Silencio

Silencio

by ThaliaBetralet

Maya Evans aparenta ser normal, pero la palabra normal se queda corta junto a ella y a su hermana Mara. Las dos empiezan de nuevo en Twin falls, luego de un tragico accidente que cambia todo... otra vez. Ella evita a toda costa fijarse en alguien y levanta muro tras muro para guardar sus secretos. Pero llega Dan, que rompe con todos sus planes...

-Eres un imbécil.

-Presumida.

-Idiota.

-Histérica.

-Estúpido. 

-Bambi.

No lo soporto más. Salgo del auto y cierro con un puertazo. Que se vaya al diablo Dan y su estúpido apodo. Entró a la casa hechando humo y suelto un grito de frustración.

20 de Junio - 22 de Julio 2014

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Capítulo 1

Hace 48 horas mi vida cambió, otra vez...

Mi nombre es Maya Evans, tengo 18 años, tengo una hermana gemela y su nombre es Mara. Somos casi iguales excepto por nuestro cabello y ojos... Los ojos de Mara eran casi verdes y los míos eran de un café color miel. Mi cabello es más ondulado y el de ella es lacio.

Mara se encuentra manejando, mientras que yo destrozo nuestros celulares. Podrían rastrear los y no sería nada bueno. Cuando termino, bajo la ventanilla y los arrojo al bosque. Dos minutos después el letrero de "Bienvenidos a Twin" aparece frente a nosotras. Eran las 3:25 am, llevábamos conduciendo cuatro horas desde Salem, Oregon. Mara siguió conduciendo y 15 minutos después estábamos frente a una bonita casa color naranja con blanco. La casa nos las dio un tío y agradezco todo lo que a hecho por nosotras.

-La casa tiene pocos muebles.

Anunció Mara y apagó el auto. Salimos y tomamos nuestras diminutas maletas que consistían en dos mudas de ropa y de zapatos. Tendríamos que comprar ropa. Llegamos a la puerta hecha de madera y abrimos. Cuando entramos solté un suspiro. Al fin a salvo...por ahora. Encendimos las luces y era cierto, nada de muebles, y totalmente en blanco. A lo ultimo de la estancia había unas escaleras de caoba, a la izquierda estaba la sala, a la derecha el comedor con otra puerta. Subimos las escaleras y nos separamos, Mara tomó el pasillo de la izquierda y yo el de la derecha. La casa tenía dos habitaciones y tres baños.

Abrí la puerta y encendí la luz... Lo primero que vi fue la diminuta cama, una mesita de noche y una lámpara. Era deprimente

ver la habitación fría. Suspire nuevamente, camine y coloque la maleta junto a la mesita de noche. Me desnude y me acurruque en la pequeña cama. Cerré los ojos y me deje llevar por el sueño.

Todo era silencio. Solo escuchaba mi respiración entre cortada y los latidos de mi corazón. El silencio fue cortado por crujidos, eran crujidos de huesos y susurros. Me tape la boca y reprimí un grito. Saque la cabeza de mi escondite y me encontré con una carnicería de cuerpos...

Desperté de golpe, estaba sudando y tenía el corazón a mil por hora. Las pesadillas no paraban y siempre estarían en mis sueños. Mire la hora... Apenas dormí una hora y media. Me seque el sudor y clave los ojos en el techo blanco de la habitación. En unas horas tendría que ir a la universidad y necesitaba fuerzas para eso. Era septiembre, primero de septiembre y las clases comenzaron hace dos semanas... Con lo sucedido dejamos la otra universidad y venimos a Orégon. Deje que mi respiración se tranquilizara y cerré de nuevo los ojos. Mañana sería un día muy largooooo y necesitaba dormir. Un minuto después ya me había dormido otra vez.

Cuando desperté estaba lloviendo a cántaros y había mucho frío. Mire la hora en mi reloj y descubrí que teníamos una hora para asistir a clases. Estire mis extremidades y gruñí cuando mis pies golpearon los tubos de la cama. Me levante de la cama bostezando y talle mis ojos. Tome mi solitaria almohada y me dirigí a la habitación de Mara. Abrí y descubrí al monstruo desparramada en una colchón. Levante la almohada y la arroje con mucha fuerza a su cara.

Le di.

-Arriba. Tenemos clases y tienes una hora para arreglarte.

Mara gruño, pero se levantó y se fue al baño. Salí de su habitación y me fui a la mía a arreglarme. Cuarenta minutos después me estaba mirando en el espejo del baño. Otra vez. Mi atuendo consistía en una sudadera azul, mi gorro blanco, mis converses blancos y unos pantalones ajustados. Todo estaba bien, excepto mi cara. 

Tenía pequeños rasguños, tenía un corte profundo en una de mis cejas y un moretón en la frente junto al corte de la ceja. Perfecto. Me acomode el cabello a modo que me cubriera el corte y el hermoso moretón. Baje las escaleras y tome las llaves de la casa. Mara estaba junto a la puerta esperándome, sostenía nuestras mochilas y las llaves del auto. Tome mi mochila y nos fuimos al auto.

Mara conducía, ya que yo estaba en pocas condiciones para hacerlo. Todo el trayecto fue total silencio y en diez minutos llegamos. Al llegar Mara me toma de las manos y me hace verla a los ojos.

-No te metas en ningún maldito problema -dice en tono serio.

-Yo no me meto en problemas -tal vez si.

Mara levanta una ceja y puso su cara de "te conozco". Ok, ok, tal vez si me meta en problemas.

-Ok, ok. No haré nada estúpido hoy... Lo prometo.

No puedo creer que le prometí eso. Pero tendré que cumplir mi palabra. Genial.

Le sonreí un poco y ella asiente. Pongo los ojos en blanco y salgo del auto corriendo para no mojarme. Cuando entró Mara va con una secretaria, hablan y ella regresa. Me entrega un horario con una estúpida sonrisa en su rostro. Miro el papel y veo porque su sonrisa.

Historia . Odio Historia y ella le encanta.

Cuando entramos todos nos observan. Esto no lo tenía planeado. Mara se sienta junto a una rubia y yo me voy junto a una pelirroja. Cuando me siento la pelirroja me sonríe y veo sus preciosos ojos azul cielo. Ella tiende la mano.

-Kimber, dime Kim.

Le estrecho la mano y le sonrió un poco.

-Maya, es un placer.

Ella me mira y luego a Mara. Segundos después su rostro se ilumina.

-Gemelas -dice asombrada y yo asiento-. Y además son nuevas en la ciudad.

-Así es y dime Kim... ¿Aquí hay chicos guapos?

Cambio de tema y Kim se pone a hablarme de los chicos de aquí y blah, blah, blah...

Me habla de chicos, un lago, un centro comercial y un cine de esos que van los autos. También que la universidad tiene un equipo de fútbol americano, unas rubias oxigenadas...que según Kim son muy zorras y bueno más chicos guapos. Kim me habla de Amy, la rubia que está sentada junto a Mara y al parecer es buena amiga de Kim. Cuando terminamos de hablar la clase término y me separe de las chicas. Entre en mi siguiente clase y me fui hasta el último lugar.

La estúpida clase no comenzaba aún, así que comencé a garabatear un plan para hoy en la tarde.

1. Comprar muebles 2. Ropa 3. Comida 4. Comprar una cámara de fotografías.

Sentí que alguien me miraba demasiado y al levantar la mirada me encontré con un azul eléctrico. Unos ojos azules hipnotizan tes me miraban fijamente, me sentí atraída por esos preciosos ojos azules y desee tener mi cámara para capturarlos. Mire mejor al dueño de los ojos

y era muy atractivo. Cabello negro azabache, una cejas gruesas y bien marcadas, unas pestañas largas y rizadas. Era todo negro, literalmente todo. Sus rasgos eran bien marcados, tenía unos labios perfectos y rosados. Me sentí estúpida por mirarlo tanto tiempo y comencé a sonrojarme. Me pegue cachetadas mentalmente y aparte la mirada de su rostro perfecto. ¿Era en serio? Estaba hipnotizada por esos ojos eléctricos.

Luego de una incómoda hora, la clase término y me apresure a salir. Me sentía como una tonta por ver tanto a aquel chico.

Estaba doblando en una esquina cuando choque con algo. O más bien con alguien. Solté un grito ahogado cuando caí al piso. Genial. Estaba apuntó de lanzar le unas buenas palabrotas a la persona con la que choque, pero al levantar la mirada me encontré con unos ojos verdes color esmeralda. Un chico. Era de tez blanca, nariz un poco respingona, cabello rubio y unas pestañas rizadas. Realmente es atractivo. Me tendió una mano y la acepte. No le costó mucho trabajo levantarme. Era alto y aparentemente fuerte. Yo no era baja de estatura pero el era medio palmo más alto que yo. 

-Lo siento -dijo arrugando un poco la frente-. Soy Logan.

-Maya -dije avergonzada.

Me quedé mirando sus ojos de un verde hermoso. Era oficial...esta universidad tenía chicos guapos.

-Eh... Bueno, fue un placer -me apresure a decir.

-Hasta luego Maya -dijo Logan.

Antes que él agregará algo más me apresure a caminar a la siguiente clase. Eso fue raro...y muy, muy raro y vergonzoso.

Al entrar inspeccione los lugares y vi a la amiga

de Kim. Me fui a sentar junto a ella y le sonreí un poco.

-Amy ¿verdad? -pregunto aún sonriendo.

-Sí, soy yo y tu eres ¿Mara? -pregunta frunciendo el ceño.

-Soy Maya.

Amy sonríe y comenzamos hablar sobre cosas comunes cuando dos personas se conocen. Amy es relajada y sencilla. Es atractiva, con su cabello rubio y ojos verde menta... Kim habla sin parar y es un poco distraída. Pero también es atractiva. Las dos me agradan, creo que podremos ser buenas amigas y todo estará bien mientras no sepan nada del pasado. Amy juraba que yo era de Arizona, pero le dije que soy de California y es mentira..en parte es mentira y verdad a la vez.

-¿Qué tienes planeado para hoy? -pregunto Amy de pronto.

Pienso un momento. Tenía planeado comprar unas cosas para la casa y cosas personales.

-Tenía planeado ir de compras, pero no tengo ni idea donde comprar lo que necesito -digo con una mueca.

-Deja que te lleve yo ¿te parece? -asiento y ella sonríe-. Deberíamos ir las cuatro y así conocen tu y Mara.

Al terminar la clase Amy yo nos vamos al café de la universidad. Amy y las demás habían quedado de encontrarse allí mientras que yo era observada por el chico de ojos hipnotizan tes. Cuando entramos lo que me llama la atención entre todos es el cabello de Kim. Creo que me escucho por que inmediatamente agitó sus brazos como las hélices de un helicóptero. Fuimos dónde Kim y Mara tomaban un batido de fresa. Cuando nos sentamos un chico con anteojos (que por cierto también era guapo) nos dijo los especiales.

-Yo tomaré un capuchino -anuncio Amy.

De todo solo me interesaban

dos en especial.

-Yo quiero el pai de frutas y un batido de chocolate.

El chico asiente y sale disparado hacia la barra. Cuando miro a Mara está pone los ojos en blanco. Sabe que eso es mi desayuno favorito. Las chicas hablan sobre lo de hoy en la tarde y yo suspiro. Sería un día muuuy largo para ser exactos. El chico vuelve aparecer y deja nuestro pedido.

-Mike es lindo -dice Kim.

Amy pone los ojos en blanco y Kim le saca la lengua.

-Kim está enamorada de Mike y él de ella...pero ninguno de los dos se atreve a dar el siguiente paso -informa Amy.

Mara y yo nos miramos y nos echamos a reír. Eso no me lo esperaba de Kim y que Amy lo dijera era más gracioso. Al terminar nuestro desayuno nos vamos a las siguientes clases y cuando me doy cuenta ya terminan. Mara aparece junto a la puerta y parece furiosa. Cuando llegó noto que realmente está hecha una furia.

-Tengo que quedarme hasta tarde y necesitare el auto.

¿Tiene que quedarse? Y para colmo necesita el auto y esta lloviendo allá afuera. Esta loca.

-Por favor, te lo recompensare y en verdad no sabes cuanto odio tener que quedarme por un estúpido trabajo.

Ella sabe que yo me se cuidar sola, pero en mi estado casi no puedo hacer nada y ni correr puedo hacerlo bien. Suspiro vencida y ella me abraza. Me besa en la frente y me da las llaves de casa.

Cuando salgo el cielo está negro y a dejado de llover. Gruño y comienzo a caminar. La casa queda a diez minutos en auto y caminando creo que el triple... Camine casi por cinco minutos cuando comenzó a llover. Maldita sea. Trote hasta una parada de autobuses y espere a que dejará de llover un poco. Me estaba congelando, temblaba y los dientes me titiritaban. Mi pelo se me pegaba a la frente y a la nuca. El maldito gorro lo tenía también empapado y ni hablar de mis zapatos...Unos faros de un auto se acercaban y un escalofrío me recorrió el cuerpo.

Un Mini Cooper negro se estacionó frente a mi. Se me corto la respiración y mi corazón se disparo. La ventanilla bajo y lo primero que vi fue esos ojos hipnotizantes..

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Capítulo 2

Mi corazón latía a mil por hora... El estaba justo enfrente de mi y me miraba fijamente. Otra vez. Sus ojos eléctricos brillaban y me inspeccionaban. En ese preciso momento me di cuenta que estaba empapada de agua y el estaba seco dentro de su auto. Cuando hablo me sentí atrapada por su seductora voz. Su voz era gruesa y bastante masculina...y también bastante sexy.

-Te llevo.

Sonó más a una orden que a una pregunta. Analice mi situación: estaba empapada, tenía frío y me faltaba al menos quince minutos para llegar a mi casa. Vi los contra y me di cuenta que ni su nombre sabía.

-Vas a subir ¿si o no? -pregunto irritado.

¿Dejar que te lleve un desconocido o seguir mojándote con una pierna de poca ayuda? Suspire y abrí la puerta del pasajero. Cuando cerré la puerta el auto arrancó y la música comenzó a sonar. Creo que el misterioso chico noto que temblaba, ya que subió más la calefacción y bajo un poco la música. Apenas me di cuenta del aroma que desprendía el auto... Menta, humedad y un leve toque de vainilla. Lo mire un segundo y vi como iba vestido. Pantalones oscuros, camisa blanca, unas botas negras y chaqueta de cuero. Era un espécimen muy masculino y lo tenía justo alado de mi.

-¿Cual es tu nombre? -susurre.

No quería que notará mis nervios. Estaba en el auto de un extraño y no sabía dónde me llevaba.

-Tu primero -dijo en tono suave.

-Maya.

No puedo creer que le haya dicho mi nombre cuando yo le pregunté primero. El asiente y clava la vista en la carretera. ¿Dónde me lleva? Por que este camino no lo recuerdo.

-¿No

me dirás el tuyo? -pregunte, mientras miraba por la ventanilla.

-Quiero que sea un misterio.

Me volteo a verlo y el sigue mirando al frente. ¿Le gusta el misterio? No le contesto a eso y mejor pregunto lo que más me preocupa.

-¿Dónde me llevas? -dije apenas audible.

El volteo a verme por uno segundo y vuelve a mirar a la calle.

-Se dónde vives -dice y yo levantó una ceja-. Uno, vivo a unas cuantas calles de tu casa. Dos, te vi cuando bajabas de un civic gris y lo vi también cuando iba a clase. Tres, eres nueva en el pueblo y las noticias vuelan rápido.

Me quedé atónita. Sabe donde vivo, vive a una cuadra de mi casa y me a visto antes. Yo jamás lo vi, claro, hasta que en esta mañana me estudiaba con la mirada. Apenas habían transcurrido cinco minutos desde que me subí en su auto y faltaban otros cinco para llegar a mi casa. 

-¿Qué te trajo a Twin? -pregunta de pronto el señor misterio.

-Quiero que sea un misterio -respondo con la misma frase que él.

El sonríe un poco, pero no muestra sus dientes. Suspiro y posó de nuevo la vista en las casas que pasamos. Solo faltan dos cuadras. Lo miro de nuevo y me siento atraída por este señor misterio. Vuelve a mirarme y sonríe levemente.

-Bueno será un placer descubrir ese misterio -dice y me guiña un ojo.

¿El acaba de...? Lo hizo. Me ruborizo un poco y clavo la visita al frente. La casa esta justo al frente y antes que le diga algo...el frena y quita el seguro del auto. ¿En que momento le puso seguro? Ya no importa. Vuelvo a mirarlo y lo descubro viéndome. Le sonrió

un poco y pongo la mano en la cerradura.

-Gracias por traerme...creo -digo un poco confundida.

Señor misterio asiente y me toma la mano que tenía en el regazo. Se la lleva a los labios y la besa. Siento las mejillas arder.

-Buenas noches, chica misterio -dice en tono seductor.

Coloca de nuevo mi mano dónde estaba y asiento. No sé que decirle. Abro la puerta y salgo disparada a la entrada de la casa. Cuando llegó, volteo a ver al señor misterio...pero el ya se había ido. Abro la puerta y entró a la casa, aún se ve deprimente sin nada dentro y al parecer tendría que ir con las chicas a comprar. Suspiro y subo a mi habitación a cambiarme. Cuando ya estaba seca me acosté a dormir un poco en lo que Mara llegaba. Cuando me acosté...caí rendida y me deje llevar por el sueño. Soñé con un azul eléctrico y mucho negro...

-¡Ya llegue! 

Despierto de golpe al escuchar el grito del monstruo. Miro la hora y es aún temprano. Bajo las escaleras y me encuentro con una Mara sonriente. 

-Amy y Kim vendrán en cinco minutos.

Asiento y vuelvo a subir a mi habitación. Tengo que peinarme un poco y ponerme unos zapatos. Llevaba puesto un suéter morado, pantalones y mis zapatos negros. Me trence el cabello y trate de cubrir el moretón. Cuando estaba bajando las escaleras se escucharon risas. Ya habían llegado Kim y Amy. Las dos iban bien abrigadas, Amy tenía el pelo sujetado en una cola de caballo y Kim en un moño alto con unos mechones sueltos.

-Muy bien, es hora de irnos -dije al comenzar a caminar hacia la puerta.

Nos fuimos en la

camioneta Dodge de Kim, ya que algunas cosas no cabrían en el auto. El centro comercial estaba a unos veinte minutos. Cuando llegamos inmediatamente nos fuimos a una departamento de muebles.

Decidí que los muebles de mi habitación serían hechos de madera, la madera era de un tono claro y tendría un espejo de cuerpo completo de estilo antiguo. Unas lámparas de colores neutros, mis sabanas serían blancas y bueno tomaría unas fotografías y las pondría en diferentes secciones de la habitación. Mara...bueno ella fue más moderna que yo y eligió bien sus cosas.

La cocina decidimos hacerla moderna y en la sala elegimos colores neutros. Me gustaba la combinación que Mara estaba haciendo un excelente trabajo y daba gracias a las Kim y Amy por ayudarnos a escoger. Cuando terminamos entregamos la tarjeta de crédito... El dinero nunca nos preocupaba a nosotras, pero tampoco lo derrochábamos como locas y sólo gastábamos en lo necesario. Nos informaron que las cosas llegarían hoy en la noche y nos ayudarían a organizar todo.

Una hora después nos encontrábamos saliendo de la tercera tienda de ropa. Ya tenía suficiente ropa como para llenar por completo mi armario nuevo y sólo me hacía falta mi cámara. Pero ni hablar, estaba muy cansada como para entrar en otra estúpida tienda. Regresamos a la casa y una hora después las cosas empezaron a llegar... Amy y Kim organizaron la parte de abajo, Mara y yo la de las habitaciones. Cuando terminamos pedimos pizza y luego las chicas se fueron.

-Tengo un regalo para ti -dijo Mara y salió hacia la cocina.

Fruncí el ceño

y deje barrer. Mara regreso con una caja color negra con un moño azul entre las manos. Me dio el regalo y me sonrió de oreja a oreja. Rompí el envoltorio y solté un grito de alegría.

-¡Una cámara!

Grite y Mara asintió. Era una cámara profesional y de buena calidad. Deje la cámara en un sillón y me lance a abrazar a Mara. Estaba tan feliz que me diera lo que tanto quería. Parecía una idiota sonriente. 

-Solo prométeme que tomarás unas buenas fotos y las pondrás por toda la casa.

Yo asentí encantada de hacerlo. Lástima que ya era de noche y no podría tomar fotografías. 

Cuando terminamos con todo nos fuimos a nuestras habitaciones y pusimos seguro a las puertas. Cuando entre, mi habitación reflejaba mi personalidad y me daba paz. Los colores que elegí eran azul, blanco y café... Los colores que me daban paz a mi y aún necesitaba comprar los libros que tenía en mi antigua casa.

Deje la cámara en mi tocador, tome una pijama y me acosté en la cama. Estaba cansada de tantas cosas por hoy y necesitaba dormir de verdad.

Me desperté pesadamente cuando la alarma empezó a pitar. No soñé nada, eso es nuevo y maravillosamente bueno. Hoy aparentemente estaba soleado y yo atrape un resfriado de ayer en la tarde. Media hora después estaba bajando las escaleras. Mara estaba preparando el desayuno y olía maravillosamente bien. Cuando me siento en la mesa, Mara me da un omelett y té de limón. Desayunamos en silencio, terminamos y nos fuimos a clases. 

-¿Quien te trajo? -pregunta Mara.

-Un chico.

-Y ese chico se llama...

-No sé su nombre -dije despreocupada.

Recordar

al señor misterio me hacía sonreír. Mara me miró confundida y yo puse los ojos en blanco.

-Es de la universidad, me lo encontré y se ofreció llevarme a casa... Ya que estaba lloviendo y me faltaba mucho por caminar -dije molesta.

Por culpa de este monstruo atrape un resfriado y aparentemente tenía un nuevo amigo. Creo. Pero al recordar sus ojos me sentía atrapada.

-Lo siento, te preparare sopa al regresar y...

-¿Y? -levantó una ceja y la miro fijamente.

-Te preparó pizza...

-Ok, te perdono...pero quiero esa pizza -sonrió y miro al frente.

Cuando llegamos a la universidad Mara se va y yo me voy a biología. Aún no tenía claro que estudiar y tenía tiempo para decidir. Cuando entre a la clase todo era tranquilo y total silencio. Me senté junto a un chico rubio que se tapaba la cara con un libro y cuando bajo el libro me sorprendí al ver de quien se trataba. Logan me sonrió y vaya que tenía una sonrisa linda. Sacó una revista de deportes que estaba dentro del libro, tenía un par de garabatos anotados en las páginas.

-Hola.

-Hola -respondí y mire el libro-. ¿Lees?

-No. Yo no...eh -se tapó la cara con una mano y negó con la cabeza-. Estaba viendo nuevas prácticas para el equipo.

-¿Equipo?

-El de fútbol y...bueno soy el capitán -dijo orgulloso.

-Vaya... ¿Y son buenos? -levante una ceja y clave los ojos en los suyos.

-Bueno... -se rasco la nuca avergonzado-. Somos pésimos.

No puede evitarlo y comencé a reír. Logan sonrió y parecía divertido. Eran pésimos...había confirmado

el. Miro mejor el libro y se me ilumina el rostro.

-Romeo y Julieta.

Logan asiente y me da el libro. Comienzo a ojearlo y mis ojos se pierden en el libro. Noto que Logan sonríe y volteo a verlo.

-¿Te gusta? -pregunta y yo asiento-. Qué bueno que te guste, porque lo tenemos que leer para un proyecto.

Sonrió y vuelvo a mirar el libro. Las obras de William Shakespeare me encantaban y más la de Romeo y Julieta. En lo que resta de la clase Logan me pone al corriente de todos los trabajos y me doy cuenta que son demasiados. Al terminar la clase Logan me acompaña a la siguiente clase. Estábamos llegando cuando me tomo del brazo y me hizo parar.

-Oye... -miro sus zapatos y puso las manos en sus bolsillos-. Me preguntaba si querías ir a mi partido este jueves.

-Sí, por que no. ¿Puedo llevar a mi hermana?

-Sí, el partido es a las ocho. Luego hay una fiesta en la mansión abandona del lago -dice.

Parece nervioso. ¿Una fiesta? Pero el día siguiente tenemos clases ¿No? Miro a Logan confundída y el sonríe.

-Los viernes tenemos los días libres.

Ah con razón la fiesta el jueves. No tenía ni idea de eso. De acuerdo iremos y tendré que convencer a Mara. Pan comido. Le digo a Logan que ahí estaré y el se va a su clase. La clase que tengo es francés y el profesor tiene prohibido hablar en su clase...así que pasó sus dos horas en silencio. Al salir me voy al café y me encuentro con Amy. Veo su melena rubia y alado de ella hay un chico de cabello castaño oscuro. Cuando me acercó los dos me sonríen y me doy cuenta que son hermanos. 

-Maya,

te presento a Zack y Zack te presento a Maya.

Lo saludo con la mano y el me devuelve el gesto. Tienen los mismos ojos y se parecen mucho. Zack nos invita al juego del jueves y a la fiesta. Amy me dice que Zack es soltero y que no tiene a nadie en la mente. Eso me dio una idea y se la cuento a Amy... A ella le encanta la idea y nos ponemos manos a la obra. Las clases terminan rápido y me voy al estacionamiento a esperar a Mara. 

Mientras esperaba, una camioneta muy voluminosa apareció frente a mi. El conductor bajo los cristales y pude ver de quien se trataba.

-Logan -digo con una sonrisa.

-Hola de nuevo ¿te llevo? 

-Eh...no gracias, estoy esperando a mi hermana.

Logan se despide con la mano y se va. ¿Quien será el papá de Logan? Porque bueno, su camioneta no es nada barata. Mara llega y nos vamos a casa...

Jueves. Hoy era el partido y la fiesta en la casa del lago. En los días anteriores me la pase sumida en mis tareas y trabajos. Aún no encontraba una librería, ya que el gran centro comercial del pueblo solo tenía 10 tiendas y no tenían un puesto para los libros. Estupendo. Tendré que buscar una biblioteca. 

Los últimos días no me encontré con Logan y señor misterio... Me encontraba en la clase de Cálculo y nos estaban asignando tutores de estudio. Llegue tarde a clase y al parecer aún no me elegían. Cuándo tome asiento la puerta se abrió y aparecieron esos ojos eléctricos. El chico hablo con el maestro y me señaló con la barbilla. El maestro asintió y anotó algo en sus papeles. ¿De que rayos estaban hablando? No lo sé,

pero señor misterio se sentó a mi lado.

-Soy tu asesor.

Anuncio y me le quede viendo. ¿Estaba bromeando verdad? Mierda. Es en serio.

-¿Eres bueno en cálculo?

-Tal vez -hizo una pausa y me miro de reojo-. No sabía que fueras pésima en la materia.

Pongo los ojos en blanco y le lanzó a una mirada asesina. El sonríe y por fin veo su sonrisa...es perfecta. 

-¿Iras a la fiesta de esta noche? -pregunta en tono despreocupado.

-Sí ¿y tu? -levante una ceja y lo miro fijamente.

Él parece pensarlo y luego asiente. Lo veré hoy en la noche y también a Logan... ¿Por que demonios me emocionaba verlos de nuevo? No conocía a ninguno de los dos y no se porque me pasaba esto. No estaba enamorada, eso era definitivo. Mi nuevo asesor se quedó en silencio y analizó los problemas... En cinco minutos ya había resuelto lo que a mi me llevaría toda la hora. Espere a que dijera algo sobre eso de asesorarme...pero cuando terminó la clase se fue y ni siquiera me volvió a dirigir la palabra cuando nos volvimos a encontrar en la siguiente clase... 

Iba sumida estudiando Literatura, cuando choque con alguien y la persona soltó un chillido... Mire bien a la persona con la que choque y lo primero que vi fue una rubia muy enojada...

-Mira lo que has hecho estúpida.

La rubia estaba roja de rabia, no se porque se enojo tanto si tan solo chocamos y...tire su bebida en la blusa. Demonios. Veo mejor a la rubia... Tiene una ojos grises, también tiene el californiano y bueno es muy linda. Una Barbie humana en pocas palabras.

-Disculpa, en verdad lo siento...no te vi.

Trate de disculparme, pero la Barbie humana levantó la mano y estaba preparada para darme una cachetada.

Cerré los ojos y las manos en puños y respire hondo. El golpe sería rápido y doloroso. Escuche de nuevo un chillido y abrí los ojos. Una mano estaba alrededor de la muñeca de la Barbie humana y cuando levante la vista me encontré con su mirada fría...

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Capítulo 3

Sus ojos azules me miraban y se me corto la respiración. El había evitado que barbie me pegara de cachetadas y se lo agradezco, no quiera problemas con la barbie humana. 

-¿Por que siempre arreglas los problemas con golpes, Amber?

Dijo el señor misterio en tono divertido, pero fulmino a la rubia con sus fríos ojos azules. Barbie resoplo y se zafo del agarre de él. 

-Esto no se quedará así, Dan.

Anuncio molesta y se fue maneando exageradamente las caderas...como si estuviera modelando. Miro al señor misterio y este sigue fulminando a la barbie que se aleja.

-¿Dan?

Pregunto y levantó una ceja. Su nombre es diminutivo de... No lo sé, pero es corto, sencillo y sexy.

-Amber arruinó la sorpresa -Dan pone los ojos en blanco y suspira.

-¿Querías que fuera sorpresa? -pregunto y el asiente-. Lástima ya no lo es... Dan.

Se queda en silencio, creo que piensa algo y pone cara de pocos amigos.

-Como sea...te veo luego nena.

Toma mi mano y la besa. Me arden las mejillas y apartó la mirada. ¡Demonios! ¿Porque hace eso? Esperen un momento...

-¿Nena? Es broma ¿cierto? 

No puedo creer que me llamará nena. Dan sonríe levemente y se va... Me deja ahí plantada como idiota y el se va a su clase. Sacudo la cabeza y comienzo a caminar a hacia el café. Cuando entró, observó todas las mesas y encuentro mi objetivo. Veo una melena negra, una pelirroja y una rubia. Me acuerdo de las chicas super poderosas y suelto una risita. Cuando me siento veo que ya compraron mi desayuno... Sándwich vegetariano y un té de limón.

-Son quince dólares

-dice Mara.

-Son mil dólares y eso es solo de dos meses.

Mara pone los ojos en blanco y yo sonrió campeona. Amy y Kim ríen...Mara termina riéndose también.

-Las veré en la fiesta chicas, no podré ir al partido -dice Amy y suelta un suspiro.

-¿Alex verdad? -pregunta Kim y Amy asiente-. No hay problema.

-¿En donde es la dichosa fiesta? -pregunta Mara.

Le hable de la fiesta el día que Logan me invitó. Ella acepto, pero yo había olvidado el lugar.

-En la mansión abandona que está junto al lago...A unos pocos minutos de aquí -Amy hace una pausa-. Bueno, algunos chicos han metido muebles a la casa y la limpian cada mes.

Eso no lo sabía. Así que está amueblada la dichosa mansión y limpia. Será interesante ir a la fiesta... No está en mis planes emborracharme hasta perder la conciencia, Mara tal vez si lo haga y yo tendré que manejar... 

-¿Quien es Amber? -pregunto, interrumpiendo la conversación.

-Es una perra rubia... Sin ofender Amy -toma la mano de Amy y esta sonríe-. Cada fin de semana se enreda con alguien nuevo.

Kim hace una mueca y Amy pone cara de pocos amigos. Kim señala con la barbilla algo y yo veo de quien se trata... Y ahí está barbie, junto a una morena de muchas curvas y otra rubia con unos pechos enormes.

-Siempre está acompañada de Sasha es la morena y Megan la rubia -dice Amy.

-Barbie y sus secuaces... -digo y las demás ríen-. Intento pegarme, pero la detuvo un chico...

Mara abre los ojos como platos y las otras dos le lanzan una mirada asesina a Barbie. Les digo que no vale

la pena y seguimos desayunando.

Cuando terminamos nos fuimos a clases, tenía examen de Sociales.

Daba gracias a dios, el profesor había faltado y el examen lo tendría el lunes... Sociales nunca fue mi materia favorita. Estaba saliendo de mi última clase cuando me llego un mensaje de Mara en mi nuevo celular.

*Me iré a comer con Amy. Llegare más tarde, las llaves las tiene Kim*

Suspire y me fui al estacionamiento. Kim estaba arrecostada al auto, tenía sus auriculares puestos y al parecer me buscaba entre la multitud. Camine y me parece enfrente de ella. Kim se quitó los auriculares, hurgo en sus bolsillos y sacó las llaves.

-¿Podrías llevarme a casa? -dice y hace un puchero.

-Claro, solo dime donde vives.

Kim sonríe y me da un pequeño codazo.

-Alguien te observa. Detrás de ti.

Me susurra al oído y yo veo disimuladamente de quien se trata. El Mini Cooper negro estaba justo a tras de mi, siento sus ojos y me ruborizo. El auto negro arrancó y desapareció rápidamente. Cuando entramos al auto, Kim comienza a mover las cejas y sonríe de oreja a oreja.

