bueno, eso me quitaba un poco de culpa. No me había acostado con Austin en ese tiempo, solo Luke.

-Ahora que tengo un poco de información de su relación, ¿En que soy culpable de que Austin te dejará?-seguía sin ver mi parte en todo el problema.

-Dijo que ya le había causado suficientes problemas y que me largará-definitivamente en estos momentos no tenía ninguna relación con su nombre, ella no estaba serena o tranquila, parecía que iba a asesinarme.

-¿Qué quieres hacer al respecto?-estaba dispuesta a negociar una solución al problema.

-Esto-una bofetada no podía ser demasiado original ¿Cuántas películas había visto esta chica?

-Bien-murmure, estaba molesta y quería matarla, pero no ahora, ese no era mi problema, era problema de Austin-Ya tuviste lo que querías, yo me largo-camine hasta las escaleras para subir al siguiente piso, necesitaba llegar a la sala de arte y luego regresar al gimnasio antes de que a Dean le diera algo.

-No he terminado de hablar-chilló como niña de dos años y me alcanzó mientras subía las escaleras, ¿Cómo era tan rápida con una falda? Debía averiguarlo.

-¿Qué más quieres?-pregunte deteniéndome, estaba cansada.

-Quiero a Austin de vuelta.

-No soy un maldito mago, habla con él-me estaba irritando esta chica, en cierto modo veía porque Austin la había dejado. Era insoportable cuando se lo proponía.

-Me dijo que su mejor amiga venía primero, que yo era la culpable de haberlos separado, ¡Es un idiota!-repetí sus palabras en mi cabeza un par de veces, Austin la había culpado. También yo lo había hecho, ¡Ese era mi amigo!

-Sigo sin ver la raíz del problema-no me moleste en ocultar mi sonrisa.

-Agh, te detesto-me empujo levemente.

-Mucha gente lo hace.

-Eres una zorra-le gente comenzaba a juntarse al pie de las escaleras.

-Dime algo que no sepa.

-Tú arte es pésima.

Fruncí el ceño, ¡Con mi trabajo no se metía nadie!-Y yo propongo que dejes de salir con idiotas que sabes que van a romper tú corazón.

-¡No me digas que hacer con mi vida!-volvió a empujarme levemente y me tambalee un poco ¿Ya había mencionado que mi equilibrio apestaba?

-Bueno, escucha Serena, lamento lo que sea que haya hecho y que tú hayas salido con un idiota como Austin. Dejemos esto por la paz-finalicé y pude ver a Austin entre la multitud de personas-Deberías hablar con él, creo que los problemas se arreglarían mejor.

Corrí escaleras arriba, Austin siempre estaba metiéndome en problemas y yo no le veía lo bueno a eso.

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Everything I didn't say

Veintisiete:

Era el último día de la semana y hasta esos momentos, nosotros íbamos ganando, ganando en pintura, teatro, danza, fotografía y música. Monroy High llevaba literatura, escultura y arquitectura. El último día podía cambiar los marcadores, nadie sabía que era, nos daban un par de horas para hacer todo, así que debíamos estar preparados para cualquier cosa.

Cinematografía

Todos miramos el cartel de nuevo, ¿Qué? ¿Un cortometraje? No teníamos tiempo para tener una idea y editarla.

-Es imposible-Sawyer estaba al borde de un ataque.

-Tiene que haber algo-Sam intentó animarlo, pero ella no lucía muy segura tampoco.

-Tenemos que pensar en algo, somos artistas-Louis comenzó a dar algunas ideas.

-No, todas son demasiado poco creativas-respondió Dougie.

Me senté en el suelo, estábamos acabados.

-Entonces, propongo que se sienten y se den por vencidos-Dean bebió de su cerveza y Blake lo imitó, se encontraban ahí para aportar ideas, pero nada estaba funcionando.

-Por primera vez, estoy de acuerdo con ellos-tome una cerveza y la abrí.

-¿Te estas dando por vencida?-Sawyer me miro, no sabía si estaba molesto o solo era parte del ataque que iba a tener.

-Nos quedan dos horas Sawyer, avísame si tienes alguna idea-murmure.

-Dame una-Sawyer estiro la mano y Dean le paso una cerveza-Estamos acabados.

-Y que lo digas, nunca hemos perdido-Dougie

puso su cara en la mesa.

-Siempre hay una primera vez para todo-Tony lanzó la lata vacía al bote.

-Propongo emborracharnos y así no recordaremos la derrota-Blake tomó otra cerveza.

-Por la derrota-brinde y todos estuvieron de acuerdo conmigo.

Mire a Sawyer, ninguno de nosotros íbamos a recordar la derrota, apenas y podía ponerme de pie, Dougie se había quedado dormido igual que el resto.

-Quedan quince minutos-Dean miro su reloj, no sabía si lo estaba inventando o si en realidad faltaban quince minutos para nuestra derrota.

-¿Kate?-la puerta de la sala de arte se abrió y pude ver a la persona más alta que jamás había conocido.

-¡Austin!-reí como loca mientras abrazaba a Dean.

-¿Qué hacen? Deberían de estar en el teatro, todos los esperan-reí nuevamente.

-Nos emborrachamos por algo Austin. No queremos ver nuestra derrota.

-¡Equipo!-grito Sawyer energéticamente mientras bailaba por toda la sala.

-¿No tienen nada?-debía decir que lucía sorprendido, o tal vez solo era el exceso de alcohol en mi sistema.

-Nada-reí, odiaba estar borracha. Reía como si no hubiera mañana.

-Nada-repitió Dean.

-De acuerdo, creo que puedo hacer algo-Austin tomó su mochila y empezó a buscar algo. ¿Qué buscaba?-La terminé hace poco, te la iba a mostrar, pero...-no terminó su oración y me tendió un disco "Everything I didn't say"

-¿5 Seconds Of Summer?-tomé el disco y lo mire sin entender.

-Hay muchas cosas que no te dije Kate-apretó los puños-¿Podemos ir al gimnasio? Ahí lo verás todo-se puso de pie y me tendió

su mano.

Lo pensé por unos segundos, podía estar borracha, pero mi cerebro aún podía entender un poco. Austin iba a ayudarnos.

-Tenemos que irnos-me puse de pie apoyándome de Dean e ignorando la mano de Austin para tomar mis cosas rápidamente-Quedas a cargo-apunte a Dean y junto con Austin salí corriendo.

-Kate-mire a Austin antes de entrar al teatro.

-No te preocupes, no le diré a nadie que tú lo hiciste-tome otro trago de mi agua y entre al teatro, toda la escuela ya estaba ahí.

-Señorita Poynter, pensamos que estaban fuera-el director de Monroy High no lucía feliz.

-Estábamos terminando esto-mostré el disco y camine hasta el frente-Y aún nos quedan-mire la pantalla de mi celular-Dos minutos antes del plazo-le di el disco a Karen para que lo pusiera.

-¿Quiere decirnos por qué es tan especial que tardaron tanto?-negué.

-Es una sorpresa-me dirigí hacía donde se suponía que debían estar los artistas, estaba vació o lo estaba, hasta que los chicos entraron corriendo al teatro, con Dean y Blake detrás de ellos y con vasos de café.

-Lamentamos la tardanza-parecía que alguien había mojado a Sawyer, su ropa estaba empapada y su cabello sin gracia-Por favor sigan.

Todos se sentaron y tomaron de sus vasos.

-Bien, veamos el material que prepararon-murmuro el director y Karen le dio play al video.

Empezaba con la semana de las bromas, todos se divertían y reían mientras se lanzaban los globos con pintura.

Recordaba cada una de las cosas de ese vídeo, incluso Austin había grabado en

mi habitación, estaba yo lanzándole palomitas y dibujando en las paredes.

Y después estaba yo con los artistas, mi ropa estaba manchada de pintura y me reía junto con Sawyer y Dougie. El equipo ganando, las porristas haciendo su rutina, todos los buenos momentos de la escuela estaban en ese video. Fruncí el ceño durante casi la última parte del video, éramos yo y Austin, el tenía su brazo sobre mi hombro y los dos reíamos. Sabía cuando había sido eso, había sido al final de nuestra primera semana de las bromas, cuando nos habíamos hecho mejores amigos. Austin y yo caminando por las calles de Las Vegas, yo vestida de novia y fingiendo que éramos recién casados. Y finalmente, la primera vez admití que Austin Max era guapo.

-Hey-Dean me tendió un papel y yo lo tome, el video había terminado y teníamos que subir y dar un discurso del porqué, pero yo no tenía ni idea de que decir-Léelo arriba-murmuro Dean y me puse de pie, mis manos temblaban, demasiados recuerdos por un día. Ni siquiera tenían idea de que Austin había conservado todos esos vídeos.

Aclaré mi garganta y desdoble el papel para comenzar a leerlo-Este es nuestro último año, probablemente la última vez que muchos se vean. Pudimos apreciar los buenos momentos que tuvimos en el transcurso de estos tres años, los triunfos, las bromas, las amistades, las locuras, lo vimos todos-mordí mi labio, eran las palabras de Austin-¿Quién iba a pensar que estaríamos tan locos?-la audiencia río

un poco-No diré que es el mejor video, pero queríamos compartirlo con ustedes, aprecien las pequeñas cosas que tenemos mientras estamos vivos. Y díganle a ese alguien especial lo que siempre le han querido decir. No esperen a que se vayan o a que se encuentren en un futuro lejano y sean conocidos que intercambian frases absurdas como si fueran desconocidos-un nudo se formo en mi garganta-Y si lo hacen, hasta ese momento compañeros-murmure y camine rápidamente a la salida, necesitaba largarme.

-Señorita Poynter-ignore al director, debía largarme de ahí-Señor Max.

-¿A dónde vas los corazones rotos?-me detuve al escuchar a Austin, estaba detrás de mí.

-Déjame en paz-respondí rápidamente y continúe caminando.

-Fue la pregunta que me hiciste cuando Michael se fue-salí del teatro, maldecía no tener un auto-Después de llorar por horas lo preguntaste y después te culpaste. En esos momentos pensé que sería nuestro final, todo por culpa de mi hermano-respire profundamente, tenía que quitarme el maldito nudo de la garganta-Pero mi hermano no tenía que meterse, yo solo lo arruine, gracias a mi, fue nuestro final.

-No debemos hablar de Michael-mi voz sonó rota y supe que no podía seguir huyendo de Austin.

-Nunca lo hablamos.

-No Austin-me detuve y lo enfrente-Tú nunca quisiste hablarlo, evitaste el tema e incluso dimos por muerto a Michael.

-Escucha Kate-Austin paso las manos por su cabello y pude ver bien su aspecto, era asqueroso. Seguía siendo guapo, pero lo conocía lo suficientemente bien para saber que el brillo ya no estaba en

sus ojos.

-¿Cuántas horas dormiste anoche?-seguí mirando su cara, las ojeras eran moradas y cada vez que parpadeaba podía ver que su párpado también lo era. Sus labios estaba agrietados y no lucía como si hubiera tomado muchas duchas.

-¿Una? ¿Dos? No lo se Kate-habló desesperadamente.

-No es saludable Austin, ¿Desde cuándo no duermes bien?

-No lo sé, ¿Semanas? ¿Cuánto tiene que te fuiste?-suspire, no podía imaginar que dijera que no había dormido desde que lo había abandonado.

-Mira Austin-mire a todos lados y después fije mi atención en Austin-Lo lamento ¿De acuerdo? Pero yo ya terminé, terminé contigo y con el tema de la popularidad. Ahora solo soy una artista más. Así que apreciaría que dejarás de intentar hacerme sentir culpable por algo que quería más que nada.

-¿Eso es lo que crees que hago? ¡Te di mi maldita película! ¡Le mostré a la escuela algo que nunca habían visto! ¡Era algo personal!

-Claro, porque tú vida es tan mala. Discúlpame Austin, no era mi intención-respondí sarcásticamente.

-¡Deja el maldito sarcasmo de una maldita vez!

-¡Es la verdad!-grite, no me gustaba que me gritarán-¡Te quejas de tú vida como si fuera demasiado mala! ¡No todos tenemos padres doctores o abogados! ¡No todos tenemos una gran familia! ¡No todos tenemos un apartamento del lujo! ¡Y no todos tenemos auto! ¡Tú vida debió haber sido realmente mala!-negué-Lo único malo que te ha pasado en la vida, ha sido ver a tú hermano largarse como cobarde-escupí con odio.

-¿Crees que mi vida es perfecta? No lo es Kate, tengo estrés y soy un ser humano.

-Tú vida será mala cuando tú padre te presione para terminar como él, cuando tú madre lance tus cosas por la ventana, cuando no tengas nada y tengas que dormir en el maldito auto. No cuando tú hermano se vaya y no puedas soportar la maldita vida que tú te creaste-tome aire, cuando me enojaba hablaba demasiado rápido. Austin apretó los labios, pero no dijo nada-Eso pensé-mire el reloj, todavía era hora de autobuses, aún podía llegar a casa sin caminar.

-Kate-suspire.

-No quiero escucharlo Austin.

-Pero yo quiero decirlo.

-¿Qué quieres decir Austin? Arruine mi vida por ti, me arriesgué y perdí. Siempre tienes que ganar Austin, felicidades-murmure.

-Vi tú cuadro, me pareció increíble Kate, debes ir a Nueva York, eres una artista.

Negué-No tengo el dinero Austin y lo sabes.¿Sabes que? Olvídalo, no se ni porque estoy hablando contigo-camine hasta la parada del autobús, no tenía nada que hacer con Austin.

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If you are James Dean then I'm Audrey Hepburn

Veintiocho:

Deje los pinceles en el suelo y mire el mural, estábamos trabajando en el mural para el baile de invierno, pero no se sentía bien, era el primer baile al que iba sin Austin. Era casi como ser la nueva otra vez.

-Me agrada la dirección que llevas-Sawyer puso una mano en su barbilla y sonrió abiertamente-Por cierto, hay un chico rubio con chaqueta de cuero que pregunta por ti en la puerta-habló como si no fuera importante.

-Ahora vuelvo-tome un trapo y me limpie las manos mientras caminaba a la puerta.