-¿Qué? -frunzo el ceño y meto la llave para arrancar el auto.

-Con que Dan eeeeh -dice y parece divertida.

-¿Qué con el? -pregunto confundída.

-Naaada.

Pongo los ojos en blanco y comenzamos a reír. 

Kim sigue diciendo "más adelante" y ya pasamos mi casa... Las casas están cerca del bosque y las tiendas, escuelas, etcétera. están en el centro del pueblo. Tres cuadras después de pasar mi casa, me señala un camino y entró. Al final del camino

aparece una casa de dos pisos de color naranja con un verde suave, tiene varias ventanas de cristal, una puerta de roble y una chimenea. La casa es preciosa, esta alejada pero se ve curiosamente acogedora y esta rodeada de árboles. Cuando estábamos más cerca... Divise el Mini Cooper negro. Tiene que ser primo de Kim ¿verdad?

-¿Dan es tu primo? -pregunto cuando paro el auto.

Niega con la cabeza. La miro confundída ¿No es su primo? Kim baja y se inclina sobre la ventanilla.

-No, solo es mi estúpido hermano mayor -dice y hace una mueca.

Me quedo boquiabierta. ¿Su hermano? ¿Kim y Dan son hermanos? No se parecen en nada... Kim es pelirroja y Dan tiene el cabello negro. Lo único parecido son sus azules ojos y su color de piel. Kim me despide con la mano y se va caminando a la entrada de la casa. Arrancó el auto y salgo de nuevo a la calle. 

Llegar a la casa no me lleva mucho tiempo y cuando llegó, cierro las puertas con seguro. Dan es hermano de Kim, pero nunca me imagine eso y mucho menos note algún parecido... Saque eso de mi mente y fui hacer los deberes. Dos horas después me fui a dormir, Mara llegó una hora después que yo y preparó la comida. Baje a comer y hable un poco con Mara.

-Dormiré un rato ¿me despertarías para ir al partido? 

Pregunto y Mara termina de masticar.

-Sí, Kim vendrá a las ocho. El partido es a las ocho y media, después nos cambiaremos y iremos a la fiesta -dice en tono calculador.

-Sí, solo despierta me a las siete. No sé que ponerme...

Hurgo mentalmente en mi armario y el único vestido

que me gusto en verdad es un vestido negro corto, sencillo y lindo.

-El vestido negro -dice Mara y recoge los platos.

Pues el negro será. Subo de nuevo a mi habitación y me hecho a dormir otro rato... 

Estaba manejando y era un silencio total dentro del auto. Mara estaba dormida a mi lado, llevábamos media hora conduciendo y era más de media noche. Tenía la música apagada y reinaba el silencio...hasta que fue interrumpiendo por un golpe sordo, seguido de una sacudida y el sonido de llantas derrapando. Un auto trataba de sacarnos del carril... Intente maniobrar, pero los golpes eran seguidos y no paraban. Mara estaba gritando palabrotas en chino y yo estaba al borde de un ataque. Hubo otro golpe y este nos dio fuertemente del lado de Mara. Yo salí disparada hacia el parabrisas y Mara se impactó contra la ventanilla. Estábamos girando y de pronto de nuevo todo fue silencio...

-¡Despierta, Maya!

Mara me estaba moviendo de los hombros y vi que estaba aterrada.

-Fue sólo una pesadilla -dice y me abraza-. Estamos bien.

La abrazo y nos echamos a llorar. Nos quedamos así abrazadas en medio de mi cama, hasta que nos tranquilizamos y nos separamos.

-Kim llegará en media hora -dice Mara y se sorbe la nariz.

Yo asiento y ella sale de mi habitación. Otra pesadilla, nunca pasarían y sería difícil dejar de tenerlas. Me levantó de la cama y me voy a bañar...minutos después salgo y me visto. Elegí una blusa de manga larga rosa, pantalones ajustados y mis converses negros. Me mire al espejo y note que las marcas ya no estaban... Era como si nunca hubiese pasado algo.

Suspiro y bajo las escaleras.

Kim estaba ahí con su melena.... ¿Rubia? Se pinto el cabello de rubio... Esta chica no me deja de sorprender.

-Kim te as pintado el cabello-digo sin poder creérmelo.

-Sí, bueno fue una apuesta...y perdí -se encoge de hombro y sonríe-. Bueno vayámonos ya.

Kim arrastra a Mara hasta la entrada y salen. Cierro bien la entrada de la casa y me subo al auto. Kim y yo cantamos a gritos, mientras que Mara conduce y ríe. Llegamos al campo y estaba a reventar de personas. Hayamos un lugar y nos esperamos a que comenzará.

Una hora después el partido término y sorprendente mente ganamos. Todos estaban eufóricos por a ver ganado y bueno también un poco borrachos. Regresamos a casa y nos cambiamos, Kim había dejado su vestido en nuestra casa y se arreglaría con nosotras. Mara se estaba poniendo los zapatos, Kim se maquillaba y yo me estaba peinando. Mara se puso un vestido azul marino con sus tacones plata, Kim llevaba un vestido azul que resaltaba sus ojos y sus tacones eran negros... Yo por otra parte me puse mi vestido negro sencillo, era liso y me puse unos tacones.

-Toma.

Mara me tiende mi dije en forma de estrella y ella se pone el de una cruz. Los dijes nos lo regalaron nuestros padres cuando cumplimos dieciséis... Eso fue hace mucho mucho tiempo. Pongo el collar y le colocó el suyo a Mara. Cuando veo a Kim ella está sonriendo. Mara nos mira a Kim y Amy, y asiente satisfecha.

-Se ven preciosas así -hace una pausa-. Hay que irnos, quiero emborracharme hasta perder el sentido.

Kim se ríe y yo niego con la cabeza... Eso

significa cero alcohol para mi. Kim se sabe el camino de memoria, así que ella conduce y dice que no me preocupe por quien nos lleve de regreso...que ella se encargará de ello. Suspire derrotada y acepte. Cuando estamos cerca una enorme mansión apareció frente a nosotras, la casa se venía bien cuidada y estaba repleta de universitarios...y más personas que no eran de la universidad. Bajamos y nos adentramos en la casa, Kim nos presentó a varios chicos y yo solo recuerdo a cinco...Emily, Alex, Chris, Jackson y Marc. 

Dos horas después el alcohol que había tomado estaba afectándome un poco. Me termine la bebida y me dirigí a la entrada. Mara y Kim buscaban a Amy, que al parecer encontraron hace media hora y ahora estaban bebiendo en la planta de arriba. Cuando estaba saliendo alguien me dio un vaso hasta el tope de alcohol, camine sin rumbo y termine cerca del lago. El sendero que estaba cerca del lago tenía unos faroles de papel y estaba bien iluminado. Tres minutos después descubrí un pequeño puente.

Me quite los tacones, me senté en el puente y deje que mis pies colgaran. El alcohol se me estaba subiendo a la cabeza y bueno...tal vez era mala idea ir al lago en estado de ebriedad. Suspire y deje que mis pulmones se llenarán de oxígeno. Alguien tocó mi hombro y solté un grito. Tome la mano que me tocó, la retorcí y maniobre para que la persona cayera al lago.

-¡Tranquila! ¡Soy Logan, soy Logan!

Este grito, pero era tarde...Ya lo había tirado al agua. Se levantó y al parecer la borrachera ya le había bajado. 

-No sabía que tu eres especialista en defensa personal.

Dice

mientras sale del agua todo empapado.

-Lo siento en verdad -me disculpe-. Perdona.

Logan sonrió y se abrazo a sí mismo. 

-¿Qué tal si me pides disculpas en una cita? -dice en tono serio.

¿Salir con Logan? No sería mala idea. Asiento y el sonríe. Me tiende una mano fría y yo la acepto.

-Hay que regresar.

Dice y yo asiento. Regresamos y Logan se va a cambiar. Me encuentro con las chicas en el patio trasero y comenzamos a beber mas. Había bebido demasiado y necesitaba hacer pis...así que fui en busca de baños. Abrí varias puertas encontrando a varios universitarios en acción...teniendo sexo. Regrese a la planta baja rendida, no encontré ningún jodido baño y en verdad necesitaba uno. Kim y otra chica aparecieron y me arrastraron hasta donde todos estaban bailando...las ganas esfumaron y me deje llevar.

Una hora más tarde y mucho alcohol me encontraba tambaleándome entre los demás. Necesitaba aire o vomitaría ahí mismo y no sería bonito. Comencé a caminar de nuevo y termine cerca de la orilla del lago. Unos pasos me sobresaltaron y caí al lago. Mierda. No sabía nadar. Comencé a gritar como loca y a pedir ayuda.

-¿Por que no te pones de pie? 

Escuche una voz y lo que dijo. ¿Ponerme de pie? Me puse de pie y el agua me llegaba hasta las rodillas... Me eche a reír, estaba demasiado borracha. Salí del agua tambaleándome y cuando estaba afuera comencé a temblar de frío. Alguien me puso una chaqueta en los hombros y mire de quien se trataba.

Dan se veía preocupado y me mirada de una forma extraña. Sus ojos fueron de mis pies a mi cara. Claro...tomo

su tiempo en cada una de mis partes y me di cuenta que el vestido se me pegaba aún más al cuerpo. Levante las cejas divertida y el puso los ojos en blanco.

-Te llevaré a casa. Estas helada

Dice y me toma del brazo desnudo con delicadeza. Llevarme a casa...esperen un momento.

-¿Y las demás? -frunzo el ceño y me detengo de golpe.

Al determe me zafe de la mano de Dan. Ladeo la cabeza y gruño. Quien sabe que le ocurría.

-Hace quince minutos las deje en mi casa...

¿Las dejó en su casa...? Y recordé todo, Kim era su hermana menor y su casa estaba cerca de aquí. Asentí y comencé a caminar. Caminaba con la gracia de un alce drogado y caí varias veces soltando grandes carcajadas. Dan solo se limitaba a reprimir risas y ayudarme a levantarme. Cuando estábamos a unos metros de llegar de nuevo a la casa, pasamos junto a unos arbustos que tenían trozos de cristales rotos regados en el piso, iba riendo... definitivamente estaba demasiado borracha y en ese momento pierdo el equilibrio, y caigo en los arbustos.

-¡Aaaaayy! -grite de dolor.

-Maldita sea, Maya -dice Dan.

Trato de levantarme pero siento una punzada de dolor. Dan me rodeo con sus brazos y me carga con mucho cuidado. Rodee su cuello con mis brazos largos y delegados. Sentía un líquido en varias partes del cuerpo, el dolor era punzante y estaba gruñendo de dolor. Me retorcí y no le ponía la tarea fácil a Dan. 

Llegó a su auto conmigo en brazos, al parecer no le costó mucho y no se venía cansado por llevarme en brazos. Abrió la puerta del copiloto con dificultad, pero trato de no lastimarme y me acomode con delicadeza en el asiento. Corrió a la puerta del conductor, entró cerrando con un puertazo y arrancó el auto. Mierda. Dolió demasiado, pero no derrame ninguna lágrima...Yo ya tenía experiencia en esto de sufrir heridas y no lloraras por unos pequeños rasguños.

Dan conduce rápido y iba sumido en sus pensamientos. Se veía preocupado y nervioso. En poco tiempo veo la casa de él aparecer en mi campo de visión.

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Capítulo 4

Dan me cargo en brazos, otra vez y me llevo hasta la entrada de la casa. Abrió con mucha facilidad. Me introdujo en la casa y me llevo hacia un pasillo, abrió una puerta, encendió la luz, y descubrí que era el baño. Seguía un poco ebria y seguía sangrado. Me sentó en la taza del baño, hurgo en un cajón y sacó un botiquín.

-Limpiare los cortes -dijo Dan.

Se puso de rodillas frente a mi y comenzó a limpiar las heridas...que no dolían ya. El tomo mi pie con delicadeza y me miro a los ojos. Me di cuenta que aún tenía enterrado el cristal y Dan me pedía permiso con la mirada. Con mucho cuidado lo saco y yo reprimí un grito. Mierda, dolió. Limpio las heridas y me ayudó a levantarme, cuando creí que me llevaría de regreso al auto, me mete en la regadera y deja correr el agua.

Doy un respingo, el agua está helada. Dan me envolvió en una toalla y volvió a cargarme. Subió unas escaleras y me estaba quedando dormida en su pecho. No escuchaba su corazón, pero sentía su respiración en mi hombro y su tacto me produjo un escalofrío. Dejo de subir escaleras y abrió una puerta. 

Estaba casi dormida, no recordaría nada mañana... O no lo sé. Dan me colocó en un sillón y salió de la ¿habitación? No sé ni donde estoy, pero me siento bien aquí y estaba temblando de frío. Mis pies colgaban, mi ropa estaba empapada y mi pelo se me pegaba a la frente. Debía verme hecha un asco. 

Dan volvió a entrar y llevaba en sus manos ropa... Dejo la ropa a un lado de mi y salió de nuevo. Mire la ropa y me di cuenta que era de Kim. Unos shorts azules y una blusa de manga larga

también azul. Me cambie la ropa y seque un poco el cabello. Intente pararme, pero me cosquillaba el pie y me sentía mareada. Me corrijo, lo sucedido me bajo un poco la borrachera...pero no cien por ciento.

Di un paso y me tambalee. Me volví a sentarme de golpe en el sillón y sonríe. Recordar a Dan cargado me me hacía sonreír como idiota y luego recordé mis caídas, y estalle en carcajadas. Dan entró en la habitación, me inspeccionó con esos preciosos ojos azules frunció el ceño. 

-¿Sabiiassss que tienesss unooss preciiossssos ojoss?

Estaba arrastrando las palabras y decía cosas en voz alta. Dan no dijo nada y se acercó a mi lentamente. Me tomo de la cintura, paso unos de mis brazos por sus hombros y volvió a cargarme. Me acostó en una cama y me tapó hasta los hombros. Abrió otra puerta y encendió la luz. Otro baño.

-Eres un aburrido -dije y me cruce de brazos.

-Sí, lo soy.

Me respondió secamente. Se sentó a mi lado en la cama. Tomo unas de mis manos, se las llevo a los labios y la beso. Apretó mi mano y yo hice lo mismo. Sus ojos me miraban fijamente y yo comencé a reír como una loca. Dan dejo mi mano en mi estomago y volvió a mirarme a los ojos. Esta vez sus ojos me penetraban y sonreí.

-¿Porrr quee me mirasss tanto? -pregunte con una risita.

Dan siguió mirando mis ojos y acarició mi mejilla tiernamente.

-¿Qué ocultas? 

Me pregunto y yo lo mire fijamente a los ojos.

-¿Yy quee ocultasss tú, detrásss de essosss preciiososs ojossss...negros? -entrecerré los ojos y los mire de nuevo-. Creo que estoy demasiado

borracha.

Juraría que los acabo de ver negros y no de él color eléctrico que tanto me encantaban. Me encantan mejor dicho. Dan no dice nada, se levanta de la cama y se acerca a la puerta. La puerta estaba cerrada ¿cuando la cerro? La abre, se detiene y me mira por encima de su hombro. 

-Eres demasiado buena para mí.

Dice y cierra la puerta. ¿Demasiado buena? No lo entiendo. Me tapó los ojos con un brazo y trato de conciliar el sueño... Las ganas de vomitar me invaden y voy al baño. Llegó gruñendo por el corte y me arrojó a vomitar dentro de la taza. Mierda, no recordaba lo que se sentía estar tan borracha. Me limpio la boca y me miro en el espejo del baño. Soy un asco, la cara pálida, mis ojos se ven rojos y mi cabello es un desastre. Regreso a la cama y caigo en un profundo sueño.

Alguien toca mi mejilla, recorre mi mandíbula y termina en mi mentón. Me despierto de golpe y miro a todos lados...vacío. Estoy sola en la habitación. Pero que demonios... ¿Dónde demonios estoy? ¿De quien es está habitación? Miro de nuevo el lugar y me levantó un poco de la cama. 

Las sabanas son de un azul marino, las almohadas blancas y la cama de madera oscura. Las paredes son blancas, en una de las paredes hay una pintura del lago con vista de un atardecer, el piso de madera y hay estantes con libros. Hay una ventana de cristal con vista al lago y ahora que miro mejor la habitación... Hay ropa de HOMBRE en una silla cerca de la cama, hay un sillón azul con mi vestido y zapatillas, una mesita de noche, una lámpara y un cuaderno de dibujos sobre la mesita.

Esta

habitación definitivamente es de un chico. ¿Qué pasó anoche? Salgo de la cama y hago una mueca de dolor. Me duele el pie como los mil demonios y maldición que duele. Miro el pie y frunzo el ceño. ¿Por que tengo una venda? Salgo de la habitación y bajo unas escaleras con mucho cuidado. Me encuentro con una Kim sonriente, lleva en las manos un juego de naranja y en la otra su teléfono.

-Anoche sufriste un pequeño accidente...-señala mi pie y yo hago una mueca-. Te cortaste y bueno Dan tuvo que cargarte. Le pedí que te trajera a nuestra casa.

¿Qué Dan que? El me trajo cargando hasta su casa... No recuerdo nada.

-¿Qué pasó exactamente? -pregunte y Kim suelta un suspiro.

-Te caíste encima de unos vidrios rotos, estabas muy borracha y bueno no podías caminar -hace una pausa-. Dan me ayudó a meterte en la regadera y yo te cambie de ropa. Te puse algo mío y... 

Se quedó callada. ¿Qué otra cosa paso? Esto tiene que terminar.

-Suelta lo de una vez, Kim.

Digo y me cruzó de brazos. Mi amiga rueda los ojos y se pone las manos detrás de la espalda. 

-Dormiste en cama de Dan -abrí los ojos como platos y ella se apresuró a seguir-. Pero el durmió en nuestra sala...Mara está en el cuarto de huéspedes.

-¿Porque no recuerdo nada?

-Bueno estabas demasiado ebria y cuando Dan te trajo...te desmallaste.

Trate de recordar la noche anterior, pero nada, tenía la maldita mente en blanco y no recuerdo nada.

-Tengo que salir, en la cocina hay jugo de naranja y analgésicos...Mi casa es tu casa.

Dice y sale disparada hacía la puerta. Eso

fue raro, pero que más da...no aguanto la cabeza. Me tomo un analgésico y un poco de jugo. Tomo un vaso con jugo, analgésicos y boy en busca del monstruo. La habitación de huéspedes está al final del pasillo, en el segundo piso y parece que hay tres puertas más. La Kim, Dan y sus padres.

Abro la puerta y veo al monstruo que parece estar en coma. Le muevo levemente...no despierta.

-Monstruo, despierta -susurro en su oído y ni siquiera se mueve-. ¡Maldita sea, despierta de una vez!

Grito y ella se levanta de golpe. Parece asustada y cuando me ve...me lanza un manotazo. Auch. Tiene la mano pesada y sus golpes en serio que duelen. Le doy las cosas y ella sólo gruñe, se toma las cosas y cuando ve mi pie pone los ojos como platos.

-¡¿Qué carajos te paso?! -grita y me empieza a tocar todo el cuerpo.

Hago una mueca de dolor cuando toca mis brazos y mis piernas. Mierda, me corte y ni siquiera recuerdo los cortes. Tan mal estaba por el alcohol. Mara me fulmina con la mirada, pero se ve preocupada.

-Anoche, tome una borrachera demasiado grande. Caí encima de unos vidrios rotos y bueno me tuvieron que traer cargando -hice una pausa y Mara frunció el ceño-. Dan, me trajo y me quede dormida en su habitación.

-¿Ustedes dos no...?

-NO -grite y Mara soltó una carcajada-. Me desmalle cuando me trajeron aquí.

-Lo que tu digas -dice con sarcasmo.

Pongo los ojos en blanco y me voy a la habitación donde dormí...la habitación de Dan. Entró a buscar mi ropa y vuelvo a salir. ¿Como rayos me desmalle por unos simples cortes? ¡Agh! 

Me pongo de nuevo

el vestido y dejó la ropa de Kim doblada en la cama de Dan. Le aviso a Mara que nos iremos en cinco minutos y bajo las escaleras. Estoy un poco pérdida, pero al final encuentro la entrada y espero a Mara.

Cinco minutos después Mara baja y se planta frente a mí.

-Kim me mando un mensaje diciendo que la veríamos hasta mañana y que espera que te recuperes.

Hace una mueca al decir lo de mi recuperación. Yo asiento y salgo de la casa con zapatillas en mano, Kim me prestó unos de sus zapatos, ya que no podría caminar. con los tacones. Caminamos aproximadamente cinco cuadras o más. La casa de Kim si que estaba lejos. Llegue agotada y subí a bañarme. Cuando terminó de vestirme comienza a llover otra vez, me acuesto en ni cama y me quedo dormida.

Cuando despierto es de noche y a dejado de llover. Me bajo de la cama y froto mis ojos, debí de dormir casi diez horas... Bajo y me encuentro con una nota de Mara diciendo que saldría con Amy. Ok, estaría sola no se cuanto tiempo.

Fui a la cocina, tome una manzana y me derrumbe en el sillón a ver tele. Diez minutos después alguien toca la puerta... Corro a la cocina y tomo un cuchillo. Soy una paranoica, lo sé, pero es tenido muchas experiencias y ninguna es bonita. Tomo el cuchillo por el mango, lo oculto tras mi brazo y abro la puerta lentamente.

Un Logan sonriente aparece en la entrada con una rosa amarilla en la mano ¿Qué hace el aquí? ¿Como sabe donde vivo? Muevo la cabeza y le sonrió.

-¿Qué haces aquí? -pregunto en tono suave.

Logan abre la boca y se ve sorprendido. ¿Y ahora que le pasa? Logan frunce

el ceño y luego sonríe más. Ok, esto es demasiado raro. Levanto una ceja y lo miro fijamente.

-Tan borracha estabas -ríe un poco-. Aceptaste salir conmigo. Anoche, cuando me tiraste al agua.

Mierda. No recuerdo nada, maldito alcohol y maldita mi memoria. Miro a esos ojos esmeralda que parecen bastante divertidos. El desgraciado le divierte que ayer estuve borracha y que ¿lo tire al agua? No recuerdo nada. Pero necesito aire.

-Dame diez minutos -digo y voy hacia las escaleras.

No escucho la puerta cerrarse, así que volteo y veo que Logan sigue afuera.

-Oye...-lo llamo y el voltea-. Puedes pasar. No te violare o algo así.

Logan ríe y entra a la casa. Subo corriendo las escaleras y entró a mi habitación. Abro mi armario de par a par y comienzo a revolotear lo. Tomo un pantalón, una blusa holgada blanca, mis zapatos rosas y mi chaqueta azul. Perfecto. Corro al baño y me comienzo a maquillar, solo me aplicó rimel, y me hago una coleta alta. Me gusta como veo y bajo de dos en dos las escaleras. 

Logan está mirando una fotografía mía y Mara, la tomamos en nuestro viaje a París. Miro a Logan que va bien vestido como siempre y en ese momento suelto un estornudo. Genial. Logan voltea a verme y sonríe.

-Te vez hermosa -dice y yo me ruborizo-. ¿Dónde quieres ir?

-No lo sé, recuerda que soy nueva -digo, mientras jugaba con mis dedos.

¿Por que estaba nerviosa? Es Logan y punto. Logan piensa y asiente, salimos, y yo cierro la casa. Veo la lujosa camioneta de Logan estacionada frente a la casa y el me toma de la mano. Me sonrojo al instante...tiene la

mano helada.

-Tienes la mano helada -digo y el se encoje de hombros.

Logan conduce en silencio hasta un pequeño restaurante. Bajamos y el vuelve a tomarme de la mano. Entramos al restaurante y esta lleno. Casi medio pueblo está aquí, no me sorprende, ya que el pueblo solo tiene tres restantes y unos cuantos locales de comida chatarra. 

Pedimos unos rabioles...me moría de hambre y cuando la comida llegó trate de no verme tan animal al comer.

-¿Qué haces en tu tiempo libre? -pregunto cuando me trago la comida.

-Ejercicio, leo un poco y bueno nado casi todos los días en el lago... ¿Y tu?

-Fotografías, leer y caminar.

Logan levanta las cejas y yo sonrío. Parezco una nerd, pero me encanta hacer eso y ni hablar yo no se nadar. Terminamos de comer y salimos a caminar al pequeño parque de enfrente. 

-¿De dónde eres? -pregunta cuando nos sentamos en una banca.

-Arizona -mentira.

-¿Y tus padres?

-De viaje -mentira.

-¿No viven con ustedes? 

-No, quisimos ser independientes -otra mentira.

-Vaya, suena bien -hace una pausa y toma mi mano-. Me gustaría saber más sobre ti, Maya.

Vaya...Eso no me lo esperaba. Veo esos ojos esmeraldas que brillan. Parece sincero y bueno no me gusta mentir... Pero no diré nada, ninguna palabra sobre mi pasado y eso significa más mentiras.

Le sonrió a Logan y asiento. El me besa la mano y me pongo roja. Posa una mano en mi mejilla y un escalofrío me recorre todo el cuerpo...su tacto es tierno, pero su piel está helada. Logan sonríe y se levanta.

-Vamos, te llevaré a casa -dice, toma mi mano y me levanta.

Logan me lleva a casa y cuando para el auto enfrente de mi casa, la situación se vuelve rara...no quiero besar lo. 

-Adiós -digo y pongo una mano en la cerradura.

-Adiós -dice en tono suave.

Titubeo por un segundo y me acercó a él. Tal vez piense que lo voy a besar y no. Beso su mejilla y bajo de la camioneta. 

Cuando entró a la casa la camioneta se va y yo cierro con seguro. Ya es de costumbre cerrar bien. Subo a mi habitación y me quito la ropa. Quedo en ropa interior, subo a mi cama y me tapó con las sabanas.

Mentir no me gusta y Logan quiere saber más de mi... No queda de otra más que mentir. Pero ¿Como es posible que no recuerde nada de lo que pasó ayer? ¡Agh, que frustrante no recordar nada! Cierro los ojos y me dejo llevar por el sueño.

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Capitulo 5

Despierto lentamente al escuchar unos golpes. Alguien toca en la puerta, debe de ser Mara y sabe que odio despertar temprano en sábado. Gruño y me levantó de la cama. Abro la puerta y alguien se arroja a mis brazos... Amy.

-¡Feliz cumpleaños! -grita en mi oído.

¿Cumpleaños? Yo cumplo dentro de dos semanas. La apartó un poco de mi y frunzo el ceño.

-Mi cumpleaños es dentro de dos semanas, Amy y ¿Quien dijo que cumplía años?

Amy me mira confundída y un segundo después comprende todo. Pone los ojos en blanco y se pega en la frente con la mano. 

-Kim juraba que era hoy tu cumpleaños -parece irritada-. Ya tengo tu regalo y el de Mara...pero se los daré hasta que cumplan.

-No te preocupes, pero me hubieses preguntado a mi -pongo una mano en su hombro-. ¿En serio lo tienes? 

-Sip, no te diré que es y tendrás que esperar.

Hago un puchero y Amy sonríe. Diablos, no me dirá. Amy me espera mientras yo me cambio y aparece Mara. Estaba en ropa interior y la muy idiota no toco.

-Llega temprano para cenar...hoy vienen visitas.

Ya sabía de quienes se trataba. El hermano de Amy, Zack. Kim vendría y no se quién más vendrá. No importa hoy tenía planes para salir toda la tarde.

-Sí, llegare a tiempo y por cierto...iré al lago a tomar fotografías.

-Solo ten cuidado.

-¿Cuando no lo tengo? -digo y cruzó los brazos por encima de mi pecho.

Mara baja la mirada a mi pie, el cual sigue vendado y mejorando. Ayer Logan no lo noto, ya que me puse unos zapatos cerrados con cordones.

-Ok, eso fue un

descuido -digo defendiéndome.

-Sí, un estúpido descuido que te dejo con el pie vendado y hablo en serio...ten cuidado Bicho.

-No te preocupes Monstruo, estaré bien y sólo serán una pocas horas... Tomaré unas cuantas y regresaré.

Mara no parece muy convencida, pero acepta. Desde lo que hemos pasado se preocupa demasiado y soy sincera yo también me preocupo por ella. Solo serán unas fotos y ya. Término de vestirme y bajo para irme con Amy.

Después de irnos fuimos a comer algo. Hablamos sobre cómo nuestro plan salió a la perfección... Nuestro plan era que Zack y Mara se conocieran, funcionó y al parecer se gustaron. El plan lo llevamos acabo en la fiesta, pero como me perdí (sucedió cuando "me caí" según Amy) Hablo con Amy sobre la cena y cosas de la escuela. Y así nos la pasamos unas tres horas. A las cuatro regrese a comer algo y por mi cámara. 

-¡Ya estoy aquí! 

Grite y fui a la cocina. Olía muy bien, el monstruo cocino lasaña y ensalada. Mara bajo y comió conmigo, terminamos de comer, y subí por mi cámara. Me cambie de ropa más ligera, tome la cámara y mi celular. Cuando estaba a punto de salir Mara me paro.

-Te quiero aquí a las seis.

¿Tan temprano? Esa hora es perfecta para las fotografías. Pongo los ojos en blanco y le arrebato las llaves de la mano.

-Sí, tranquila mamá llegare temprano.

-Hablo en serio -si que lo hace-. La última vez dijiste eso y llegaste en la noche.

-Eso fue hace un año -ella levanta una ceja-. Ok, eso pasó hace dos meses. Tranquila, llegare temprano.

Si claro,

temprano. Ella no me cree, pero no discute y me voy. Conduzco hasta la casa abandonada, que está al final de las casas. No creo que a nadie le moleste que deje el auto ahí. Bajo del auto con cámara en mano, aseguró bien las puertas y comienzo a caminar. Me adentre en el bosque, dejando un pequeño rastro para no perderme y comienzo a tomar fotos. 

El paisaje del bosque es espectacular e igual que los animales pequeños que viven en el. Tome fotografías a flores, mariposas, venados y árboles. Me falta el lago. Miro la hora...falta media hora para las seis. Tengo tiempo y sigo caminando. Llegó al lago y veo el atardecer. Es hermoso. No dudo un segundo y comienzo a fotografiarlo; nunca vi un atardecer tan precioso como el que tenía justo enfrente.

Seguí tomando fotos, hasta que algo me llamo la atención o mejor dicho alguien. Había una persona al otro lado del lago, no se si es hombre o mujer...pero parece estar muy relajado. Miro mejor a la persona, es un hombre. Esta sentado en un tronco, al parecer dibuja algo y esta clavado en ello. Su imagen ahí sentado es asombrosa...no resisto y tomo unas fotografías de él en esa pose.

Pasan los minutos y yo sigo tomándole fotos a él. No sé quién demonios es, pero me encanta como se ve y ahora cambia de posición. Tomo otras cinco fotos y el se levanta ¿a donde va? Desaparece detrás de los árboles y lo pierdo de mi campo de visión. Suspiro y miro el cielo...¡Carajo! Miro la hora y son más de las seis. Mara me va a matar. Camino lo más rápido que puedo por el bosque, el pie no ayuda de mucho y esta oscureciendo rápidamente.

Me paro en seco al escuchar a un lobo o coyote aullar. Maldita sea. Empiezo a trotar ¡a la mierda la herida! Comienzo a correr y los aullidos se escuchan más cercanos. Mierda. Corro lo más rápido que puedo por el bosque hasta que veo la casa. Sigo corriendo hasta que llegó al auto, lo abro a la carrera y me aviento dentro. Un escalofrío me recorre la espalda... Eso no es buena señal. 

Arrancó el auto, aceleró y derrapo en la carretera. Estaba pasando por la casa de Kim cuando veo a alguien pienso que lo lleven, cuando me acercó más veo que es Dan y no dudo en parar.

-¿Podrías llevarme? -dice en tono seco.

Yo asiento y el sube al auto. Conduzco en silencio, no quiero hablar. Después de lo que sucedió me faltan las palabras y el aire. El no dice dónde lo deje, así que conduzco hasta mi casa y cuando estábamos a una casa de llegar Dan habla.

-En la siguiente casa.

¿El también va a la dichosa cena? Voy a matar a Mara, primero la hago sufrir y luego la mato. Estacionó el auto en la parte delantera. Hay otros tres autos ¿de quienes son? Kim no tiene auto...mierda. La camioneta de Logan está ahí. Mara date por muerta. No me había dado cuenta que seguía en el auto con Dan, hasta que el rompe el silencio. De nuevo.

-Gracias, bambi -dice divertido.

-¿Bambi?

¿Por que rayos me dice Bambi? 

-Bueno, es que el jueves caminabas con la gracia de Bambi -sonríe de lado

Esa sonrisa es tan sexy, sus ojos eléctricos me miran por completo y me sonrojo ¿Por que me sonrojo? Un momento...¿me dijo bambi?

-Eres un imbécil.

-Presumida.

-Idiota.

-Histérica.