-Creí que ese loco no te avisaría que llevo media hora aquí-reí y deje el trapo en la mesa.

-Estamos trabajando en el mural ¿Qué necesitas Luke?

-Ven conmigo-tomó mi mano y me guió por los pasillos de la escuela.

-Esperó que no sea nada ilegal-murmure en cuanto comenzamos a subir las escaleras para llegar al techo.

-No creo que se considere ilegal-empujo la puerta y ambos caminamos hasta la cornisa del techo.

-Solamente no me mates-murmure deteniéndome.

-Kate-Luke soltó mi mano y acarició mi mejilla-Mira abajo.

Vaya, eso era raro, creí que iba a besarme, pero aún así le hice caso, mire abajo y juro que esa era de las pocas sorpresas que alguien había hecho para mi.

Los amigos de Luke o moteros, como los conocía toda la escuela, sostenían 6 carteles; "¿Irías al baile conmigo?". Mire a Luke sorprendida y éste me tendió una rosa blanca.

-Kate,

se que esto puede verse poco varonil y probablemente arruine mi reputación, pero eres una gran chica y te quiero ¿Irías al baile conmigo?-mire abajo otra vez y pude ver como todos esperaban una respuesta.

-Sí, sí-abrace a Luke y reí levemente, nunca nadie me había invitado al baile, con Austin solo me decía la hora, nunca había hecho algo así.

-Me alegra que hayas aceptado, sería vergonzoso si no lo hubieras hecho-sonreí y bese a Luke, pude escuchar como sus amigos aplaudían y gritaban.

-Es adorable-sonreí y quite el labial rosa de la boca de Luke.

-Mmm...Kate, nunca había invitado a alguien al baile, así que me tendrás que ayudar con toda esa basura de colores combinados y las flores que usas en la muñeca-Luke paso la mano por su pelo y puedo jurar que era la persona más adorable de este mundo, lucía tan perdido.

-Se llama corsage Luke-volví a reír.

-Puedo buscar un traje si eso quieres.

-Claro que quiero Luke-lo bese otra vez-Debo irme, el mural no se va a terminar solo-tome la flor y bese su mejilla-Te veo luego-baje las escaleras rápidamente, no podía dejar de sonreír, eso había sido adorable.

-¿Ronan te lleva al baile?-me detuve y mire a Austin.

-Es el único que se atrevió a pedírmelo.

-Escuche que Sawyer también estaba interesado.

-¿Sawyer o tú?-respondí ácidamente.

-No te pongas tanta importancia Kate, ya invite a una chica.

-Mis condolencias para la ignorante-comencé a caminar.

-¿Recuerdas a Serena? Al parecer le siguen encantando los idiotas-apreté

los labios-¿Esto es lo que querías Kate? ¿Ir al baile con Luke Ronan? Pues ya lo tienes.

-Vete al infierno-murmure.

-¿Por qué?-tomó mi mano y me detuvo-¿Por invitar a alguien más al baile que no seas tú? Tienes un gran autoestima si crees que eres la única a la que llevaba al baile.

-¿Qué quieres que te diga Austin? ¿Michael me va a llevar al baile? La última vez que te dije eso enloqueciste y después desapareció Michael, espero que a Luke no le pase lo mismo-aparte bruscamente su mano-Hablo enserio Austin, déjame en paz.

-No me tomes por idiota, puede que lo sea con las personas, pero no contigo. Te conozco Kate.

-No me importa Austin. Puedes estar bien o mal, no me importa.

-¿No te importa? Deja de mentirte a ti misma Kate, no estás hablando con tu padre, se honesta contigo por una vez.

-¿Y? ¿Qué? ¿Hago lo que quiero? Ya lo hice Austin, me aleje de ti.

-¿Eso querías?-apretó la mandíbula.

-No lo sé-admití-Contigo nunca se lo que quiero.

-Yo creo saber lo que quieres. Quieres aventura y no caer en la rutina.

-Al final se volvió una rutina estar contigo Austin-negué con la cabeza-Solo una cosa, se que no somos amigos.

-No, no lo somos Kate.

-Lo que no entiendo...¿Por qué no me dijiste que tenías novia?-me cruce de brazos.

-¿Por qué te importa ahora?-frunció el ceño.

-Siempre me ha importado Austin, somos...éramos mejores amigos, siempre me importaba lo que te pasaba, incluso ahora no puedo ser ajena a ti-suavice

mi tono.

-No pensé que fuera importante-relajo el rostro.

-¿Por qué?-repetí.

-Porque no creí que fuera importante.

-Nos estábamos besando en ese entonces-murmure, no me avergonzaba que los demás supieran, pero tenía la sensación de que a Austin sí.

-¿Ahora te avergüenza?-me imitó y cruzo sus brazos-¡Nos besamos Kate! ¡Todo el maldito mundo lo sabe!-las personas que estaban en el pasillo nos miraron y asintieron entre ellos.

-¿Crees que me avergüenzo? Eres más idiota de lo que creía.

-No puedo ser tú James Dean, Kate, ya deberías saberlo.

-No quiero que seas James Dean y tampoco quiero ser Audrey Hepburn. Quiere ser Kate y que tú seas Austin, eso es lo que quiero, pero no se puede-suspire-No iré a Nueva York, espero que estés feliz-retomé mis pasos y me dirigí a la sala de arte.

Pase de largo de la sala de arte y entre a los baños, necesitaba un respiro de todo. Cerré la puerta y recargué la cabeza en esta, no podía más, mis nervios estaban en el límite.

-¿Kate?-cerré los ojos, no otra vez-Se que estás ahí Kate, debemos hablar.

-No quiero hablar.

-Pero yo sí. Así que supongo que yo hablaré-me deslice hasta el suelo-Siempre has tenido ese brillo especial en tus ojos, pude verlo desde el primer día, desde ese día supe que seríamos grandes amigos. Puedo ser idiota, impulsivo, ignorante, demasiado alto, con ojos demasiado azules, popular, espontáneo y todo un cliché de película. Pero contigo, era solo Austin. Me gustaba ser solo Austin y me gustaba que tú fueras solo Kate. Me encantaba ver películas de chicas contigo y esconderme cada vez que tu padre llegaba a casa-mire a la pared, no tenía escapatoria-Lo que quiero decir es que me...

Su voz se apago y me puse de pie rápidamente para abrir la puerta-¿Austin?-pude ver a Austin besando a Serena, ese cabello y esas piernas eran difíciles de olvidar. Claro y yo que pensaba que iba a decir algo importante-Será mejor regresar-mire por última vez a Austin y esta vez, si me dirigí a la sala de arte.

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#783 en adolescentes! Enserio gracias a todas las personas que leen, votan y a las que comentan en la historia. Sinceramente no pensé que fuera a tener éxito, pero bueno, gracias por su apoyo y gracias por leer xx.

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King & Queen

Veintinueve:

Tome la mano de Luke y ambos caminamos dentro del gimnasio.

-¿No te aburrió esperar en la fila?-Luke beso mi mejilla y yo reí.

-Amenazaste a los de adelante, claramente no esperamos

-Se estaba tardando mucho-se encogió de hombros.

-Le estaba dando sus boletos a Dean-corregí.

-Como sea-aclaro su garganta-¿Quieres algo de tomar?

-Debajo de la mesa Luke-soltó mi mano y camino en dirección a la mesa de las bebidas.

-Es un cambio esto-Sawyer se colocó a mi lado-Por cierto, luces hermosa.

-Gracias-sonreí-El mural luce genial-señalé al escenario.

-Siempre lucen geniales-arregló sus lentes-¿Sabías que te iba a invitar al baile?-lo mire confundida.

-No lo sabía Sawyer, de haberlo sabido hubiera venido contigo-me disculpe.

-No importa Kate. En el fondo siempre serás popular, por eso vienes con el chico malo o con el idiota, es básico en las historias clichés.

-De acuerdo-Sawyer estaba loco-¿Con quién viniste?-cambie el tema.

-Con Jenna-Jenna Harrison era parte de los artistas, tenía la entrada asegurada en Julliard-Ella me invitó.

-Eso es muy lindo Sawyer-toque su brazo-Prometo bailar contigo.

-Creo que esta noche nos traerá más sorpresas que eso-Sawyer aparto gentilmente mi mano-Hablando de sorpresas-mire a la puerta y puedo jurar que de no ser por el hecho de que aún tenía un poco de orgullo, hubiera salido huyendo de ese lugar en esos momentos-Vaya, Austin tiene buen gusto-Serena era el centro de atención con ese vestido dorado que hacía que el mío luciera como si hubiera sido

atacado por una bola de nieve.

-Definitivamente sabemos que este año la corona no será de Meredith.

-No digas eso Kate-Sawyer lucía demasiado seguro-Tú luces como una Emperatriz Etérea. Yo no votaría por esa chica, yo te elegiría.

Reí-Buen chiste Sawyer.

-No sabía que querías tomar, así que te traje un poco de ponche especial-Luke me tendió un vaso y yo lo tome-¿A quién le robo la novia Max?

-A Cameron Jones y es su prima.

-Largo Sawyer-murmure.

-Claro, recuerda ese baile-Sawyer se alejo nerviosamente.

-¿Max con el enemigo? Vaya, ni siquiera yo caigo tan bajo.

-Claro que caíste bajo, sales con la ex mejor amiga de él-me encogí de hombros.

-Pero no tan bajo-se intentó defender y yo reí.

-Lo que sea que te deje dormir en la noche Luke.

-Tú puedes hacerme dormir en la noche.

-Atención-ignore el comentario de Luke y le puse atención al director-Se que es un poco temprano para esto, pero al parecer la mayoría de los alumnos ha estado de acuerdo, así que se toma como una decisión unánime. El rey del baile es...Austin Max-todos aplaudieron, vaya sorpresa, es como si no supieras que One Direction es asquerosamente rico-Y la reina de este baile es...-Serena acomodo su cabello y puso su mejor sonrisa, yo sabía que esa sonrisa era falsa, tan falsa como su cerebro-Vaya, esto es nuevo....Katherine Poynter.

¿Qué? Vaya, esas eran buenas bromas, ni siquiera había estado involucrada en esta semana de las bromas.

-Creo que deberías ir por tú corona-susurro Luke ante la mirada de todos.

-Creí

que era una broma-respondí a su susurro.

-Esto parece muy enserio, ahora ve-me empujo suavemente y comencé a caminar al escenario, solo rezaba porque esto no fuera como en Carrie.

El director puso la tiara en mi cabeza y me gire para ver a todos, vaya, enserio no lo estaba esperando, esto era tan nuevo.

-Ahora, el primer baile de rey y la reina de Jet High y la canción es petición de nuestro rey-Austin me tendió su mano y supe que no tenía opción, así que la tome y ambos bajamos del escenario.

Austin puso su brazo en mi cintura y yo coloque el mío en su hombro.

Four letter word

But I don't have the guts to say it

Sonreí levemente, amaba Boys Like Girls y creo que Austin lo sabía.

-¿Sabías que esto pasaría?-murmure mirando a Austin a los ojos mientras ambos nos movíamos al ritmo de la canción.

-¿Qué serías reina? Tuve la sensación-sonrió abiertamente, ahí estaba esa sonrisa que amaba ver, sonreía tanto que se torcía-Ya no tienes el poder para obligar a la gente a no votar por ti Kate-me obligo a dar una vuelta-Le gustas a la gente Kate, eso deberías saberlo ya.

Gotta let you know somehow

-¿Y tú Austin? Serena debe querer asesinarme en estos momentos.

-Ella debe aprender a perder.

-¿Tú sabes perder?-hace mucho que no estaba tan cerca de Austin.

Austin me miro y después a mis labios-No Kate, no se perder.

-Siempre pensé que estaríamos juntos siempre, que seríamos amigos y que nuestros hijos serían también mejores amigos-murmure-¿Qué

nos paso Austin?

-Nos dejamos llevar Kate, creímos que por ser mejores amigos, todo estaba asegurado. Creo que ambos olvidamos lo frágil que es una amistad.

-Creo que tienes razón, ambos hicimos las cosas mal.

-Podemos arreglarlo, todo se arregla en la vida.

-No se Austin.

-¿Puedes imaginarte estar con Luke pero no conmigo?-lo pensé por unos momentos, Austin siempre había sido parte de mis planes.

-No-admití.

-Bien, porque yo tampoco-sonreí levemente.

But who's to say

That we could never last forever

-Eres perfecta para mi Kate, nos completamos mutuamente. No quiero dejarte ir, no otra vez.

-Te estás poniendo sentimental-me burle.

-Es la canción.

-Me encanta tú elección de canción.

-Supuse que te gustaría.

Austin me hizo dar otra vuelta-Ya deberías saber que soy pésima para bailar-reí mientras intentaba no pisar a Austin.

-¿Recuerdas la vez que rompí tú brazo?-asentí-Lamento todas las veces que te hice daño Kate, nunca fue mi intención.

-No sabías conducir una motocicleta Austin, claramente no fue tú culpa-hable suavemente, no había sido su culpa.

-Aún así te obligue a subir-negué y quite mi mano de la suya para poner mis dos manos alrededor de su cuello.

-Puedo tomar mis propias decisiones.

-También lamento todo lo de Michael.

-Austin, es tú hermano, él debe de disculparse, deja de culparte por lo que paso-susurre y jugué con el cabello de su nuca-Necesitas un corte, si sigues así, pronto parecerás Justin Bieber 2009-me burle.

-No puede ser tan malo.

-El equipo se va a burlar de ti-recordé cuando Blake tuvo su fase Justin Bieber y como Dean tuvo que darle un nuevo corte de pelo para que la gente dejará de burlarse de cabello.

-Entonces los golpearé a todos.

-La violencia siempre es la solución contigo.

-Al parecer el baile hace que nos digamos nuestras verdades-me encogí de hombros-Me sentí orgulloso cuando defendiste a Vincent, muy poco se atreven a hacer eso Kate y lo digo enserio, yo nunca hubiera podido.

-El otro día Austin, ¿Qué querías decirme?

-¿El otro día?-lucía incomodo-Quería decirte que...Siempre estaré a tú lado Kate, no importa que decisión tomes, se que tomarás las que es mejor.

And everytime you close your eyes

I will be by your side

-Es bueno saberlo-mire sus labios.