-Estúpido.

-Bambi.

No

lo soporto más. Salgo del auto y cierro con un puertazo. Que se vaya al carajo Dan y su estúpido apodo. Entró a la casa echando humo y suelto un grito de frustración. Miro hacia el comedor y me encuentro con varios ojos... Mara, Kim, Amy, Zack y Mike. Logan no está. 

-Maya ¿que sucede? -pregunta y todos los ojos se ponen en mí.

-Estaré arriba -digo y ahora todos van a ella.

Subo a prisa las escaleras y me voy a mi habitación. Cierro la puerta y me arrojó a la cama. No me había dado cuenta que la cámara la traía colgada del cuello, hasta que siento algo en mi pecho, la quitó de mi cuello y la enciendo. Me pongo a ver las fotos hasta que llegó a la del chico, por que se ve joven y sigo viéndolas por un rato.

Alguien toca la puerta delicadamente. Maldita sea no quiero hablar con Mara.

-Vete, no quiero hablar contigo Mara -digo y hundo la cara en la almohada.

Mara entra y cierra la puerta. Siento que el colchón se hunde a mi lado, el olor a menta y vainilla penetra mis fosas nasales... Eso no huele a chicle como Mara. Levantó la cara de la almohada y veo que Dan está tirado en MI cama alado mío, mirando el techo blanco. Esto es el colmo.

-¡LARGO DE AQUÍ!

Grite y Dan se tapó los oídos. ¿Qué diablos hace este idiota en mi habitación? Me paro de la cama y pongo los brazos en jarras.

-¿Quién demonios te dejo entrar aquí? -pregunto casi gritando.

-Tu doble -dice Dan.

No lo puedo creer. Ahora si se pasó de la raya. Es una hija de su...

-No me importa, no puedes estar aquí.

-Mira -se apoya en sus codos y me mira-. Soy tu asesor y tendré que hablarte, me guste o no.

-Sí, lo sé y no se que tienes contra mí -ahora me cruzó de brazos.

-Simplemente...es complicado -dice casi en un gruñido.

¿Le guste o no? No lo entiende y según el es complicado ¿Qué tiene en contra mío? Yo no le e hecho nada. 

-Sí ya terminaste... ¿Te puedes ir de mi habitación? -le digo en tono irritado.

Se levanta de la cama y va hacia la puerta. Cuando estaba a punto de salir voltea a verme.

-Nos vemos mañana...bambi.

Lo fulmino con la mirada y le arrojó una almohada. Pero fue más rápido que yo y cerró la puerta antes que la almohada lo tocará. Es un idiota, un idiota muy irritante y lindo. Demonios, deja de decir que es lindo. Me a puesto Bambi. La cena...al diablo la cena. Estoy cansada y no quiero pelear con Mara hoy.

Me baño y me pongo mi pijama. Cepillo mi pelo y dientes y me voy a la cama. Mañana es lunes y no quiero verle la cara al imbécil de Dan, solo de recordarlo me pone mal. Cierro los ojos y caigo en coma.

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Capítulo 6

De nuevo estaba lloviendo y ya era lunes. Día de verle la cara a mi amigable asesor ¡Agh! Ayer me la pase durmiendo todo el día y no salí a ningún lado en especial...

Hoy conducía yo, por que bueno, Mara se lastimó la mano haciendo no se que y no podía manejar. Ella no me a querido hablar y me siento un poco culpable.

-Oye en serio disculpa ayer no me sentía bien -miento.

Me sentía perfectamente bien, pero mi humor andaba mal y no quería descargarlo contra los demás. Estaba molesta con Dan y aún lo estoy. Solo un poco.

-Sí, Dan me dijo que te dolía la cabeza y quiso saber como estabas -mira para cualquier lugar menos a mi-. Así que le dije que podía ir a verte.

No le respondo. Ya me imaginaba que ella era la responsable de que Dan estuviera en MI habitación.

-El es bueno, solo que es un idiota de vez en cuando lo es y Kim dijo que tenía problemas con algo -me pone la mano en el hombro-. No te molestes con el, Bicho. Yo fui la que le dijo dónde estaba ti habitación.

-Descuida ¿si? Ya pasó.

Es cierto, hice un gran escándalo y ella no sabía nada. Bambi... Sonrió al recordar el apodo que me puso ese imbécil. Tengo que ser honesta, me gusta el apodo y no suena tan horrible.

Llegamos a la universidad y nos vamos a clases. Cálculo...hora de verlo. Camino lentamente por los pasillos, tratando de tomar mi tiempo y ver con quien me encuentro... Suelto un gruñido cuando llegó a la clase. Respira, solo será una hora y ya. La puerta está abierta y el está ahí y me mira con ¿asco? ¿horror? ¿odio?

-Evans.

Escucho su voz y sonrió. El pone sus manos en mis hombros y me giro

con una sonrisa.

-Logan ¿Qué haces aquí?

El mira a la dirección de Dan... Lo mira con asco y odio ¿ellos se odian? Chasqueo los dedos en la cara de Logan y él reacciona.

-Planeta llamando a Logan-digo en tono divertido y levantó las cejas.

-Así, disculpa -mueve la cabeza y me mira-. Hablamos luego, tengo que...hacer algo.

¿Y a este que bicho le picó? Vio a Dan y fue como si viera a su archi-enemigo. Logan se inclina y besa mi mejilla..

Me quedo petrificada y siento como mis mejillas se ponen como tomates. Logan me sonríe, da media vuelta y se va. Sacudo la cabeza y me voy a mi lugar.

Dan me fulmina con la mirada ¿a este que le pasa? Está bien que no me soporte, pero no es para que siempre sea un idiota conmigo. Pongo los ojos en blanco y miro a Dan. Esta hecho una furia y ahora tiene la mirada perdida en la puerta.

-Jodido idiota -susurra.

Esta loco. Me pongo a escribir los problemas y dejó de ponerle atención a Dan. Lo miro de reojo y lo descubro mirándome. Definitivamente está enojado, solo falta que saque humo como en las caricaturas y le explote la cabeza. Vuelvo a poner mi atención en los problemas...rayos, no entiendo nada y no quiero hablarle a la furia que tengo alado. Miro de nuevo los problemas, ni hablar tendré que hacerlo. Lo miro y frunzo el ceño.

-¿Oye...me podrías explicar? No entiendo nada.

El no dice nada, solo me mira y juguetea con un anillo suyo. Demonios ¿que le pasa? Así sigue toda la clase. Mirándome fijamente y comiéndome con los ojos. Dios, me pone de nervios que me miren tanto.

Termina la clase y tomo mis cosas. Literalmente salí corriendo de la clase para ir a la otra. 

Llevaba la mirada perdida en el piso cuando choque con alguien. Levantó la vista y me encuentro con unos ojos verdes conocidos.

-¿Maya, has visto a Mara? -pregunta Zack.

Le sonrió y niego con la cabeza. El me gusta para que sea novio de Mara...

-Gracias. Adiós.

Hace un gesto con la mano y se va. Di unos cuantos pasos cuando alguien me detuvo. Miro la mano que tengo enganchada al brazo...es grande, dedos largos y conocida. Levantó la mirada y me encuentro con los ojos de Logan.

-¿Qué tienes planeado para esta tarde? -pregunta mirándome a los ojos.

Dios, ya me pone nerviosa que me miren a los ojos y más así como lo hacen ellos.

-No tengo planeado...

-Sí, tenemos planes.

Me interrumpe Dan y me rodea los hombros con un brazo, atrayéndome hacia su cuerpo. El olor a menta y vainilla me invade, es un olor agradable y es el de Dan. Pone un mechón rebelde detrás de mi oreja y al rozarme la oreja, me estremezco. Es una sensación agradable y su tacto es suave.

Miro a Logan que fulmina con la mirada a Dan. Logan me mira a mi y espera una respuesta. ¿Qué respondo? Miro a Dan que tiene cara sería cuando mira fijamente a Logan, baja la mirada hacia mí y al parecer también espera una respuesta. Ir con Logan o con Dan ¿con quien? La mano de Dan me acaricia el brazo y la otra la tiene apretada en un puño...

-Maya, te veré luego. No hay problema -dice Logan.

-Pero... -digo pero es tarde, Logan se había ido ya.

Se fue y parecía molesto.

Demonios, ahora Logan se molesto conmigo y todo por este idiota que me tiene atrapada. Volteo a verlo y levantó una ceja.

-¿Cuales son nuestros planes? -digo remarcando el "nuestro"

-Ya lo veras -dice Dan con cara sería.

No tiene ningún plan, logró que no saliera con Logan y provocó que se molestara. Genial. Trato de zafarme del brazo de Dan, pero es más fuerte que yo y no lo logró.

-Te acompaño -dice y me acaricia de nuevo el brazo.

Un escalofrío me recorre el cuerpo y sólo lo logró con una caricia. Pongo los ojos en blanco y comienzo a caminar pegada al costado de Dan. Tengo Literatura y los pasillos ya están vacíos...Diablos llegó tarde. Sigo pegada al costado de Dan, tener su cuerpo tan cerca me pone nerviosa y se me corta la respiración. Trato de no parecer nerviosa y sigo caminando. 

Cuando llegamos, Dan me toma de la mano y me la besa. Me ruborizo. Estos cambios de humor suyos me irritan y sin importar mi irritación...me sonrojo. Que idiota eres. Me digo a mi misma y levantó la mirada para ver a Dan.

-Nos vemos luego, bambi -dice, gira sobre sus talones y se va.

Le lanzó dagas mentalmente, mientras el camina con tranquilidad por el pasillo y ya no lo veo. Suspiro y entró a la clase. 

-Tarde señorita Evans -dice la profesora Scott, cuando entró.

-Lo siento -digo y me apresuro a sentarme.

Me siento junto a Amy. Ella levanta una ceja interrogatoria y muevo los labios diciendo "luego" Amy asiente y la profesora Scott sigue con lo suyo. Dos horas después salgo de la clase con Amy y nos vamos a la cafetería. Me

muero de hambre y necesito comer ya.

Cuando llegamos buscamos a Kim y a Mara. Las encontramos y nos vamos hacia su mesa. Cuando llegamos apenas noto la presencia de Zack, que está tomando la mano de Mara y parece muy relajado. Comemos, conversamos y reímos lo típico que hacemos todos los días. Cuando termina la hora de comer me voy a mi siguiente clase. Biología. La clase la comparto con Logan y espero hablar con él. Quiero explicarle lo que sucedió con Dan y quedar con el luego.

Cuando entró a la clase tengo una punzada de desilusión...Logan no está. Suspiro y voy a tomar asiento. Las clases se pasan volando y no me vuelvo a cruzar con Dan o Logan. Quiero hablar con Logan y luego enfrentarme a Dan ¿Qué planes tendrá Dan? ¿Llevarme a un lugar alejado y matarme o violarme? Borro esa idea de mi mente. Es estúpido pensar que el misterioso haga algo así, él no sería capaz... ¿O si? Basta, deja de pensar idioteces y pon los pies en la tierra.

Me voy al estacionamiento para esperar a Mara. Cuando llegó al estacionamiento, me colocó mis audífonos y me pierdo en la música. Sia canta una canción dulce y lenta. Me pierdo en la canción y olvido dónde estoy. Estaba apoyada en el auto y tenía la mirada perdida en el piso, cuando unos converses negros aparecieron en mi campo de visión. Levante la cabeza y me encontré con sus ojos azules. Me saco los audífonos y miro a Dan.

-¿Qué tienes planeado Dan?

Pregunto, remarcando su nombre y haciendo un gesto con la mano.

-Primero te ayudare con la tarea de cálculo...eres pésima -hace una mueca y pongo los

ojos en blanco.

-Se queda soy pésima, no es para que me lo recuerdes siempre -digo y junto las cejas.

Dan eleva las comisuras de sus labios. El muy maldito quiere reírse de mi. El comienza a caminar hacia su auto y yo abro la puerta del mío.

-¿No vienes? -pregunta y frunce el ceño.

¿Ir con el? Tengo las llaves del auto y Mara no aparece. No me puedo ir con las llaves. No está lloviendo ya, pero la casa no está cerca y en cualquier momento puede volver a llover.

-Mi clon aún no llega y yo tengo las llaves del auto.

Al decir clon, Dan sonríe y señala detrás mi. Me giro y veo que Mara se acerca...tomada de la mano de Zack. Se ven tan lindos juntos. 

-Estaré fuera -le entrego las llaves a Mara-. Llámame si ocurre algo.

Mara levanta las cejas divertida y me sonríe como el gato de Alicia en el país de las maravillas. Resoplo y me doy media vuelta. Ahora entiendo por qué la sonrisa, Dan no me quita los ojos de encima y pareciera que me quiere comer con la mirada. 

Comienzo a caminar y me paro enfrente de Dan.

-Sí haz terminado de comerme con los ojos, podemos irnos -digo cruzándome de brazos.

Dan sonríe un poco y entra al auto. Niego con la cabeza y subo a su auto ¿Es que acaso todos en este pueblo te miran así? No me ponía nerviosa que me mirarán tanto...pero ahora si.

Unos minutos después estábamos entrando a casa de Dan. La casa tenía mucha luz y olía a vainilla. Dan cierra la puerta y comienza a caminar hacía las escaleras ¿Dónde va? Claro, su habitación. Me apresuro a alcanzarlo y entró a su habitación.

Igual a como la recordaba, pero ahora hay más luz y con unos dibujos. Dan está sentado en el borde de la cama y saca varios libros.

-¿Qué es lo que no entiendes? -pregunta sacándome de mi mundo.

Me acercó a la cama y me siento junto a él. Sacó mis libros de cálculo y resoplo.

-Nada -me tapó los ojos con una mano y siento a Dan sonreír-. Lo siento, pero soy de lento aprendizaje en cosas de cálculo.

-Tengo tiempo -dice divertido.

Las siguientes dos horas me la paso escuchando a Dan y tratando de no perder la cabeza. Tengo que admitirlo, Dan es bueno en la materia y no le molesta cuándo me equivoco. Al contrario, sonríe y me explica con más detalle. Cada vez estamos más cerca. Cuando me muevo, mi hombro roza con el suyo y el se queda quieto. Me volteo a verlo y lo descubro mirándome fijamente. Miro sus ojos que brillan y bajo los ojos a sus labios sin pensarlo.

Estoy peligrosamente cerca de Dan. Si me acercó unos centímetros más...tocare sus labios. Levantó la vista de sus labios a sus ojos y ahora el mira mis labios. Se me corta la respiración y el corazón me late a mil por ahora, creo que mis latidos se escuchan y mi respiración igual.

-No lo soporto más -dice y acorta el espacio que nos separa.

Dan impacta sus labios contra los míos. Sus labios son suaves y saben a menta... Dios santo, besa maravillosamente bien. Le respondo el beso y abro un poco más la boca. La lengua de Dan invade mi boca y comienza a juguetear con la mía. Tomo su rostro entre mis manos para profundizar el beso. El me toma de la cintura, me coloca a orcadas sobre el

y pone sus manos en mis caderas. Mis manos vuelan de su rostro a su cabello, enredo los dedos en su cabello y tiro suavemente. Dan gime y me atrae más hacia su cuerpo. 

Siento la adrenalina subir por todo mi cuerpo y me estremezco. Nuestras respiraciones se entremezclaron y sentía sus latidos que iban igual de rápidos que los míos. Comencé a sentir su erección creciendo debajo de mi y trate de apartarme. Esto no puede llegar más lejos y me estoy pasando de la raya. Dan muerde mi labio y se me escapa un gemido. No sé en qué momento paso, pero ahora Dan se encuentra encima de mí y sube sus manos por mis piernas. Voy a perderme a mi misma si sigue... Y como por obra de arte, el timbre suena y nos dejamos de besar. 

Dan apoya su frente en la mía, mientras nuestras respiraciones vuelven a la normalidad. Dan besa mi frente, se aparta de mi y se levanta de su cama. Camina hacia la puerta, la abre y voltea a verme.

-Ya vuelvo. No te muevas -me señala y se va con un brillo malicioso en sus ojos.

Santa madre...nos hemos besado y fue de una manera subrealista. Me peñisco para ver si no es un sueño. No, no lo es. Fue real, muy real y excitante ¿Qué diablos me pasa? Esto no estaba en mis planes, no puede ocurrir nada entre nosotros y menos ahora que nos siguen buscando. Demonios. Tengo que salir de aquí o la cosa terminará en otra cosa. Tomo mis libros, los meto a la carrera en mi mochila y me peinó un poco.

Cuando estaba bajando las escaleras escuche voces y luego ya no había nada. Mierda, Dan me vera aquí y me preguntará dónde voy. Ok, piensa algo, piensa... Bajo las escaleras y me encuentro con una escena, que no se porque...pero siento una apuñalada en el pecho y una ganas de salir corriendo de aquí.

Dan está en la entrada tomando de la cintura a la Barbie humana y se están besando... Las ganas de correr se hacen más fuertes ¿Por que me siento así? No estoy enamorada de Dan, pero...¿El me gusta? Sacudo la cabeza y me escabullo para no ser vista. Ellos se separan y yo me arrojó detrás de una pared. La cocina.

-¿Qué haces aquí? -dice Dan

-Bueno, creí que podríamos pasar un rato juntos y ya sabes...-dice la voz chillona de Amber.

-No estoy de humor para eso...y tratándose de ti mi humor es peor -dice Dan agriamente.

-¿Eso se trata por la mocosa esa? No hablaras en serio...-dice Amber con tono divertido-. Noo, no me lo puedo creer... Te gusta.

-Eso a ti no te incumbe -escupe Dan.

-Demuéstralo -dice Amber, en tono desafiante.

No escucho la respuesta de Dan y cuando intento verlos...se están besando apasionadamente 

¿Qué creías? ¿Qué hablaban de ti, idiota? ¿Qué le gustabas? Cuando desaparecen de mi campo de visión, corro hacia la puerta, la abro y cierro con un puertazo. No me importa si escucharon, no quería seguir ahí y menos ver esa escena. Comienzo a correr por el sendero de la entrada, hasta llegar a la carretera y sigo corriendo todo el camino. Mi pie ya no me duele, la pierna tampoco y eso es bueno... Sigo corriendo, pasando por todas las casas y paro hasta que estoy enfrente de la mía.

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Capítulo 7

Entre sin aliento a la casa, Mara no estaba y agradecía que no estuviera. Una lágrima solitaria se deslizó por mi mejilla y la limpie violentamente ¿Por que lloro? El me trata mal y después...es tan atento conmigo. Dios, no lo entiendo y no creo poder aguantar sus cambios de humor. El es otro más y punto... Gracias a dios no llegue a más con él, el pudo a ver hecho lo mismo que Christian y de solo recordarlo me entran más ganas de llorar.

Sacó mi celular y miro la hora. 4:48. Es temprano aún así que le mando un mensaje a Mara.

*Dónde stas? 

Le mando el mensaje y contesta al instante.

*Con Zack ¿ocurre algo?

*No, nd. Solo necesito el auto.

*ok, lo llevaré en dos minutos ¿donde stas?

*En casa.

*ok.

Guardo mi celular y subo a mi habitación. Esta oscura y huele a limón... Me quito la ropa que llevó puesta y busco algo más. Escojo unos jeans, una camisa de cuadros rojos, mi gorro negro y unos zapatos negros cerrados. No me miren en el baño, sé como luzco y soy un asco. Me hago una trenza francesa y busco mi cadena. ¿Dónde la deje? La buscó pero ni rastro de ella, la e perdido y era un recuerdo de mis padres...

El monstruo toca la bocina del auto. Tomo mi celular, llaves, tarjeta de crédito y veinte dólares. Bajo de dos en dos las escaleras, cierro la puerta y camino hacia el auto. Mara sale del auto y me entrega las llaves. 

-Llámame si pasa algo, estaré en casa y haré la cena -me mira y levanta una ceja-. No llegues tarde.

Asiento y me meto en el auto. No sé a donde ir, pero necesito aire y pronto. Pienso un lugar y lo busco

en el mapa que está en la guantera. Esta a diez minutos de casa y a unas cuantas calles de la universidad. Conduzco en silencio y trato de analizar todo lo que me a ocurrido... Mudarme de California, ir a París, mudarme de nuevo, escapar, escapar de nuevo y empezar en Twin falls. Creo que he vivido en casi cinco estados y sólo e durado en uno diez años. 

Llegó a la biblioteca que es inmensa y hermosa. Tomo mis cosas, bajo del auto y entró al inmenso edificio. Amo este lugar, siempre está en silencio y tranquilidad absoluta. Me dirijo a la sección de venta y busco los libros que me gustan... E.L. James en cincuenta sombras de Grey. Lo se soy una sucia. Tomo el de Romeo y Julieta, otros cinco libros más y me dirijo a la caja.

La señora que es la encargada de ventas tiene unos sesenta y pico. Me recuerda a mi abuela y inmediatamente borro eso de mi mente. Le entrego a la señora la tarjeta de crédito y me sonríe. Apesar de ser un pueblo, la biblioteca te acepta tarjetas de crédito y no te pide firmas. Raro que no lo hagan. Le sonrió a la señora y salgo de la tienda. Miro la hora 5:41, sigue siendo temprano y quiero seguir fuera.

Después de conducir de regreso a casa, me di cuenta que no quiero llegar y encerrarme en esa jaula. Cuando estaba a una cuadra, acelere y no pare el auto en la casa. Me fui de largo para ver hasta donde llegaba. Pase muchas casas, hasta que las deje de ver y comenzaron a aparecer más árboles enormes. Pare auto a mitad del camino y me quedé quieta en el asiento. Definitivamente necesitaba esto, estar fuera por unos minutos de la civilización

y disfrutar del hermoso silencio que me rodea.

Extraño mi antigua vida. Faltan una semana para ni cumpleaños y exactamente ese día mi vida cambió por completo. Odio mi cumpleaños y odio tener que pasarlo aquí. Tengo que ver al tío Tom y creo que será dentro de otras cuantas semanas. No me quiero arriesgar hacer rastreada y ponernos en peligro de nuevo. Mi celular comienza a sonar y eso significa que es hora de volver a casa...

Doy la vuelta y manejo de regreso a casa. Pongo música y rompo con el silencio que disfrutaba hace unos minutos. Radioactive suena en las bocinas y subo el volumen. No quiero seguir pensando y deprimirme más aún. Llegó a casa y bajo los libros del auto. Las luces están apagadas y la puerta está totalmente abierta... Mierda. Corro hacia la casa y arrojó los libros en la entrada de la casa.

-¡Kate! 

Grito. Demonios, no responde. Corro a la cocina a tientas, abro un cajón y sacó un cuchillo, agarre el cuchillo más grande que tenemos y salgo hacia el pasillo. ¡Maldita sea! Todo está apagado y no la escucho.

-¡Kate! -susurro casi a grito.

Nada. Subo las escaleras silenciosamente y revisó su habitación. Nada. Bajo las escaleras y una sombra aparece en la puerta. Tomo el cuchillo con más fuerte y me pegó a la pared ¿Dónde diablos está Kate? Alzó la mano con cuchillo preparado para atacar y me aviento a la persona que acaba de entrar. Dejo el cuchillo a centímetros de su pecho, cuando veo de quien se trata. Kate.

-¡Mierda Kate! -grito y la abrazo.

-¿Qué sucede? -dice pegada a mi pecho-. Quedamos en que me llamarías

Mara.

-Creí que te habían atrapado -digo caso en sollozos.

-No, tranquila -me pasa las manos por la espalda-. Se fundió un fusible y tuve que ir a ver.

Solo se fue la luz y fue a investigar. Solo eso. Fue un error mío decirle Kate, pero me preocupe y creí que el mundo se me caía. La última vez que me preocupe tanto fue hace seis meses y en este momento estoy con el corazón en la mano. 

-Katherine no vuelvas hacerme esto nunca más -digo estrujándola a mi pecho.

Ella no dice nada y se limita a abrazarme. Mierda, me dio un susto de muerte y me dan ganas de darle cachetadas. Dejo de sollozar y me limpio las lágrimas. Le sonrió un poco y subimos a nuestras habitaciones.

-¿Puedes dormir conmigo? -le pregunto y ella asiente.

Nos acostamos en mi cama, nos acomodamos y nos dormimos al instante...

Martes, el día está nublado y no se ve ni rastro del cielo azul. En la mañana le prometí al monstruo que la llamaría Mara, por nuestra seguridad y acepte. Me puse un suéter blanco, jeans, botas cafés y una cinta en mi cabello. Mi cabello se puso más negro y mis ojos se aclararon aún más. Necesitaba mis lentes de nuevo... Mara conducía y yo tomaba una siesta. Me dio unos leves golpes en la pierna y me despertó. 

-Llegamos -me toma la mano-. Se que algo sucedió ayer, aparte que te pusiste como una histérica y me llamaste como hace un año ¿Qué sucede?

¿Qué sucede? Ni yo lo sé, desde ayer que me bese con Dan mi mundo se vino de cabeza y el susto de perder a mi hermana fue la gota que derramó el vaso. Tengo que seguir con lo mío y superar eso... Le sonrió

y niego con la cabeza. No le diré lo que sucede.

-Nada monstruo, todo esta bien.

Antes de que insista bajo del auto. No quiero que siga con ello. Entró a la primera clase, creo que me toca con Logan y espero que no siga molesto. Ayer fue un error ir con Dan y me sigo arrepintiendo desde el momento que nos besamos. Me gustó el beso pero estuvo mal y no se volverá a repetir. Cuando entró a la clase media voy al lugar donde me siento junto a Logan. Tengo que pedir disculpas y ni siquiera se porque.

Logan está sentado con libro en mano, creo que es el de prácticas y parece muy concentrado en ello.

-Hola -digo y tocó su brazo.

-Hola ¿como éstas?

-Bien, creo -hago una mueca y Logan sonríe-. Y tu ¿Qué tal?

-Bien...¿Estarás libre más tarde? 

Más tarde...no haré nada interesante toda la semana. Le digo que nada bueno y el me invita al auto cine. Salir tal vez me haga bien, así despejó mi mente y me preocupó por otras cosas. Termina la clase y me despido de Logan. Es un buen amigo, me agrada y me gusta la idea de pasar el tiempo con un amigo. Mi siguiente clase es con Kim y cuando la veo me acercó a ella. Es pelirroja de nuevo y...tiene los ojos grises.

-Holaaaaa -me saluda alegremente.

-Hola cambiante -reímos y miro sus ojos-. Con que grises.

-Haaa, sobre eso... Uso pupilentes y bueno volví a mi color de cabello natural-dice y se pasa la mano por su cabello rojo oscuro.

-Me gusta rojo.

-Y a mi el negro.

Toma un mechón de mi cabello y juguetea con el. Esta chica me recuerda a mi de pequeña, era curiosa y estaba siempre en movimiento.

Kim me invita a su casa, pero le digo que saldré con Logan y pospone el plan para la semana que viene... Diecinueve de septiembre, mi cumpleaños y otra fecha especial. Estábamos a ocho de septiembre, llevábamos aquí casi dos semanas y ya teníamos unas amigas. Amy y Kim.

Le pregunto a Kim que como le va con Mike y me dice que ayer la invitó a salir toda la tarde... Significa que ella no estaba en casa, no me vio y no vio la escena de su hermano con... Sacudo la cabeza, esos recuerdos son abrumadores y es mejor borrarlos. Kim me dice que tiene una cita con Mike mañana en la noche y que es sorpresa el lugar donde la llevará. Al menos alguien está enamorada y yo bueno yo estoy bien. Dos horas después me voy al comedor con Kim a mi lado.

Vemos a los demás y nos acercamos... En la mesa hay una chica de cabello castaño como el caramelo, es linda y dulce. Cuando me acercó más veo que está tomando la mano de Amy... Veo al monstruo que se está tragando con Zack.

-Hoy esperan hasta en la noche, cuando no esté yo en casa -digo y los dos se sonrojan-. Además, hay niños presente.

Los demás se parten de risa y Mara me saca la lengua. Zack se pone colorado y yo sonrió burlona. Mara me mira y pone cara divertida.

-Tienes envidia de que yo tenga con quien pasarme saliva y tu no -me saca la lengua y besa a Zack.

Pongo los ojos en blanco y me río. Diablos, tiene razón. Zack ya es mi cuñado y tiene mi aprobación. Soy un poco sobre protectora, lo sé y a ella le molesta eso. Pedimos el desayuno y yo sigo con mis burlas. Kim se me une y Amy y la chica misteriosa se van.

Cuando están lejos me acercó a Kim.

-¿Quien era ella? 

-Ella -no entiende la pregunta y luego le señaló a la chica-. Haaa... Alex. Es la novia de Amy.

Abro los ojos como platos ¿su novia? ¿Amy es...? Me recompongo y cambio de tema. No debo juzgarla por sus gustos... Amy es mi amiga y no soy quien para juzgarla. Termina la hora de comer y nos vamos a las clases. Pasan las horas y ninguna me tocó con Dan... Pero mañana seguro tendré dos horas con él. Carajo. No quiero verlo hoy, tampoco quiero que pregunte por que me fui ayer así como así y mucho que menos soportarlo si esta enojado.

Salgo de mi última clase y voy al estacionamiento. Hago una mueca al ver a Mara y a Zack pasándose demasiada saliva. ¡Agh! Que se busquen un hotel o algo. Creo que les voy a regalar una caja de preservativos, esto es horroroso y ya vi esto una vez... Cuando me paro frente a ellos toso y ellos se dejan de comer.

-Sí ya han terminado...podemos irnos a casa.

Zack sube en la puerta del piloto. Vaya, el va a manejar. Mara en el del copiloto y yo en la parte de atrás. Zack conduce hasta la casa y yo me quedo profundamente dormida... 

-Hey, despierta que ya llegamos -dice Mara y me sacude del hombro.

Dormí al menos diez minutos creo. Me bajo del auto y como un zombie me voy a mi habitación ¿como llego hasta mi habitación? No tengo idea pero al llegar me aviento a la cama y vuelvo a dormirme. Mara dice que yo no duermo...que yo caigo en coma. 

Creo que duermo casi cinco horas y despierto cuando escucho mi celular sonar. Lo busco a tientas, lo saco de mi

bolsillo trasero y miro la hora. Las ocho en punto.

-¿Hola? -digo con voz ronca.

-¡Evans! -gritan y alejo el celular de mi oreja-. Ya voy a buscarte. Recuerda que quedamos de vernos a las ocho.

¿A las ocho? Diablos, se me olvido la salida que tenía con Logan. Brinco de la cama y me baño rápidamente. Tomo una blusa beige, mi chaqueta marrón y mis botines a juego. Cepillo mi pelo rápidamente y tomo mi bolso a juego con mía atuendo. Meto aprisa mi celular, dinero, llaves y un brillo labial. No sé para que lo llevó, pero lo metí en el bolso y baje las escaleras.

-¡Regreso más tarde! ¡No tengan demasiado sexo!

Grito y salgo de la casa. La camioneta de Logan está estacionada enfrente y subo rápidamente.

-Hola -lo saludo.

-Hola Evans ¿Tomaste una siesta? 

-Nop -el voltea a verme y sonrío-. Yo caigo en coma.

Nos reímos y hablamos un poco. Logan conduce al límite de velocidad, que es de treinta kilómetros y se toma su tiempo. Llegamos al auto-cine y él estaciona la camioneta en un buen lugar.

La película se llama encuentro explosivo, la actriz es Cameron Diaz y el otro no se su nombre. A medía película Logan hace la maniobra del bostezo y pone sus brazos detrás de mis hombros y se acomoda en su asiento. Creo que ya se que viene después. Logan se me acerca y yo finjo estornudar. El es mi amigo y nada más. 

Dos horas después estábamos de regreso en mi casa. Las luces de arriba están prendidas y la de la entrada. Me giro hacia Logan y le sonrió.

-Gracias...por todo.

-No hay de que, es un placer para mi.

Se acerca a mi ¿Qué hace? Te quiere besar idiota. Me digo a mi misma. Cierra los ojos y yo los abro como platos... Pongo las manos en sus hombros y lo alejo de mi. Cierro los ojos y niego con la cabeza. Esto será difícil.

-No -niego con la cabeza.

-¿No? ¿Por que? -parece molesto. Diablos-. ¿Esto es por Dan?

-¿Qué? 

¿El que tiene que ver en todo esto?

-El te gusta -afirma y me mira-. ¿Lo besaste, cierto? 

No le respondo ¿a que viene todo esto? El no puede estar...

-¿Estas celoso? -pregunto y el evita mi mirada.

Lo esta. Lo que me faltaba, pensé que era mi amigo y resulta que quiere algo más.

-Logan...eres un gran amigo y apenas acabamos de conocernos -digo y el me mira.

¿Molesto? ¿Desilusionado? Ni hablar, no puedo seguir así y menos soportar una escena de celos. Bajo del auto y antes de cerrar me despido de él.

-Adiós Logan.