-Desde Halloween-habló Austin en voz baja, ha sido un largo tiempo.

-Vine con Luke-susurre mientras me acercaba lentamente.

-¿Y eso que?

-No debemos.

-Cállate y bésame Kate-junte nuestros labios, rayos, Austin tenía razón, había pasado demasiado tiempo desde la última vez que nos habíamos besado, casi había olvidado la forma en la que me hacía perderme cada vez que nos besábamos.

Incluso ignore el grito de indignación que Serena soltó y bloquee de mi mente la posible mirada de decepción de Luke, solamente me importaba Austin.

No lamentaba nada en esos momentos, solo lamentaba la conclusión a la que había llegado mientras besaba a Austin.

-Me alegra tenerte de vuelta Kate-sonrió Austin y volvió a besarme.

Y disfrute ese beso.

Y todo eso porque había llegado a la conclusión de que me gustaba Austin Max.

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Desastres de una cena

Treinta:

Mire por la ventana de mi habitación, las vacaciones de Navidad habían llegado y junto con ellas mi encierro total. Mi padre tenía demasiado trabajo y lamentablemente, yo no tenía dinero como para salir de vacaciones, tampoco tenía el corazón para dejar solo a mi padre.

Apenas llevaba una semana y básicamente ya se me habían acabado las ideas de lo que posiblemente pudiera hacer, el surf en el techo no más una opción, tampoco molestar a los vecinos con música a todo volumen, pintar la barda del jardín también, ya no tenía más barda ni pinturas, habían sido castigadas por mi padre al ver mi obra. Me estaba quedando sin ideas.

Con Austin no había hablado desde que me había llevado a casa después del baile y me había besado de nuevo. Al parecer, Austin se había ido de vacaciones con su familia a Alaska y yo no existía más, pero al mismo tiempo no me molestaba eso, me daba más tiempo para intentar sacarme la idea de que me gustaba, incluso había pensado en ir al psicólogo, pero repito, no tengo dinero.

-Kate-aparte la mirada de la ventana y vi a mi padre-¿Te sientes bien cariño?-asentí.

-¿Qué pasa papá?-me había negado a ir a Londres con Jessica y su familia, no quería pasar tiempo con ellos, menos con Ryan, sabía que no estaba feliz con lo del baile. Así que mi padre iba a verme cada dos horas con cuarenta y cinco minutos, lo había contado.

-¿Saldrás hoy?-negué, no tenía amigos, todos habían salido-Bien-sonrió-No se como decir esto-se cruzo de brazos incómodamente-Hoy viene una compañera de trabajo a cenar.

-Claro-asentí,

compañera, sí claro.

-¿Estás bien con eso?-asentí de nuevo, mi padre tenía derecho a salir con gente-Genial, arréglate para las ocho-salió de mi habitación.

Me puse de pie rápidamente y mire dentro de mi armario, la caja seguía ahí. La tome con cuidado y la saque de detrás de las cajas de mis botas.

-Bien-murmure y abrí la tapa. 

"Kit de supervivencia para cuando papá tiene una cita"

Lo había creado junto con Austin después de que mi padre saliera con una anciana, decidimos que debía tener algo para sobrevivir durante sus citas a las cuales me obligaba a ir con él.

Tome el vestido que se encontraba en el fondo y supe que Austin se lo había robado a Ashley, definitivamente no debía haber confiado en él cuando dijo que lo había comprado.

Tome el siguiente objeto, lo único que había en esa caja junto con el vestido, un walkie-talkie. Era una lástima que Austin fuera el que tuviera el otro y lamentablemente ahora se encontraba en Alaska.

-¿Austin?-hable por el walkie-talkie sin esperar respuesta-Papá tiene una cita, como me gustaría que contestarás-murmure y deje el walkie-talkie en el suelo para tomar el vestido y caminar al baño, necesitaba despejar mi mente un poco.

-¿Puedes poner la mesa?-mire sorprendida a mi padre y a su traje.

-No creí que fuera formal-tome los platos.

-¿Es demasiado?-lucía nervioso, sabía que era más que una compañera de trabajo.

-No-deje los platos en la mesa-Está bien, solo quita las velas y estaremos bien ¿Seguro que quieres que este aquí?

-No, quédate cariño. Estoy seguro de que te agradará-el

timbre sonó-Esta aquí-camino emocionado a la puerta y yo termine de poner la mesa-Cariño, déjame presentarte a Amelia-puedo jurar que me iba a dar algo y conocía a alguien que probablemente también sufriría de un ataque.

-Señora Max-murmure sorprendida. ¿Qué hacía la madre de Austin aquí?

-Kate-supongo que ella tampoco esperaba verme.

-¿Se conocen?-mi padre tenía una enorme sonrisa.

-Es la madre de un compañero de clase-explique rápidamente.

-Oh, me alegro. ¿Cenamos?-mi padre camino hasta la cocina.

-No sabía que David fuera tú padre-susurro la Señora Max.

-No es por ofender señora Max, pero, ¿Está en una cita con mi padre?-susurre también.

-¿Qué? No Kate, el jefe de tú padre tiene problemas legales y yo estoy arreglando los problemas junto con tú padre.

-¿No estaban en Alaska?-ignoré su explicación.

-¿A Alaska? ¿No te dijo Austin? Cancelamos el viaje.

-¿Cancelaron el viaje?-maldita sea Austin, aunque le encontraba sentido.

-La cena esta servida-las dos caminamos hasta el comedor.

Durante el mayor tiempo de la cena me la pase dibujando en las servilletas de papel y cuando mi padre me obligo a dejarlas, comencé con mi brazo.

-Austin me dijo que quieres estudiar arte-deje de dibujar en mi brazo y mire a la Señora Max. Oh no, esto no iba a terminar bien.

-Oh Amelia-mi padre negó divertido-Kate en realidad quiere estudiar Literatura, irá a Oxford-sonrió orgulloso.

-Oh, pero creí que Nueva York te había aceptado-era hora de golpear con un ladrillo a la Señora Max para que guardará silencio.

-¿Kate?-mi padre me miro sorprendido-¿Nueva York?

Aclaré mi garganta-Saldré a tomar aire.

Me puse de pie rápidamente y salí de la casa. No quería tener que explicarle a mi padre mi otra opción con la madre de Austin en la misma mesa. La Señora Max estaba arruinando todo lo que había logrado ocultarle a mi padre, estaba segura de que mi padre tiraría todas mis cosas de pintura en cuanto regresará a la casa.

Me senté en la banqueta y mire mis zapatos, esto apestaba.

-Supongo que necesito preguntar que sucede-sonreí levemente, era de esperarse.

-¿Seguiste a tú madre?

-Algo así-se encogió de hombros-¿Estás bien Kate?

-Tú madre dijo que me habían aceptado en Nueva York y eso no va a terminar bien con mi padre.

-¿Por qué no le dices que quieres ir a Nueva York?-negué.

-Mejor dime ¿Qué paso con ese viaje a Alaska?

-Mis padres tienen mucho trabajo-paso su brazo por mis hombros-¿Puedo besarte Kate?

-¿Desde cuándo pides permiso?-reí suavemente y lo bese, rayos, debía de quitarme la idea de que me gustaba Austin.

-Ven, te llevaré a un lugar que te gustará. Por cierto, el vestido es de Ashley.

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Anagapesis

Anagapesis: No sentir amor por algo que alguna vez amaste

Treinta y uno:

Le lance a Austin harina en la cara y reí-Debí saber que esto era mala idea-limpió su cara con un trapo.

-Oh vamos, sabes que esto siempre termina así-le saqué la lengua.

-Como digas cariño-sonreí y recargué mi cabeza en su hombro.

-No tengo muchas ganas de hornear Austin-admití-¿Podemos solamente, hablar?

-¿De qué quieres hablar?-respiré profundamente.

-Quiero ir a Nueva York, enserio quiero.

-Pues ve y hazlo.

-No es fácil-me separé y me senté en la barra de la cocina-No tengo dinero.

-Podrías tenerlo si quisieras-se sentó en la silla.

-¿Qué quieres decir con eso?

-Vamos Kate, ¿Camisetas mojadas? ¿Un lavado de autos? ¿Vender droga? Podrías hacerlo todo y conseguir el maldito dinero-se encogió de hombros.

-¿Crees que solo eso? Maldita sea Austin, ahora recuerdo porque me aleje de ti en primer lugar-me baje de la barra y me saque su camisa-Eres un idiota-tire su camisa al suelo y camine con dirección a su habitación para tomar el vestido-Estúpido vestido rosa-las mangas se habían enredado, genial.

-Kate, ¿Qué paso? La estábamos pasando bien ¿Quieres un trago?-Austin se paro en el marco de la puerta.

-Quiero que por una maldita vez en tú vida te tomes algo enserio-deje de pelear con el vestido y lo lancé al suelo-Es de Ashley, creo que lo quiere de vuelta-tome la chaqueta que estaba en su cama.

-Lo estoy tomando enserio Kate-Austin me detuvo.

-Bien, entonces dime ¿Por

qué demonios le hablaste a tu madre de mi beca en Nueva York? Olvide que tenías una gran boca Austin, eres imposible-lo empuje y comencé a caminar.

-Creí que mamá podía ayudarte ¿De acuerdo?-me detuve.

-No quiero tú ayuda.

-Eso no se lo dijiste a Jo cuando hiciste la apuesta-me gire lentamente, podía apostar a que había palidecido-¿Enamorarme? Vamos Kate, eres más buena que ese cliché de película.

-Soy mejor que eso, por eso abandoné la apuesta.

Austin sonrió, no era la sonrisa que me gustaba, era la que usaba con las chicas para obtener algo que quisiera-Ambos sabemos que sigues en la apuesta de alguna manera-se acercó lentamente, sus labios rozaron con los míos.

-¿Quieres ser parte de esa apuesta?-murmure.

-Me encanta ser el objetivo de las apuestas nena-sonreí levemente-La mayoría son sobre mí, la tuya no es la excepción.

-Entonces supongo que te encanta cuando ganan apuestas.

-¿Qué tienes en mente Kate?

Mordí mi labio-Austin Max, ¿Te enamorarías de mi?

Austin rió levemente-Creí que nunca lo preguntarías-y sin más, me besó-Prométeme que no romperás mi corazón-se separó levemente.

-¿De que hablas Max? Soy Katherine Poynter, me dedico a romper corazones-mantuve los ojos cerrados.

-Entonces supongo que debo arriesgarme-sonreí, aunque las palabras solo fueran parte de la actuación, una parte de mi quería que las sintiera de verdad y las dijera de manera sincera.

Querer a Austin Max era una tortura verdadera.

-¿Qué tal si tocas algo en la guitarra?-murmure.

-No quiero separarme de ti.

-Hagamos esto Austin-abrí los ojos y pude ver sus hermosos ojos azules-Durante estás dos semanas actuaremos como las personas más felices del mundo, una pareja de verdad y cuando volvamos a la escuela, romperé tú corazón.

-¿Cómo lo hiciste con Luke?-aparté la mirada.

-Es diferente.

-No es diferente Kate, él te quería-me separé bruscamente.

-¿Y eso qué? ¿Tú me quieres Austin?-esperaba escuchar un sí, pero sabía que eso no iba a pasar.

-Como a una hermana, eres mi mejor amiga. ¡Maldita sea Kate! ¿Por qué siempre tienes que complicar todo? Estábamos pasando un buen momento.

-¡Y tú sacaste el tema de Luke!

-¡Por qué no hemos hablado de eso!

-Bien, hablare de Luke y tú hablaras de Serena-me cruce de brazos.

-Ella ya no tiene importancia. Fue un pequeño capricho-paso las manos nerviosamente por su cabello.

-Mientes, ¿La sigues viendo?

-¿Y eso por qué te importa?-me miro sin entender.

-¡Por qué te estoy besando Austin! ¡Por eso me importa!-grite frustrada y pensé mis siguientes palabras por un momento-No seguiste a tu madre-negué con la cabeza-¿Pensabas que si tu madre abría la boca sobre lo de Nueva York y después tú venías a consolarme, volvería a acostarme contigo?-Austin se mantuvo en silencio-¡Maldita sea Austin! ¡Eres un maldito idiota! ¡Estás jodido!-lo empuje con todas las fuerzas que tenía, era una artista, no una deportista.

-No es así Kate, por favor déjame explicarte-atrapo mis muñecas con una mano y con la otra acarició mi mejilla.

-No quiero escucharlo Austin-hable rendida-Enserio no quiero escucharlo, necesitas madurar de una maldita vez y entender que no eres el centro del mundo.

-Ha sido un completo infierno sin ti Kate, dame la oportunidad de explicarme-negué.

-Quiero irme a casa Austin-sentí el nudo en mi garganta y Austin también se dio cuenta de que estaba a punto de llorar-Por favor-odiaba rogar, pero solo necesitaba eso y podía asegurar que Austin me llevaría a casa.

Me miro por un momento, como si quisiera encontrar algo-Este apartamento no es mi hogar si tú no estás aquí Kate. Se que sientes lo mismo si no estoy yo en ningún lugar contigo.

-No te queda nada Austin-murmure-Parece que las mesas se están girando.

Austin apretó la mandíbula y me soltó bruscamente, tanto que caí al suelo-Haz lo que quieras-hablo duramente-Toma todas tus cosas y lárgate a Nueva York si así lo deseas o a Inglaterra, solo asegúrate de estar en un lugar donde yo no te pueda ver.

-Si eso deseas-me puse de pie y limpie la lágrima que había salido-Vete al diablo Austin Max.

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Oblivion

Treinta y dos:

Desearía que Austin Max se hubiera mantenido alejado de mi vida, pero eso sería como pedirle al sol que dejará de tener un sistema solar a su alrededor.

-¿Hablarás o miraras todo el día a la pared?-centré mi atención en mi padre, al parecer el tema de Nueva York no se le había olvidado como esperaba.

-Quiero ir a Nueva York y no a Inglaterra-era simple, no tenía gran ciencia.

-Kate-mi padre suspiro, siempre lucía cansado-Oxford te ofreció una beca...

-También Nueva York-lo interrumpí-Podría conseguir un trabajo y pagar mi departamento...