Cierro y me voy a la casa. Grito al entrar y Mara baja las escaleras. Cenamos y ella pregunta como estuvo la película. Yo solo le respondo "bien" y "fue lindo". Mara cambia de tema y hablamos de que queremos hacer el día de nuestro cumpleaños.

Recogemos los platos, los lavamos y nos vamos a dormir. Cuando llegó a mi habitación, me despojo de mi ropa y me pongo una pijama.

Me acuesto en la cama, me tapó hasta en la cabeza y me duermo con el silencio de la oscuridad.

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Capítulo 8

Miercoles. Hice lo de todos los días. 

-Despertar.

-Ir a la escuela.

-Comer.

-Leer.

-Estudiar.

-Comer.

-Dormir.

Estuve evitando a Dan todo el día. Hasta me senté en otro lugar para no verlo y luego hable con Logan. Me pidió disculpas y las acepte. Dijo que yo le gustó y blah blah blah. En la tarde tome fotos y seguí haciendo lo de diario.

Jueves. Fui a la escuela y evite de nuevo a Dan. Logan me invitó a salir y le dije que estaba ocupada. Falso. Tenía toda la tarde libre. Hice tarea y compre unos libros. Y de ahí hice lo de a diario.

Viernes. Sábado y Domingo.

Ahora los viernes teníamos clases, así que fui y de ahí al partido con Mara, Zack, Kim, Mike, Amy y su novia Alex. El fin de semana me la pase encerrada viendo películas, leyendo y estudiando. No me sentía de ánimos. Y no se debía a lo de Dan.

¿A quien quiero engañar? Se trataba de Dan, los asesinos y el día que se supone que debe ser festejado. Nuestro cumpleaños número diecinueve y todo es tan estresante. Mara trata de animarme, pero le digo que estoy bien y que se vaya a pasarse saliva con Zack.

Lunes. Otra vez.

Mi alarma sonó y la apague gruñendo. Tenía que ir a clases y no podía faltar... Mañana examen de biología, miércoles de Literatura, jueves francés y viernes Cálculo. Y la semana que viene más exámenes... Diablos. Me levante de la cama y pegue un brinco. El piso estaba frío y al parecer afuera habían fuertes rachas de viento. Me metí a bañar y quince minutos después estaba saliendo envuelta en mi bata de baño. Rebusco en mi

armario y tomo algo abrigado. Una blusa de mangas de tres cuartos, unos jeans, mis converses azules y un suéter de lana rosa pálido. 

-¡Baja a desayunar! -grita Mara desde abajo.

Me hago un moño alto y suelto algunos mechones. No me maquillo. Como siempre. Meto los libros necesarios en mi mochila, tomo mi celular y llaves. Bajo trotando las escaleras y camino hacia la cocina. Desde hace unos días comemos en la barra de desayuno y sólo en las noches en el comedor. Mara preparó una whafles con miel y jugo de naranja. Tengo que aprender a cocinar y rápido.

-Hoy no te quiero encerrada en la casa -me apunta con la espátula-. Sal a que te entren más aires.

Tengo la boca llena y sólo asiento. Tendré que tomar fotografías toda la tarde para que deje de decirme eso todos los días. Terminamos de desayunar y nos vamos al auto. Maneje yo, por que Mara se iba maquillado y estaba nerviosa. Al parecer no había estudiado para Historia, mientras que yo si y lo hice todo el fin de semana. Llegamos y nos vamos a la clase del señor Trainor.

El examen fue fácil, gracias a que estudie sin parar. Camine por los pasillos y llegue a la puerta de cálculo... Dan estaba ahí. Me senté en mi lugar lo más relajada que pude y saque mi libro. Dan me miro y frunce el ceño.

-¿Estas bien? 

¿Qué si estoy bien? Pues no..

-Sí, estoy perfectamente y ¿Tu?

-Mientes -dice y me mira a los ojos.

-Dan, estoy bien.

-Sigues mintiendo -levanta las cejas.

-Ok, ok. Deja ya eso ¿por qué no mejor me ayudas a entender los problemas? Tenemos examen el viernes -digo

ya irritada.

-Mañana...te veo en tu casa.

¿En mi casa? Pues ya que... Después de esa pequeña conversación, no volvemos hablar y seguimos en la clase. Termina y me voy a la siguiente, la que comparto con Amy. Cuando llegó al salón Amy me sonríe y da unos golpecitos en el asiento de alado. Me siento junto a ella y le sonrió.

-¿Qué sucede? -pregunto

-El miércoles no hay clases, por un consejo...-sonrió más y Amy asiente-. Abra una fiesta y quiero que salgas de esa jaula y vayas con nosotros.

-Hummm...de acuerdo. Pero nada de alcohol para mi.

Amy asiente y nos ponemos al corriente con los apuntes de la clase. La mañana se me pasa volando, cuando me doy cuenta estoy en el estacionamiento esperando a Mara y pierdo la mirada en el cielo. El cielo está nublado y el viento sopla un aire frío. Es septiembre y esta comenzando hacer frío. Me pregunto como será en Diciembre. Mara llega y nos vamos a casa.

Cuando dejo la mochila en mi habitación, tomo mi cámara y mi celular. Quería que estuviera fuera... Bajo las escaleras y la busco en la cocina. Nada. Voy a la sala y esta desparramada en el sofá viendo televisión.

-Estaré tomando fotos en el bosque... Llegare tarde a comer.

Mara no dice nada. Me acercó y la encuentro profundamente dormida. Le beso la mejilla y salgo de casa. Tome el auto, espero que ella no lo utilice y no le importe. Pongo la canción de I know you de Skylar Grey y me relajo al instante. Conduzco hasta la casa abandonada, estacionó el auto y me adentro en el bosque. Llevaba tomando fotos más o menos una hora y ya

me había alejado bastante del auto. 

-¿Siempre te escondes en el bosque? -dice esa voz gruesa y grave que conozco bien.

Me sobresalta escucharlo y suelto un grito. No escuche cuando se acercó y ahora está arrecostado a un árbol. Me mira de pies a cabeza. Como siempre. El aire sopla y me estremezco. Hace frío y aún no son ni las cuatro. Me levantó del tronco dónde estaba sentada y me acercó dos pasos a él. 

-Yo no me escondo en el bosque.

-¿Por que me evitas? -pregunta y avanza tres pasos. Yo retrocedo dos.

-Yo no te evitó.

Dan avanza otro paso y yo retrocedo. Se está acercando mucho.

-¿Por que te fuiste? -da otro paso y yo retrocedo una vez más.

-Tenía cosas...que hacer. Además...tu tenías compañía -digo con indiferencia.

-Una compañía que no deseaba -dice y avanza un paso.

-La besaste -susurre y di un paso atrás.

-Nos viste... Pero te fuiste..

¿Por que no te quedaste?-avanzó un paso.

-¿Para que? ¿Para ver como se metían la lengua? No gracias -dí un paso atrás y mi espalda chocó contra un árbol.

Estúpido árbol.

-¿Estas celosa? -niego con la cabeza-. Pues yo si.

Da otro paso y queda frente a mí. Estúpido árbol, estúpido árbol. 

-¿Celos? ¿De que? -digo en un susurro.

Dan pone sus manos a los lados de mi cabeza. Estoy atrapada entre el y el estúpido árbol.

-De Logan...el no es bueno para ti -susurra y clava sus ojos en los míos.

-¿Y tu que sabes lo que es bueno o no para mí?

Toca mi mejilla y desliza su dedo índice desde mi mandíbula hasta mi

barbilla.

-Se lo suficiente, como para decirte que el es peor que yo y no te merece.

Bajo la cabeza ¿el me esta diciendo esto? Dan toma mi barbilla y la levanta para que lo vea a losé ojos.

-¿Cual es tu nombre? -susurra.

Siento su aliento golpearme la cara y un escalofrío me recorre todo el cuerpo.

-Ya lo sabes -digo casi inaudible.

-No, no es así. Dilo completo...

Sus ojos me penetran y me pierdo en aquel azul eléctrico. Sus ojos se oscurecieron y ahora estudian mis facciones.

-Maya Evans -digo sin aliento.

Se me esta yendo la respiración, si sigue así creo que...

-Mientes -dice y su rostro se ensombrece.

-¿En qué cosa miento? -digo aún susurrando.

-Dime tu nombre... -sus ojos me penetran más aún.

Respiro hondo. El aire se me esta yendo. Tranquila, inhala, exhala, inhala y exhala. Aquí vamos. Solo dile tu nombre y termina con esta tortura.

-Kara... -digo apenas entendible-. Kara Thermopolis.

Dan me toma de las mejillas y frunce el ceño ¿y ahora que? Ya le dije mi nombre.

-Kara... ¿Con "K"? -pregunta y yo asiento con el corazón en la mano.

-Me gusta tu nombre Kara y toda tu persona.

Se acerca lentamente y cierro los ojos. Pasa su pulgar por mis labios y retengo el aire. Suavemente Dan une sus labios a los míos y suelto un suspiro. Sus labios encajan perfectamente a los míos y se funden en un beso lento y suave. Besa extraordinariamente bien. Muerdo su labio inferior y el gruñe. Me pega más árbol, pone una de sus manos en mi nuca y la otra en mi espalda. Yo pongo las manos en su espalda,

tomo su camisa con mis manos y las cierro en puños.

No sé cuánto tiempo a pasado, segundos, minutos... No tengo idea, pero se que estoy en el paraíso en brazos de Dan y el silencio que nos acompaña es placentero. Dan pega su cuerpo al mío, haciendo que quede más atrapada y profundiza más el beso. Se que esto está mal y que lo pongo en peligro a él... Dan introduce su lengua a mi boca y comienza un baile con mi lengua. Me eh enamorado, no estaba en mis planes y no se como ocurrió. Dan termina el beso y esta jadeando. Trato de recuperar el aire y él pone su frente contra la mía.

-¿Quien eres Kara? -pregunta sin aliento.

-¿Eso importa?

Pregunto y Dan sonríe. Se aparta un poco de mi y besa mi frente. Apenas me doy cuenta que es diez centímetros más alto que yo y tengo que pararme de puntillas para besar su mejilla. Toma mi mano y la besa. Esto ya se me esta haciendo costumbre.

-¿Algún día me contarás todo? -pregunta y le sonrió de lado.

-Algún día Dan, algún día.

Caminamos tomados de la mano de regreso al auto. Cuando le pregunto a Dan a que vino al bosque, me respondió que siempre viene y desde lo que pasó en su casa viene más seguido. 

-¿Y tu auto? -pregunto, al darme cuenta que no lo veo por ningún sitio.

-Vine caminando... -se pone serio.

-¿Cuanto tiempo llevabas en el bosque, antes de vernos?

-Unas dos horas -dice y se rasca la nuca.

Subimos al auto y conduzco de regreso. La música se pone al instante y Dan se me queda viendo. La canción que suena es de The Weeknd, la canción suena en la película de cincuenta

sombras de Grey y la siguiente también es de la película. Ok, lo admito. Soy una fan de cincuenta sombras y estoy enamorada de Christian Grey. Me volteo para ver a Dan y lo encuentro con la mirada perdida en la ventanilla. Después de unos minutos estacionó el auto enfrente de su casa.

-Bueno...creo que te veré mañana -digo y sonrió un poco.

Me pongo un poco triste al dejarlo, pero no me quedaré con el toda la tarde y además, mañana lo veré.

-Oye... -toma mi mano y la acaricia con su pulgar-. Lo siento. Fui un idiota contigo y no te merecías que te tratará así.

Iba a responder, pero hizo un gesto para que me cayera y obedecí.

-Soy un idiota, muchas veces... Lo siento en verdad, Kara.

-Ya pasó, Dan -aprieto su mano y quitó el seguro del auto.

-Te veo mañana... -le sonrió levemente.

-Hasta mañana...bambi -dice y baja del auto.

Me guiña un ojo y se va. Estoy enamorada de él. No quiero ponerlo en peligro y si sabe más de mí no sé cómo reaccionaria...

Llegó a casa y cuando abro la puerta descubro un papel. El papel está perfectamente doblado y tiene una caligrafía perfecta. Desdoblo la hoja y la leo...

 -Se tu secreto

Siento que las piernas me fallan y me siento en el piso. Nadie sabe nada, es imposible, el único que lo sabe Dan y el no sería capaz de hacer algo así. ¿O si? El solo sabe mi nombre. Borro esa idea de mi mente. Estoy pensando locuras y no se donde este el monstruo. Tomo la hoja y la parto en varios pedazos. Quien sea que la

mando, esta alucinando y no armare un escándalo por un pesado de papel. Me levanto del piso y subo a la habitación del monstruo. Mi clon se encuentra sentada como indio en medio de la cama y tiene libros por todos lados. Me siento junto a ella y tomo uno de sus libros.

-¿Qué pasa? -pregunta ella y se saca los audífonos.

-No quiero seguir diciéndote Mara...

Ella me mira confundida. Suspiro y la miro a los ojos.

-Llamarte Kate, tu verdadero nombre y no el de una muerta -tomo su mano.

-Pero llevamos meses usando nombres falsos¿Qué te hizo cambiar de opinión? -inspecciona mi rostro y no entiende.

-Le dije a Dan, el hermano de Kim... Mi verdadero nombre -cierro los ojos y aprieto los labios.

-¡Estas loca! ¡Eso es peligroso y tu lo sabes! -se levanta de la cama y se pone a gritar- ¡El puede hablar, nos encontrarían por su culpa y nos matarían! ¡Hemos escapado seis meses, Kara! ¡SEIS PUTOS MESES! 

-¡Puedes dejar de gritar! Estas histérica, por dios. Hablaré con él ¿De acuerdo? Le diré que no diga nada. Por dios... -pongo las manos en mi cabeza.

-Di mi nombre cuando estemos en la casa...las dos solas -está caminando de un lado al otro-. Pero habla con ese...tipo.

-Lo haré, Kate. Pero ya tranquilízate -masageo mis sienes con los dedos.

Ella se relaja un poco y sale de su cuarto. Creo que salió bien... Ahora me tengo que deshacerme de los pedazos de la hoja. Bajo las escaleras y busco a Kate con la mirada. No está. Escucho el auto que arranca y luego ya no escucho nada. Camino hacia la chimenea. Kate la debió de prender

desde hace unas horas... Arrojó los trozos de papel al fuego y veo como se queman rápidamente. Si Kate llegaba a ver la hoja, se pondría peor a como se puso hace un momento y no sería la primera vez que se pone así. Me cambio de ropa a algo más cómodo: un suéter largo negro, unos jeans claros y unas vans.

Son las siete apenas. Me acuesto en el sofá más grande que hay y enciendo la televisión. Busco una película y escojo la de ¿Qué pasó ayer? 3. Apenas había pasado unos quince minutos cuando me dio frío y subo por unas mantas. Me tape hasta la boca con las mantas y mire la película. Parecía loca riendo por la película y paro de reír de golpe al escuchar ruidos arriba. Busco el celular a tientas. Mierda, lo deje en la cocina cuando fui por palomitas. 

Me levantó del sofá sin hacer ruido, camino despacio hasta llegar a la cocina, tomo el celular y me oculto detrás de la barra de desayuno. Marco el número de Kate, al menos tres veces, pero me manda a buzón y cuando vuelvo a intentar contesta.

-¿Hola?

-Kate, no vengas y hagas lo que hagas no te acerques a la casa -susurro y cuelgo.

Pongo el celular en silencio y recibo una llamada de Kate. Dejo el celular en el piso y gateo hasta llegar a los cajones de cuchillos. Quien este arriba no oculta su presencia, hace mucho ruido y arroja cosas. Solo rezo para que Kate no haga la idiotez de venir. Mi celular suena de nuevo. Numero desconocido. Contesto con un susurro.

-¿Hola?

-Kara -es Dan-. ¿Dónde estás? ¿Y porque susurras?

¿Qué le digo? Piensa idiota, piensa, piensa...Di algo.

-Estoy en la biblioteca -miento.

-Voy a buscarte.

-No -susurro casi gritando-. Mara vendrá por mi. Tengo que colgar.

No espero a que conteste y cuelgo. Diablos. Escucho como un vidrio o sea lo que sea es impactado en el piso. Rebusco en los cajones y hago ruido. Mierda. Sacó rápidamente el cuchillo, cierro el cajón y gateo de regreso a la sala. Apagó la chimenea y la televisión. Me acercó lentamente a las escaleras y empuño el cuchillo. Mis nudillos se ponen blancos de la fuerza con la que lo sostengo, mi respiración es agitada, pero no escandalosa y mi corazón se me quiere salir del pecho... Esta noche puedo morir....

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Capítulo 9

Subo las escaleras silenciosamente y trato de no hacer movimientos bruscos. La parte de arriba está destrozada, vidrios y madera por doquier. Esto es un desastre total y de solo verlo me da jaqueca.Me acercó a la habitación más cerca. La habitación de Kate. Cuando entró me horrorizo al ver como la dejaron. Sus almohadas y el colchón están rajados. Sus espejos están hechos añicos, su ropa está regada en el piso y sus demás cosas rotas. 

Tomo el cuchillo fuertemente y abro la puerta del baño. Vacío. Cuando estaba saliendo de la habitación apagaron las luces. Carajo. Camino con la poca claridad que da la luna y me acercó a la puerta de otra habitación. Esta igual, vacía y destrozada. Cierro la puerta lentamente me acercó a mi habitación. Estaba oscura y no olía a limón, sino a cigarrillos y a humedad. Di un paso y antes de dar otro paso... Alguien me avienta contra la pared, provocando que me golpee la cabeza y suelte el cuchillo. Joder. Mi atacante patea el cuchillo lejos de mí alcance y suelta una carcajada.

-Va a ser más fácil de lo que dijeron -dice el intruso.

Su acento es italiano, era musculoso y tenía la cara cubierta con un pasamontañas... No va ser tan fácil matarme, digo mentalmente y me levantó de un salto. El intruso me toma del cuello y me levanta del piso. Mide casi dos metros, es más fuerte que yo y es jodidamente creído. Es igual a los demás que lo han intentado.

El aire se me esta agotando y necesito liberarme de su agarre. Le pegó con mi rodilla en su estómago, me suelta y el aire vuelve a mis pulmones. Tomo una fuerte bocanada

de aire y corro por el cuchillo. Cuando estaba cerca de tomarlo, el intruso patea una de mis piernas y caigo al piso. El reí, me patea en el estómago y yo chillo del dolor. Diablos, verdaderamente duele. Me estiró un poco y tomo el cuchillo. Se lo clavo en la pierna y lo saco rápidamente. El gruñe y pone sus manos en donde lo apuñale. 

Me paro lo más rápido que puedo, corro hacia el y lo empujó con todas mis fuerzas. El barandal cruje cuando su cuerpo se estrella contra el y se cuartea un poco, pero logró tirar al intruso desde aquí arriba y su cuerpo hace un ruido seco cuando se impacta en el piso. Bajo las escaleras rápidamente y me voy a la cocina por mi celular. Marco el número de Kate.

-No vengas aún -digo y cuelgo.

En ese momento me llega una llamada. Número desconocido. Contesto y escucho una respiración agitada.

-¿Dónde estás?

Es Dan. Estaba apuntó de contestarle, cuando recibo un fuerte golpe en la cabeza y suelto el celular. Escucho a Dan gritar y gruño. Mi atacante me carga y me arroja al otro lado de la barra de desayuno. Mi espalda se impacta con el piso y suelto un grito ahogado. Mierda. El intruso se acerca a mí y yo tomo un jarrón que estaba en una mesita. Me levantó velozmente y lo estrelló contra su cabeza. Él cae y deja de moverse. 

Voy a la cocina y tomo otro cuchillo. El otro no se donde lo deje y ahora el que tomo es más afilado. Cuándo me di media vuelta para terminar con mi atacante...me paro en seco al verlo parado a unos metros de mí.

-¡Ay por favor! ¡Ya muere! -grito y el comienza a correr hacia mi.

Tomo el

cuchillo con fuerza y cuando estaba a centímetros de mi lo esquivo y lo corto en un costado. El me mira con odio, toma la mesa dónde antes estaba el jarrón y lo arroja hacia a mí. Fui lenta y la mesa se impactó en mis piernas. Perdí el equilibrio y el cuchillo. De nuevo. Doble mierda. Comienzo a gatear y cuando estaba a centímetros del cuchillo... El me toma del cabello y me jala hacia atrás. Joder. El sigue jalando y en verdad duele. Trato de alcanzar el cuchillo y cuando lo tengo en la mano, hago algo que me jamás creí ser capaz de hacer...

Levantó la mano con el cuchillo, cierro los ojos y corto mi cabello. Adiós a mi largo cabello negro. Salgo disparada hacía delante y corro hacia la sala. Me dan ganas de llorar por lo que hice, pero este no es el momento para ello y no lo hago. Tomo una lámpara y me oculto tras la pared. No sé cómo carajos hago todo esto sin luz. Escucho crujir la madera y tomo la larga lámpara como bate de béisbol.

Cuando lo tengo suficientemente cerca impacto la lámpara en su cara y lo pateó en las espinillas. Corro hacia las escaleras, subo a tropicones y entró en la habitación de Kate. Busco en sus cajones ¿donde la tiene? Encuentro la caja, pero el arma no y se escuchan unos silbidos.

-Kaaaraa, sal a juuugaaar -canta el intruso y siento ganas de vomitar-. Sal pequeña zorra, no te are daño amor.

Agarro un trozo de cristal y me agachó tras la pared. Cuando pone un pie en la habitación, clavo el cristal en su pie y corro hacia un lado.

-Pero yo a ti si.

Digo y me precipitó contra el. Le pegó un puñetazo en la

mandíbula y el se tambalea. Pongo las manos en puños y el sonríe. Se saca el cristal del pie, sin dejar de mirarme y suelta una carcajada. Este idiota ya me esta cansando. El acorta el poco espacio que nos separa y me da un golpe en el labio. Demonios, pega fuerte. Caigo de senton en el piso y la vista se me nubla. El intruso me levanta de un jalón y vuelve a pegarme en la cara. Esto dejará marcas. Cuando vuelve a levantarme le pegó en sus partes íntimas y salgo disparada a la parte de abajo. Tomo el cuchillo que está en piso y miro a todos lados. El baja las escaleras y se queda parado junto a ellas. Carajo ¿nunca se rinde? Empuño el cuchillo y se lo entierro en el pecho. El saca una navaja y me la entierra en el muslo. Mierda. Sacó el cuchillo de su pecho y corro como puedo a la cocina. 

Di un paso y me corto con el cuchillo. Doble mierda. Me volteo y lo corto en la cara. El pasamontañas se oscurece y comienza a brotar sangre de la herida. El intenta apuñalarme, pero lo esquivo y lo intenta de nuevo, esta vez me hace un leve corte en la mejilla y yo retrocedo. Esto tiene que terminar. Le pegó con todas mis fuerzas en la cara y otro en la pierna. Logró tirarlo y lo apuñaló en la espalda. Clavo el cuchillo varias veces y el maldito sigue vivo. Le doy la vuelta de una patada, me pongo a orcadas sobre el y entierro el cuchillo lo más profundo que puedo en su corazón y deja de respirar.

Dios santo, este tipo era duro de matar y tarde mucho. Me levantó de su pecho, tiro el cuchillo a la basura y me lavo las manos. Estoy cansada y las heridas sangran. Me revisó la pierna...

Joder, es profundo el maldito corte y acaba de mejorar mi pierna. Busco el celular, que está tirado en el piso y cuando lo veo la pantalla parece tener un tema de spider ¡Genial! Tengo tres llamadas perdidas de Dan ¡Demonios! Le llamó a Kate y contesta al segundo tono.

-¿Estas bien? -pregunta y no le respondo-. Ya estoy llegando.

Cuelgo, miro la hora 9:24. Dejó el celular en la barra. Pongo los brazos en jarras y miro el cuerpo ¿donde rayos lo ocultare? Es demasiado grande. Suspiro y lo arrastró hasta el baño de abajo. Pesa demasiado y hacer fuerza hace que mi pierna sangre más. Regreso a la cocina, busco velas y enciendo varias. En la cocina, las escaleras, la entrada y en la parte de arriba. Voy a la sala y enciendo la chimenea. Cuando iba saliendo de la sala, Kate entra y corre a abrazarme.

-Limpia la sangre -digo cuando deja de abrazarme.

-¿Lo mataste? -pregunta Kate.

-No, tuve una gran charla con el y lo invite a cenar -digo en tono sarcástico.

Kate no dice nada. Se va a la cocina y comienza a limpiar. Tomo la vela que estaba en las escaleras y me voy a mi habitación. Mi habitación no está tan dañada como la de Kate. Mis libros están tirados, pero no rotos, mi ropa en el piso y un espejo roto. Llegue antes que arruinada mi habitación. Me acuesto en la cama y me quito el pantalón con cuidado. La herida si que es profunda. Limpio mi mejilla y mi labio, ese maldito me rompió el labio y bueno yo le rompí mucho la cara. La luz regreso.

Estaba acostada en la cama, sosteniendo un pañuelo en el corte y limpiando mi brazo a cada rato. Se

escucho el timbre, luego voces, quejas y pasos ¿Quien es? La puerta de mi cuarto se abre y aparece Dan ¿Qué hace aquí...? Maldita sea, no conteste sus llamadas y no le envíe ningún mensaje. Se acerca a mí y me abraza.

-Tu clon me dijo todo...estas a salvo ahora, mi pequeña bambi -dice Dan en tono dulce y besa la coronilla de mi cabeza.

Me hecho a llorar en su pecho. Que mas quisiera estar a salvo. No estaré a salvo y él tampoco. Dan me abraza más fuerte y yo me quejó. Baja la mirada a mis muslos y sus ojos brillan por un segundo...luego se horrorizan. Toca mi herida y yo hago una mueca de dolor.

-Te llevaré al hospital -anuncia y hace ademán de cargarme.

-¡No! -chillo y Dan pega un salto-. No quiero ir al hospital, por favor no me lleves.

Dan asiente y me carga con cuidado. Cuando bajamos, Kate no estaba y a Dan le importó poco y me subió en su auto. Manejo despacio cuando marco un número ¿a quien llama?

-¿Estas en casa?...Sí, tranquila estoy bien...Hubo un...problema... Un problema, alguien necesita puntos y curación... Estaré allí en un minuto... Desaste de Kim -Dan me mira-. No... Si... Te veo pronto.

Cuelga y aprieta mi mano

-Pronto llegaremos.

-¿A donde vamos? -pregunto y miro por la ventanilla.

Pasamos unas cuatro cuadras y ahora entramos en un camino conocido. La casa de Dan y Amy. Dan estaciona el auto y se apresura a bajarme, la puerta está abierta y me lleva a paso veloz a su casa. Cuando entramos aparece una señora de unos cuarenta y pocos de cabello rubio lacio y ojos azul claro. Se nos acerca y me mira en brazos

de Dan. 

-Santo dios... Dan esa herida es profunda -dice la mujer. No parece horrorizada, pero si preocupada.

-La llevaré a mi habitación, date prisa mamá -dice Dan y se apresura a subir las escaleras.

Es su madre... Es hermosa y joven ¿por qué nunca la vi? Dan entra en su habitación y me deja en la cama. Enciende las luces y abre la puerta de un armario. Saca dos camisetas ¿para que las camisetas? Ahora que lo veo bien... Esta perfecto, excepto por su camisa azul llena de sangre y sus manos. Dan lleva pantalones negros ajustados y unos zapatos a juego. 

Se acerca a mí y baja la vista a la herida o creo que es la herida. No recordaba que estaba en bragas y el suéter solo me daba hasta las caderas. Lo miro y lo encuentro con la mirada perdida en mis bragas. Se muerde el labio y sube la mirada a mis ojos.

-Pervertido -digo y arrugo la nariz.

-Eres tentadora, pero no estás bien y también tienes un corte en la cadera -señala el corte y luego el suéter-. Te traje una camisa para que te quites ese suéter lleno de sangre...

-Date vuelta -digo y el se da la vuelta tapándose los ojos.

Me quito el suéter y me pongo su camiseta. Cuando levante la vista, lo encontré mirándome y parecía preocupado. Iba a regañarle, pero entró su madre con un montón de cosas en sus manos y me calle. Ella se sentó a mi lado y comenzó a revisar las heridas.

Sus ojos azules eran atentos a todo. Inspeccionó mi rostro y moretones. Sacó las cosas las para poner puntos y se volteo hacia su hijo.

-Dan, cariño necesito un vaso de agua y pastillas para el dolor.

El

asiente y sale disparado hacia abajo. Su madre me voltea a ver y sonríe un poco.

-Le dije eso en parte porque te va a doler y el no soporta ver a alguien así -asiento y ella frunce el ceño-. ¿Cuál es tu nombre cielo?

¿Para que mentirle a su madre? 

-Kara -digo y hago una mueca cuando me entierra la aguja.

La mamá de Dan es un amor. Cada vez que daba un punto, me hacía hablar y trataba de sacarme una sonrisa.

-Listo -dice cuando da el último punto.

-Gracias, Señora Colleman -creo que ese es el apellido de Dan.

-Dime Sarah -sonríe y sale de la habitación.

Me levantó de la cama con cuidado y siento un calambre en la pierna. La camisa de Dan huele a el y es lo suficientemente grande para darme hasta los muslos. Voy con cuidado al baño y me miro en el espejo. Mi labio está un poco hinchado y tiene un pequeño corte. Mi mejilla tiene un rasguño, que no se por que me sangraba tanto y ni siquiera me corto tan profundo. Y por último mi cabello.... Antes lo tenía hasta debajo de la cintura y ahora lo tengo al menos siete dedos debajo de mis hombros. Ese maldito hijo de... Dan asoma la cabeza por la puerta del baño y le sonrió. El entra y me rodea con sus brazos.

-Te puedes quedar -susurra en mi oído.

-Tengo que volver con mi hermana...pero te veré mañana en la fiesta -volteo y pongo mis brazos en su cuello.

-Te llevaré... -baja la vista a mi atuendo-. Mejor hay que ir.

-¿Por que? -frunzo el ceño.

-Por que es muy tentador verte así...y más en mi habitación.

Me sonrojo y le doy un golpe en el brazo. Es un imbécil. Dos minutos después me deja en mi casa, me da un corto beso en la frente y se va. Suspiro y voy en busca de Kate.

-¿Kate?

-Aquí estoy -dice ella y sale del baño.

-¿Qué hiciste? -pregunto y me asomo en el baño.

El cadáver no está. No hay rastro de sangre y no huele mal. 

-Lo arrastre hasta la cochera, de ahí lo metí en la cajuela del auto y limpie el desorden...el de arriba sigue igual -dice y se quita su blusa.

-Hay que deshacernos del cuerpo... -hago una pausa-. El bosque. Lo enterraremos en el bosque dentro de una hora... ¿Tenía el símbolo?

Kate asiente y yo me estremezco. Todos los matones con los que luchamos o matamos...tenían un símbolo extraño. Kate se va a su habitación y yo a la mía. Tomo unos pans del piso, me los pongo, me quito la camisa de Dan y me la cambio por una sudadera. Tomo mis deportivas y bajo las escaleras. Kate sale de la casa y yo la sigo. Abrimos el garaje, entramos y subimos al auto.

Kate conduce hasta lo más alejado que puede del pueblo, cuando ya estamos lo suficientemente lejos, entra en el bosque y para el auto cuando ya no podemos avanzar más. Arrastramos el cadáver más lejos aún, Kate me da una pala y comenzamos a cavar. Cavamos casi dos metros, arrojamos el cadáver en el hoyo y volvemos a cubrirlo de tierra. Regresamos a casa y dormimos en mi habitación. 

Este día fue... No tengo palabras para decirlo. Pero cada tiempo mandan a un matón para deshacerse de nosotras y fallan. Tengo miedo de perder a Dan y a Kate. Ya perdí a mi demás familia y no quiero perderles. No quiero irme de aquí, pero se necesitan tomar medidas y las tomaré...

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Capítulo 10

Al día siguiente sentía el cuerpo molido. Cuando me levante de la cama, mis piernas temblaron y me volví a sentar en la cama. Moví a Kate y ella se despierta de golpe.

-¿Qué sucede? -dice toda somnolienta.

-Nada, tenemos que ir a clases y ya es tarde -digo y ella pega un brinco.

Sale de la cama y corre a su habitación. Yo salgo lentamente de la cama y abro las cortinas. El día está soleado, hace un poco de calor y corre aire fresco. Tomo una blusa, una falda y ropa interior del suelo y me voy al baño. 

Diez minutos después estaba en la entrada esperando a Kate. Dios, como tarda y sólo tenemos unos minutos. La invoque mentalmente, por que literalmente venía bajando las escaleras a brincos. Ella sale disparada hacía el auto, yo cierro y subo a la carrera el auto. Kate conduce a casi ochenta kilómetros por hora y no tardamos mucho en llegar.

Nos apresuramos para ir a las clases y terminamos corriendo por los pasillos. Es martes y la primera clase que tengo es Literatura. Con Logan. Y cuando llego, voy directamente a sentarme junto a Logan y le sonrió.