-No-ahora me interrumpió mi padre-No estudiaras arte, creí solo era un pasatiempo tuyo, no que querías dedicar tú vida a eso.

Para mi padre los artistas morían de hambre-Me encanta pintar-murmure.

-No vivirás de eso Katherine, no irás a Nueva York. Llamaré a Oxford para confirmar que irás-se puso de pie.

-Papá, por favor-rogué-No quiero ser infeliz el resto de mi vida solo porque tú escogiste la carrera de la que viviré-tuve cuidado con mis palabras, no quería decirle que no quería terminar como él, con una hija, una ex esposa loca y con un trabajo el cual odiaba.

-Hemos hablado de Oxford desde que dejamos Australia Kate-volvió a sentarse.

-Eso fue hace tres años papá y no hablábamos, tú hablabas de ir a Oxford.

-No estás siendo razonable Kate, en está vida debes estudiar algo que te dinero, no algo que te haga feliz. El mundo ahora gira alrededor del dinero.

-Quiero estudiar algo que me haga feliz.

-No te daré el dinero.

-Bien-me puse de pie-No iré a Oxford papá, es hora de que entiendas que amo el arte y a eso dedicaré mi vida. No me sentaré en una oficina todo el día y leeré intentos de libros como tú. Conseguiré el dinero de alguna manera.

-Katherine-mire a mi padre-No volverás a pisar está casa si decides estudiar arte.

De acuerdo, eso no me lo esperaba cuando planeé enfrentar a mi padre y decirle que estudiaría arte-¿Qué?

-Ya lo oíste, si vas a Nueva York, olvidaré que tengo una hija.

-Ahora entiendo porque Jessica te dejo-camine hasta las escaleras.

-¡No me des la espalda Katherine!-subí las escaleras rápidamente-¡Katherine!-entré a mi habitación y tome una bolsa-¡¿Qué crees que haces?!

Suspire frustrada-Me largo, estudiaré arte, eso quiere decir que no viviré en esta casa más-respondí mientras tomaba mi ropa.

-¿Y dónde crees que vivirás?-esa era una buena pregunta papá, te respondería que con Austin si este no hubiera sido un idiota ayer.

-Con Jessica.

-Odias esa casa.

-Aprenderé a amarla durante los tres meses que me quedan de escuela-cerré la bolsa-Aprendí a amar América después de dejar Australia, no puede ser tan diferente-me encogí de hombros.

-No estás pensando las cosas bien.

-Tu tampoco papá, solo acepta que estudiaré arte y todo bien-colgué la bolsa en mi hombro.

-No puedo-negó y asentí.

-Estaré en casa de Jessica por si cambias de idea.

Baje las escaleras rápidamente-Kate-mire a mi padre-Ten-me tendió mi sketch-Quiero suponer que lo necesitaras-caminó a la cocina.

-Gracias-susurre y salí de la casa.

Eso había salido peor de lo que esperaba, gracias Austin por arruinar mi relación con mi padre, aunque no era su culpa, estaba destinado a saberse que estudiaría arte y no literatura.

Ahora solo me quedaba una cosa por hacer, sobrevivir en la casa de Jessica.

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#864 en ficción juvenil! Enserio gracias a las personas que leen mi historia. Es más de lo que puedo pedir y lamento si la historia se les hace muy repetitiva a veces, aún no perfeccionó mi escritura.

Aún así gracias y quiero decirles que la historia esta llegando a su fin. 

Gracias por su apoyo, por sus votos y por leer xx.

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I'm Sorry

Treinta y tres:

-Tienes que estar bromeando-quite las cosas de la cama-¡Te dije que todo eso iba en el suelo Ryan!

-¡Es mi habitación!

-Dejo de serlo cuando entré por esa ventana.

-Cállate, llegaremos tarde a la escuela-ambos tomamos nuestras cosas y bajamos-Espérame en el auto-camine directo a la puerta, durante todo el tiempo que llevaba en esta casa, había evitado a Jessica y a la hermana de Ryan, detestaba a los niños.

-¿No desayunaras?-ignoré a Jessica y seguí caminando, ella tampoco estaba muy contenta de aceptarme en su casa, pero John estaba más que feliz, así que yo no iba a discutir con él.

Subí al auto, odiaba el auto de Ryan porque no era el auto de Austin. Odiaba a Austin por hacerme llorar durante todas las vacaciones y a mi padre por no apoyarme.

-Mantén la cabeza en alto Kate-Ryan subió al auto y lo encendió-No dejes que vean lo rota que estás.

Tome aire y sonreí-Se nos hace tarde.

Ryan apretó el volante y comenzó a manejar, no me sentía preparada para el primer día del último semestre, pero debía aparentar estarlo.

-No esperaba que mi último año fuera así-me baje del auto y Ryan tomó mi bolsa-Yo solo quería un último año normal, no una novela dramática.

-Las cosas pasan por una razón Kate-ambos caminamos a la escuela-Solo respira y ya.

-¡Kate!-Sawyer me abrazo y Dougie se le unió-No supimos de ti durante el invierno.

-Estaba ocupada-me encogí de hombros y le quite mi bolsa a Ryan-Te veo aquí-él asintió y se fue-¿Cuáles

son los planes para este año?

-Bueno, el baile de bienvenida fue cancelado porque el gimnasio se inundo, así que no tenemos nada por el momento-comencé a caminar.

-¿Se inundo?-no sabía que eso era posibles.

-Los chicos del equipo de fútbol intentaron hacer una broma que salió mal-asentí distraídamente.

-¿Qué clase tienes?-mire a Doguie y le sonreí levemente.

-Historia-demasiado ánimo para la primera hora.

-¿Te sientes bien cariño?-mire a Dean que me saludaba con demasiado entusiasmo desde su auto.

Aparte la mirada-Solo tengo sueño Sawyer, debo irme, quiero tener un buen lugar-mentí-Los veo en la sala de arte chicos-me dirigí al salón.

Elegí el lugar a un lado de la ventana, necesitaba aire o probablemente escapar de la clase, cualquiera de la dos era válida.

-Me pregunto que hizo está vez-mire al frente, donde Austin entraba con una chica nueva de su brazo.

-No entiendo porque debió hacer algo.

-Todos vimos el beso del baile Kate y ahora ni siquiera me miras, algo debió hacer.

Mire a Dean-No beso y cuento cariño.

-Te besaría si no tuviera novia y lo sabes-sonreí levemente-¿Qué es esa sonrisa?

La sonrisa desapareció y un ceño fruncido la reemplazo-¿Te estás burlando de mi?

-¿Viste Skins durante las vacaciones?-negué-Tienes esa sonrisa de Effy, como dice su madre, la de "No me conoces en lo absoluto"

-Deberías de dejar de ver tantos shows Dean, te afectan el cerebro-me cruce de brazos.

-¿También perdiste la cordura o eso del delineador corrido es la nueva moda?-negué.

-Me dormí

con el delineador y se me hizo tarde-pase mi mano por mi mejilla.

-Creí que tú padre no te deja usar maquillaje-Austin tomó asiento delante de nosotros, sabía que estaba escuchando.

-No se si te enteraste Dean, pero ya no vivo con mi padre-murmure-Estaba destinado a ser así, no puedo culpar a nadie-admití-La clase va a empezar-lo ignore en cuanto supe que iba a comenzar a hablar y a hacer preguntas.

Salí rápido de la clase, hubiera salido por la ventana de no ser porque a Austin se le ocurrió intentar hablarme, debo admitir que saltar de la ventana hubiera sido un poco drástico, pero nunca debo limitar mis opciones.

-¡Katherine Elizabeth Poynter!-me detuve, ¿Quién había dicho mi segundo nombre?

-Maldita sea Ryan, voy a matarte, ¿Enserio debías decirlo?-murmure.

-No seas nena, ven, necesito que me ayudes con algo-tomo mi brazo.

-Tengo que ir a la sala de arte.

-Y yo a conseguir una noticia.

-¿Qué noticia?

-Austin Max y Luke Ronan peleando por la bella Elizabeth Poynter-ignoré que me hubiera llamado por mi segundo nombre y quite mi brazo-En la terraza-respondió rápidamente y corrí hasta el maldito tercer piso, mugre elevador que siempre iba lleno de gente floja que iba del primero al segundo.

-¿Qué demonios?-la gente me abrió paso, esto no pintaba bien.

Camine hasta el centro del circulo y vi a Luke y a Austin, los dos sentados pacíficamente en el suelo, como si nada hubiera ocurrido

o no tuvieran el rostro lleno de golpes.

-No creí que te importara-habló Austin.

-¿Qué es esto?-pregunte, tenía que irme lo más rápido posible.

-Hablar, eso querías ¿No?-volvió a responder Austin.

-¿Qué tiene que ver él?-señalé a Luke.

-Dile Ronan, termina de humillarte y deja que rompa tú corazón.

Mire a Luke negando-No lo hagas Luke, se lo que quieres decir.

-Esto no termina hasta que escojas a uno de los dos.

-¿Convirtieron esto en una competencia? A ti te rechace y a ti te dije que te fueras al diablo.

-Me lo has dicho muchas veces cariño-Austin se encogió de hombros.

-Esta vez fue enserio Austin. Gracias a ti no tengo donde vivir, mi padre me odia, no iré a la Universidad e incluso por tú culpa Michael se fue. Puedo seguir con la lista si gustas.

-¿Michael?-se puso de pie rápidamente.

-Como si no lo supieras ya, él se fue y tú viniste a ocupar su lugar como rey de los idiotas. Felicidades, el sueño de todos.

-¿Y que me dices tú? Estando con mi hermano porque yo nunca podría estar contigo.

Ouch, más directo no podía ser-No todo es sobre ti Austin, nunca te molestaste en saberlo todo sobre mi y adivina, tú deseo se hizo realidad. Me mudo a Nueva York y estaré lejos de ti-apreté los labios-Oficialmente me perdiste Austin, solo para eso eres bueno, para alejar a la gente que te quiere, buen trabajo-gire y me dirigí a la puerta, debía salir ahora.

-Lo lamento-me detuve por un momento y cerré los ojos.

Austin podía juntar y romper mi corazón al mismo tiempo, era algo que lo caracterizaba.

¿Enserio era Austin todo lo que quería? Se le estaban acabando las maneras de decir que lo sentía.

-Yo también Austin-murmure-También lo siento.

-Kate-salí de mi momento de película y baje las escaleras.

Quería a Austin, enserio lo quería, pero no podía seguir jugando conmigo.

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Celular perdido, secretos y preparando la broma final

Treinta y cuatro:

-Escuche del teatro que Austin y tú montaron-Jo cerró mi casillero.

-Aja-murmure sin darle importancia y buscando mi celular en mi mochila, sabía que debía dejar de arrugar todos los papeles y meterlos como cupieran en ella.

-También escuche que lo culpaste de lo que paso con Michael-abandoné la búsqueda de mi celular y la mire-También que al parecer estás enamorada de él, puedes decírmelo Kate.

-¿Enamorada?-quise reírme, pero sabía que esas palabras eran verdad.

-¿Lo estás?-se cruzo de brazos y yo negué-¿Él lo esta de ti?-volví a negar-¿Quieres que te ayude a ir a Nueva York?

-¿Qué? Pero no gane la apuesta-murmure confundida y ella sonrió, la sonrisa que indicaba que ella sabía algo que yo no.

-Se lo mucho que quieres ir Kate-respondió simplemente-Haré el deposito.

Sonreí y la abrace-Gracias Jo.

-Cuando quieras querida-se separó-Debo ir a clase-se alejo por el pasillo y yo retome la búsqueda de mi celular.

Podía jurar que estaba en algún lugar de mi mochila, tal vez debería haberle pedido a Jo que me llamará, solo para estar segura.

-¡Espera Jo!-corrí detrás de ella-¿Podrías llamarme?-pregunte en cuanto vi su vestido rosa e intentaba continuar buscando en mi mochila-¿Jo?-levante la vista y esa era la segunda sorpresa del día. Jo y Austin, eso era algo que no me esperaba-Oh-fue todo lo que logre articular.

Austin quito sus manos rápidamente del trasero de Jo y ella desenredó sus manos de su cuello-Kate-no quería escuchar a Austin, estaba rompiendo mi corazón sin saberlo.

-Yo buscaba mi celular-murmure.

Austin apartó la mirada y de su bolsillo saco mi celular. ¿Por qué lo tenía?-Quería una excusa para hablar contigo-explicó mientras tomaba mi celular-Siempre fuiste distraída.

-Claro-murmure, en realidad quería decirle "Y tú siempre fuiste un idiota" pero no estaba segura de poder decir una frase tan larga sin que algo saliera mal-Debo irme-me di media vuelta y camine hasta mi casillero otra vez.

Definitivamente las vacaciones no me habían ayudado a aclarar mi mente.

Lance mi mochila al interior de mi locker, ya no podía importarme menos.

-¿Te encuentras bien?-Dean apareció de la nada o tal vez estaba tan molesta que no había notado que había llegado.

-Con un corazón hecho pedazos y con los pies de Austin pisando los pedacitos, pero estaré bien-Dean suspiro y paso su brazo sobre mis hombros.

-¿Qué tienes con los Max? Siempre sales mal.

-Tengo sexo con ellos Dean, eso es lo que pasa-era verdad, los Max eran como imán para mí y yo solo salía mal cada vez que me metía con ellos.

-Tengo algo que tal vez te anime-aleje a Austin de mis pensamientos por un momento.

-¿Qué?

-La broma final, la última que esta escuela verá de nosotros, pasaremos a la historia.

Lo pensé por unos momentos-Quiero un equipo completo.

-Y lo tendrás preciosa.

Sabía que me arrepentiría, pero era necesario si quería que fuera épico-Llama a Austin Max, tenemos una última broma que planear.

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Necesitas un corte de pelo

Treinta y cinco:

-Kate-ignoré a Austin y puse mi mejor sonrisa.

-Tenemos que organizar la broma final.

-Por favor no actúes como si nada hubiera pasado, prefiero que estés molesta conmigo.

-Tenía la idea de utilizar nitrógeno y pintura-volví a ignorar su comentario.

-Kate, para.

-Quiero que sea algo para recordar.