-¿Te maquillaste? -pregunta y frunce el ceño.

Pensé que nadie lo notaria. No tenía moretones, pero si marcas rojas y trate de ocultarlas con maquillaje. Y mi brazo...me puse una camisa de tres cuartos fresca y la falda me daba arriba de las rodillas.

-Sí, solo un poco -le sonrió y el asiente.

-Ah...por cierto, la fiesta se cambia para hoy -hace una pausa-. Porque bueno muchos tendrán resaca como para ir a clases.

-De acuerdo... ¿Y que celebran?

-El cumpleaños

de Mike.

-¿El cumpleaños de Mike? -pregunto y el asiente-. Vaya...no tenía idea.

-Sí y bueno espero verte -sonríe y yo asiento.

La semana pasada hable con él y le aclare que lo quiero como amigo. El acepto, un poco triste, pero dijo que sí y yo respire tranquila desde entonces. Hoy no comparto ninguna clase de con Dan y como por obra del cielo, me llega un mensaje de él.

*Bambi, te veo en la cafetería con el demonio de mi hermana.

Sonrío al leer como le dice a Kim. Es un cretino. Necesito conocerlo más, me gusta así como es, pero hay cosas que quiero saber de él y así tal vez regalarle algo. Estoy sonriendo como una idiota, recuerdo que Logan está a mi lado y me volteo a verlo. Logan mira el mensaje y parece molesto. Carraspeo y el quita la mirada de mi celular. Nota mental: comprar nuevo celular. 

La clase termina y me despido de Logan. El no sabe que Dan y yo... No sé que somos el y yo. Pero Logan sospecha que e estado con Dan. Me voy a mi clase de francés. Esta universidad parece más a una preparatoria. Entró a la clase. La señorita Milicens comienza a dar su clase al instante que entra el último alumno. Francés se me pasa volando y me voy a mi clase de biología. Biología la comparto con Kate, así que la buscó y me siento junto a ella.

-Ya crecerá -dice y señala mi cabello.

Lo tocó instintivamente y gruño. Sí, crecerá...pero le llevará tiempo. 

-Eso espero -digo y hago un puchero.

-Ya... Además corto te queda bien -dice y me hace sonreír.

Tengo un amor de hermana. El profesor entra y comienza

su clase. Se me hace eterna, pero al terminar arrastró a Kate hasta la cafetería y buscamos a Kim. Veo su rizada cabellera roja, junto a ella está Mike y Amy... No veo a Alex por ningún lado. 

-¡Mara! ¡Maya! -grita Kim y agita su mano.

Sonrió y nos acercamos. Ella es demasiado diferente a Dan. Todavía no me la creo que sean hermanos, ella con aspecto dulce y él...de un maldito seductor con toque de chico malo. Me siento enfrente de Kim, Kate alado de Amy y Mike...bueno el rodea la cintura de Kim. Se ve tan tierno con sus gafas y alado de Kim me da más ternura. Amy recibe una llamada, creo que es Alex y se levanta.

-Las veo luego chicas... Tengo que ver a Alex -dice y se despide de nosotras.

Veo como Amy se aleja y escucho a Kate quejarse. Mike y Kim se devoran enfrente de nosotras. Cuando se separan, Kim ve detrás de mi y pone los ojos en blanco. Me giro y veo a un Dan no muy contento. El debió de a ver visto la escena de su hermana menor y Mike. Le sonrió y se sienta a mi lado. Fulmina con la mirada a Mike y este se hace pequeño en su asiento. 

Entiendo a Mike. Dan tiene cara amenazante y que asusta a cualquiera, a mi no. He visto muchas caras de ese tipo. Kim pone de nuevo los ojos en blanco, Mike se remueve nervioso y Dan no le quita los ojos de encima al pobre. Miro a Kate y esta se parte de risa, tardó un segundo en hacerle compañía y las dos nos carcajeamos. Esto es épico.

-¿Mara podemos hablar? -todos nos volteamos, menos Dan.

El sigue matando con la mirada a Mike. Zack parece nervioso. Le sonrió.

-Hola Zack

-Hola Maya...¿me permites

a tu hermana? -dice y mira a Kate.

Ella asiente. Se levanta y sale de la cafetería con Zack. Kim se voltea y comienza a hablar con Mike. Me volteo a ver al hermano celoso y hundo mi dedo índice en su mejilla.

-Eres un celoso -digo y el ahora pone sus ojos en mí.

-Solo protejo lo que quiero -dice y pone una mano en mi mejilla.

Su mano es caliente, grande y me toca con una delicadeza asombrosa. Ya se por que lo dice. Mira mis ojos y sonrió.

-Se cuidarme sola.

-Ya lo veremos -dice y me rodea los hombros con un brazo.

-Te apuesto a que te ganó en una lucha -digo y levante las cejas.

El toca su barbilla en gesto pensante y me hace reír. Se muerde el labio y vuelve a mirarme.

-Eso sonó más a un reto que a una apuesta -dice y besa mis labios suavemente.

Siento que muchos ojos nos miran y me apartó de él. Kim tiene la boca abierta en una perfecta "O", Mike tiene los ojos como platos y todos los que están alrededor nos miran ¿por qué rayos nos ven? Siento que me sonrojo y Dan sonríe.

-No me lo puedo creer... --dice Kim y se voltea hacia Mike-. Me debes veinte dólares.

-¿Apostaron? -digo sorprendida.

No puedo creer que hayan apostado.

-Heee...si -dice y se encoje de hombros.

-Tu y yo tenemos que hablar de muchas cosas hermanita -dice Dan en tono amenazante-. Y a ti -señala a Mike-. Si le haces algo a esa cosa que tienes alado, te las veras conmigo.

Mike traga saliva y Kim rueda los ojos. Suelto una risita y niego con la cabeza. Es gracioso ver al hermano mayor en acción.

-Yo también tengo que hablar contigo, idiota -dice Kim

y se mete una papa en la boca.

-Y hablando de tener conversaciones -digo interrumpiendo el duelo de hermanos-. Tu y yo necesitamos hablar.

Señaló a Dan y me mira con cara desconcertante. El timbre suena, es hora de ir a clases y soportar cinco horas más de clases. Le doy a Dan un beso casto y me levantó de la silla.

-Me voy...los veo más tarde.

-Pero... -se queja Dan, pero lo calle con otro beso.

Cuando abrió los ojos, yo salí disparada hacia la salida y escuchaba sus quejas. Necesito decirle lo que en verdad sucedió ayer y una pequeña parte de mi vida. Tengo miedo que Dan se aleje de mi por lo que le diré y diga verdaderamente mis motivos del por qué...estoy aquí. Entró en mi siguiente clase, que pasa lentamente y así sucede con todas las demás. 

Cuando salgo de mis lentas y tortuosas clases, voy al estacionamiento y espero a Kate. Un minuto después aparece y viene muy sonriente. 

-¿Qué sucede? -pregunto y ella suspira.

-Zack me pidió ser su novia y...acepte -dice y vuelve a suspirar.

-Me alegro mucho por ti -la abrazo y la tomo por los hombros-. No le digas tu nombre aún.

Ella asiente. Sabe que no podemos confiar en las personas y las medidas que tomamos fueron altas. Entramos al auto y nos vamos a casa. Kate me cuenta lo que hizo y yo no le digo gran cosa...pero si le cuento sobre la discusión de hermanos. Ella ríe y yo le digo que hoy no tenemos que beber. Ella dice que no...y eso significa que cuidare de ella. Mejor que la última vez que me emborrache.

Al llegar a casa la ayude a re acomodar su habitación.

Llamamos a la mueble-ria y pedimos cosas nuevas. Llegarían más tarde, así que mientras tanto guardamos nuestra ropa y limpiamos toda la casa. Comenzamos a las dos y media y terminamos a las siete. Tenía que aceptarlo...había hecho un desastre. Pero el muy maldito no moría, seguía vivo y destruyendo.

No tenía ganas de ir a la fiesta... Además la ropa que tenía dejaba al descubierto mi herida del brazo y los puntos de la pierna dolían un poco. No quería ir para emborracharme como la última vez y tener más cortes. Kate tendría que ir con las chicas... Así que llame a Kim.

-¡Maya!

Grita Kim al contestar y yo alejo el teléfono de mi oído. Esta chica siempre tiene energía.

-Yo no iré a la fiesta -digo y Kim se queja-. No me siento bien.

-De acuerdo...recogeremos a Mara en tu casa. Mmm...a las nueve, iré con los demás y espero que te recuperes.

-Gracias Kim. Adiós.

-Cuídate. Bye -dice y cuelgo.

Listo. Yo no iré, Kate si y no estará sola... Sabe cuidarse sola, pero me preocupa que este demasiado ebria y no se defienda. Ok, tengo que hablar con ella.

-¡Kate!

Grito y recuerdo que Mike llegó a cinco minutos. Me doy cachetadas mentalmente. No seas idiota Kara. Me digo a mi misma y tomo a aire para gritar.

-¡Mara! ¡Ven un minuto! 

Ella aparece en la puerta y esta despeinada. Sonrío y ella se pone roja. La señaló y suelto una carcajada.

-A mi no me engañas. Tu estabas teniendo sexo -digo y me río más alto.

-Cállate -dice y se pone roja.

-Escucha, Kim y los demás vendrán a las nueve por ti. Yo no iré,

no me siento bien.

Ella se me queda viendo y sonríe ¿por qué sonríe? 

-Tu...a mi no me engañas -me señala ahora a mí-. Traerás a alguien a casa mientras yo no estoy. Solo usa protección hermanita.

Dice y sale de mi habitación ¿Qué use...? 

-¡Mara! 

Grito y escucho risas. ¿Ella piensa que tendré sexo con...? Aún no e pensado en ello y por cierto...necesito hablar con Dan. Llamo a su número y contesta al tercer timbre.

-¿Qué sucede? -pregunta el, en tono preocupado.

-Nada, solo quería hablar contigo y quería saber si nos podemos ver más tarde -pregunto y me voy a las escaleras.

Escucho risas en la habitación de Kate. Esa maldita si esta teniendo sexo. Bajo las escaleras y escucho ruido al otro lado del teléfono.

-¿Dan?

-Sigo aquí... Bambi estoy en el hospital -iba a hablar pero me interrumpe Dan-. Estoy bien, te hablo más tarde y te explico.

-De acuerdo, adiós y cuídate.

Cuelgo y me voy a la cocina. Abro el refrigerador y sacó el jugo de naranja. Tomo del envase. Se que a Kate le molesta, por que dice que no son modales de una señorita y yo siempre le digo que no soy una. Tomo un vaso y sirvo jugo en el. Regreso a mi habitación, colocó el vaso en la mesita de noche, tomo mis audífonos y me sumerjo en la música. Adam Levin canta Lost Stars, una canción lenta y me quedo dormida escuchando la canción.

Mi alarma me saca del sueño que estaba teniendo con bailes y máscaras. Miro la hora...11:30. Me levanto y voy a la habitación de Kate. Vacía. Ya se debió de a ver ido hace casi dos horas mientras dormía. Regreso

a mi habitación y me meto a bañar. Luego de salir tomo una pijama de unos shorts cortos rosas y una blusa de tirantes. Dan no a llamado, tal vez siga ocupado y lo vea mañana. Cepillo mi pelo y lo enrrollo en una toalla para que se seque. Escucho el timbre y bajo a abrir.

Cuando abro veo que es Logan y se arroja encima de mí. Esta borracho. Caemos al piso y el me inmoviliza ¿Qué le pasa?

-Logan suéltame -digo con los dientes apretados.

Me esta lastimando las heridas y el aroma del vodka me penetra la nariz.

-¿Por que? ¿Por que con el y no conmigo? -dice.

-¿De que hablas? -digo y trato de zafarme del él.

Logan toma mis muñecas y las pone arriba de mi cabeza. Esto no va a terminar bien.

-¿Por que Dan? Siempre lo escogen a él. Ya te acostaste con el de seguro.

¿Qué? Está delirando y su acercamiento no me gusta. Logan está demasiado cerca de mí.

-Ay Maya, creí que eras diferente y no caerías tan fácil en sus brazos. Pero no...resultaste ser una zorra. Si el té tuvo, yo también te tendré...

¿De que está hablando? Logan comienza a besar mi cuello y se pone a orcadas sobre mi. ¿Qué soy una zorra? Forcejeo con el, pero es inútil no puedo escapar y ahora sube sus manos por mi cuerpo. Me siento estúpida y sucia. No voy a permitir que se sobrepase conmigo, se metió con la persona equivocada y no por que sea mi amigo será tan dulce con el. Muerdo su oreja con todas mis fuerzas y el grita. Me pega una cachetada con mucha fuerza. Ok, se a pasado de la raya. Le pegó un puñetazo en la cara y sólo logró hacerlo enojar más. Esta vez me pega con

puño cerrado en la cara y se me nubla la vista. De esto era lo que me hablaba Dan ¿donde estará? Me remuevo y logró tirar a Logan. Me levantó con rapidez, pero es en vano y el me inmoviliza contra la pared. Mierda, duele y no puedo pelear contra el. 

Logan sube sus manos por mis piernas y yo cierro los ojos. Esto me recuerda a Christian y lo que sucedió después fue peor. Logan es derribado y no es por mi. Cuando abro los ojos veo a Dan golpeándolo salvaje mente y Logan trata de defenderse. Dan tiene una fuerza impresionante, sigue golpeando a Logan y sigue aún cuando Logan deja de moverse. Lo va a matar.

-¡Dan! -trato de alejarlo de Logan, pero sólo recibo que me empuje y caiga al piso-. ¡Dan, lo vas a matar!

El deja de golpearlo y cuando voltea a verme sus ojos no brillan. Son de un azul oscuro y no eléctrico. Esta demasiado molesto. Miro sus manos...Sus nudillos están sangrando y su mejilla está roja. ¡Demonios! ¿Por que todo me ocurrió está semana? Me levanto del piso y corro a abrazarlo. El sigue viendo a Logan con rabia...ni que me hubiese violado, bueno tal vez eso trataba de hacer. Pero no lo logró, gracias a él y ahora siento que me voy a desmayar.

-Dan sube a mi habitación -susurro en su pecho.

El no me abraza y lo siento muy lejos de aquí. El no se mueve. Necesito sacar a Logan y calmar a Dan. 

-Por favor...-digo al borde de las lágrimas.

Dan me mira a los ojos y asiente. Dejo de abrazarlo y observó como sube las escaleras. Suspiro y miro a Logan ¿como sucedió esto? Dan tenía razón y no quise creerle, lo di por loco y mira como terminó todo. Tomo los pies de Logan y lo arrastró hasta sacarlo de la casa. Demonios, si que pesa y sigue inconsciente. Lo dejo en la entrada y cierro la puerta con seguro. Suelto un suspiro, tengo que hablar con Dan y decirle un poco más de mí. Subo las escaleras y me voy a mi habitación... Solo dile lo básico y ya.

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Capítulo 11

Cuando entró la habitación está oscura y sólo veo la silueta de Dan parada junto a la cama. Me acercó a él y lo abrazo. El me responde el abrazo, envolviéndome en sus brazos y dándome calor. Se sienta en la cama y yo en su regazo. 

-Me había asustado y al ver a ese maldito sobre ti...-dice Dan en un susurro.

Rodeo su cuello con mis brazos y hundo mi cara en su cuello. Eso fue algo que quiero olvidar.

-Quiero olvidar eso... Por favor -susurro y lo abrazo más fuerte-. Quiero pasar una noche normal con mí...

No sé aún que somos exactamente. Dan me aparta un poco y pone su frente contra la mía. No logro ver sus ojos, esta demasiado oscuro para verlos.

-Soy un idiota... -dice y parece molesto.

-¿Cuándo no lo eres? -digo y lo siento sonreír.

-Ammm...no soy bueno en esto, bambi -dice, mientras desenrosca mis brazos de su cuello y toma una de mis manos-. ¿Quisieras...quisieras ser mi...? 

Parece que nunca dijo esa palabra así que le contesto sin titubear.

-Sí, si quiero -digo y lo beso.

Dan me acuesta en la cama sin dejar de besarme y se pone encima mío. El primero que se aparta soy yo y enredo mis dedos en su cabello.

-¿Hay algo que quieras preguntar?

Dan se queda en silencio. Creo que está pensando. Se quita de encima de mí y se acuesta a mi lado.

-Tengo muchas preguntas -dice.

Me pongo de costado y trato de ver sus ojos. Solo veo la sombra de su cara.

-Tengo tiempo -digo y pongo una mano en su mejilla.

-¿Dónde están tus padres?

-Murieron -digo y me estremezco.

-Sí no quieres

hablar sobre ellos no hay problema -dice y besa mi mano.

-No, tengo que -digo y pongo los ojos en el techo-. Mi madre murió hace un año y mi padre hace algunos meses... 

-¿Hermanos? -pregunta Dan y acaricia mi brazo.

Su caricia me da escalofríos y sonrió un poco.

-Tenía a dos...pero murieron en un accidente -digo y Dan me rodea la cintura con su brazo-. Así que me queda Kate.

-¿Kate? -pregunta Dan y lo imagino frunciendo el ceño.

-Mara es Kate. Ese es su verdadero nombre.

-Ya entiendo -dice y pone su cabeza en mi hombro.

-¿Otra pregunta?

-¿Donde naciste?

Eso es fácil.

-California...viví ahí diez años.

-¿De dónde bienes?

-Nueva York.

-Vaya...-siento a Dan soltar un suspiro-. Bienes de muy lejos, bambi.

-Lo sé -digo y acaricio el pelo de Dan.

-¿Por que te mudaste a Twin falls?

-Eso...no lo puedo decir.

-¿Por que?

-Por que tengo miedo -digo susurrando.

-¿Miedo de qué? -pregunta Dan, mientras se apoya en un codo.

-De perderte.

Dan se acerca a mi y me besa suavemente.

-Nunca me perderás.

Eso quiero pensar yo también. Creo que por hoy termine de decirle sobre mí.

-Ya que estamos en preguntas y respuestas...creo que es mi turno -digo y beso la nariz de Dan.

-Ok, pregunta bambi.

¿Qué quiero preguntarle? Buenos ya tengo la lista.

-¿Qué hacías en el hospital?

-Estoy estudiando para ser doctor -hace una pausa-. Mi madre es doctora y trabaja en el hospital...así que me ayuda con las prácticas.

Wow ¿Dan estudiando para doctor? Me impresiona

y saber que su madre es doctora también.

-¿Cuantos años tienes? 

Esa pregunta me intriga. El parece de veintitrés o más, por su forma de vestir y hablar.

-Veintiuno.

-Eres un fósil -digo en tono burlón.

-Sí, soy un fósil y así te gustó -dice y pone las manos detrás de su cabeza.

Cierto, me lleva casi tres años, pero así me gusta y no creo que me deje de gustar.

-¿Por que exactamente me dices bambi? 

Esa pregunta la tengo desde el día en que me dice el apodo. En parte no le creí lo que dijo.

-Eso...quiero guardarme lo para mí.

-Vamos...dime -ahora yo me pongo a orcadas sobre su estómago.

-No te diré... ¿Otra cosa..?

-Sí ¿por que todos nos veían tan raro hoy? 

Eso también me intriga. Dan resopla y pone sus manos en mi cintura.

-Antes de ti...era un maldito -dice y suelto una risa-. No, es en serio. Era un mujeriego de lo peor...me la pasaba de bragas en bragas todos los fines de semana. Y al día siguiente hacia como que nada paso...

-Eres un maldito -afirmo y Dan ríe.

-Ya no lo soy bambi...-suelta un suspiro-. Por eso ese idiota se quería pasar contigo...siempre que me veían con alguien, significaba que me había acostado con ella. Y ese idiota creyó que tu eres igual a las demás.

-No lo soy -digo y pongo las manos en su pecho.

-Lo sé, eres una chica maravillosa y encantadora-dice y baja sus manos a mis caderas-. Y sin contar lo sensual que te ves arriba de mí.

Golpeó su pecho y el finje que le duele. No le pegue tan fuerte y el se hace el dolido, eso me hace reír y besar

lo.

-Eres un idiota -digo y me levanto de la cama.

-Sí y tienes que admitir que soy un idiota muy sexy...

-Sí claro...-digo y prendo la luz de mi habitación.

-Vamos sabes que lo soy ¿dime quien no se resiste a esto? -dice y se señala el mismo.

Niego con la cabeza y rio. Es un creído, pero hay que aceptarlo nadie se puede resistir y es muy sexy. 

-¿Y cuando pensabas decirme que tu cumpleaños es el sábado? -dice y me detengo de golpe en medio de la habitación.

-No te dije nada porque nunca lo celebró -digo y me pongo en marcha de nuevo.

Me acuesto a lado de Dan y gira su cabeza para verme. Ahora puedo ver sus ojos que brillan como dos estrellas. Miro el rostro de Dan y la boca se me hace agua...es guapo a no poder más y hasta parece modelo de Calvin Klein. Nunca lo e visto sin camisa, pero debe de tener un físico espectacular y lo sé con solo ver sus fuertes brazos y su bello rostro. 

-Te regalare algo lindo.

-Nada de regalos -digo y niego con la cabeza.

-¿Aún cuando el regalo puedo ser yo? -pregunta y mueve las cejas de arriba a bajo.

Me muerdo el labio y miro a Dan. Puedo babear por el...pero no. Aprieto los labios y niego con la cabeza. 

-Es tentadora tu propuesta...pero no mi querido Dan.

El hace un puchero y sonrió. Se ve tan tierno haciendo eso. Comenzamos hablar hasta largas horas y cuando veo la hora me sorprendo. 3:08 y comienzo a bostezar. Dan me atrae a su pecho y siento como mis ojos se cierran lentamente. Aún siento el pecho de Dan subir y bajar, su corazón late a un ritmo relajado y cuando

levanto la vista para verlo, me enamoró de su imagen. Dan duerme profundamente, en sueños gruñe y me rodea con sus brazos. Su rostro está relajado y parece de su edad. Me acurruco en su pecho y me dejo llevar por el sueño.

Me despierto lentamente al sentir un reguero de besos que Dan me da en la cara. Ya es de día y soy despertada de la mejor manera gracias a Dan. El me besa en las mejillas, la frente, la nariz y mis ojos. Deja un camino de besos desde mi oreja hasta mi barbilla y por último besa mis labios. Lo atraigo hacia mi provocando que caiga encima mío y comencemos a reír como dos niños. Nos besamos lentamente y luego comenzamos a besarnos con ganas. Dan pone sus manos a cada lado de mi cabeza y se levanta un poco para no aplastarme con su peso. Cuando veo sus ojos están oscuros y sus pupilas dilatadas. Nuestro pechos suben y bajan rápidamente, y nuestras respiraciones también se aceleraron.

-Quiero poseerte...-besa mi cuello y susurra en mi oído-. Quiero hacerte mía. 

Y es ahí cuando siento un golpe en el pecho y me dan ganas de llorar... Comienzo a llorar y me tapó la cara con las manos. Dan se pone a orcadas sobre mí y quita mis manos. Esta preocupado y ahora falta que piense que me a hecho daño. 

-¿Qué ocurre? -pregunta en tono preocupado-. ¿Eres...?

-No -suelto un sollozo y respiro hondo-. Tengo que contarte algo...

Dan se acuesta alado mío y toma mis manos entre las suyas. Se lleva mis manos a sus labios y las besa suavemente. Dios, esto será demasiado para mí y hace meses no hablo sobre esto.

-Dime que ocurre bambi.

-Esto

es muy difícil...más difícil de lo que e hecho todos estos meses -me estremezco y respiro hondo-. Esto sucedió hace casi dos años...

Me acababa de mudar a una nueva casa en Nueva York y tuve que cambiar de instituto. Me enamore de un chico mayor que yo por casi dos años y en ese momento las hormonas estaban alborotadas. Su nombre era Christian. Llevaba con el más o menos tres meses...el quería dar el siguiente paso y yo me negué, él no volvió a tocar el tema nunca y se distanció de mí. Una noche fui a una fiesta con Kate y otra amiga, me encontré con Christian... Bebimos y en cierto momento me dio un vaso, dijo que era vodka y lo tome pensando que era eso...Comencé a sentirme mareada, así que Christian me llevo a una habitación y nos encerró en ella...

Dan aprieta la mandíbula y las manos en puños. Se debe de imaginar que ocurrió luego. Tomo sus puños y el abre las manos. Me llevo una de sus manos a mis labios, la beso y sigo contando la historia.

-Me dijo un montón de atrocidades, palabras que me hicieron sentir sucia y luego el me aventó en la cama. La bebida que me había dado tenía una droga que duerme tus sentidos y a tu cuerpo. Lo peor fue cuando abuso de mí y no pude moverme para defenderme. Me violo Dan... Abuso de mí cuando yo estaba en un estado dónde mi cuerpo no recibía ordenes de mí y el hizo lo que quiso con mí cuerpo...

Rompo en llanto y Dan me abraza hablando en mi oído palabras tranquilizadoras. De todo lo que me a sucedido, creo que esto está en el tercer lugar de mis traumas psicológicos y siempre que lo recuerdo lloro por que

no pude ni moverme.

-Tienes que ir a tu casa, tu madre debe estar preocupada y de seguro tienes cosas que hacer -digo y limpio mis ojos.

-La llame y le dije que estaría contigo -besa mi cabeza y me abraza más fuerte-. Bambi, juro que tengo unas ganas de asesinar a alguien y por cierto ¿Dónde está ese idiota? 

-Lo saque de la casa...y no lo vas asesinar.

-Se merece eso y más -dice entre dientes.

-Ya...tranquilo -digo y lo beso.

Dan gruñe y yo sonrió. Pasamos horas hablando, perdí la noción del tiempo y no tengo ni idea dónde está Kate. No la e visto desde ayer antes que se fuera a la fiesta ¿Dónde estará? Tengo que llamarla. Trato de levantarme de la cama, pero Dan me toma de la cintura me arroja al colchón. Se arroja encima de mí y comenzamos a reír. Trato de tirarlo, pero sólo consigo que rodemos y yo quede encima suyo. Me arrecuesto en su pecho y respiro su aroma.

Pasamos unos minutos así hasta que me estómago ruge de hambre y Dan ríe.

-¿Tienes hambre bambi? ¿Quieres unos huevos revueltos? 

Pregunta y se levanta de la cama. Yo asiento y me levanto de la cama.

-¿Sabes cocinar huevos revueltos? -pregunto y Dan asiente.

-Sí y me quedan buenísimos.

-Hay que probar para creer -digo y Dan sonríe.

Camino hacia la puerta y jalo a Dan conmigo. Bajamos las escaleras entre risas y fuimos a la cocina. Al instante que llegamos Dan se pone en marcha y yo lo observó desde el taburete dónde estoy sentada. Se mueve con gracia y suavidad por la cocina mientras prepara la comida.

-¡Joder!

Grita y yo pegó un

brinco de mí asiento. Corro y me paro enfrente de él. El sostiene una de sus manos y la tomo. Revisó su mano y no veo nada.

-¡Te engañe! -dice y muestra sus manos.

Lo fulmino con la mirada y le pegó un manotazo con mucha fuerza. El imbécil me asusto. Dan me mira con enojo y yo retrocedo.

-Está la pagas nena.

Acorta el espacio que nos separa, se agacha y toma mis piernas.

-¡No! ¡No,no, no Dan! -chillo y el me carga en su hombro.

Me sienta en la barra de desayuno y toma mi cara entres sus manos. Impacta sus labios contra los míos y lentamente baja las manos a mis caderas. Pongo mis manos en su cabello, enrosco mis dedos en el y lo jalo para acercarlo más a mí. Lo tengo entre mis piernas y el empuja sus caderas. Me alejo de él y hundo mi cara en su hombro. Dan se mueve y siento su erección en mi pierna.

-Creo que no tengo hambre de comida -dice en tono pícaro.

-Pervertido -digo y levanto la cabeza de su hombro.

Dan sonríe y besa mi frente.

-Yo me muero de hambre...

Digo y alejo a Dan. Salto de la barra, busco un plato y me acercó para servirme un poco. Pero Dan me arrebata el plato, me señala el taburete y yo obediente me voy a sentar. Dan me pone el plato repleto de hotcakes, huevos revueltos y un vaso con jugo de manzana. Corto un poco de los hotckes y me lo llevo a la boca. Jadeo de placer, esta delicioso y cuando pruebo los huevos revueltos y me devoró todo. Volteo a ver a Dan y este sonríe satisfecho.

-¿Está rico? -pregunta divertido.

Término de masticar y trago. 

-Quien lo creería...sabes cocinar y muy bien

-digo y me meto otro trozo del desayuno.

Desayunamos y cuando terminamos me dispongo a recoger...pero Dan me fulmina con la mirada y me vuelvo a sentar. Busco a tientas mi celular y no lo encuentro. Lo deje arriba. Le digo a Dan que voy por mi celular, el solo asiente y salgo disparada hacia las escaleras. Las subo a la carrera, corro hacia mi habitación y me arrojó a la cama. Veo la hora...11:22. Tengo dos llamadas perdidas. Una de Kate y otra de Tom.

Idiota, idiota, idiota, idiota, idiota, idiota y doble mierda. Tengo una llamada pérdida de Tom y no se cuando volverá a llamar... ¡Carajo Kara! ¡En serio genial! Comienzo a caminar de un lado a otro en la habitación y me maldigo a mi misma. Tengo que volver a cambiar de número, el no se arriesgara a llamarme otra vez a este número y si lo hace lo encontrarán a él ¡Joder Kara! Tengo que cambiar de número hoy mismo, lo antes posible y llamar a Kate. 

Revisó la llamada y veo que fue hace diez minutos. Mierda. No puedo localizarme con Tom y el solo lo hace cuando tiene algo importante que decirnos. Doble mierda, Kara. Me sigo maldiciendo y caminando por toda la habitación. Creo que mis pasos no demoran en escucharse abajo. Me siento en la cama, pongo los codos en las rodillas y hundo la cara entre mis manos. Eres estúpida en verdad... Me regaño a mi misma y suelto un suspiro.

Pero la pregunta es ¿para que me llamaría? Con el nunca se sabe y no puedes adivinar porque mí jodido tío y es un maldito misterio ¿tendrá noticias de Carol? ¿Sobre nuestros perseguidores? ¿El descubrió el porque nos quieren matar? ¿Sabrá algo sobre nuestros padres que nosotras no sepamos? Recibo una llamada y la contesto al instante.

-¿hola?

-Bambi -es Dan-. Tuve que ir a buscar a Kim, paso algo y esta histérica...te veo mañana nena.

-Hasta mañana, Dan -digo y cuelgo.

Dan no está y es temprano. No sé qué hacer, necesito moverme y distraerme de la ansiedad que tengo. Me levanto de la cama y rebusco en mi armario. Saco un pantalón, una sudadera y un top deportivo. Corro al otro lado y abro mi pequeño armario dónde guardo los zapatos, sacó unos tenis deportivos y me los pongo.

Tomo las llaves de la casa y mi celular. Kate no aparece. Y como si fuera adivina recibo un mensaje de ella.

*Estoy con Zack. Llegare más tarde y no tengas mucho sexo

Niego con la cabeza y sonrió. Nunca cambiará. Le mando otro diciendo que saldré a correr y que llame si algo pasa. Responde con un simple Ok. Bajo las escaleras, cierro la puerta y me pongo en marcha. Necesito correr o hacer algo...

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Capítulo 12

Tomó mi celular, audífonos y salgo a correr. Troto por el pequeño sendero de la casa y me alejo lentamente. Paso varias casas de alrededor, las casas están en completo silencio y es reconfortante. Necesito entrenar mi cuerpo, porque cuando pasó lo del el matón, mi pierna dolía y me estoy volviendo lenta. Comienzo a correr más rápido cuando pasó alado del sendero que lleva a la casa de Dan y salgo disparada por el borde de la carretera. Quiero alejarme de la civilización y relajarme un poco.

Sigo corriendo y llegó a la casa abandonada. Freno un poco y respiro profundamente. Miro al rededor, no se ve nadie y comienzo a correr hacia el bosque. Corro hacia el norte y mis pies siguen. La música suena en mis oídos, el aire golpea mi cara y comienzo a sudar poco a poco. Me pregunto si el tío Tom tendrá noticias urgentes ¿será sobre Carol? ¿Nuestros padres? ¿El sabrá quien mató a mis padres? ¿Por que nos buscan y nos quieren muertas? ¿Tendrá que ver con el pasado de mi padre? No lo sé, el siempre fue un maldito misterio y me recuerda a mi madre.

Me detengo de golpe y trago una bocanada de aire. Mi madre... Casi nunca habló de mi familia y menos de mis padres. Extraño el aroma que desprendían las rosas de mamá en su jardín y su olor a pintura, que desprendía su piel por estar tanto tiempo pintando cuadros. El olor que desprendía mi padre lo tengo gravado en la memoria... Tabaco, pólvora y limón. Por mi padre es que amo el té de limón y también por el odio el cigarro. Los extraño en verdad y estar sin ellos es doloroso. Me dejo caer en el suelo lleno

de musgo, ramas y hojas.