-Te quiero de vuelta Kate-estaba teniendo una taquicardia en estos momentos.

Apreté los labios-Para Austin.

-¿Por qué? Eres mi mejor amiga y te quiero de vuelta.

Mejor amiga, auch.

-Solo quiero planear esta broma Austin, eso es todo.

-Aún nos quedan semanas para hacerlo.

-Entonces si no quieres planear la broma-tome mis cosas-No tengo nada que hacer aquí.

-¿No me hablaras si no es para planear la estúpida broma?-se cruzo de brazos.

Suspire-Escucha Austin, tú y yo ya no tenemos nada que nos conecte o nos obligue a estar juntos, esta broma es la única razón por la que pasaremos tiempo juntos. Si eso no es suficiente para ti, entonces lo lamento.

Austin lo pensó por unos momentos y después pareció darse por vencido-¿Qué tienes en mente para la broma?-deje mis cosas en el suelo de nuevo y me acerque lentamente a la mesa, quería mantener mi distancia, pero al mismo tiempo, quería entrelazar nuestros dedos.

-Nitrógeno y tal vez convertir el baile en una invasión zombie.

-Creo que has visto demasiada televisión-reí, tenía razón, acababa de ver Los Hechiceros de Waverly Place.

-Eso pasa cuando no tienes pinturas en casa-tome el lápiz y dibuje el

gimnasio de la escuela sobre el papel de la mesa.

-Este año no es en el gimnasio linda-Dean entró con una caja llena de invitaciones en la mano.

-¿Hannah?-señalé la caja y él asintió-¿Dónde será?-arranque el papel y puse uno nuevo.

-En la cancha de fútbol-se encogió de hombros.

-¿Qué? Eso no es posible-Austin tomó la caja-Siempre es en el gimnasio.

-Al parecer Hannah quiere protegerse en contra de sus bromas este año-Dean le arrebató la caja a Austin.

-La broma final se arruino-Austin se sentó en el banco y Dean le paso la mitad de invitaciones.

-Has estado durante tres años en el campo y aún no tienes idea Austin-Dean sacó sobres de distintos colores-Aún sigo sin entender como es que haces que el equipo gané.

-Se le llama talento Winchester-gruño Austin.

-Se nota que Kate te obligaba a ver Supernatural-murmuro Dean.

-¡Lo tengo!-ignoré el comentario de Dean y la mirada que me daba Austin-¿Quién esta dispuesto a ensuciar un poco su vestido de graduación y tal vez terminar en la oficina del director?-Austin y Dean alzaron la mano-Cuida a Hannah Dean, porque el baile será una noche para recordar.

-Con una seña estará bien y así podré cubrirla con una bolsa de plástico-Dean continuó guardando las invitaciones en los sobres.

-Que caballeroso-tome uno de los sobres-¿Le importaría a Hannah si les doy un toque?-

Dean dejo los sobres sobre la mesa-Adelante pequeña artista, pero primero dibuja el plan en la mesa.

-Mis acuarelas están en mi casillero-volví a tomar el lápiz y comencé a dibujar.

-Ahora

vuelvo-Dean salió y Austin se puso de pie para colocarse a mi lado.

-¿Crees que eso sea algo para recordarnos?-Austin miro con atención el papel.

-¿Además de recordar como arruinamos sus caros vestidos? Creo que algo-sonreí.

La mano de Austin detuvo la mía y la inspecciono por unos momentos-Cada vez que te veo las manos las tienes llenas de pintura-sonrió como si eso le recordará a algo-¿Te mataría lavarte las manos antes de ir a clase?

-La pintura es difícil de quitar algunas veces, no es que no me las lave-respondí ácidamente.

-Al parecer te la pasas pintando-soltó mi mano suavemente.

-Me conoces Austin-retome el dibujo.

-¿De dónde sacaremos todo eso?-reviso las anotaciones en la parte inferior.

-Como si el equipo no fuera capaz de conseguirlo-me burle.

-No nos subestimes linda-mordí mi labio para no decir nada-Tus plantas siguen apestando-señaló las flores que acababa de dibujar.

-No son malas, es solo que tú sentido del arte está por los suelos-Austin rió, extrañaba su risa, incluso podía decir que era en esos momentos cuando sonreía y su sonrisa se enchuecaba.

-Y tú sentido del humor sigue sin mejorar. Debes relajarte Kate-puso sus manos sobre mis hombros-Estas un poco tensa-susurro en mi oído y eso mando un escalofrío por todo mi cuerpo.

-Austin-deje el lápiz en la mesa.

-Date la vuelta Kate-estaba utilizando toda mi fuerza de voluntad para no hacerlo-Vamos Kate, se que lo quieres-sus manos abandonaron mis hombros y se colocaron en mi cintura.

¿Dónde estaba Dean cuando lo necesitaba de verdad? Mi casillero no estaba tan lejos, debió de haber sido un plan, ¿Cómo no lo vi venir?

-Kate-Austin me dio la vuelta gentilmente y quedamos de frente, ahí estaban sus ojos, demasiado azules para ser perfectos-Vamos, dime que pare y me aleje. Lo haré.

Abrí la boca, quería decirle eso, pero algo más me decía que un beso no haría daño.

Mire su rostro, estaba lejos de ser perfecto, su nariz estaba un poco chueca de algunos golpes del fútbol, sus ojos eran demasiado azules como para ser considerados normales y los cuales me encantaban, tenía los rasgos de su madre, delicados y afilados y una fuerte mandíbula, como Michael. 

-Necesitas un corte de pelo-aparte el pelo de su cara.

-No tengo a nadie que me acompañe.

Me reí suavemente-Ya estas lo bastante grande Austin, puedes tomar tú auto y manejar hasta la peluquería.

-Siempre con tan buenas ideas-me dio una media sonrisa-Yo también tengo unas cuantas buenas ideas.

-Tengo las cosas esas Kate-Dean entró con mis acuarelas y una bolsa de papel en la mano-Vaya, uno pide unos tacos y ustedes ya se están besando-negó lentamente y yo empuje a Austin.

-Cállate y dame las pinturas-tome mis acuarelas.

-No me imaginó que hubiera hecho si yo hubiera tardado un poco más-abrió la bolsa y saco un taco-Debo de decirle a Armando que apure su servicio, es muy lento.

Austin rió y tomó un taco de la bolsa-Deja de quejarte Dean.

-Deja de aprovecharte Max-respondió Dean.

-No lo hago y lo sabes-me guiño un ojo.

Austin tenía razón, en esos momentos quería besarlo y seguía queriendo hacerlo.

-Sueña-le saque la lengua y comencé con mi trabajo de decorar sobres.

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Trampas, parejas y Ryan dando consejos

Treinta y seis:

Mire intensamente la última pregunta del examen, era la de esa vez que le había lanzado a Austin la mochila por la ventana y después me había obligado a volarme la clase con él para ir por una hamburguesa.

Estaba entre la A o la C, aunque también podía ser la B porque obviamente no era la D. Nadie era tan estúpido para marcar la D. Maldito seas Austin por sacarme de clase.

-Les quedan cinco minutos-avisó el profesor, nunca se me había dado bien la química, pero de alguna manera seguía pasando la materia. Eso de cambiar materias cada semestre no era lo mío, debía haberme quedado con Sullivan.

-Es la C-mire a mi izquierda y me sorprendí de ver a Austin en la ventana-Lo vi en el examen de Vincent.

-Largo-susurre y marque la C.

-La quince está mal, vamos Kate, es la B-fruncí el ceño.

-Largo-repetí.

-Como quieras-desapareció y relaje mi cara.

-Señorita Poynter, ¿Un examen intenso?-el profesor tomo mi examen.

Le regale una sonrisa-En especial la última pregunte-tome mis cosas.

-Cierre la ventana señorita Poynter-continuo recogiendo los exámenes.

Termine de recoger mis cosas y salí rápidamente-¿Te gusto la ayuda?-Austin estaba recargado en los casilleros.

-Si Jenkins me atrapa te culpare a ti-Austin tomo mi bolsa y la colgó en su hombro.

-Siempre puedo cambiar la calificación-le guiño el ojo a una chica.

-Largo de mi vista-me aparte antes de que pusiera su brazo sobre mi hombro.

-No seas tan dura conmigo nena. ¿Irás al baile conmigo?-me reí y quite mi bolsa del hombro de Austin, Ryan me esperaba en el estacionamiento.

-Alguien más me invitó Austin.

-¡¿Quién?!-camine hasta el auto de Ryan y sonreí al escuchar el grito de Austin.

-No eras mi única opción Austin, recuérdalo-abrí la puerta del auto.

-¿Qué quiere decir eso?-le guiñe un ojo y subí al auto.

-Creí que solo Sawyer te había invitado al baile-me encogí de hombros.

-Fue el único que se atrevió a hacerlo.

-¿El único que se atrevió?-bajo el volumen de la música.

Jugué con un mechón de cabello-Austin puede ser bastante intimidante cuando se trata de los chicos que se acercan a mi.

-Espera...¿Qué?-frunció el ceño-¿Aleja a los chicos de ti? Vaya, con razón el único novio que haz tenido ha sido su hermano.

-No te burles-golpee su brazo suavemente-Es peor que si fuera mi propio hermano.

-Tal vez a él le gustas-se detuvo en un alto.

-¿Qué?-me reí nerviosamente-Es mi mejor amigo Ryan, deja de decir tonterías.

-Aveces, cuando a los chicos nos gusta una chica Kate, nos ponemos posesivos porque no queremos perderla-habló suavemente-Soy un chico, se como funciona esto.

-Claro-mire por la ventana-Con Austin nunca sabes.

-Y tú, ya sabes...¿Quisieras salir con él?-pregunto, claramente incomodo.

Sonreí levemente-Sabes la respuesta a eso Ryan-lo pensé por unos momentos, tal vez no podía salir con Austin, pero al menos podíamos dejar atrás la incomodidad-¿Podrías dejarme en un lugar?

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Brokenhearted

Treinta y siete:

Sonreí, sabía que Austin probablemente iría por comida, era muy flojo como para cocinar, así que buscar la llave que estaba sobre el marco de su puerta no era tan difícil. Aunque debo admitir que me sorprendió ver que su apartamento fuera un desastre, Austin era un maniaco de la limpieza.

Aparte latas de botellas con mi pie derecho, incluso encontrar la mesa era difícil. ¿Qué demonios había estado haciendo Austin?

Deje mis cosas sobre el sofá, era momento de esperar a Austin y arreglar todo. Camine por su sala, había estado tantas veces en este lugar, lo conocía de memoria.

El apartamento iba a ser originalmente de Michael, pero cuando se fue, paso a manos de Austin. Era raro pensar en Michael, pero últimamente me encontraba pensado mucho en él. Debía de admitir que en parte, me había quedado con Austin solo para no perder por completo a Michael, a pesar de ser físicamente parecidos, eran realmente diferentes.

Michael era realmente fácil de conocer, todo un libro abierto, todos podían ver que tarde o temprano huiría.

Austin siempre había inquietado a la gente, yo me incluía entre los inquietados. Nunca lució interesado en reemplazar a Michael, pero en cuanto él se fue, Austin tomó su lugar rápidamente y llevo al equipo a la victoria. Era como si solo esperara el momento en que Michael desapareciera para tomar todo lo que habría de dejar atrás, a mi incluida.

Los dos hermanos nunca habían sido rivales, pero la tensión entre ellos decía lo contrario.

-¿Kate?-dirigí mi atención a la puerta,

Austin me miraba sorprendido.

-El apartamento es un asco-fue lo primero que dije.

-Bueno, no esperaba que volvieras a venir nunca-cerro la puerta.

-Pensé en venir y en arreglar esto-me cruce de brazos.

-¿Esto?

Suspire-Nuestra amistad Austin, la escuela esta a punto de terminar y yo iré a Nueva York. No puedo estar molesta contigo siempre.

Austin dejo sus cosas en el suelo-Traeré té-se dirigió a la cocina.

Mordí mi labio, no tenía idea de lo que le diría, solo sabía que había actuado por impulso al venir aquí.

Me senté en el sofá y espere a Austin, tal vez podría golpearlo y después pedirle perdón o simplemente darle un largo discurso.

-¿Te encuentras bien?-Austin se encontraba a unos cuantos centímetros de mi cara.

-¿Desde cuando no haces ruido?-reí suavemente y Austin sonrió.

-He aprendido unas cuantas cosas en estos meses Kate.

Sonreí-¿Cómo cuáles?

-Como que odias vivir con Jessica.

-Dime algo que no sepa-me acerque más a él.

-Que te he extrañado mucho.

-¿Aja?-me detuve antes de tocar sus labios.

-Vamos Kate, lo siento, pero me estas haciendo sufrir aquí.

Mordí mi labio-No te besaré Austin-reí y me aleje-Vine a hablar contigo, no a besarte.

-Bien-se cruzo de brazos e hizo un puchero como niño pequeño.

-No seas infantil-volví a reír-Hablo enserio. Vine a arreglar las cosas.

-Te llevo a Coachella-lo pensé por unos momentos, era demasiado tentador.

-Fuimos el año pasado y terminaste borracho-me encogí de hombros-Hablar-repetí.

-De

acuerdo-se dio por vencido-Vamos, se todo lo que quieres decirme Kate.

-Eres un idiota, pero te extraño Austin.

Austin se relajo-Sabes que también te extraño Kate. ¿Podemos dejarlo todo atrás? Tal vez podemos sellarlo con un beso de paz.

Reí-Eso fue bastante astuto de tu parte.

-Lo se, podría ir a Harvard si me lo propusiera.

-Pero en lugar de hacerlo, gastas tú vida haciendo música, vivirás en la calle.

-Y tú haces arte cariño, ambos viviremos juntos-sonreí y lo abrace.

-Es bueno tenerte de vuelta-bese su mejilla.

-Vamos, tocaré algo para ti, tengo la canción perfecta.

Se puso de pie y me ofreció la mano-Aún tenemos mucho de que hablar.

-Se lo que me dirás Kate y lo entiendo, tú sabes que diré-mire su mano dudosa.

-Ryan estará esperándome.

-Él entenderá-suspire y tome su mano.

-Más te vale que sea buena música, no aguanto más que intentes tocar a Ed Sheeran.

-Mis habilidades con la guitarra son mejores que las de él-me guío hasta su habitación.

-Quisieras-me senté en la cama.

-Solo escucha y ya-tomó su guitarra.

Hey there, Delilah

What's it like in New York city?

I'm a thousand miles away

But, girl, tonight you look so pretty

Sonreí, amaba esa canción y no me había dado cuenta, pero me sentía identificada. Con eso de que yo iría a Nueva York y Austin quería ser músico.

Mire a Austin, lucía tan concentrado en tocar y cantar al mismo tiempo, pero sobre todo, lucía feliz y eso me encantaba.

Aún seguía

sin estar segura de porque me gustaba Austin Max, era un idiota de pies a cabeza, pero algo de él me había hecho caer, tal vez era la manera en la que caminaba, ese caminar tan seguro de si mismo o tal vez como odiaba cortarse el cabello y terminaba tomando mis ligas para amarrar su cabello o la manera en la que alejaba a los idiotas de mi o la manera en la que era realmente protectivo, eran todas esas pequeñas cosas que todos veían pero nadie entendía, las que me hicieron enamorarme de mi mejor amigo.

Austin siempre había estado ahí, incluso desde antes de Michael, Austin era la persona de la que debía haberme enamorado desde un principio, pero supongo que Michael fue demasiado brillante para mi y me cegó, me olvide por completo de Austin. Tal vez por eso Austin no estaba molesto cuando Michael se fue, porque comencé a verlo de nuevo y tal vez desde esos momentos comencé a enamorarme, pero no me di cuenta hasta ahora. Hasta que sale una apuesta, Austin tiene una novia de la que no sabía, destruimos nuestra amistad, se acuesta con mi mejor amiga y toca la guitarra en su habitación, que me doy cuenta de que siempre fue Austin.

A thousand miles seems pretty far

But they've got planes and trains and cars

I'd walk to you if I had no other way

Our friends would all make fun of us

And we'd just laugh along because we'd know

That none of them have felt this way

Limpie las lágrimas rápidamente, no servía de nada darme cuenta de que siempre había querido a Austin, sabía que él nunca me vería de esa forma. Austin

siempre sería el idiota popular del que lees en las historias y del tipo que te rompe el corazón, aún sin saber que te lo esta rompiendo.

-No puedo-Austin dejo de tocar y me miro sorprendido. Me puse de pie rápidamente.

-¿Qué? ¿Qué pasa Kate?

-Tengo que irme-camine de regreso a la sala, tenía que tomar mis cosas y largarme.

-¿Hice algo mal? Creí que ya estábamos bien-tome mis cosas.

-Es solo...-negué con la cabeza-Creí que sería diferente.

-¿Diferente cómo?-camine rápidamente a la puerta.

-Yo...No puedo Austin, no más-me di por vencida.

-No entiendo Kate, ¿De qué hablas?

Sonreí tristemente, las lágrimas corrían libremente ahora-Cada vez que intento avanzar, ahí estás Austin.

-Sigo sin entender.

-No puedo hacerlo Austin, no más, no contigo.

-Kate-se acercó lentamente-Dime que sucede-su dedos pulgares limpiaron las lágrimas que caían de mis mejillas-Podemos arreglarlo si me dices que esta mal.

Respiré profundamente, era el momento, no había marcha atrás-No me gusta en quién me convertiste Austin, en como me haces sentir, en como...rompes mi corazón-aparte la mirada de sus ojos, aunque quisiera verlos, sabía que iban a estar confundidos o incluso no mostraría emoción alguna. Lo había visto rechazar a las chicas antes e incluso romper sus corazones-No te preocupes, cuando me di cuenta de que te quería, preparé mi corazón para que no pudieras romperlo más-las manos de Austin se alejaron de mi rostro y ahí pude sentir el rechazo inmediato de su parte-Lo enserio, no quería que esto terminará así.

Austin

se quedo callado por unos momentos y se aparto-Creo que será mejor que te vayas.

-De acuerdo-abrí la puerta y mire a Austin-Pensé que serías diferente-Austin aparto la mirada y mi corazón no podía estar más roto-Adiós Austin-salí de su apartamento.

No me importo limpiar mis lágrimas, ni tampoco que la gente que se encontraba en el ascensor me viera con lastima. Solo quería llorar y que Austin llegará y me abrazará, que me dijera que también me quería, no quería tener un corazón roto.

Odiaba los corazones rotos, pero supongo que era algo de los Max, rompían tu corazón en millones de pedazos y después desaparecían.

Probablemente este solo sería otro rechazo para Austin, pero para mi era más que eso. Necesitaría tiempo para recuperarme y pegar todos los pedazos rotos.

Tal vez después de todo, ir a Nueva York era una buena idea.

-Vamos linda, las chicas lindas como tú no lloran-la anciana que vivía a un lado de Austin me tendió un pañuelo.

Le sonreí levemente, aunque estaba segura de que tenía el maquillaje corrido y mi sonrisa temblaba-Gracias-tome el pañuelo.

Salí rápidamente del ascensor en cuanto llegó al primer piso, no podía más. En cualquier momento me terminaría de romper.

Saque mi celular con manos temblorosas y marque el segundo numero que me sabía de memoria-Por favor contesta-mordí mi labio fuertemente.

-Hey ¿Qué pasa Kate?

-¿Puedes venir por mi? Por favor-hable con voz rota.

-¿Dónde estas?-escuche como tomaba las llaves.

-En casa de Austin-tan solo de decir su nombre me dolía el pecho.

-Estaré

ahí en cinco, no te muevas-colgó el teléfono y supe que tal vez Dean tendría una multa por manejar como maniaco, pero eso no me importaba.

Me sentía estúpida de pensar que tal vez tenía una oportunidad con alguien como Austin Max.

Decir que desearía no haberlo conocido sería algo estúpido, con Austin mi vida cambió, me hizo sentir viva e incluso me hizo sentir cosas que ni siquiera Michael había logrado.

Sencillamente entendía porque Austin me había rechazado, no podía hacerlo quererme, no podía hacerlo luchar por mi, sencillamente no podía hacerlo amarme. Lo entendía, pero ahora lo difícil sería aceptarlo.

-¿Alguna señorita que necesite un hombro para llorar?-Dean se bajo del auto rápidamente-Vamos Kate, tengo dos barras de chocolate blanco en el auto, puedes decirme todo en el camino-me ayudo a subir y unos segundos después subió él y arrancó.

-Le dijo que lo quería-hable después de unos minutos de silencio incomodo-Él solo dijo que debía marcharme.

-Oh Kate-sabía que Dean quería abrazarme.

-Esta bien-admití-Esperaba algo así, solo que no estaba esperando decírselo hoy o nunca.

-¿Quieres ir al muelle?-asentí.

-Quiero irme Dean. Quiero irme a Nueva York y nunca regresar.

-Solo lo dices porque tienes el corazón roto, estarás bien Kate, estoy aquí.

Encendí la radio-Espero que tengas razón Dean. Y ojalá las personas tengan razón cuando dicen que el tiempo cura todo.

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Bueno, eso fue algo deprimente de escribir.

Aún quedan tres capítulo más, así que no crean que esto es el final.

Y quería preguntarles algo, ¿Quisieran leer una segunda parte de la historia? Ya saben con Kate en Nueva York y lo que haga Austin.

Diganme si les gustaría o solo quieren que termine la historia y ya.

Gracias por leer xx.

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De recuerdos y pláticas con Luke

Treinta y ocho:

-Cuando primero lo conocí sabía que todo iba a cambiar, un chico como ese no es alguien que pase por tu vida sin dejar cicatriz-sentí un nudo formarse en mi garganta, ¿Quién había escrito esta maldita obra escolar?

-Pero si te hizo daño, ¿Por qué sigues queriéndolo?-es todo, iba a golpear al escritor.

-Porque cuando comienzas a hacer excusas para todo el dolor que te ha causado, es porque te das cuenta de que lo amas. Yo lo amo Brittany, Jace es el gran amor de mi vida.

Me puse de pie y salí del teatro, necesitaban mejorar su actuación y el escritor necesitaba una patada en la cara o ser golpeado con una silla hasta quedar inconsciente.

Mi cara estaba pálida, ojeras como un mapache y tenía las mejillas completamente rojas, eran los claros signos de que llevaba dos días llorando e intentando ocultar mis sentimientos al mundo.

-Kate. ¿No deberías estar en el auditorio viendo la obra?-Connor me tomó gentilmente del brazo.

-Era demasiado mala como para verla-me encogí de hombros, Connor inspeccionó mi rostro por unos momentos y después suspiró.

-Vamos, te daré un pase para que te vayas temprano a casa-soltó mi brazo y ambos caminamos a su oficina.

Le agradecía la falta de preguntas y la consideración de su parte para dejarme irme antes de mi infierno personal.

-¿Tienes a alguien que te lleve a casa?-pregunto mientras escribía el pase.

Ryan estaba ocupado con el periódico escolar, Dean ayudaba a Hannah con el baile y Austin no era una opción para mi en esos momentos.

-Yo la llevaré Connor-Luke

entró por la puerta.

-Oh Ronan, ¿Qué haces aquí? Ya me había extrañado que no te enviaran conmigo-Connor sonrió.

-Al parecer no valgo el tiempo del director esta vez-se encogió de hombros y me miro-¿Necesitas que te lleve Kate?

Lo pensé por unos momentos-Sí-Connor me tendió el pase y me puse de pie para salir con Luke de la oficina.

-¡Detención Ronan!-grito Connor-Y Kate-me detuve en la puerta y lo mire-Deja ya de llorar por él, tienes más potencial que eso-asentí y camine detrás de Luke.

-Así que, ¿Cuál de todos los rumores es el correcto?-mire a Luke y me encogí de hombros.

-Depende de cuales estén circulando-no había estado pendiente de los rumores, me había perdido en la cama durante el fin de semana y acurrucándome con Dean viendo películas románticas y después tirarlo de la cama para que fuera por chocolate blanco.

-Bueno, veamos-lo pensó por unos segundos-¡Ah sí! Uno dice que estás embarazada y es de Austin.

-Lo más falso que he oído en mi vida-mordí mi labio.

-Otro que estás embarazada y es mío-fruncí el ceño.

-Bueno Luke, me atrapaste, serás padre-murmure sarcásticamente.

Luke ignoró mi comentario-Otro que te casaste en Las Vegas con Austin-me detuve y cerré los ojos mientras dejaba que los recuerdos de aquella vez inundaran mi mente.

Había robado el vestido de novia de Jessica, lo había encontrado cuando había ido a su casa y había decidido gastarle una broma tomándolo prestado, sabía que adoraba demasiado ese vestido.

-Vamos Kate, tengo hambre-reí mientras terminaba

de ponerme el vestido.

-Listo-Austin me miro, sonreí y le tendí el anillo que había tomado también como un préstamo de mi padre-Ahora estamos casados.

Ambos bajamos del auto y entramos al hotel corriendo, entre besos y risas.

Siempre había querido saber lo que era casarse en Las Vegas y Austin me había dado la oportunidad de tener todo eso sin casarnos de verdad.

Me dio incluso la suite de luna de miel y el alcohol gratis, ¿Qué más podía pedir para mi falso matrimonio con mi mejor amigo?

Incluso cuando paseamos por la calles tomados de las manos, me sentía feliz, incluso deseé por unos momentos que todo fuera verdad, que estuviéramos lo suficientemente enamorados como para cometer la locura de casarnos en Las Vegas sin la necesidad de estar ebrios.

-Supongo que eso tampoco es verdad-volví a la realidad cuando escuche la voz de Luke y abrí los ojos rápidamente.

-Lo lamento, es la falta de sueño-toque mi cabeza, en parte era razón, incluso podía decirse que tenía pesadillas cuando intentaba dormir-Eso es mentira-aclaré.

-Bueno el último es que Austin te rompió el corazón-vaya, la gente de hoy en día siempre tenía la verdad.

-¿Quién dijo eso?-me cruce de brazos.

-Yo, porque puedo ver que tienes un corazón roto.

Parpadee sorprendida y suspire-Supongo que el karma es una perra.

-También porque algunas veces mirabas a Austin de una manera que ni siquiera tú te dabas cuenta Kate, lo veías con tanto cariño que deseó algún día poder encontrar a una chica que me mire de esa manera cada

vez que estoy a su lado, no importa si soy un idiota con ella-por un momento quise estar enamorada enserio de Luke, quise olvidar a Austin y estar con él-Y lo se porque se como es tener un corazón roto y también se lo que siente tenerlo.

Aparte la mirada-No me gustan los corazones rotos, pero es Austin Max, al parecer a los Max les gusta romperme el corazón-reí amargamente.

-Sí, al parecer-Luke me abrazo y si hubiera tenido las fuerzas de llorar, lo hubiera hecho. ¿Alguien puede morir por llorar tanto? Ojalá no, eso no sería agradable.

-No estoy molesta con él Luke, supe desde un principio que no iba a ser correspondido, solo estoy cansada de todo este drama-murmure-Incluso algunas veces desearía que me hubiera ignorado cuando llevaba ese horrible suéter rosa.

Mire a mi alrededor en la escuela, enserio que odiaba a mi padre por haberme obligado a utilizar el horrible suéter rosa. Sinceramente no era un muy bueno "Pasar desapercibida". 

Intentaba encontrar a los llamados "artistas" como había dicho el director, solo debía encontrar a un chico pelirrojo y entonces estaría bien.

-Hola, soy Austin Max-un chico me sonrió y pude jurar que esos eran los ojos azules más extraños y hermosos que nunca había visto, con su cabello oscuro era realmente atractivo y esa sonrisa, estaba segura de que era de ese tipo de personas que no sonreía mucho por miedo a que su sonrisa se enchuecara.

-Kate-me presente.

-Llegaste en el peor momento Kate, tienes suerte, eres de mi equipo-el chico me guiño el ojo y yo reí. ¿Qué era esto?

¿Un asalto armado?

-¿Robaremos un banco acaso?-el chico sonrió más y comprobé que mi teoría de su sonrisa era verdad, se enchuecaba, pero eso no le quitaba lo guapo.