Las lágrimas empiezan a brotar de mis ojos y me quito los audífonos. El dolor y el odio me invaden. Ellos los mataron a todos... Mamá, papá, James y Nick. Nick mi estúpido hermano mayor. El era alto como Dan, de piel bronceada como yo, cabello negro como mi madre y ojos verdes como mi padre. Nick era guapo, inteligente y atlético. En pocas palabras...era el sueño de todas las chicas y la adoración de mi abuela. Carol. Mi pequeño y dulce James...ya no es tan pequeño. Ahora debía de cumplir dieciséis años y convertirse en un joven apuesto. James era el menor de los cuatro, la adoración de mi madre y el consentido de la familia. James era un poco más bajo que yo, su piel era igual que nosotras...bronceada, de ojos verdes y cabello castaño. Era idéntico a mi padre, con sus lentes y su forma de hablar. James era inteligente, audaz y tierno.

Dios, como los extraño y cuando los perdí mi mundo se vino abajo. Primero fue Nick, luego mi madre y James y por último...mi padre... Ver sus muertes fueron lo que me traumaron de por vida y son la causa de mis pesadillas. Tengo a Kate...la última familia más cercana que tengo hoy y me moriría si la pierdo a ella. Necesito encontrar a Tom a como de lugar. Me levanto del suelo y limpio mi cara. Miro al cielo negro y cierro los ojos ¿que are? Me pregunto a mi misma y cierro las manos en puños. Are lo que e hecho en los últimos seis meses...luchar por mi vida y proteger a Kate.

Unas gotas caen en mi cara y abro los ojos. A comenzado a llover y sólo pasan tres segundos cuando comienza a llover con más fuerza y se comienzan

a escuchar truenos. Mi pelo inmediatamente se pega a mi frente y mi ropa se empapa. No me importa mojarme, necesitaba esto y necesito más tiempo aquí. Camino hacia un árbol grande y meto mi celular dentro de la sudadera. Me siento en el suelo ahora húmedo y respiro el aire que que huele a humedad...y me recuerda a Dan. Cierro los ojos y me dejo llevar por el sueño.

Abro los ojos de golpe al escuchar un rayo. Diablos, hay una tormenta eléctrica y yo aquí sentada como idiota debajo de un árbol. Me levanto del suelo y miró la hora... Llevo aquí seis horas y ni siquiera recordaba que estaba aún en el bosque. Me apoyo en el tronco y me levanto. Tengo que volver. Me estiró un poco y vuelvo a correr en la lluvia. Recuerdo bien el camino de regreso y no tengo problemas para llegar a la casa abandonada. No paro en la casa y sigo corriendo. Corro junto a la carretera y en pocos minutos vuelvo a la civilización.

Entró a la casa empapada y me quito la sudadera y mis tenis. Camino hacia la sala y me encuentro con Kate sentada leyendo. Que raro que este leyendo y no esté en la computadora jaqueando cuentas. Si...Kate y yo robamos al menos unos mil dólares de la empresa donde trabajo nuestro padre.

-Necesito que me lleves al hospital -digo y exprimo mi cabello.

-¿Que te paso? -pregunta y me mira preocupada.

-Nada, solo quiero quitarme los puntos y revisarlos.

Kate suelta un suspiro y asiente. Subo a mi habitación y me cambio de ropa. Me pongo unos jeans, un suéter y unas botas cafés a juego. Pongo a cargar mi celular y bajo las escaleras. Kate tiene en mano un

paraguas y las llaves en la otra mano. Tomo el paraguas, lo abro y caminamos hacia el auto. Tardamos al menos veinte minutos en llegar al hospital. Me mandan a la segunda planta y espero sentada en la camilla. Kate se quedó en la sala de espera y me dijo que llamará si necesitaba algo.

-Kara. Que gustó verte otra vez.

Volteo a ver a la señora Sarah y le sonrió. Esta mujer siempre me hace sonreír.

-¿Quieres quitarte los puntos? -pregunta mientras revisa unos papeles.

-Si, pero quiero saber si ya mejoraron...

-Cariño, apenas han pasado tres días y tienes que esperar un poco más -ella me toma la mano y la aprieta suavemente-. ¿Que harás el día de tu cumpleaños?

Abro los ojos como platos. Dan. Niego con la cabeza y sonrió... Ese maldito.

-Dan me contó y quisiera que fueras a mi casa el sábado en la noche -me sonríe tiernamente.

¿Como decirle que no?

-La veré el sábado... Sarah.

Ella sonríe y anota algo en sus papeles. Me cita para dentro de una semana y me voy a la sala de espera. Veo a Kate al borde el sueño y me acercó lentamente a ella.

-¡Buuu! -grito y ella me pone cara de pocos amigos.

-¡Shhhhh! -me calla una enfermera de poco humor.

-Lo siento -digo y me siento junto a Kate-. La mamá de Dan me invitó a cenar el sábado -hago una mueca.

-Y yo te invito a comer -dice y yo pasó un brazo alrededor de sus hombros.

-Te regalare algo lindo -digo y ella sonríe

-No me regales ropa, por favor -ruega y yo río.

-Lo mismo digo...

Nos levantamos y nos vamos al auto. Afuera sigue

lloviendo y no parece que vaya a parar. Cuando llegamos a casa, comienzan a escucharse rayos y truenos. Kate se va a la cocina y empieza a preparar la cena. Subo a mi habitación y revisó mi celular. Tengo un mensaje de Dan.

-Hola nena.

-Hola imbécil ¿sabias que tu madre me invitó a cenar el sábado? Me pregunto ¿como sabe que cumplo ese día? 

-Me declaró culpable. Lo vas a celebrar quieras o no.

-Que mandon eres,cariño... 

Le mando el mensaje y Kate me grita que baje a cenar.

-Sí, lo soy bambi. Te veo mañana nena, descansa.

-Hasta mañana, imbécil. Descansa.

Dejo el teléfono en la cama y bajo las escaleras. Me voy al comedor y me siento en unas de la sillas. La casa era muy espaciosa... Tiene una tercera habitación, la sala está a la izquierda y el comedor, y la cocina a la derecha. Y por si fuera poco descubrí un armario debajo de las escaleras. Kate pone un plato con un sándwich de pollo y un vaso de leche. 

-¿Kate?

-¿Que sucede? -pregunta y deja el vaso en la mesa

-El cumpleaños de James es mañana...

-De eso no se habla, Kara -me interrumpe y se levanta de la mesa.

Mierda.

-Yo también lo extraño -digo y me acercó a ella.

Kate me mira con ojos cristalinos y me abraza. Unas cuantas lágrimas se me escapan y las limpio bruscamente. No debo de llorar. Le limpio las lágrimas a Kate y ella asiente.

-Mañana compro algo... -dice Kate en un susurro.

-No...lo aremos el sábado -ella asiente y se va a la cocina.

Mi madre

y James murieron en nuestro cumpleaños número dieciocho. Y James cumplía un día antes que nosotras...el diecisiete de septiembre. Mañana es su cumpleaños y no lo tenemos con nosotras. Esto es demasiado para un día. Subo a mi habitación, tomó una pijama, me trenzo el cabello y me acercó a la ventana. Veo como los rayos caen a lo lejos en el bosque y todo el cielo se ilumina cuando caen. Dios, como extraño a mi pequeña criatura de grandes ojos verdes y anteojos enormes.

Un rayo caen y doy un respingo. Malditos rayos. Me voy a la cama y me acurruco en medio de ella. Me tapó hasta la cabeza y suelto un suspiro. Recuerdo a un pequeño James en el jardín de mamá observando a las mariposas y a los pájaros...

Siento que el colchón se hunde a mi lado, Kate alza mi sabana y se tapa también hasta la cabeza. Quedamos de frente las dos y sus ojos brillan llorosos.

-Los extraño, Kara -dice susurrando.

-Yo también Kate...

Ella cierra los ojos y se deja vencer por el sueño. La miró por un rato y me doy cuenta que este bicho y yo somos el reflejo de nuestra madre. Nuestro pelo negro, los ojos y nuestra figura. Mi madre era alta, delgada y tenía unas cuervas bien definidas...era hermosa. Tan joven y tenía cuatro hijos... Nick le sacaba canas verdes a mis padres y James dolores de cabeza. Nosotras...bueno nosotras éramos otra cosa. Cierro los ojos y me dejo llevar por el sonido de los rayos que caen.

-Hey, bella durmiente -dice Kate y me destapa por completo.

Yo gruñó y me tallo los ojos. Kate ya está vestida con botas, suéter y una falda. Bostezo y me levanto

de la cama. Me meto al baño, me desnudo y me doy un baño con agua caliente. Relajo los músculos y me tomo cinco minutos. Salgo enrollada en mi bata de baño y con una toalla en la cabeza. Saco una blusa color verde, unos jeans, unos botines negros y mi chaqueta negra con flores. Me enamore de mi chaqueta al instante, negra de los brazos y repleta de flores. Me hago una coleta alta y bajo a desayunar.

-Iré a la ciudad a conseguir armas -dice Kate y come un trozo de manzana.

Cuando Kate habla de armas de refiere a cuchillos, dagas, pistolas y otras cosas. Kate es buena con la pistola, yo con los cuchillos y en pelea las dos somos buenas. Así que básicamente sabemos defendernos muy bien. Yo asiento y me levanto del taburete. Kate me sigue hasta afuera y nos metemos en el auto. Mientras conduzco Kate me dice que estará fuera hasta tarde...así que eso significa que la veré hasta el viernes en la madrugada.

Llegamos a la universidad y nos vamos a clases. Tengo francés, así que me dirijo a la clase de Milicens y acomodo mi mochila en el hombro. Como siempre la clase va lenta y pasó a la siguiente que es Biología con Kate. Solo rezo para no encontrarme con Logan. Entró a la clase de biología y me siento junto a Kate. Me dice que estará fuera toda la tarde y noche...así que la veré mañana temprano.

-Mañana temprano te veo en el bosque...lleva tu mochila -dice susurrando y yo asiento.

¿Para que me quiere mañana en el bosque? Sea lo que sea tengo que ir.

Kate se centra en la clase y yo dejo volar la mente. Necesito ir a comprar algunas cosas... Necesito un auto. Tal vez Dan me quiera

prestar el suyo y así puedo transportarme fácilmente. La clase termina y suelto un suspiro, tengo que decirle y rogarle para que me lo preste. Entró a la clase de Cálculo y me voy directamente con Dan. El se hace a un lado en su asiento y yo me siento en el espacio que dejó libre. Lo abrazo y le hago ojitos, lo beso y le sonrió.

-Tu quieres algo...-dice Dan en tono pensante y yo revoloteo las pestañas-.¿Qué deseas bambi?

-Dan... ¿Me prestaría tu auto? -digo y Dan niega con la cabeza-. Por favoor, es para algo importante y necesito un auto.

-¿Y el tuyo? -pregunta y levanta una ceja.

-Ka...Mara se lo llevará, necesita arreglar algo y me dejo sin transporte.

-Yo te llevo -dice y tomó un mechón de mi cabello.

-Quiero ir de compras -Dan gruñe y yo río-. Ir a comprar un regalo y comprar una mariposa.

-¿Una mariposa? ¿Para que?

-¿Me lo prestarás si o no? -Dan me mira y yo lo miro ya irritada-. Te diré luego para que lo necesito. Por favor...

-Odio cuando haces esa cara...-dice Dan y yo pongo cara de perrito-. Ni hablar, no lo soporto más, te prestare mi auto y lo puedes ir a dejar en la noche.

Acepto y lo beso con ternura. Este chico me enloquece. Dan me explica los problemas, que aún sigo sin entender y nunca lo are. La clase transcurre y yo me muero de hambre. Fulmino con la mirada al reloj que está pegado en la pared y como una loca, le digo que se apresure y que termine la clase. Cuando termina la clase, tomó a Dan de la mano y lo arrastró hasta la cafetería. El se queja de que voy muy rápido, yo le digo que muero de hambre y sólo se

ríe. Nos sentamos con los demás y cuando Dan ve a Mike, lo saluda y hasta le sonríe ¿que demonios pasó aquí? Amy, Alex, Kim, Zack, Mike y hasta Dan, nos tratan de convencer de hacer una fiesta, pero Kate y yo respondemos al unísono "no", ellos siguen en lo mismo y no paran hasta que termina el tiempo de comer y nos vamos a clases.

Mi última clase fue literatura y cuando vi a Logan me entraron ganas de reír. Tenía un ojo morado, la nariz rota, el labio partido y unos buenos moretones en toda la cara. Cuándo me ve me fulmina con la mirada y me siento hasta enfrente junto a una chica llamada Milla. Milla me cae bien, así que le pido que si me puedo sentar desde ahora con ella y acepta. Cuando salgo de la clase voy al estacionamiento, busco con la mirada el auto de Dan y lo encuentro hasta el final de un aparcamiento.

Espero a Dan, que tarda una eternidad y por más que lo busco no lo encuentro. Me siento en el capo del auto y lo espero. Sigue nublado y no demora en llover. Dan aparece en mi campo de visión y cuando nuestras miradas se encuentran me guiña un ojo. Me sonrojo y observó como se calcula acercando. Camina con mucha gracia, a paso seguro y ligero. Lo observó detenidamente y me vuelvo a enamorar de su imagen. Camisa de cuadros azul, pantalones negros y sus botas negras. Estoy babeando y cuando llega, se para frente a mi y me da un beso largo y lento.

-Tendrás que llevarme a casa y luego el auto es todo suyo señorita -besa mi nariz y me baja.

Me entrega las llaves del auto, se va a la otra puerta y entró al auto feliz. Por primera vez voy a conducir un Mini Cooper. Cuando arrancó el auto ronronea levemente y sonrió. Este auto es rápido. Miro a Dan y el trata de no sonreír. Abrocho mi cinturón y pongo en marcha al auto. Cuando ya estamos a una cuadra de. La universidad, aceleró más y salimos disparados hacia la carretera.

-Tranquila bambi, nos vas a matar -dice Dan y clava las uñas en el asiento.

Sonrió y sigo conduciendo. Dan se queja de que debo de bajar la velocidad, pero yo aceleró más y el cierra los ojos. No tardó mucho en llegar a su casa y cuando llegamos Dan me mira con horror.

-Eres una amenaza al volante -dice y desprende las uñas del asiento.

-Y tu una amenaza para la sociedad femenina -sonrió y el suelta una carcajada.

Por primera vez lo escucho reír a carcajadas y su risa es linda y contagiosa. Me despido de él, doy media vuelta y regreso a la carretera. Tengo cosas por hacer y comenzare en el centro comercial...

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Capítulo 13

Conduzco hasta el gran centro comercial y me voy a la sección de joyería. Tengo que regalarle algo en verdad lindo al monstruo de Kate. Algo me llama la atención en la sección de joyería, así que entró y digo que me lo muestren. Me gusta, lo compro y la señorita que es la encargada me mira sorprendida cuando pago con la tarjeta de crédito y ni siquiera pregunto por el precio. Salgo de la joyería y busco ahora una tienda de mascotas. Pero no encuentro nada y salgo de ahí. Subo al auto de Dan, guardo el regalo y me dirijo al pueblo. En el hay algunas tiendas y espero que este la tienda de mascotas.

Tengo suerte y encuentro una. Entró, compro el animalito y me lo entregan en un frasco con agujeros. Regreso a la casa y me cambio de ropa. Me pongo un vestido, suéter y unos converses blancos. Dejo mi cabello suelto y me colocó un pasador con forma de mariposa. Respiro hondo y regreso al auto. Pongo la canción de Nothing Would Be Better y me relajo en el asiento. Creo que estoy bien con lo que are, tengo que hacerlo y lo are por él. Llegó a la casa abandonada, estacionó el auto, bajo de él con frasco en mano y me encaminó al puente. Llegó al pequeño puente dónde estuve en la fiesta y me pongo a un centímetro del borde.

Abro el frasco, meto una mano con cuidado y la saco del frasco. Me agachó y dejó el frasco en el piso. Abro un poco la mano con el bichito y la cubro con la otra mano. Respiro hondo. Abro las dos manos y la mariposa extiende sus alas. Le toma unos segundos comenzar a agitarlas y la observó detenidamente. Es una mariposa monarca, con sus alas

naranja con negro y puntitos blancos. Su favorita. Impulso a la mariposa y esta vuela de mis manos.

-Feliz cumpleaños años James.

Susurro y sonrió. Creo que este regalo le hubiese encantado cuando tenía siete. Pero no me importa, donde quiera que este y espero que le guste. Me siento en el puente y suelto un suspiro. No se que are en toda la tarde, tal vez fotografías y una caminata cerca de las montañas. No sé qué hacer. Miro el agua que seguro debe de estar fría...creo que are una idiotez. Me levanto y me quito la ropa. Vestido, suéter y zapatos, quedan fuera y quito el pasador. Observó el agua helada y me observó a mi. Llevo un brasier y bragas blancas. Aquí voy. Tomo impulso y me aviento al agua helada. 

El agua me empapa al instante y no logro llegar al fondo. El lago está profundo y helado. Nado hasta la superficie y tomó una bocanada de aire cuando mi cara sale del agua. Me estoy muriendo de frío, puedo morir por el frío y la verdad no me importa. Nado un poco hacia la orilla y cuando mis pies tocan tierra, camino un poco y me detengo cuando el agua me da hasta la cintura. Me giro hacia el lago y observó detenidamente lo que me rodea. Es hermoso. El bosque, el lago y el silencio que los acompaña. 

A mi padre le hubiese encantado la tranquilidad y a mi madre la vista. Me quedo parada en el agua unos cinco minutos y luego suspiro de nuevo. Es hora de salir, porque en verdad creo que moriré de frío y tengo que entregar el auto. Doy media vuelta y salgo del lago toda empapa. Comienzo a temblar de frío y me apresuró a vestirme. Tomo mis converses,

el frasco y el broche, comienzo a caminar a paso rápido hacia el auto y gruño cuando me entierro una piedra en el pie. Genial. Llegó al auto, dejo los zapatos y el frasco a un lado y prendo la calefacción.

Pongo el auto en marcha y me dirijo a casa de Dan. La canción de Chandelier suena y me pongo a cantar... No llegó a las notas de Sia, pero me gusta su canción y trato de cantar mejor. Cuando llegó veo un Nissan gris estacionado a un lado de la casa, creo que es el auto de Kim y una Toyota blanca alado del auto. Se me hiela la sangre, se parece al auto de Logan y me apresuró a estacionarme. Cuando estacionó el auto, quito las llaves y salgo disparada hacia la casa.

-¿Kim...? -habló y escucho risas.

Me guió por las risas, giro a la derecha y luego un pasillo a la izquierda. Llegó a una sala oscura, pero las risas se escuchan más altas y ahora entiendo por qué las risas. En la pantalla enorme de la sala está una película de risa. 

-¡Kara! Ven siéntate -escucho la voz de Kim y me acercó más.

Kim, Amy y Mike, están sentados en un gran sillón para casi seis personas y están tapados por una cobija. Miro mejor la sala y veo más sillones y un plato lleno de palomitas.

-Si buscas al cretino de Dan..

Esta arriba -dice Kim y se mete un puño de palomitas en la mano.

-¿Arreglaste tu problema?-pregunta Amy.

-¿Cuál problema? -pregunto y nadie voltea a verme.

-Tu novio dijo que tenías problemas -dice Mike

-Por eso no te avise. Dijo que los problemas eran urgentes y no podrías ni contestar -dice Kim.

-Cierto... Bueno los veo más tarde -digo y doy

media vuelta.

-¡En el baño hay un paquete de condones, por si los necesitan! -grita Amy y escucho risas.

Río y me dirijo a las escaleras. Cuando llegó a la parte de arriba escucho música y muy alta. Dobló a la derecha y me acercó más a la música que proviene del cuarto de Dan. Radiotive de Imagen Dragons suena a todo volumen y cuando entró a la habitación, la música me golpea los oídos y hago una mueca. Esta demasiado alto. Cierro la puerta y voy junto a Dan que está dormido ¿como puede dormir con la música tan alta? Me acercó a el y lo beso en la mejilla. Dan gruñe y balbucea algo que no entiendo. Saco mi celular del bolsillo del suéter y le tomó una foto.

-Si... Me gustan los ponys rosas -balbucea y yo río.

Me quito los zapatos, apagó la música y me acuesto alado suyo. Dan me enrolla en sus brazos y pasa una de sus piernas por encima de las mías. Balbucea algo y luego suelta un suspiro. Veo mejor a Dan y casi jadeo. Esta vestido solo con unos boxers negros ajustados y su pelo está revuelto. Apenas noto que tiene un tatuaje en la parte de atrás de su hombro. Bueno más bien en su espalda y es una frase más bien... "La vida es bella" en cursiva con un pajarito a lo último de la frase. 

-Hola -dice con voz grave.

Me derrito al escuchar la voz que tiene al despertar. 

-Hola -susurro y acarició su cabello.

Dan pone su cabeza en mi pecho y me atrae más a él. Siento su respiración en mi pecho y un cosquilleo me recorre el cuerpo. Tenerlo así baja todas mis defensas.

-Estas mojada -dice y me sonrojo-. No de esa manera

bambi... ¿Nadaste o te mojaste con la lluvia?

-Fui a nadar... -susurro.

-¿Con el agua a casi cinco grados bajo cero? -dice y levanta la cabeza de mi pecho.

-Sip... Es el cumpleaños de mi hermano pequeño y bueno quise hacer algo lindo y estúpido por el-digo y Dan ríe.

-Tengo una novia suicida...-dice y yo no me rio-. Que es tremendamente sexy.

Río y niego con la cabeza. Nunca va a cambiar, es un cretino y un engreído.

-No es justo, yo tengo poca ropa y tu estas vestida...-dice y mira mi atuendo-. Traes puesto un vestido...

Sus ojos brillan y me muerdo el labio. Es un pervertido. Miro la habitación y mis ojos se clavan en un dibujo. Es el bosque y a lo lejos se ve una chica haciendo algo...tomando fotos y mira el cielo. Y alado hay otra dónde tiene la vista al frente y parece posar mientras toma fotos...

-¿Esa soy yo? -pregunto y señaló los dibujos.

-Heeee...si -dice y hunde la cara en mi pelo-. Lo hice mientras estabas tomando fotografías y bueno... Ok, ok, te dibuje mientras lo hacías.

Me le quedó viendo y luego al dibujo. Es bueno dibujando, hizo sombreados y los enmarcó.

-Dibujas bien... -digo y acarició su espalda desnuda.

-Sabes que el sábado la cena es para ti y tu clon ¿verdad, Bambi? -dice y besa mi clavícula.

Un escalofrío me pone la piel de gallina. Dan sonríe y me besa de nuevo.

-Le agradas a mi madre -dice y se pone arriba mío-. Esta emocionada por tenerlas aquí.

-¿Le agrado a tu madre? -pregunto y pongo mis manos en sus brazos.

-Eres la primera chica que le presentó...-hace una pausa y besa

mi frente-. Además dice que eres muy bonita y que si quieres...puedes venir más seguido.

-¿Eso lo dijo ella o lo dijiste tu? -pregunto divertida y lento una ceja.

-Yo.

-Eres un tonto -digo y lo beso.

-Tengo algo para ti -dice y rueda sobre la cama.

-¿Así? -digo y levanto las cejas.

-Si...espera un momento -dice y se para de la cama.

Observó a un Dan en boxers caminando a paso seguro por su habitación. Rebusca en un cajón y saca una caja blanca con un moño rojo. Se acerca con ella sonriente y hasta me da miedo su sonrisa maliciosa. Me entrega la caja y se pone de rodillas junto a la cama. Se agacha y saca otra caja azul con un moño rosa. Ok, no se que rayos tienen las cajas y la sonrisa de Dan...me pone de nervios. Me entrega la otra caja y se pone serio.

-Abre las -dice y se va al baño.

Abro la segunda caja y descubro un vestido color vino...ajustado. Es lindo, pero es ajustado y marcará TODO. Dan sale del baño y se sienta junto a mí. Me le quedó viendo y sonrió. Es lindo a pesar de no ser mi estilo.

-Gracias...

-Ahora abre la otra -dice y sus ojos brillan.

Ok, siento que esto no es bueno. Sacudo la caja y escucho ropa. Desató el moño y la abro lentamente. Abro los ojos como platos y miró a Dan. El está acostado con los ojos cerrados y los brazos detrás de la cabeza. El imbécil me compro ropa interior... Tomo unas bragas negras de encaje con el dedo índice y se lo pongo frente a su cara.

-¿Estas jugando verdad? -digo incrédula.

-Nop -dice y niega con la cabeza.

Miro la caja y veo más lencería. 

-¿Esto

es para mi...o para ti?

Dan abre los ojos y mira las bragas. Se muerde el labio y yo me sonrojo.

-Tal vez si...tal vez no -dice y cierra de nuevo los ojos.

Dejo las bragas a un lado y miró lo demás. Hay cuatro bragas blanca, roja, rosa y azul cielo...y todas de encaje y de diferente corte. Miro los brasieres...tres son de encajes y los demás normales. Tengo que admitirlo...la lencería es sexy y la eligió el pervertido de mi novio.

-Te recomiendo que te pongas las rojas -dice Dan y sonríe de lado.

Miro las bragas rojas...son de encaje y se transparenta todo. Me sonrojo y guardo todo en la caja.

-No se si agradecerte...o darte unos buenos golpes por idiota -digo y lo fulmino con la mirada.

-Mmm...la primera por favor -abre los ojos y sonríe-. Te ves adorable cuando te sonrojas.

-Cállate -lo regaño y el se ríe.

-Acéptalo...soy buen novio. Un novio sexy, encantador y...

-Idiota -lo interrumpo y sonrió.

-Buen besador iba a decir.

-Hay que probarlo -me acercó a el y lo beso.

Dan me atrae hacia el y terminó encima de él. Toma mi cintura y rueda sobre la cama, haciéndome quedar abajo y el arriba. Muerde mi labio y se me escapa un gemido. Enredo los dedos en su cabello y lo jalo, Dan gime y introduce su lengua en mi boca. Mi lengua y la suya bailan lentamente. Dan toma mis piernas y las pone en su cintura. Enrollo mis piernas en su cintura y lo atraigo hacia mí. Dan empuja sus caderas hacia las mías y siento su miembro, que crece más y lo empuja contra mi ropa interior.

Mi cuerpo comienzo a reaccionar a las caricias

de Dan y un escalofrío me recorre todo el cuerpo. Mis caderas lo buscan y mi respiración se agita cada vez más. Clavo las uñas en su espalda y las subo lentamente. Dan gime y sube sus manos por mis piernas. Mi cuerpo me traiciona y comienza a temblar. Comienzan a brotar lágrimas de mis ojos y Dan para de tocarme. 

-Lo siento -digo y suelto un sollozo.

-Tranquila bambi...-dice y me abraza.

Maldito Christian ¿por que tuvo que abusar de mi? Mi cuerpo sigue temblando y Dan besa mi cabeza. Quiero hacerlo con él...pero tengo miedo. Idiota, tienes miedo de tener sexo y no de matar a sangre fría. Dan me abraza por un buen rato y me acurruco en su pecho. Me quedo dormida mientras mi cuerpo tiembla.

Despierto lentamente y al abrir los ojos me encuentro con otros electrizantes. Dan está sentado enfrente de mi y me mira detenidamente. Lo observó y me doy cuenta de que me estaba dibujando.

-Hola...-tallo mis ojos y me siento en la cama

-Hola...-dice y sonríe.

-¿Cuanto tiempo e dormido?-pregunto y busco mi celular.

-Unas seis horas -se levanta y se sienta a mi lado-. Te ves hermosa hasta cuando duermes.

Pone una mano en mi mejilla y apoyo la cara en ella. Me da un corto beso y se levanta de la cama. Ya está vestido y parece recién bañado. Lleva una camisa blanca, unos pantalones oscuros y unos converses negros. Toma su celular y sus llaves.

-¿Me llevarás a casa? -pregunto y me levanto de la cama.

-Si... Es tarde y necesitas cambiarte esa ropa -dice y se acerca a mi-. Me encanta tenerte aquí...pero necesitas ir a tu casa. Tu clon debe de estar preocupada.

-Si...-digo y lo abrazo.

Se que Kate no está y llegará en la madruga. Amo estar junto a Dan, pero es cierto tengo que ir a casa y darme un baño. Me separó de él y me pongo mis tenis. Cuando me los pongo Dan se agacha y me hace señales para que suba a su espalda. Ahora que lo pienso...somos una pareja normal. Claro que el es muy sincero conmigo y yo soy una maldita, que guarda demasiados secretos.

Dan baja las escaleras conmigo en su espalda y nos subimos a su auto. Dan maldice y sale del auto. Mierda, las cajas. Dos minutos después vuelve a subir y me entrega las cajas. Dan conduce hasta mi casa y yo revisó mi celular. Kate no a llamado... Mejor no la llamo, tal vez este ocupada y la llamó en un momento poco adecuado. Dan estaciona el auto y lo apaga.

-Te veo mañana bambi -dice y se acerca a besarme.

-Hasta mañana cariño -digo y sonrió.

Se que le gusta que lo llame a sí. Salgo del auto con las cajas en mano y me despido de él. Cuando entró a la casa, escucho el auto alejarse y subo a mi habitación. Dejo las cajas en mi tocador, me voy al baño, me desnudo y me doy un baño con agua caliente. Salgo del baño, me pongo una pijama de pantalones y sudadera color morada. Me acuesto en la cama cierro los ojos. Hoy fue un día lindo... Mi dulce James, lo extraño y daría todo por tenerlo junto a mi.

Cierro los ojos y me dejo llevar por el sueño...

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Capítulo 14

La canción Undiscovered me despierta y busco a tientas mi celular. Veo quien llama y contestó.

-¿Que sucede? -pregunto con voz ronca.

-Te espero abajo en tres minutos, toma tu mochila que está afuera de tu puerta y abre el libro que está en tu tocador -dice Kate.

Cuelga y yo gruño. Son las cinco de la mañana y es viernes...odio despertar temprano. Me levanto de la cama, enciendo la luz y me acercó al libro que está en mi tocador. "Ábreme" tiene escrito en un papel. Abro el libro y dentro hay una pistola calibre cuarenta y cinco. La tomó y la revisó. Esta cargada. La dejo en su lugar y me voy al armario. Tomo unos mayones negros, una blusa gris, un suéter verde oscuro, botas de corte bajo y un gorro.

Me visto, me hago una trenza sencilla y abro la puerta de mi habitación...y como dijo, la mochila está ahí y parece llena. La tomo y bajo las escaleras. Kate está en la puerta esperándome, parece cansada y cuando me acercó la veo pálida.

-¿Dormiste? -pregunto y tomó las llaves de la casa.

-Si...pero sólo dos horas -dice y suelta un gruñido.

Nos vamos al auto y Kate conduce hasta la casa abandonada. No se que aremos, pero lo que quiera hacer ¿por que no lo hizo más tarde? Es temprano y siento que los párpados se me cierran. Cuando llegamos Kate toma un arco, su mochila y baja del auto. Suelto un suspiro y salgo del auto. Kate saca una brújula de su bolsillo y comienza a caminar. Yo solo gruño, acomodo mi mochila en mi hombro y comienzo a seguirla. 

Kate me arrastra hasta lo profundo del bosque y seguimos así por casi quince

minutos ¿hasta donde nos lleva?

-¿Hasta donde vamos? -brinco una rama y me apresuró a alcanzarla.

-Hasta muy lejos -dice y saca de nuevo la brújula.

-¿Hasta donde es muy lejos? 

-Cállate y sigue caminando falta poco -dice y sigue caminando.

La sigo y trato de adivinar que hacemos en el bosque a las cinco y media de la mañana. Apenas me doy cuenta que me gusta Twin falls. Claro, no es California con sus bellas playas y el sol... Pero soy positiva, a pesar de lo que pasó con Logan y la visita del matón. En Twin falls conocí a Dan y las chicas, este lugar me agrada y no se cuanto tiempo estaremos aquí. Pero quiero disfrutarlo a lo máximo. Sigo caminando y tomó la mano de Kate. Le sonrió y ella sonríe un poco.

-Ya llegamos -dice y se sienta en el suelo.

Yo me siento frente a ella y vacío mi mochila. Kate saca de la suya tres revólveres, flechas, blancos para disparar, una venda negra y unas manzanas. 

-¿Para que la venda? -pregunto y tomó la venda.

-Ya lo verás -dice y se levanta.

Toma los blancos y los coloca en árboles. Toma dos revolver y los carga. Me pasa un arma y me señala un lugar para pararme...

-¿Quieres practicar? 

-Si y probar algo nuevo -dice y señala la venda.

-Espera un segundo ... ¿Quieres que aprenda a disparar a ciegas? -pregunto incrédula.

No debe de estar hablando enserio. Nuestro padre nos enseñó cosas y nunca nada que tuviera que ver con disparar a ciegas. 

-No, ni hablar. No disparare sin ver, que tal y te disparo -digo y niego con la cabeza.

-No dispararas -dice y suelto un suspiro-.

Lanzaras cuchillos.

-¡¿Qué?! -grito y abro los ojos como platos.

-Lo intentaremos -dice y toma la venda-. Te guiare con mi voz.

-De todas las locuras que hemos hecho...esta es una gran idiotez Kate -digo y gruño.

-No será la primera que hagamos -dice y se acerca con la venda-. Tenemos que practicar Kara.

-Ya que -digo y pongo los ojos los ojos en blanco.

Kate me pone la venda en los ojos y la sujeta fuertemente.

-¿Cuantos dedos vez? -pregunta.

-No veo nada genio -digo y niego con la cabeza.

-Dame la mano izquierda -dice y se la doy-. Cuando escuches tres empiezas.

Asiento y sujeto los cuchillos con cuidado. Soy buena con las dos manos...pero no se si funcione esto. Respiro hondo. Tranquila Kara, inhala, exhala, inhala, exhala...

-¡Tres! -grita Kate.

Y rápidamente tomó un cuchillo y lo lanzó en dirección a su voz. 

-Fallaste -dice y hago ademán de quitarme la venda-. No te la quites aún. Un poco más a la izquierda y le das.

Escucho movimiento de hojas y vuelvo a respirar ¿y esto de que sirve? Así, sirve para que le entierre un cuchillo a mi hermana y la hiera o la mate.

-Tres -dice y vuelvo a lanzar el cuchillo-. ¡Vamos! Tu puedes...un poco a la derecha. Eres buena con luz, pero sin ella eres torpe y lenta.

-¿Por que no lo haces tu? -digo y tomó otro cuchillo.

-Por que de las dos, la primera que nació fuiste tu...así que las ancianas primero -dice y vuelvo a escuchar ruido.

-Solo por dos minutos, Kate -digo irritada.

-Dos minutos son dos minutos querida hermana -ríe

y se queda callada-. ¡Tres!

Lanzó el cuchillo y escucho un golpe.

-¡Le diste! -grita y sonrió.

¡Por fin! Tomó otro cuchillo y vuelvo a respirar. Inhala, exhala, inhala, exhala, inhala, exhala....

-¡Tres! 

Tiro el cuchillo y vuelvo a escuchar un golpe. Volví atinar.

-Dos fallas y dos buenas...vamos tu puedes -dice y aplaude.

Vuelvo a respirar y tomó otro cuchillo. Esto no es tan malo como creí que sería.

-Tres -susurra.

No se de que dirección proviene su voz. Volteo para todas las direcciones...pero nada.

-Tres -vuelve a susurrar.

-No se donde estas -digo.

-Vamos...puedes hacerlo -dice y escucho pasos-. Tres

Dice y lanzó el cuchillo. Escucho un golpe...pero a unos siete metros de mí. Tomo otro cuchillo.

-Le distes a otro árbol idiota...-dice y vuelvo a escuchar pasos-. Tres

Tiro el cuchillo y escucho otro golpe. Le di.

-Ok, creo que ya terminaste con los cuchillos -dice y me quito la venda-. Ahora me toca a mí.

Kate toma el arco y las flechas. Me acercó a ella y vendo sus ojos. Pongo cuatro dedos frente a ella.

-¿Cuantos dedos vez? pregunto y muevo los dedos frente a ella.

-No veo nada -le enseñó el dedo corazón y ella ni se mueve.

-Ok.

Camino hacia un árbol y me oculto tras el. Pienso una palabra...

-¡Amber! -grito y me tapó la boca.

-¡Zorra! -grita Kate y me parto de risa.

Después de diez segundos de reír paramos un poco.

-Ok, ok, ok. Ya enserio... ¿Que te parece "ya"? -digo entre risas y salgo de mi escondite.

-Ok, esa

está bien -dice Kate y asiente con la cabeza. 

Camino silenciosamente hacia otro árbol y me oculto tras el. 

-¡Ya! -grito y escucho un golpe seco-. Ok, le distes al árbol de alado.

Me voy a otro árbol y trato de no hacer ruido. Me pego al tronco del árbol y tomo aire.

-¡Ya! -grito y escucho otro golpe-. Le distes. 

Saco la flecha y me voy a otro árbol.

-¡Ya! -otro golpe-. Demasiado a la derecha.

Kate maldice y yo río. Es gracioso verla así. Voy a otro árbol y me oculto.

-¡Ya! -grito y escucho el golpe-. Ok, le as dado.

Las siguientes dos veces no falla. Se quita la venda y me ayuda a buscar los cuchillos y las flechas. Toma las dos armas y me entrega una... El material es frío y un poco pesado. Tomo el arma con fuerza, quito el seguro y apuntó a un árbol.

-Ok, yo te diré en que dirección y tu disparas -dice Kate y quita el seguro de su arma.

Se pone alado de mí y se prepara. Cierro los ojos y espero su señal.

-Izquierda -dice y disparamos en esa dirección.

Mi bala roza el árbol y la de Kate se fue demasiado arriba.

-Dos en punto -dice y disparamos.

Las dos damos al blanco y seguimos así por casi una hora. Paramos hasta que nos quedamos sin balas y nos sentamos a comer unas manzanas. Miro la manzana que tengo en la mano y tengo una idea... Es otra idea estúpida.

-Tengo una idea -digo y Kate se me queda viendo.

Me levanto del suelo y camino a un árbol con la manzana en la mano. Me alejo a unos diez árboles y me pego a uno de frente. Colocó la manzana en mi cabeza y le hago señales

a Kate. 

-¿Estas loca? No lo are -dice y me fulmina con la mirada.

-¡Ay por favor! Lo aras con los ojos abiertos... Vamos hazlo, confió en ti -digo y me pongo derecha.

Kate lo piensa y toma el arco. Acomoda una flecha y se levanta del suelo. Se posiciona y baja la mirada al piso. Yo cierro los ojos... Espero no equivocarme y terminar con una flecha en el cuerpo o en el cerebro.

Escucho un golpe y abro los ojos. La flecha dio más arriba.

-¡Vamos tu puedes! -grito y pongo las manos en mi espalda.

-Eres una maldita suicida Kara -dice y toma otra flecha. 

Esta vez no cierro los ojos y la miró fijamente. Kate respira y vuelve a ponerse en posición. Suelta la flecha y veo como se acerca a gran velocidad. La flecha le da a la manzana y me hago a un lado para ver. 

-Wow -digo y miró la manzana.

La manzana está atravesada por la flecha y quedó pegada al árbol por ella. Miro a Kate y esta sonríe. Me acercó a ella y le doy unas palmaditas en el hombro. Tomo una manzana y se la entrego.

-No, ni loca dejo que lo hagas tu -dice horrorizada.

-Por Dios, tu lo hiciste y ahora no quieres ponerte de blanco -ella niega con la cabeza y yo tomo tres cuchillos -. Confía en mi.

Ella me mira y da media vuelta. Se coloca en un árbol y cierra las ojos. En verdad tiene miedo de que le de a ella. Respiro hondo, tomó impulso y lanzó el cuchillo. Al primer intento le doy a la manzana. Kate mira la manzana que está arriba de su cabeza y suelta el aire que había contenido. Se acerca a mi y me quita los cuchillos.

-No vuelvas a tener

esa idea jamás -dice y mete las cosas en las mochilas.

-Nop... Pero si se me ocurren otras ideas -digo y Kate me pone cara de pocos amigos.

Sonrió y la ayudó a guardar. Nuestro padre nos enseñó a luchar y disparar...pero nada como lo que sugirió Kate. Eso de la venda fue una locura y la mía...ni hablar. Vamos de regreso al auto y en el transcurso pasó un brazo por los hombros de Kate y la atraigo a mí. Cuando llegamos, Kate abre el maletero y mete las cosas ahí. Subimos al auto y conduzco yo de regreso. Es increíble que casi nadie venga hacia acá...claro con excepción de las fiestas. Al llegar a casa Kate prepara el desayuno (platos de cereal con leche) Lo sé, se mató preparando el desayuno. Miro la hora y casi me atraganto con el cereal. Son la once de la mañana. 

-¿Qué harás mañana en la tarde? -pregunto y Kate parece pensar.

-Creo que saldré con Zack... O no lo sé ¿y tu? -pregunta y se mete una cucharada de cereal.

-Ni idea... Mañana en la cena...creo que estarán los chicos o no sé -me tomo el vaso de leche y suspiro.

No se que aremos mañana. Pero tengo que darle el regalo a Kate y espero que le guste. Término de desayunar y subo a bañarme. Twin falls tiene un clima frío y húmedo. Me gusta. Tomo el baño con agua caliente y me pongo una sudadera, pantalones holgados y calcetines de lana. Cepillo mi cabello, pongo música en mi celular y tomó un libro. Kate entra a mi habitación y deja una cajita alado del libro que tiene el revolver oculto. Me levanto, abro la caja y sonrió. Un celular nuevo. No dudo en usarlo y le mando un mensaje

a Dan.

-Hola imbécil... Digo "cariño" ¿que harás más tarde?

Mando el mensaje y me levanto de la cama. Tengo que acomodar el libro. Lo meto entre los demás y veo las cajas de regalo de Dan. Sonrió y tomó la de lencería. Creo que hoy usare un juego de lencería. Regreso a la cama y revisó mi celular. Dan respondió a mi mensaje.

-Hola nena... ¿Nuevo celular eh? Estaré ocupado más tarde bambi.

-Con las prácticas del hospital me imagino.

-Si, lo siento bambi. Te lo recompensare mañana.

Sonrió y suspiro. Quería verlo hoy, pero sería demasiado y creería que soy una empalagosa. Ayer estuve con el y es bueno darnos un día. 

-Te veo mañana "cariño"

-Hasta pronto bambi.

Pongo de nuevo la música y tomó el libro. Estoy leyendo el libro de Romeo y Julieta...otra vez. Lo e leído al menos unas diez veces y no me aburro de él. Hoy no tengo pensado salir, así que pasare tirada en la cama leyendo y escuchando música. Pasan al menos unas tres horas, cuando Kate me habla para ir a comer y bajo a la cocina... Esta vez prepara pollo asado con ensalada y puré de papas. Me lleno hasta no poder más y vuelvo a subir para seguir leyendo. Pero en vez de leer...me quedo dormida.

Kate vuelve a despertarme para que cene algo. Yo si que caigo en coma, puedo dormir todo el día y seguir con sueño. Bajo a la cocina y tomó un plato de frutas con yogur. Kate me dice que saldrá a cenar con Zack y eso significa que estaré sola hasta tarde. Siempre la molesto con que tiene sexo con Zack cuando salen, ella se niega y yo se que tengo razón. Subo a mi habitación con el plato de frutas y me lo termino enseguida. Hoy fue un día agotador y estúpido de mi parte ¿a quien se le ocurre hacer lo de la manzana? Así, a mí ¿y a quien se le ocurre lanzar cuchillos a ciegas? A la ingeniosa de Kate. 

Vuelvo a suspirar y terminó mi plato de frutas. Lo dejo en la mesita de noche y me cambio de ropa. Tomo unos shorts y una blusa de tirantes para dormir, y dejó mi cabello suelto. Me puse las bragas y el sostén rosa. Es estúpido...pero me siento sexy. Río como tonta por mi pensamiento y me voy a la cama. Mañana será un día largo en verdad, no se que are y no sé qué me regalará Kate. Gruño y me acuesto en la cama. Cierro los ojos y espero que el sueño llegue a mí...

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Capítulo 15

Despierto lentamente al escuchar unos golpes en mi ventana. Bostezo y me levanto de la cama. Miro la hora...11:53 pm. Gruño y camino a la ventana ¿que rayos está golpeando la? Me acercó y abro la cortina, pego un brinco y pongo una mano en mi pecho... Dan está trepado en el árbol que está junto a mí ventana y sus ojos brillan intensamente. Abro la ventana y el se escabulle dentro de mi habitación.

-¿Qué haces aquí? Me has asustado -digo y cierro de nuevo la ventana.

-Hola nena, yo también te extrañe -dice y bostezo-. Lo siento, no quise asustarte. 

Se acerca a mi y besa mi frente ¿que hace aquí? Me gusta tenerlo en casa...pero ¿que hace a estas horas? Me alejo de él y camino de regreso a mí cama.

-¿Que estabas haciendo? -pregunta y se acuesta junto a mí.

-Bailando -digo y Dan sonríe-. Estaba durmiendo, genio.

-Lo siento bambi...pero traigo algo para ti -dice y se acerca a la ventana.

La abre y sale por ella ¿dónde va? Me acercó a la ventana y Dan me arroja una cuerda ¿para que la cuerda? No logro ver que sujeta la cuerda, esta muy oscuro.

-¡Sube! -susurra casi gritando.

Jalo la cuerda que pesa un poco y la subo hasta la ventana. Es una canasta. La tomó y la colocó a un lado de la ventana. Observó como Dan sube el árbol agilmente y sin hacer ruido. Me recuerda a algo. Borro esa idea de mi mente. Es estúpido pensar eso. Me alejo de la ventana para dejarlo pasar y prendo mi lámpara. Dan cae al piso y yo me parto de risa.

-¡Shhhhh! -susurra, se levanta y

sonríe-. Despertaras a todos.

-¿Todos? -pregunto y me

siento en la cama con las piernas cruzadas.

-Zack está con tu clon... ¿Sabias que ellos...? -dice y toma la canasta.

-Si, cállate -lo interrumpo.

Se a lo que se refiere. Estaban teniendo sexo... ¡Agh! Dan ríe y yo pongo los ojos en blanco.

-¿La canasta para que? -la señaló y levanto una ceja.

-Ya lo verás en cinco minutos... -dice y mira su celular.

-¿De acuerdo? -digo y acomodo mi cabello.

Dan pone la canasta alado de la cama y se sienta a mi lado.

-¿Te digo un secreto? -dice.

-¿Cuál secreto? -pregunto.

Me acercó más a él y se gira hacia mí.

-Sarah no es mi madre biológica -dice y acaricia mi mejilla.

¿Que Sarah no es su...?

-¿De que hablas Dan? -pregunto.

-Hace unos años lo supe...Kim no lo sabe. Y ese es mi secreto, mi pequeña bambi -dice tranquilamente.

-No se que decir... -digo sinceramente.

¿Que se puede decir con una noticia así? No lo sé.

-No tienes que decir nada -dice, toma mi mano y la besa.

Iba a responder, pero soy interrumpida por un zumbido y me quedo callada. El zumbido viene del celular de Dan. El lo saca y sonríe. Me muestra su celular... Diecinueve de septiembre: 12 am.

-Feliz cumpleaños mi pequeña bambi -dice y se abalanza sobre mí.

Caigo de espaldas sobre el colchón con Dan sobre mi y me da un ataque de risa. Esta loco. Me besa fugazmente y rueda a un lado. Cae de rodillas en el piso y toma la canasta. La abre, saca de ella una caja grande y otra mediana. Me entrega la caja grande y no dudo en abrirla... Dentro hay otra caja más pequeña. Lo miro

y el sonríe un poco. Abro la caja pequeña y sonrió como una tonta. Dentro hay una cadena de plata con un dije de Yin.

Miro a Dan y este saca me muestra una cadena que trae en su cuello pero con el símbolo del Yang. Me entrega la caja mediana y la abro lentamente. Doy un grito ahogado y me lanzó a sus brazos. Me regalo el libro de Orgullo y Prejuicio. Caemos al piso, pero yo caigo en su pecho y Dan se queja por el golpe. Pero se rinde y me besa. Me despegó de él y beso su nariz.

-Gracias -susurro y me pongo a orcadas sobre él.

-Se que no querías regalos y no entiendo porque... Pero me sentía mal si no te daba algo -dice y trata de levantarse.

Me siento entre sus piernas con las mías cruzadas y le sonrió. Fue un lindo detalle lo que hizo. Me doy la vuelta y le entregó el collar. Dan levanta mi cabello y roza con sus dedos mi piel cálida con los suyos fríos. La piel se me pone de gallina ahí donde me rozó y coloca el collar. Besa mi hombro y una corriente eléctrica me recorre el cuerpo.

-Dan... -susurre bajito.

-¿Que sucede bambi? -pregunta, pone sus manos en mis hombros y me gira hacia él-. Te estas mordiendo el labio y eso significa que estas nerviosa.

Apesar del poco tiempo que llevábamos, me conoce y sabía lo que me pasaba. Aún no descubro como es que sabe cuando miento...

-Quiero hacerlo -digo y tomó el dije entre mis dedos.

-¿Estas segura? -pregunta y levanta mi barbilla.

Mis ojos se encuentran con los suyos electrizantes y me pierdo en ellos. Estoy lista, este miedo tiene que acabar y quiero estar con el.

-Si...estoy segura

-susurro y muerdo mi labio.

Dan toma mi cara entre sus manos y lentamente acerca sus labios a los míos. Colocó mis piernas arriba de las suyas y acerco mi cuerpo al de él. Dan hunde las manos en mi cabello y yo rodeo su cintura con mis brazos. Lo quiero, lo quiero con una locura que me aterra y me hace sentir estúpida... Me enamore de un chico engreído, cariñoso, frío, idiota y lleno de paz. Dan me toma de la cintura y se levanta del piso conmigo pegada a su cuerpo.

Lentamente me recuesta en la cama y se coloca encima mío. Me besa por varios minutos y lentamente levanta mi sudadera. Mi cuerpo comienza a temblar y Dan susurra en mi oído palabras tranquilizadoras. Lentamente me quita la sudadera y se me queda viendo. Sus ojos se oscurecen y brillan. Bajo la mirada y recuerdo que me puse el sostén que me regaló. Me sonrojo y el me mira a los ojos.

-Eres hermosa, Kara -dice y se acerca a mis labios.

Me besa suavemente, pasa su lengua por mis labios y se me escapa un jadeo. Vuelve a besarme, introduce su lengua en mi boca y su lengua juega con la mía. Baja las manos a mis caderas, toma el resorte de mi pantalón entre sus manos y yo colocó mis manos en su cabello. Cuidadosamente me quita el pantalón y mis piernas se ponen rígidas. Dan pone sus manos en mis tobillos y me levanta levemente las piernas. Siento que el corazón se me va a salir del pecho con cada caricia que hace y recuerdo lo de Christian

-¿Estas bien? -susurra.

-Ss..si -digo y muerdo mi labio.

Dan se quita la camisa y me quedo estupefacta viendo su pecho. Tenía razón, Dan tiene un físico

impresionante y bien trabajado. Pone sus manos en mis tobillos y las sube lentamente por mis piernas. Abre más mis piernas suavemente y se pone entre ellas. Mi pecho sube y baja rápidamente... Y ni hablar de mi corazón que pareciera que va a explotar. Dan me besa detrás de la oreja y deja un rastro de besos hasta mi mandíbula. Besa, mordisquea y lame mi cuello hasta llegar a mi clavícula. Besa mis labios y se separa de mí.

-Espera un minuto -dice y se levanta de la cama.

Clavo la vista al techo y escucho sus pasos. Abre La puerta y la vuelve a cerrar ¿dónde va? En verdad estoy lista para esto y para cualquier cosa que venga. Tenía dieciséis cuando abusaron de mí y era virgen a esa edad... Se puede decir que me primera vez será con Dan y el a sido muy dulce conmigo. Recuerdo bien el día que abusaron de mi, fue ya hace tres años y recordarlo me da asco. Siento odio, dolor y unas ganas inmensas de matarlo. Deja de pensar en ello, Kara. Me digo a mi misma y escucho la puerta abrirse. No apartó la mirada del techo.

Escucho que Dan se quita los pantalones y yo me sonrojo ¿por que me sonrojo tanto con el? Me siento desnuda y aún tengo la ropa interior. Dan vuelve a ponerse arriba de mi y besa mis labios fugazmente.

-Si quieres que pare solo dilo ¿de acuerdo nena? -dice y mira mis ojos.

Respiro profundamente y asiento. Dan vuelve a besarme y baja los tirantes del sostén. Sus caricias me provocan escalofríos y me estremece. Busca el broche del sostén y yo me levanto para que pueda quitarlo. Y lentamente me entrego a el... Salen de mis ojos unas cuantas lagrimas cuando

Dan se hunde dentro de mi, pero el tiernamente las quita con besos y me hace suya de una manera dulce. En verdad estoy perdidamente enamorada de este chico...Creo que lo amo y me asusta a muerte perderlo. Se que llevamos apenas una semana de ser novios...pero en verdad lo quiero más que a nada. Estar con el me da una inmensa paz y hace mucho tiempo que no me sentía así. Desde la muerte de mi madre y la de James, la palabra paz ya no existía en mi vocabulario y cada vez que escapábamos esa palabra se escuchaba lejana. Recuerdo la primera vez que vi a Da, me sentí tonta por admirar su belleza y verlo fijamente. Aunque fue un completo idiota conmigo al principio, el cambio y ahora es menos idiota. Es un pervertido de primera...pero es mi pervertido.

-Dan...-susurro con voz entre cortada.

Dan acelera el ritmo y se queda quito. Yo estallo en mil pedazos y grito... Pero Dan me besa y sofoca mis gemidos. Un escalofrío me recorre desde la punta de los pies, hasta la cabeza y suelto un suspiro. Dan deja caer su cuerpo encima del mío, jadeando y sudando. Lo abrazo y trato de calmar mi respiración. El se da la vuelta y termino en su pecho, que sube y baja de una manera más lenta. Y nos quedamos así casi diez minutos.

-Te quiero -susurro en el oído de Dan.

Pero el se quedo dormido. Beso su pecho y me bajo de él. Me acuesto a su lado y lo miro fijamente ¿Qué vio el en mí? No soy una chica de pechos voluminosos y no soy hermosa. Tendré curvas...pero viene de familia, no me creo hermosa y perfecta. Queda claro que no soy perfecta y normal. Las chicas de mi edad tienen al menos a uno de sus padre o tío...pero nosotras ninguno. La primera persona que asesine fue hace seis meses...el día que murió mi padre. Aunque quisiera nunca sera normal, aparento serlo pero no y no creo serlo nunca. Acaricio la mejilla de Dan y el entre abre los labios ¿En verdad lo merezco? ¿El merece estar con alguien como yo? El apenas sabe mi nombre, donde nací, de donde vengo y lo que paso con mi familia. Pero el no sabe como murieron y lo que hicimos hace seis meses. 

No quiero que se horrorice si llega a saber de mi pasado. No se como va a actuar o que ara... Pero en verdad lo necesito. Lo necesito a mi lado...sera un idiota, pervertido y engreído, pero el es la pequeña esperanza que me hace pensar y desear un futuro. No sé cuanto tiempo estaremos juntos pero quiero que ese tiempo sea memorable para mí. Dolerá el día que tenga que dejarlo... Pero el corre peligro junto a mí y antes mi prioridad era proteger a Kate...y ahora es proteger a Dan. Se que ellos lo buscaran, por que sabrán la conexión que hay entre los dos y querrán matarlo. Levante muro tras muro para alejar este tipo de sentimiento...pero llega este imbécil y manda todo al carajo. Miro el techo, cierro los ojos y me pregunto una ultima cosa ¿Qué serias capaz de hacer para protegerlo? 

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Capítulo 16

Siento calor. Demasiado calor para ser exacta. Abro los ojos y miró a mi alrededor. Esta oscuro y no sé qué hora es. Y lo primero que noto es que estoy desnuda, la segunda...siento una respiración en mi pecho y la última...es que me veo enrollada en brazos y piernas de alguien. Recuerdo lo de esta madrugada y me sonrojo... ¿Como puede olvidar lo? Acarició su espalda desnuda y Dan se remueve gruñendo. Quito sus extremidades lentamente de mi cuerpo y me muevo silenciosamente en la cama. Bajo de ella, busco mi ropa interior a tientas y busco algo para ponerme encima... Veo la camisa de Dan, que es negra como siempre y me muerdo el labio ¿O sera igual que siempre? Me acercó y la tomó del piso, llevándomela a la nariz e inhalando profundamente. Huele a él aún. Me la pongo y me da hasta los muslos. Abro la puerta muy despacio y salgo de mi habitación sin hacer ruido.

Bajo las escaleras y voy a la cocina. Abro un poco la cortina y sólo veo oscuridad. Suelto un suspiro, enciendo la luz y me acercó al refrigerador. Aún no me creo que lo haya hecho con Dan y precisamente el día de mi cumpleaños. Saco del refrigerador una botella de agua y me la término de tres tragos. No tengo idea de que are más tarde...pero estoy segura que comprare flores blancas para mi madre y James. Tiro la botella al bote de basura, apagó la luz y me voy a las escaleras. Entre a mi habitación y admire la vista. Dan estaba acostado boca abajo...con el trasero al descubierto y tenía aferrada una almohada en sus brazos. Me acerque silenciosamente a él, cubrí su trasero y busque mi cámara. Cámara en mano, me

pare alado de él, quedando enfrente de su cara, me aleje un poco y tome la foto. Sonreí y me acosté del otro lado. Me estire un poco, apague la lámpara y cuando estaba devuelta en mi lugar, Dan me enrolla en sus brazos y me atrae a su pecho. Mi espalda queda pegada a su pecho, mi trasero pegado en su entre pierna y él hundió la nariz en mi cabello. Cerré los ojos y me quede dormida escuchando la respiración de Dan pegada a mi oído.

-Despierta bambi.

Dice Dan en mi oído y yo gruño, me pongo boca a bajo y suelto un suspiro. Dan me pega en el trasero y yo doy un respingo. Me doy vuelta y lo veo con una bandeja en manos. Me siento en la cama, tallo mis ojos y trato de peinarme un poco.

-Te hice el desayuno...y me encontré con una escena, la cuál me a traumado de por vida y necesitare de ayuda psicológica para olvidar lo -dice y hace una mueca.

Río por su cara y por la forma tan formal que hablo.

-¿Qué vistes? -pregunto y bostezo.

-No querrás que te traume también a ti -dice y se acerca a la cama-. Pero tiene que ver con tu hermana y Zack...

-No sigas...

Veo la bandeja que trae en sus manos y la boca se me hace agua. Pan tostado con nutella, waffles, juego de naranja y té de limón...

-¿Como sabias que me gusta el té de limón? -pregunto y el pone la bandeja en mis piernas.

-Adivine -me le quede viendo- No lo sabía -dice y se encoje de hombros.

Miro el desayuno que trajo y sonrió como idiota.

-No debiste de molestarte, Dan -digo y doy golpecitos a mi lado.

Dan se sube a la cama y se sienta junto

a mí. Tomo una tostada y cuando estaba apuntó de meterla a mi boca, Dan me la quita y se la mete toda en la boca. Hago un puchero y el sonríe un poco.

-Eso era mío -digo y tomó otra tostada.

-Si...era -dice.

Trata de quitarme la tostada que tengo en mi mano y muerdo sus dedos.

-Auch -dice y toma sus dedos.

-Eso es para que aprendas -digo y muerdo la tostada.

Dan me mira y niega con la cabeza sonriendo. Término mi desayuno y terminó mi té.

-Eres el mejor -digo y beso su mejilla.

-Lo soy -dice y pone su mano en mi pierna.

Las sábanas me dan hasta la cadera y aún traigo puesta la camisa de Dan. Miro a Dan y se me seca la boca. Esta solo en boxers y deja ver su cuerpo bien trabajado.

-Bambi...mis ojos están aquí arriba -dice y apunta sus ojos azules.

Me pongo roja y bajo la mirada. Eso fue vergonzoso.

-Hey...mírame -levanto la cabeza y lo miro-. No me enoja que me mires...al contrario, me gusta y más si eres tú.

Pone una de sus manos en mi mejilla y cierro los ojos. Esa simple caricia me hace desear más.

-¿Qué vistes en mi? -pregunto con los ojos cerrados aún.

-Lo sencilla y normal que eres nena -dice y acaricia mi mejilla.

Abro los ojos y siento que me pican. No quiero llorar.

-La palabra normal se queda corta para mí -digo y suelto un suspiro.

Dan ladea la cabeza y sonríe de lado.

-Y eso me gusta -dice sonriente.

Pongo los ojos en blanco y sonrió. Me acerca a él y beso sus labios. Dan me besa dolorosamente lento y quiero más. Muerdo su labio fuertemente y escucho sonidos raros de la garganta Dan. Me toma de la cintura

y me coloca encima suyo. Mis piernas están a cada costado de él y empuja su pelvis contra mis caderas. Siento su miembro y se me escapa un gemido. Vaya manera de empezar la mañana... Dan deja de besarme y se va a mi cuello. Ladeo la cabeza para darle más acceso a mi cuello y jadeo. De un movimiento rápido estoy debajo de él y enredo mis dedos en su cabello. Tiro de él, cuando Dan muerde mi clavícula y gime. Dios, esta es la mejor manera de despertar y el mejor cumpleaños.

-Me... encanta... sentirte-jadea y vuelve a besarme-. Pero no tengo protección -dice entre besos.

Paramos de besarnos y apoya su frente en la mía. Tengo la respiración acelerada y no ayuda de mucho tener las caderas de Dan pegas a las mías. Besa mi nariz y se levanta un poco.

-¿Te han dicho que besas bien? -pregunto inocentemente.

-¿Solo bien? -pregunta y levanta las cejas.

-Extraordinariamente eres un buen besador -digo y beso su nariz-. ¿Qué hora es?

Dan se aparta y busca su celular. Miro la vista que tengo y le veo el trasero. Tiene un buen trasero, lo admito.

-Son las...once -dice y yo abro los ojos como platos.

Mierda. Salto de la cama y corro al baño. Me quito la camisa de Dan, las bragas y me meto en la ducha. Maldita sea, es tarde y tenía planeado salir al bosque. Maldito Dan, no sé porque lo maldigo...pero lo hago. Me término de bañar y me enrollo en una toalla. Salgo disparada fuera del baño y cuando estaba parada enfrente del armario... Dan jala de mi toalla y esta cae al piso. Hago cómo puedo para cubrirme y me pongo roja a no más poder.

-Está vista...

Uff -me mira de pies a cabeza y sus ojos brillan-. Es la mejor de todas.

Se acerca lentamente a mí y yo solo lo miro. Tengo un brazo cubriendo mis pechos y con el otro trato de cubrir mi parte íntima. Dan sigue en boxers y yo estoy chorreando agua de mi cabello. Veo que trae algo en la mano y cuando esta cerca...veo que es un preservativo ¿de donde los saca?

-¿De donde los sacas? -pregunto y señaló con mi barbilla.

-Mmm...Zack -dice y se para enfrente de mí-. No debes avergonzarte de estar desnuda frente a mí...ya te vi como Dios te trajo al mundo.

Me pongo roja y el sonríe. Toma mis muñecas y las pone en su pecho. Pone sus manos en mi trasero y aprieta. Doy un grito ahogado y Dan lo sofoca besándome con lujuria... Y así señores lo volvimos hacer y esta vez no fue tan tranquila como la primera vez. Después de eso Dan se quedó dormido...otra vez y yo me termine de vestir.

Me había puesto una falda floreada, una blusa de tres cuartos blanca y unos zapatos rosas. Mi cabello lo deje suelto y baje las escaleras. Zack estaba acostado en el sofá y no había rastro de Kate. Cuando Zack me ve se levanta y corre abrazarme.

-Feliz cumpleaños, cuñada.

Dice, me levanta del piso y me da vueltas. Yo me aferró a sus brazos y suelto grititos. Es un tonto. Me baja y me entrega una cajita. La abro y encuentro un par de aretes de flores...son de plata. Eso también debo de admitirlo...me gusta usar cosas de plata. Lo abrazo y beso su mejilla.

-¿Y Mara? -pregunto y trato de acomodar mi cabello.

-Tomando un baño -asiento y doy media vuelta-. ¿Usaron

bien el condón? 

Me paro en seco, me giro y lo fulmino con la mirada. Idiota. Doy media vuelta y comienzo a caminar en busca de las llaves del auto, a mis espaldas Zack ríe y niego con la cabeza. Son tal para cual. Tomo las llaves y salgo de casa. Me voy al auto, lo enciendo y manejo hasta el pueblo. Me voy directamente a una florería y compro una rosas blancas. Dejo las rosas en el asiento trasero y emprendo el viaje al bosque. No tomaré fotografías... Conduzco al menos unos veinte minutos y llegó hasta una pequeña montaña con vista al bosque. Es hermosa la vista y no tengo mi cámara. Tomo las rosas y bajo del auto. Me colocó en la orilla con rosas en manos y una corriente de aire me recorre el cuerpo. Maldición hace frío. Regreso al auto, tomo un suéter que estaba en el asiento trasero y me lo pongo. Regreso y comienzo a quitar los pétalos de las rosas... Dejo que se los lleve el viento y observó como se alejan suavemente. Cierro los ojos, dejo que el oxígeno entre a mis pulmones y mi cabello choque en mi cara.

-¡Maldita sea! -grito, me alejo de la orilla y me dejo caer en el suelo.