-Algo aún mejor.

Nunca había tenido experiencia con los chicos, de hecho nunca ningún chico se había acercado a hablar conmigo por voluntad propia, siempre creí que no les resultaba atractiva, pero Austin Max llegó y cambió completamente eso. Me dio una confianza y una nueva actitud a todo, incluso me dio a mi primer novio.

-¿Entonces sales con Michael?-Austin metió los libros en su casillero.

-Sí Austin, salgo con Michael-reí suavemente, llevaba haciéndome esa pregunta desde que le había dicho ayer que su hermano me había pedido ser su novia.

-¿Segura que lo quieres de primer novio? Digo, hay muchos aquí que quisieran tener ese privilegio-me encogí de hombros.

-Deja de decirle esas cosas a mi chica-Michael llegó y beso mi mejilla, para después pasar su brazo sobre mis hombros-Si no fueras mi hermano ya te hubiera golpeado por meterle esas ideas a mi chica.

-Y yo por meterte con mi mejor amiga.

-Vamos Kate, te llevaré a casa, necesitas dormir-Luke se separo y tomo mi mano para después llevarme con él.

-Dentro de poco me iré a Nueva York-murmure y Luke apretó su agarre en mi mano.

-Algo había escuchado, como dije, demasiado rumores en esta escuela-respondió algo tenso.

-Pues ahora yo te digo la verdad.

-Felicidades-murmuro y se detuvo-Se que tal vez no es el mejor momento, pero quiero preguntarte algo-paso una mano por su cabello

-Claro-ya no tenía mucho que perder.

-Sí Austin nunca hubiera estado ahí, ¿Yo hubiera tenido alguna oportunidad contigo?

Vaya, esa era una respuesta que no estaba preparada para pensar-Tal vez-me encogí de hombros-Eres un buen chico Luke y aveces yo puedo ser un asco de persona, pero tal vez si Austin y Michael nunca hubieran estado ahí, definitivamente habrías sido una opción.

Luke sonrió y por un momento la idea de besarlo, cruzo por mi mente, pero desapareció tan rápido como llego-Eso me hace sentir un poco mejor.

Sonreí también-Me alegra eso ¿Me llevarías a casa ahora?

-Claro-retomamos la marcha-¿Segura que estarás bien?

Era claro para Luke que Austin me tenía alrededor de su dedo, estaba segura de que si lo veía en estos momentos y me pedía perdón, regresaría con él. Debía alejarme y aclarar mi mente, así que Nueva York era un gran lugar para empezar de nuevo. Empezar desde 0, sin Austin y sin idiotas populares que te rompieran el corazón y después te abandonaran. Era el momento perfecto para irme.

-Estar bien no es una opción ahora, Luke-admití-Pero necesito tiempo, debo volver a encontrarme con Austin me perdí y ahora debo volver a pensar en quien quiero ser.

Luke paso su brazo por mis hombros-No cambiaras nunca Poynter, siempre serás esta adorable tú. Tal vez tiempo es lo que necesitas.

-Tal vez-estuve de acuerdo con Luke, solo necesitaba tiempo y tal vez cuidar lo que decía en los pasillos.

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Letting go {FINAL}

Treinta y nueve:

Tome mi última maleta y mire la habitación a mi alrededor, tantos recuerdos dentro de aquellas cuatro paredes, casi podías verlos si ponías la atención suficiente.

Los dibujos en el escritorio y en las paredes, casi podía imaginar que nada había cambiado si ignoraba la falta de cosas.

Debía admitir que no había dormido bien los últimos días y ahora que era el momento de partir, había decidido regresar a casa, mi padre ni siquiera se atrevía a mirarme a la cara y Austin no estaba ahí, mi vida se había vuelto un completo desastre.

Baje las escaleras y pude ver a mi padre sentando en el comedor, tal vez sería un buen momento para despedirme.

-¿Sabes? Iré a Nueva York-me recargué en el marco de la puerta.

-Lo se, Jessica me lo dijo-asentí, me sentía mal por mi padre, todas las mujeres de su vida lo abandonaban.

-Lamento no haber sido lo que tú esperabas-murmure-Pero quiero que sepas que seré feliz.

-Adiós Katherine-de acuerdo, si así lo quería.

-Adiós papá-volví a dirigirme a la puerta.

-¿Lista para Nueva York?-sonreí y subí al auto de Dean, el día anterior los chicos del equipo y los artistas se habían juntado para comer pizza y beber cerveza como una fiesta de despedida en mi honor, claro que Austin no estuvo ahí, ni siquiera lo esperaba.

Dean se la paso hablando de lo orgulloso que estaba de mi, de lo mucho que no podía esperar para visitarme, de lo mucho que odiaba haber sido aceptado en Stanford porque estaba demasiado lejos de Nueva York, de lo mucho que me extrañaría y de lo mucho que

me quería, además de darme sus consejos y su frase "Si un idiota se atreve a hacerte algo, juro que iré hasta Nueva York solo para patearle el trasero a ese idiota"

-Te extrañaré mucho Dean-lo abrace fuertemente, iba a pasar por seguridad y era hora de despedirme, Ryan ya había tenido su momento por dos días.

-Y yo a ti linda-beso mi frente-Quiero que vayas a Nueva York y seas la mejor artista que el mundo ha visto ¿De acuerdo?

Asentí-Y yo quiero que seas un gran abogado Dean.

-Tenlo por seguro-volvió a besar mi frente y puedo jurar que podía ver las lágrimas en los ojos de Dean.

-Debo irme-me separé de Dean, aún faltaba tiempo para mi vuelo, pero si no me separaba de Dean comenzaría a llorar y no me iba a querer ir nunca de California.

-Suerte Kate. Te quiero-le sonreí y pase por seguridad, detestaba las despedidas, nunca había sido buena para ellas y me incomodaba ver a la gente llorar.

Compre un café, detestaba el café, pero también odiaba dormir en los aviones, así que no tenía mucha opción.

-¡Kate!-tal vez también por eso no compraba café, porque podía alucinar cosas, como por ejemplo, la voz de Austin gritando mi nombre-¡Kate!

Me gire, definitivamente no era una ilusión, porque estaba segura de que no podía alucinar a una persona corriendo hacía ti, comenzaba a dudar de mi salud mental.

-¿Creíste que te irías sin despedirte?-llegó con la respiración agitada hasta donde estaba.

Sinceramente estaba sorprendida-¿Cómo pasaste seguridad?

-Eso no importa. No puedo creer que creíste que solo podrías irte-¿Por qué estaba

aparentando que nada había pasado?

-¿Qué haces aquí Austin? Creí que después de...

-Eres mi mejor amiga Kate, no podía dejarte ir tan fácil-asentí, mejor amiga, auch.

Sonreí a pesar del dolor, tenía a Austin delante de mi y eso era lo que importaba, había venido a despedirse.

-Te quiero Austin-abrace a Austin.

-Yo también-sabía que no lo decía de la misma manera que yo, pero al menos podía imaginar que sí lo hacía por unos momentos.

-Vaya, odio los aeropuertos-murmure con los ojos llenos de lágrimas.

-Y odias las despedidas, lo se Kate-asentí, tenía un nudo en la garganta-No llores Kate, la tecnología tiene cosas maravillosas con las que nos podemos seguir comunicando.

Austin tomo mi rostro entre sus manos y limpió el maquillaje que se había corrido por mis lágrimas, como iba a extrañar esto.

-¿Estarás bien?-pregunto por décima vez mientras nos sentábamos en las sillas, odiaba los aeropuertos, odiaba esperar.

Reí y aferre el café en mis manos-Aún sigo sin saber como pasaste seguridad-sonreí.

-Tengo mis trucos-se encogió de hombros.

-Siempre los tuviste-deje el café en el suelo y lo mire, iba a extrañar esos ojos, no importaba que me hubiera roto el corazón.

-Solo contigo-murmuro y pude notar como se inclinaba para después atrapar mis labios.

Era un beso que incluso podía describir como doloroso, no me quería, pero aún así me besaba.

-Austin...-me separé y borre mi sonrisa, quería decirle que fuera conmigo que podía enamorarlo, pero debía recordar que era Austin Max

y que había roto mi corazón más veces de las permitidas.

-Debo irme, ese es mi vuelo-me puse de pie y tome mi bolso.

-Puedes esperar a que la fila sea más corta-lo mire incrédula ¿Se atrevía a decirme eso? No entendía que esperaba Austin de mi.

-No solo es la fila Austin-murmure, estaba cansada de siempre tener que hacer esto con él, incluso ahora que me había rechazado-Deberías de dejar de ser egoísta por una vez en tu vida, me iré a Nueva York y tienes que aprender a vivir sin mí. Tienes que dejarme ir.

Austin tomó aire, parecía que se preparaba para decir algo, algo realmente importante, pero yo ya había tomado mi decisión.

-Sabes que habría ido a cualquier lado del mundo contigo Austin, habría dejado todo por estar a tú lado, incluso me habría tragado mi orgullo, pero tú no me quieres Austin, solo no quieres dejarme ir para no estar solo, pero te tengo malas noticias, estarás solo. Lo más triste es que tú solo determinaste ese futuro para ti.

-¿Eso piensas Kate? ¿Crees que solo eres eso?

-Es lo único que me das a entender Austin, no puedo esperar más de ti.

-Puedo intentarlo-la sangre en mi cuerpo se heló al escuchar sus palabras-Enséñame a como hacerlo correctamente, enséñame a amar, quiero quererte Kate, enserio quiero, pero no se como hacerlo sin lastimarte.

Sentí las lágrimas volver a mojar mis mejillas-Es muy tarde Austin, no puedo creer que esperaras tanto para decirme eso.

-Lamento no habértelo dicho antes, no sabía como hacerlo-tomó mis manos-Por favor no te des por vencida ahora Kate, no te des por vencida en

nosotros, en lo que podemos ser.

Probablemente debía decirle algo, tal vez debía decirle que lo quería y que podíamos intentarlo, pero no podía, sencillamente estaba cansada de intentarlo con Austin y que él siempre lo arruinará todo, odiaba que arruinará las cosas apropósito, que podía lastimarme tanto, no era sano para ninguno de los dos.

-Ambos nos lastimamos más de lo que podemos querernos Austin-murmure-Ambos somos malos para eso que las personas llaman amor, así que te diré esto, me rindo Austin, me rindo con nosotros dos-zafé mis manos de las suyas-Te quiero, pero es momento de decirte adiós.

Por primera vez desde que lo conocía, pude ver lágrimas en los ojos de Austin, lágrimas de dolor y probablemente enojo. Podía ver todas sus emociones a través de sus ojos y no me gustaba lo que veía, no me gustaba verlos llenos de tristeza, algo tan hermoso como sus ojos no estaban hechos para estar tristes.

Aparte la mirada, simplemente no podía seguirlo mirando sin sentirme culpable y querer besarlo para quedarme junto a él-Todo lo que quiero se va-murmuro y tenía la idea de que no solo hablaba de Michael-¿Tan malo soy? Supongo que algunas veces solo lo quiero demasiado y lo rompo, ¿Te rompí Kate?

-Debo irme Austin-limpie las lágrimas de mi rostro.

-Por favor Kate, dime la verdad.

Sonreí tristemente-Me rompiste el corazón sin saberlo Austin, no es tú culpa.

-Pero incluso te hice daño después de que me lo confesaste, ni siquiera fuiste al baile por mi culpa.

Mire mis manos-No fue tú culpa Austin, sencillamente sentí que no tenía nada que hacer en ese lugar, no había una última vez Austin.

-Señorita, debe abordar, el vuelo sale en 15 minutos-mire a la azafata que había tocado mi hombro.

-Claro, claro-asentí y ella me dedico una sonrisa, para después dirigirse a las puertas de abordaje.

-Supongo que debo dejarte ir-Austin paso una mano por su pelo-Aunque no quiera hacerlo.

-Sí-murmure y me acerque hasta Austin-Debes hacerlo Austin.

-De acuerdo-asintió-Solo...déjame hacer esto-se inclino y me beso, pude sentir que ese era probablemente nuestro último beso. Austin me estaba dejando ir y yo también lo estaba dejando ir-Diviértete en Nueva York-acarició mi mejilla.

-Suerte Austin-me aparte de él y camine hasta el avión.

No podía ver atrás, sabía que estaría Austin esperando que cambiará de idea, pero no lo haría, tenía que dejarlo ir, superar a Austin Max y seguir con mi vida.

Austin Max había sido como el gran amor que nunca se olvida, aquel que no es correspondido, pero aún así quieres recordar por más doloroso que sea. Quieres evitar cometer los mismos errores.

Así que solo tenía que respirar, porque todo iba a estar bien o eso era lo que esperaba. Iría a Nueva York y comenzaría de nuevo, no idiotas populares ni más drama, no más Austin Max. Y tal vez, solo tal vez, era lo mejor.

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Close as Strangers

También recomiendo escuchar AMENSIA-5SOS y LONG WAY HOME-5SOS

Cuarenta:

Austin POV:

OCHO SEMANAS DESPUÉS:

Me senté en el único lugar en el que estaba seguro que Kate nunca se había sentado.

La imagen de ella despidiéndose de mi en el aeropuerto, rompía mi corazón cada vez que la recordaba.

-Te quiero Austin-sus delicados brazos me abrazaron y sonreí, Kate.

-Yo también-me aleje y tome su rostro entre mis manos para quitar el estúpido maquillaje de su rostro, el cual se había corrido por sus lágrimas.

Solo éramos ella y yo, Jo estaba con su madre y su padre se había negado a venir.

-¿Estarás bien?-pregunte por décima vez mientras nos sentábamos en las sillas para esperar, tenía un boleto de avión esperando en mi bolsillo, si ella decía lo que quería, iría por la maleta que estaba en mi auto y usaría ese boleto para irme con ella.

Ella rió y aferró su café en sus manos-Aún sigo sin saber como pasaste seguridad-sonrió infantilmente, esa sonrisa que solo me mostraba a mí.

-Tengo mis trucos-me encogí de hombros.

-Siempre los tuviste-dejó el café en el suelo y me miro fijamente, ese extraño brillo estaba en sus ojos de nuevo.

Yo solo esperaba que ella me dijera que no quería estar sola en una gran ciudad como lo era Nueva York y yo felizmente la acompañaría, no quería dejar de ser parte de su vida.

-Solo contigo-murmure y me incline, vamos Kate, dilo.

Atrapé sus labios, tenía

que decirlo, no podía imaginarme tener que ir a la Universidad sin ella.

Estudiaría derecho si eso implicaba estar con Kate en Nueva York, me habían aceptado en la NYU, pero solo quería escucharlo de la boca de Kate.

-Austin...-la sonrisa de Kate se borró y también el extraño brillo que tenían sus ojos.

Vamos, estaba seguro de que lo diría.

-Debo irme, ese es mi vuelo-se puso de pie y tomó su bolso de mano.

-Puedes esperar a que la fila sea más corta-¿Tanto le costaba pedirme que me fuera con ella?

-No solo es la fila Austin-su rostro lucía cansado-Deberías de dejar de ser egoísta por una vez en tu vida, me iré a Nueva York y tienes que aprender a vivir sin mí.

Mire alrededor, todo mi apartamento estaba lleno de Kate, eran los recuerdos que me perseguían y no me permitían escapar de ellos.

Tome un trago de la botella, necesitaba a Kate. Ella era la que no tenía miedo de gritarme que estaba siendo un gran idiota y se enfrentaba a mí, a pesar de saber que estaba molesto.

Recordaba la primera vez que la había visto como si no hubiera sido hace cinco años.

Mis padres dormían sobre una silla de playa y mi hermana se dedicaba a jugar en la arena. Eran nuestras vacaciones de Navidad, mamá quería algún lugar con sol, pero no quería ir a las playas en México. Así que nuestro padre, había decidido que Australia sería un buen lugar.

Por mi parte, yo me dedicaba a ver a las chicas que querían broncearse.

Le sonreí a una rubia que se ponía bloqueador y

ella solamente me regresó la sonrisa.

¿Quién lo diría? Las chicas caían por los niños jóvenes y adorables, como yo, que solo tenía 14.

-No, otra vez no papá-despegué mi atención de la rubia y mire a una chica castaña la cual estaba con los brazos cruzados y un suéter enorme encima.

-No dejaré que uses eso aquí Katherine, tienes 13. ¡Dios!-la chica parecía cansada y lucía como si quisiera golpear a su padre.

-No seguiré usando trajes completos-se quejó y se quitó el suéter para mostrar un bikini de color negro.

-¡Katherine!-parecía que a su padre le fuera a dar un infarto.

La chica rió y corrió hasta el agua, dejando a su padre gritando en la orilla.

Sonreí, esa era la primera vez que la había visto revelarse contra su padre. Había sido la primera y la única vez que había visto a esa chica.

Y dos años atrás, que había llegado a la escuela.

Había llegado en un mal momento, en el momento en donde todos son enemigos.

Había llegado en la semana de las elecciones, o como nosotros lo llamábamos, la semana de las bromas.

En esa semana, las chicas competían por todo. Desde quien sería la presidente del comité, hasta quien se llevaría mi atención para ser mi siguiente conquista. Los chicos decidíamos jugarnos bromas entre nosotros y mantenernos fuera del asunto de las chicas.

Así que cuando Kate entró por la puerta con una suéter demasiado rosa y con la frente en lo alto, sabía que ella era diferente.

Cuando Meredith posó su mirada en ella, sabía que la veía como una

amenaza y Kate no se merecía la mierda que esa zorra le fuera a hacer, así que hice lo inimaginable y me presenté ante aquella chica de ojos astutos.

Meredith miraba fijamente hacía la puerta, como si pudiera matar a quien fuera que estuviera de pie ahí. Seguí su mirada y me tope con una chica castaña, nada mal. ¿Competiría este año por mi atención? Hice una mueca al ver su suéter, ew, demasiado rosa para mí.

-Esa niñita no se llevará su atención-fruncí el ceño al ver a Meredith murmurar hacía sus amigas, vamos, esa chica lucía totalmente perdida, no hablaba enserio.

Tomé aire, esto podría arruinarme, bah, eso no me importaba, camine hasta ella-Hola, soy Austin Max, bienvenida-sonreí a la chica.

-Kate-se presentó y reconocí su acento, australiano, mmm.

-Llegaste en el peor momento Kate, tienes suerte, eres de mi equipo-le guiñe un ojo y ella rió, era una risa bonita.

-¿Robaremos un banco acaso?-sonreí más, no me gustaba sonreír mucho, porque si lo hacía, mi sonrisa se torcía, pero a ella no le importaba.

-Algo aún mejor.

Así Kate se había convertido en mi mejor amiga, yo nunca hacía equipo con nadie en la semana de bromas y mis bromas siempre eran las mejores, pero con Kate, las bromas se habían ido al límite y ambos ganábamos. Tanto, que decidimos que la semana de bromas sería durante los bailes, durante la semana de elecciones y la última semana de clases.

-Vamos Austin-Kate recogió su vestido hasta sus rodillas mientras caminábamos.

Entramos a la sala del director y pusimos las

cosas sobre las mesas.

-¿20 bolsas de gel en una bolsa comprensible?-fruncí el ceño mientras ella sacaba cosas de abajo de la mesa del director.

-La enfermera me las regaló-recogió su cabello en una coleta y continuó esparciendo las bolsas-De acuerdo, si aplicas mucho calor en estas cosas, explotan-me mostró una.

Oh, para eso quería que fuera en el gimnasio, era una perra astuta.

-Pero no hace suficiente calor a pesar de toda la gente.

-Pero Meredith puso calentadores porque "el maldito invierno no impedirá que utilice mi vestido"-sonrió y terminó de sacar las bolsas-Antes de que las cosas exploten, coronaremos como reina a Maggy junto con Derek, ella enloquecerá y subirá al escenario y ¡boom!-me encantaba como pensaba.

Disimuladamente colocamos las bolsas sobre los calentadores y vimos como Meredith enloquecía por no haber ganado.

"Feliz Navidad" leí los labios de Kate y una pequeña explosión se escuchó y después algunas risas, otros quejidos y algunos gritos.

Todos estaban cubiertos de gel azul, todo estaba arruinado. Kate y yo chocamos las manos y subimos al escenario para recoger nuestras coronas.

-Disfruten del baile.

Tenía tantos buenos recuerdos junto a ella.

Odiaba siempre haber sido tan egoísta, pero la necesitaba, con Kate no era un idiota, con Kate era yo mismo.

-Eres un idiota-le sonreí y le tendí las flores.

-Soy tu mejor amigo-ella tomó las flores y las miró.

-¿Qué querías que hiciera?

-Vamos, mis padres esperan-dejó las flores en

el auto y ambos entramos.

Mis padres corrieron a abrazarla, estaban felices de que tuviera una novia normal y agradable, claro, solo omitamos el pequeño detalle de que Kate era mi mejor amiga y no mi novia.

Esa noche habíamos huido de la cena familiar después del postre, habíamos huido en cuanto mi madre comenzó a hablar junto con mi abuela de nuestra posible boda.

Esa noche había manejado hasta Las Vegas y Kate se había vestido de novia, mientras yo colocaba un anillo en su dedo.

Kate se estaba poniendo un vestido en la parte de atrás, cuando le pregunte de quien era me había dicho "De una puta que se casó dos veces", supuse que era de su madre.

A esta hora las familias de turistas que visitaban Las Vegas paseaban por todos los lugares, claro, ellos solo salían en el día.

California no estaba lejos de Las Vegas, pero con todas las paradas que hicimos, era obvio que llegaríamos a la hora del desayuno.

-Listo-mire a Kate, utilizaba un vestido blanco, muy bonito y me tendió un anillo-Ahora estamos casados-sonrió.

Ambos bajamos del auto y entramos al hotel corriendo, entre besos y risas.

Las pocas familias que estaban ahí nos miraron por un momento, algunos de seguro pensando que estábamos locos, y después, todos comenzaron a aplaudir y a decir frases como "Muchos años más" "Ella es muy bonita, de seguro se escapó de su propia boda" "Que linda pareja" "Siempre quise casarme en Las Vegas" "Cuídala hijo, se ve que es una buena chica"

Kate y yo pedimos una habitación normal, no teníamos

mucho dinero a nuestra disposición, pero la mujer nos dijo que la suite de luna de miel estaba disponible y nos la dio por un precio de habitación normal, así que la tomamos, junto con el alcohol gratis.

Esa tarde, Kate y yo paseamos por las calles tomados de las manos, pretendiendo ser esposos y ella aún utilizaba el vestido, podía decirse que era afortunado.

Ese era mi recuerdo favorito de Kate, ella vestida de novia. Eran de esas cosas que estabas seguro que nunca olvidarías. Aquella noche la contemple dormir, siempre la miraba y sabía que era hermosa, necesitaba de Kate y ella de mi, éramos perfectos.

Ahora lamentaba no haberle demostrado todo el tiempo lo que ella significaba para mi, como quisiera haberme largado con ella ese día, o haber vivido en ese momento para siempre, verla dormir y siendo "esposos".

Kate lentamente se había escurrido de entre mis manos, con tantas peleas y con mi idiotez, yo solo la alejaba más, le provocaba alejarse mi. Siempre esperaba que ella se olvidará de todo, sabía no podíamos vivir sin el otro, pero al parecer me equivoque.

-¿Llegará un momento en el que nos ignoraremos al vernos?-Kate descansaba sobre mi pecho y trazaba figuras imaginarias con su dedo sobre este.

-Si es así, nos veremos hasta ese momento-murmure, no quería que eso sucediera nunca, Kate era lo mejor que me había pasado.

-Ojalá nunca llegué, no quiero ser de esos conocidos que actúan como extraños.

Lo único que hice fue besar su frente, no le dije lo que pensaba.

Había tantas cosas que no le había

dicho, tantas cosas que hubiera deseado haberle dicho.

Recordaba la última vez que había hablado con Kate, había sido hace un par de días.

-Esto es totalmente increíble-fue lo primero que dijo en cuanto contesto.

-Seis semanas-le recordé, hace seis semanas que se había ido, pero en realidad, no sabía que decir.

-Con tanto estrés ya no se ni cuanto-sonaba cansada, pero su rostro seguía siendo el mismo, por eso amaba a Skype, podía verla.

No sabía si Kate podía sentirlo, pero cada día era como si los dos nos alejábamos más, no siempre podíamos hablar pos Skype, algunas veces por teléfono o por simples mensajes.

-¿Qué estamos haciendo Austin?-esa pregunta era la que me había hecho pensar.

-Ser amigos-le expliqué como si fuera obvio.

-No-negó y parecía que quería decir algo, pero dijo otra cosa-Esto se esta convirtiendo en el tema de dos conocidos que actúan como dos extraños.

-¿Cercanos como extraños?-Kate amaba a esa banda, estaba seguro de que ella entendería a lo que me refería.

-¿Esto es lo más cerca que vamos a estar?-siguió mi juego.

-Siento que no he visto tu cara en años-esa frase la admitía.

-Parece que tenemos una nueva canción-rió divertida-Bien, también me gusta esta.

Mordí mi labio y la mire, Kate, necesitaba a Kate.

-Austin-vamos Kate, se lo que quieres decir-Debo irme-suspiro-Mañana debo entregar un trabajo y aún no lo termino, hablaremos cuando tenga tiempo.

Y colgó, así de

simple.

No había hablado con ella desde ese día, mis mensajes habían sido contestados con monosílabos y mis llamadas ignoradas, al parecer Kate se estaba olvidando de mi y lo único que yo podía hacer era recordarla, como el idiota que era.

Pero recordando nuestros momentos me hacían darme cuenta de algo, siempre creí que estaba con Kate por necesidad, la necesitaba para no ser un idiota, pero no, yo estaba con Kate porque me agradaba y se sentía bien.

Al principio la necesitaba, pero después, se sentía más como costumbre, me acostumbraba a sus llamadas a las 4 de la mañana, diciendo que fuera por ella a una fiesta o que la ayudará a deshacerse de alguien.

Había sido su hombro para llorar cuando su madre y su padre se pasaban de la línea, mi casa había estado siempre a su disposición, mi ropa era de ella, yo era de ella.

Y eso apestaba, era propiedad de Kate y no me molestaba, ella era mía y lo sabía.

Siempre la trataba mal, pero no quería seguir escuchando lo que siempre decía cuando hablábamos "Te quiero Austin, hablamos mañana" ahora ya ni eso ahora era "Adiós Austin, hablaremos cuando termine con esto" Kate ya no era mi Kate, pero yo seguía siendo suyo y eso dolía como el infierno.

Podía decirse, que la necesidad se había convertido en cariño y sí, yo quería a Kate.

Me había enamorado de mi mejor amiga, que cliché.

Y ahora que sabía que estaba enamorado de mi mejor amiga no estaba dispuesto a ser el idiota popular más, iría por Kate.

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Bueno, antes que nada quería darle las gracias por leer esta historia y lamento que terminará de una manera triste, pero no se preocupen porque habrá segunda parte de la historia.

Se llamará "Hey there kate" porque "Hey There Delilah" es como la canción de Kate y Austin, así que esa es una razón y la podrán encontrar en mi perfil.

Muchas gracias por apoyarme con esta historia y hacerla #422 en Novela Juvenil, espero que sigan conmigo en mis futuros proyectos y también que se queden con la historia.

Nuevamente, muchas gracias por leer, votar y comentar y si quieren alguna dedicación en algún capitulo, háganmelo saber. Aquí termina Mr. & Ms. Popular. MUCHAS GRACIAS XX.

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NOTA

Bueno, hola gente, no se como decir esto sinceramente pero lo diré

Está historia ha sido una de mis favoritas de escribir y ame la idea, pero ahora que vuelvo a leerla me doy cuenta de que no es exactamente lo que quería, así que estaré editando la historia y puede que cambie un poco la manera en la que la historia se desarrolla.

Tampoco quiero borrar la historia pero quiero darle más estructura y forma porque he notado que algunas cosas pasan de forma muy random o parece que hay saltos en el tiempo. Así que tengan paciencia en lo que arreglo esta historia y prometo que tendrá más sentido.

Gracias si van a leer de nuevo xx.