-¿Por que? -susurro y lágrimas caen por mis mejillas-. ¿Por que ellos? 

Siento que alguien pone una mano en mi hombro, se sienta a mi lado y ni me molesto en mirar de quien se trata. 

-No es tu culpa Kara -dice Kate con voz dulce-. No es culpa de nadie...

Suelto un sollozo y la abrazo. Ella rompe en llanto y me envuelve en sus brazos.

-Claro que es culpa de alguien...y es de ellos Kate. Solo de ellos -sollozo y hundo mi cara en su cuello.

Hoy hace un año Samantha

White y James Thermopolis murieron en un accidente en auto. El accidente pasó el día de nuestro cumpleaños...hace un año. Es horrible perder a tu madre y hermano menor el día de tu cumpleaños. Recuerdo ese día y me entran más ganas de llorar. Sorbo mi nariz y dejó de abrazar a Kate.

-Hay que regresar -dice y yo siento.

-¿Como llegaste? -pregunto y entró al auto.

-Zack me trajo...que por cierto se quedó en casa junto a tu "modelo de Calvin Klein" -dice y sonrió.

Si... Dan es mi maldito modelo de Calvin Klein. Kate conduce de regreso a casa y yo tarareo la canción Chains de Nick Jonas. Kate estaciona el auto afuera del garaje, veo el auto de Dan y la camioneta de Zack. Es parecida a la de Logan... Bajamos del auto y entramos a la casa. Escuchamos ruido en la sala así que nos acercamos. Dan y Zack estaban semi sentados en los sofás.

-¡Falta! -grita Zack.

-¡Maldito hijo de perra! ¡A sido falta idiota! -grita Dan.

Kate y yo nos quedamos en la entrada de la sala viendo la escena sin ser vistas. Estaban viendo el fútbol...hombres. Pasan a comerciales y aparecen chicas semi-desnudas. Los chicos se sientan enseguida y ponen sus ojos en la pantalla. Kate tose y automáticamente ellos voltean a vernos.

-Amor...-dice Zack.

-Bambi...-dijo Dan.

Se quedan parados y yo niego con la cabeza. Kate a mi lado pone los brazos en jarras y cara de enojada.

-¿Me puedes explicar que estaban viendo? -dice en tono de enojo.

Pongo cara de seriedad y Dan solo me mira con cara de... "me han atrapado" Cruzó los brazos sobre mí pecho y pongo

todo mi peso en una pierna.

-Amor lo puedo explicar...-trata de decir Zack.

Pero Kate da media vuelta y se va a las escaleras. Zack no dudo por un segundo y sale corriendo tras ella. Trato de no reír y me funciona. Ahora tengo un duelo de miradas contra Dan. Azul contra café. No soporto la risa, doy media vuelta y camino hacia las escaleras. Escucho pasos y salgo corriendo. Subo las escaleras y cuando estaba apuntó de entrar a mi habitación Dan me toma en por la cintura y me pega a su cuerpo. 

-Oye nosotros...

No aguante más y rompo en risas. Dan me mira con el ceño fruncido y luego entiende todo. Niega con la cabeza y besa mi frente.

-Ya me había preocupado.

Dice y me carga en brazos. Entra a mi habitación y me deja caer en la cama. Me entrega una caja... El regalo de Kate.

-Quédate con ella...en lo que el imbécil de Zack y yo preparamos algo de comer.

Asiento, tomó el regalo y me levanto de la cama. Me pongo de puntillas y beso su mejilla. Salgo de mi habitación y voy a la de Kate. Abro la puerta y la encuentro con una caja en mano. Me acercó a ella y le entregó la caja. Ella la abre y aparece el collar de oro con un pequeño rubí en medio de una flor. Ella me abraza y me entrega su regalo. Lo abro y descubro una pulsera igual de oro con unas perlas. Es hermosa.

-Gracias -decimos al unísono.

Pasamos unas horas hablando y recordando viejos cumpleaños...claro evitando el del año pasado. No se cuanto tiempo pasó...pero me dormí en las piernas de Kate y ella también se quedó dormida. Escucho un "click" y luego un flash. Me despierto y veo a los dos idiotas parados en la entrada con sus celulares y mi cámara en mano.

-Ya está lista la comida -dice Zack y sale junto con Dan.

Muevo a Kate y esta se despierta enseguida.

-Hora de comer monstruo -digo y bajo de la cama.

Kate bosteza y yo acomodo mi falda. Bajamos y enseguida somos arrastradas por el olor de comida. Los chicos prepararon una estupenda comida. Que por cierto les quedo bien y los felicitamos. Luego de comer pasamos la tarde viendo películas y riendo. Después ellos se fueron, porque ya era de noche y necesitábamos arreglarnos para la cena en casa de Dan. Estaba en mi habitación ya bañada, con la ropa interior que me recomendaron y mire la hora. Faltaba una hora y media para que Dan viniera por mí. Así que me deje caer en la cama y inmediatamente caí en coma.

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Capítulo 17

-Despierta hermosa -dicen en mi oído y yo abro un ojo-. ¿Es que acaso nunca te cansas de dormir?

Me doy vuelta y miró a Dan.

-Ni que durmiera corriendo -sonrió y el pone los ojos en blanco.

-Tienes quince minutos para vestirte...tu clon ya se fue con el imbécil de Zack -dice y se sienta en mi cama.

¡Carajo! Salgo de la cama y corro a mi armario. Me pongo como puedo el vestido y ni me molesto en subir el cierre. Corro por mis zapatos, me los pongo y salgo disparada al baño. Tomo mi bolsa de maquillaje y comienzo a pintarme. Rimel, labial y polvo. Me miró al espejo y salgo a peinarme. Siento que me ven fijamente y cuando volteo me encuentro con los ojos de Dan...el cual tiene una estúpida sonrisa en su bella cara. Idiota.

-¿Te divierte? -pregunto y comienzo a peinarme.

-Pues...si -dice y sigue sonriendo.

Lo fulmino con la mirada y sigo peinándome. Me dejo el cabello suelto, tomó mis aretes dorados y la pulsera que me regaló Kate. Diablos, no me e subido el cierre.

-¿Me subes el cierre? -me acercó a él y me levanto el cabello.

Dan se levanta de la cama y se acerca a mí. Me doy vuelta, quedando de espaldas y me pongo las dos manos en mi cabello. Dan pasa sus dedos fríos por mi espalda y los vellos de mi espalda se erizan. Sube el cierre lentamente, tomándose todo el tiempo del mundo y rozando mi piel. Siento mi piel arder ahí donde me toca y luego besa mi nuca... Suelto un jadeo.

-Se nos hace tarde...y todos nos esperan en casa -dice en mi oído.

Asiento y acomodo mi cabello. Camino y siento los ojos de Dan

sobre mi trasero.

-Te vez hermosa -dice y pone una mano en mi trasero.

-Si, si... Pero deja de verme el trasero -digo y quito su mano de él.

El ríe y bajamos las escaleras. Salimos y veo el auto negro de Dan. El se apresura y me abre la puerta del auto, me ofrece la mano para ayudarme, la acepto y subo. El sube y conduce hasta su casa. Miro el vestido que me da arriba de las rodillas, es ceñido al cuerpo, estraple con forma de corazón y ahora que lo veo mejor tiene una línea negra arriba de la cintura. Era hermoso y abajo traía la ropa interior roja de encaje...que Dan me recomendó ponerme. Me había puesto unas zapatillas negras y...deje el celular ¡Mierda!

-Dan...deje mi bolso con mi celular...

Dan saca mi celular de su bolsillo y me lo entrega. Lo tomó y me le quedó viendo a mi encantador novio. Va vestido con un pantalón ajustado, una camisa blanca, una chaqueta y zapatos azul marino. Se ve guapo y su cabello negro está despeinado como siempre.

-¿Por que me miras tanto? Si quieres te regalo una foto mía -dice y sonríe.

-Porque me gustas tanto...y eres un creído -digo y pongo la vista al frente.

Dan estaciona el auto y veo otros cuatro autos. Bajo del auto y Dan se coloca a mi lado. Entrelaza nuestros dedos y una oleada de calor me recorre el cuerpo. Sonrió y el acaricia mi mano con su pulgar. Abre la puerta y escucho risas. Dan me conduce hasta el comedor y me encuentro rodea de caras sonrientes. La primera que me abraza es Kim, luego Amy, Alex, Mike, Sarah y de nuevo Zack.

-Ok, basta de abrazos...quiero a mi novia devuelta -dice

Dan, me jala y quedó pegada a su pecho.

-¡Hey, tranquilo! Es mía perro -dice Kate y todos ríen.

-A ver, yo no soy de nadie y punto -digo en tono firme.

Dan hace un puchero y Kate niega sonriendo. Dan se inclina y susurra en mi oído.

-Eres mía...solo mía -dice en tono seductor.

Me sonrojo y sonrió. Tiene razón...soy suya. En todos los sentidos posibles.

-A ver chicos, vamos a comer y celebrar el cumpleaños.

Anuncia Sarah y todos nos vamos a sentar. Miro el vestido de Kate, rosa pálido pegado al cuerpo y zapatillas negras...se ve hermosa. Sarah en la cabecera, Kim al lado izquierdo y Dan al derecho. Del lado de Kim estaba Mike, Kate y Zack. Yo estaba junto a Dan, Amy y Alex después. La comida ya estaba en la mesa enorme y se veía deliciosa. Espaguetis, pollo envinagrado, ensalada de frutas, puré de papas, brochetas de carne y algo que no conozco su nombre pero se ve delicioso. Como hasta reventar y aún no como el postre. Kim se levanta y golpea suavemente con la cuchara su copa con agua.

-Atención... ¡Dejen de comer! 

Dice casi gritando y todos dejamos de comer.

-Quiero felicitar a mis queridas amigas -nos mira a Kate y a mí-. Por sus diecinueve años, por ser un gran apoyo y por ser la mejor cuñada que e tenido en mucho tiempo... Mara, contigo siempre se puede contar al igual que Maya. Las quiero chica -sonríe y mira a Zack y a Dan-. A ustedes dos más les vale cuidarlas...porque si no los voy a castrar.

Todos reímos menos los chicos. 

-Y gracias a mi maravillosa madre por la cena...para mi maravillosa cuñada y mi encantadora

bambi -dice Dan y todos aplauden.

Yo le doy un codazo y Sarah sonríe. La cena fue bien y nos quedamos platicando unas cuantas horas. Este día fue...lindo, solo me ponía mal pensar en lo de hace un año y no quería pensar en ello. Dan tenía su mano en mi pierna y la acariciaba, hasta el punto que me dio un escalofrío y el sonrió. El maldito sabe lo que hace. Mete su mano debajo de mi vestido y la sube hasta donde puede. Trato de no llamar la atención y tengo suerte que nadie nos presenta atención a nosotros. El se acerca a mí y besa mi hombro desnudo. Diablos, esta jugando conmigo. Me muerdo el labio y colocó mi mano en su pierna. Subo y bajo la mano por su pierna suavemente, y la dejo cerca de su entrepierna. Sigo así por tres minutos y Dan ni se inmuta.

-Es hora del postre -dice Sarah y se levanta.

Hago ademán de pararme pero Dan me sujeta la muñeca y me quedo en mi lugar. Kim, Kate y Amy van tras Sarah... Deje de mover la mano y detuve en su rodilla. Dan toma mi mano y juega con mis dedos.

-Dinos Maya... ¿Qué estas estudiando? -pregunta Mike.

-No sé aún que escoger -respondo sinceramente.

-No eres la única -dice Zack y mira a Dan.

¿El no estudiaba medicina? 

-Ok chicos ya llegó el pastel...-dice Sarah.

Sarah y Kim trae en sus manos dos pasteles... Uno de chocolate y otro de vainilla. Dan se levanta de su silla y Kate se sienta en ella. Ponen el pastel de vainilla frente a mí y el de chocolate frente a Kate... No me gusta el chocolate a mí. Cantan la canción de Feliz cumpleaños y aplauden a lo último.

-¡Pidan

los deseos! -grita Alex.

Cierro los ojos y pienso en ellos...

1. Estar a salvo Kate y yo.

2. Tener un futuro.

3. Nunca separarme de Dan.

Abro los ojos y soplo a la solitaria vela que está en el pastel. Todos aplauden y miró a Kate. Ella sonríe y nos abrazamos. Estiró la mano está su pastel, en barro mis dedos y me alejo de ella sonriendo. Ella hace lo mismo...y en barro los dedos en su cara, Kate hace lo mismo y terminó con la cara llena de pastel. Reímos y escucho a los demás reír.

-¡Foto! -grita Dan.

Rodeo los hombros de Kate con mi brazo y sonreímos. Los flashes nos atacan y seguimos sonriendo. Luego veo a Dan y me acercó lentamente a él. Me ve y retrocede.

-No, no, no. Ni se te ocurra ¡NO...! 

Tomó su nuca con mis manos, me pongo de puntillas y impacto mis labios contra los suyos. El se resiste, pero sede y pone sus manos en mi cintura. Escucho los flashes y las risas la. Me despegó de Dan y estalló en carcajadas. Toda su cara quedó llena de pastel, pone cara de enojado y luego también ríe. Me da una servilleta y limpio nuestras caras.

-Debes de ver esto -dice Kate y me pasa mi cámara.

Miro las fotos de Dan y yo. La primera Dan no me toca, en la segunda me sostiene de la cintura y las últimas salimos sonriendo con las caras llenas de pastel. Dan me rodea la cintura con sus brazos y le enseñó las fotos.

-Eres una malvada, bambi -dice pegado a mi cuello y yo río.

-Sí, lo soy -beso su mejilla y devuelvo la cámara.

Todos nos vamos a la sala y seguimos hablando. Los chicos como siempre hacen burlas

y yo solo río. Este día está yendo increíble...trato de no recordar mi viejo cumpleaños y me funciona un poco. Kim dice de quedarse en casa de Amy con Alex. Mike no sabe que ara más tarde. Kate y Zack se irán a casa...ya me imagino que aran aya. Luego de un rato todos nos ponemos a limpiar el desastre que dejamos en el comedor y algunos empiezan a despedirse. Alex me abraza y Amy se me acerca, muy bajo me dice:

-Tu regalo lo tiene el modelo de tu novio -dice y me guiña un ojo.

¿Será lo que creo? Me sonrojo y niego con la cabeza.

Zack me abraza y luego Kate.

-Trata de llegar temprano mañana -dice y besa mi mejilla.

¿Ella cree que me quedaré? 

Luego Kim se acerca a Sarah.

-Me quedaré en casa de Amy, para una pijamada -dice y besa su mejilla.

-¿No están ya grandes para eso? -dice Sarah frunciendo el ceño.

-Nop...te veré mañana temprano mamá -se acerca a mí y susurra en mi oído -. Que te diviertas con el imbécil de mi hermano.

Estalló en carcajadas y Dan solo me mira. Si supiera... Luego de que todos se hagan ido nos quedamos Sarah, Dan y yo. 

-Iré a mi habitación -dice Dan y me guiña un ojo.

Sarah ríe y yo me pongo roja. Sarah y yo nos vamos a la sala y nos sentamos una enfrente de la otra.

-Kara, me alegra de que seas tu la novia de mi hijo -dice y yo me sonrojo.

-Gracias -digo y me acomodo el cabello.

-Y dime ¿que estas estudiando? -pregunta y me mira fijamente.

Buena pregunta, suegra.

-Creo que terminaré estudiando fotografía -respondo.

-Me alegra mucho de que sepas al menos que estudiar...

¿De donde eres?

Piensa, Kara. No le puedes decir la verdad.

-Nueva Orleans -respondo sin titubear.

-Vaya... ¿Tus padres, cariño?

-Están de viaje -digo rápidamente-. Los veré dentro de unos meses.

-Me alegro mucho... Sabes, antes de que tu llegarás aquí, Dan era alguien muy callado y cerrado con sus emociones -me le quedó viendo y ella me mira a los ojos-. Casi siempre estaba molesto y ahora sonríe. Te debo agradecer Kara.

-No agradezca nada, Sarah.

-No tengo que, gracias a ti mi hijo se ve feliz y ahora habla más... Cuando tenía quince años, estaba fuera de control y no sabía que hacer... Así que lo mande al ejército.

Abro los ojos como platos y siento que la mandíbula se me va a caer. ¿Dan...mi Dan, en el ejército? 

-Y cuando tenía dieciocho volvió, pero ya no bebé ni fuma...solo se volvió así como era cuando le dije que no era su madre -una lágrima cae de su ojo y yo voy a su lado y la abrazo-. Eso lo cambio y lo volvió un rebelde. Después del ejército se cerró y con tu llegada volvió a sonreír. Gracias Kara, por unir está familia y hacerlo feliz. 

Una lágrima sale de mi ojo y la limpio rápidamente. Un celular suena y Sarah contesta.

-Colleman -dice con voz suave-. Entiendo... ¿Qué tiene?... Revisa su archivo... Estaré ahí enseguida -cuelga y se levanta.

Camina hasta la entrada de la casa y la sigo.

-Kara, dile a Dan que tengo una emergencia en el hospital y estaré toda la noche ahí -besa mi mejilla y sale.

Suelto un suspiro y camino hacia las escaleras. Cuando ya estaba en el

último escalón, vi a Dan esperándome y en su mano tenía una venda...

-¿La venda para que? -pregunto y señaló las flores.

-Sorpresa -dice y cuando llegó hasta el mes venda los ojos-. Camina, yo te guiare.

Toma mi mano y comenzamos a caminar. Abre una puerta y jala de mi mano. Me suelta y desata la venda. Suelto un grito y me tapó la boca. Volteo a verlo y sonrió.

-Wow...es asombroso y hermoso.

Dan nos pinto...el día que le dije mi nombre. Estoy pegada al árbol y el me acorrala. Ese día fue nuestro segundo beso de muchos.

-Igual de hermoso que tu -se para atrás de mi y besa mi hombro-. Quiero arrancarte ese vestido de una maldita vez.

Me toma de las caderas y me voltea. Quedó pegada a su pecho y colocó las manos en sus hombros. Meto las manos debajo de su chaqueta y la deslizó fuera de sus brazos. Toma mi barbilla y la levanta. Mis ojos se encuentran con los suyos que brillan. Acerca sus labios a los míos y los devora. Tomo el dobladillo de su camisa y trato de quitársela, torpemente la quito y pongo las canos en sus caderas. El baja el cierre lentamente y me sigue besando con lujuria. Cuando lo baja por completo el vestido cae a mis pies, me toma del trasero y me pega a su pelvis. Siento el bulto en los pantalones de Dan y tomó sus cara entre mis manos. El me levanta y enrollo mis piernas en su cintura. Camina a su cama, se deja caer quedando el sentado y yo en su regazo. Muerdo su labio y el gruñe. Lo empujó y el cae en la cama. Torpemente desabrocho su pantalón aprisa, mientras Dan besa mi cuello y termina ayudándome. Quedamos en roca

interior y el desabrocha mi sostén. Dan gira y quedó debajo de él. Estira la mano, abre un cajón torpemente y saca una caja de preservativos...

-¿El...regalo...de...Amy? -pregunto entre besos.

-Sí...es buena amiga -dice y vuelve a besarme.

Quita mis bragas de un tirón y el se quita sus boxers rápidamente. Se coloca el preservativo, enrolla mis piernas en sus caderas y me penetra de una fuerte envestida. Suelto un grito, clavo las uñas en su espalda y la araño sin piedad. Dan gruñe y me embiste fuertemente. Besa mis labios, mi cuello y mis pecho. Regresa de nuevo a mis labios y los devora. Mete su lengua en mi boca y acaricia mi lengua. Sus embestidas se vuelven dolorosamente lentas y yo quiero más...

-Dan...por favor -digo entre jadeos-. Más...rápido.

El gime y comienza moverse de verdad. Besa mis labios y hunde la cara en mi cuello. Besa, chupa y lame mi cuello. Yo encajó las uñas en sus brazos y gimo fuertemente. Este hombre me va a matar... Nunca me canso de él ¿Eso es normal?

-Kara...

Susurra en mi oído, me besa y explotó en miles de pedazos. Muerdo su labio fuertemente y Dan se queda quieto. Siento un sabor metálico en mi boca... Le rompí el labio. El se apoya en sus codos, mira mis ojos y se lame el labio.

-Eres una salvaje -dice y besa mis labios fugazmente.

-Tu no te quedas atrás -digo y desenrollo las piernas de sus caderas.

Dan sale lentamente de mí, se levanta y se mete en el baño. Tomo las mantas, me cubro hasta el pecho y miró el techo. Termine mi cumpleaños de la mejor manera... Muerdo mi labio y volteo a ver la pintura. Dan pinta muy bien, ame la pintura y se el lugar perfecto para ponerlo. Dan sale del baño y se acuesta a mi lado...desnudo.

-Gracias por todo cariño -digo y me pongo de lado.

-No hay de que bambi -dice y me atrae a su pecho.

Mi espalda queda pegada a su pecho y mi trasero pegado en su entre pierna. El hunde su cara en mi cabello y queda dormido al instante. Siento que los párpados me pesan y me dejo llevar por el sueño. Hoy fue el mejor cumpleaños de todos... Gracias a él.

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Capítulo 18

Había transcurrido una semana desde mi cumpleaños y ya era viernes. Como siempre no teníamos clases hoy y me desperté hasta que Kate tuvo que hablarme para desayunar junto a los chicos. Después de ello pase unas cuantas horas hablando con Kate sobre nuestros planes para navidad... Si lo sé, falta mucho pero con nuestra vida uno nunca sabe y podríamos salir corriendo de nuevo. 

Esta vez me encuentro en el bosque tomando fotos...cono siempre. El atardecer teñía el cielo de un color naranja mezclado con rosa pastel y en verdad se veía hermoso. No tenía planes para más tarde, pero si pasaría unas cuantas horas más en el bosque y luego vería que hacer. Deje la cámara colgando de mi cuello y saque mi celular para ver la hora. 6:48 pm es temprano aún, pero tengo que llegar a casa. Tome unas cuantas fotografías más y mi celular comenzó a sonar. Mire quien llama. Número Privado...no dude en contestar.

-¿Hola? 

-Kara - es Tom-. Te veo en Salem dentro de unas horas. En el Holiday Inc a las afueras de la ciudad. Esta en construcción.

-¿Qué pasa? -pregunto entre voz baja.

-Muchas cosas...

Llamada finalizada.

Miro el celular... Mierda, eso no es buena señal y sólo significa cosas muy malas. Tomo mi bolso, meto la cámara y salgo corriendo. Subo al auto, lo enciendo y arrancó, provocando que rechinen las llantas y salgan a toda velocidad. Conduzco a ciento cincuenta por hora y sólo me lleva cuatro minutos de diez llegar a casa, cuando me acercó piso el freno y salgo corriendo a la casa. Cuando entró subo las escaleras

aprisa y comienzo a gritar.

-¡KATE! ¡KATE! -entró a su habitación.

Ella pega un brinco de su cama y se acerca corriendo a mí.

-¿Qué ocurre? -pregunta exaltada.

-Tom -digo y ella se queda inmóvil.

Salgo de su habitación y me voy a la mía. Me desvisto y tomó ropa negra. Jeans, blusa de mangas largas y una chaqueta negra. Corro al baño, abro la puerta del lavabo y sacó mi cinturón. Ando corriendo en mi habitación en ropa interior y me pongo los jeans a brincos, me pongo el cinturón y corro a mi armario. Saco mi mochila y dejó caer todo el contenido en mi cama. Tomo el revolver, unos cuchillos y la calibre cuarenta y cinco de mi libro. Todo lo colocó en el cinturón y terminó de vestirme. Me pongo mis botines negros y amarró mi cabello en una coleta alta. 

-Iré contigo -dice Kate.

Giro y la veo ya lista. Acomodo las armas dentro de la chaqueta negra y oculto el cinturón.

-No -digo y me acercó a ella-. Iré sola, tu me iras a dejar a Salem y regresarás.

-Ni lo sueñes iré contigo, Kara.

Pongo las manos en sus hombros y miró sus ojos.

-Jure que te protegería hasta mi muerte, lo hice el día que murió papá y no dejaré que vayas conmigo a un lugar donde tal vez no regrese viva -mis ojos arden, pestañeo rápidamente y suelto un suspiro-. Te amo Katherine Thermopolis.

Ella me abraza y suelta un sollozo. Nunca la dejaré ir conmigo, es mejor que ella se quede cuidando mis espaldas por los comunicadores y no ponerla en peligro. Somos gemelas...pero yo soy la mayor y lo que le pase a ella es mi maldita responsabilidad.

Dejamos de abrazarnos y bajamos para ir al auto. Kate conduce a toda velocidad por la carretera y nuestros celulares comienzan a sonar. Apagó el mío y el de ella.

-Si Dan va a casa dile que lo veo mañana -digo con voz firme.

Ella asiente y acelera más. Abrocho mi cinturón y dejó la vista clavada en la ventanilla. Tom llamó y dijo "muchas cosas" eso solo me hace pensar en muchos problemas y un escalofrío me recorre la espina dorsal. Miro a Kate que tiene la vista al frente y cada vez acelera más para llegar pronto. Ella...mi pequeña hermana, mi única hermana que a sobrevivido a la tormenta y nunca se rinde. Recuerdo el día que le disparó a alguien que trato de matarme a mí. Ese día se volvió fría y cuando estábamos a salvo lloro durante horas, yo no dije nada y sólo la abrece. También el día que le rompieron el corazón, se limpio las lágrimas y siguió como si nada. Katherine es la persona más fuerte que conozco, cada vez que nos atacan ella trata de no perder el control y protegerme a mí. Mantenerme a salvo a mí es un maldito trabajo difícil, ya que soy una puta suicida y no tengo miedo de morir.

Un recuerdo viene a mi mente... El día que murió mamá y James. Ese día yo quede destrozada, ella fue fuerte y me dijo que todo estaría bien, ella sabía que nada estaba bien...y sin embargo trato de tranquilizarme ¿Qué are si un día la pierdo? Unas ganas de llorar me invaden y miró la hora del auto. Ya a pasado una hora y media. Salem queda a cuatro horas y a la velocidad que vamos debemos llegar en media hora. En el trayecto inventamos un plan que esperamos

que funcione. Consiste en que yo lleve un comunicador pegado a la chaqueta y un rastreador, así ella puede saber de mi y no preocuparse. Kate me dejara a unas cuadras del hotel y de ahí yo me las arreglare para regresar a Twin falls. Kate estaciona el auto a unas cuatro cuadras y toma mi mano.

-Cuídate Kara -me abraza y susurra muy bajo-. prométeme que estarás bien.

-Te lo prometo -beso su mejilla.

-Te amo, Kara.

-Te amo Katherine.

Bajo del auto y comienzo a caminar. El auto acelera hacia la ciudad y yo suelto un suspiro. Me tranquiliza un poco saber que está lejos de aquí. Comienzo a caminar y me doy cuenta que los edificios de mi alrededor están apenas en construcción...pero ya tienen nombre. Me oculto en las sombras y sacó el revolver de mi cinturón. Camino a paso rápido y pasó dos cuadras más o menos. Mis manos comienzan a sudar y mi corazón late con rapidez. Escucho ruido y salto detrás de un bote de basura. Saco la cabeza y veo un auto alejarse. Suelto el aire que estaba conteniendo y vuelvo a caminar. Divisó el nombre del hotel en construcción y entró. Esta en completa oscuridad, a tientas saco una pequeña lámpara. Alumbró con la lámpara, mientras que apuntó con el arma...como lo hacen los policías y en películas. 

Entró a lo que debe de ser el living y lo atravieso. En ascensor suena y apuntó rápidamente en esa dirección. Las puertas se abren, pero no sale nada y aún así no dejó de apuntar ahí. Me acercó lentamente, pero sin dejar de apuntar y agudizó mis oídos por si escucho un ruido. Entró rápidamente al ascensor y apuntó

a todos lados, nada de nada y cuando iba a salir las puertas se cierran, suena el timbre de llamado y comienza a subir. Llegó a la segunda planta y no para, la tercera, cuarta, quita y sigue sin detenerse. Esto debe de ser obra de Tom. Llegó hasta el piso dieciséis y se abren las puertas. Vuelvo a apuntar y salgo del elevador. Camino por el pasillo y veo luz en una habitación. Me acercó sin hacer ruido, me pego a la pared y respiro profundamente. Aquí vamos. Salgo y apuntando, miró la habitación llena de aparatos electrónicos...y en una silla está sentado alguien.

-Kara...-reconozco su voz y me acercó.

El gira su silla y lo veo. Su rostro se ve cansado, sus ojos grises se ven ansiosos y su cabello que alguna vez fue rubio ahora es más oscuro y lleno de canas. Apagó la lámpara y la guardo junto con el arma en el cinturón.

-¿Qué ocurre, tío Tom? -pregunto en tono tranquilo.

Camino y me siento en una silla enfrente de él. Damas y caballeros les presento a Thomas White. Hermano mayor de mi madre Samantha White y nuestro único familiar que se contacta con nosotros. E mentido diciendo que no tengo a nadie, pero es que a Tom es raro cuando lo vemos y cuando es así no es nada bueno. El nos ayudó con el cambio de nombres, los cuales tenemos tres falsos...contando con el de Maya y ni hablar de las clases de computación que le dio a Kate. Ellos dos son unas malditos cerebritos en cosas de computación y yo soy más estilo a mi padre.

-Tengo noticias sobre...Mason -dice y acomoda sus gafas.

Mason es el nombre de mi padre.

-¿Qué sucede? -pregunto

y trato de tragarme los nervios.

-Kara...tu padree estuvo en la milicia y trabajo para el servicio secreto... -dice y lo interrumpo.

-¿De que estás hablando, tío? 

Ok, ya me perdí. El me mira y asiente. Cierro los ojos y cierro las manos para luego volver abrirlas. Mi padre...estuvo en la milicia y fue agente secreto ¿que cosas más oculto?

-El tiene archivos sumamente importante para ciertas personas...-dice y entrelaza sus dedos.

-¿Qué archivos? -pregunto y miró sus ojos grises.

El cubre su rostro con sus manos y se talle los ojos. Suelta un suspiro y se acomoda en la silla.

-Escúchame -mira mis ojos y se quita sus lentes-. Los archivos que tenía tu padre están ocultos y donde los oculta se necesita de una clave para abrirse...

-¿Y en qué parte entramos nosotras? -pregunto y cruzó los brazos sobre mí pecho.

-Esa clave está escrita en los collares que les regalaron sus padres -dice y se levanta de la silla giratoria.

-¿En los collares de Kate y mío? -pregunta y asiente-. Pero...

Se que siempre hay un pero. El se recarga en la mesa, dándome la espalda y mirando a los monitores. 

-Pero...ustedes tienen sólo cuatro dígitos en total -hace una pausa-. Y son ocho. Los otros cuatro están en los demás collares...

Me quedo inmóvil al recordar. Hace cinco años mis padres nos regalaron a Nick, Kate, James y a mí collares con dijes. El mío era de una estrella, el de Kate una media luna, el de Nick un sol y el de James una piedra azul con un cuarto de luna...

-Ellos murieron Tom... No sé dónde están los collares

-digo y niego con la cabeza.

-Kara...los collares están con ellos -dice y se voltea a verme.

-No sé a qué te refieres -digo sinceramente.

El mira mis ojos y suelta un suspiro. Eso no es buena señal.

-Kara, tus hermanos están vivos...

Me quedo petrificada mirando sus ojos ¿no habla enserio verdad? El asiente y bajo la marida al piso... Están vivos... Mis ojos se llenan de lágrimas y cierro los ojos. Dios, están vivos...todo este tiempo los di por muertos. Esto cambia todo, todas las cosas y mi vida. Siento que la habitación me da vueltas y me dejo caer al piso de rodillas y hundiendo la cara en mis manos. 

-Nick y Jame están vivos -digo en un susurro y sonrió-. Están vivos...

Levanto la cara y dejó que lágrimas de felicidad caigan por mi rostro... Pero yo vi morir a James...

-¿Como sobrevivió James, si iba en el mismo auto que mi madre? -pregunto y limpio mi cara.

-Ahí es cuando entra Carol -dice y camina hacia un cajón.

-¿Qué tiene que ver mi adorada abuela en todo esto?- pregunto y frunzo el ceño.

-Tu madre dejo a James con Carol...antes del accidente -dice y se queda callado.

¿Carol? ¿Pero que tiene que ver ella con eso? Miró a Tom y me entrega un sobre. Lo miro confundida, el solo da media vuelta y se sienta de nuevo en la silla. Rompo el sobre y sacó unas fotografías... Mis manos comienzan a temblar y la boca se me seca. Más lágrimas salen de mis ojos y las limpio bruscamente. Hay fotos de James junto a Carol, en un parque, un auto y luego en un bote. Miro a Tom confundida.

-Esas fotos fueron

tomadas hace un mes...-abro los ojos como platos y el asiente-. Es cierto, pero no se encuentran el país y no sé en que parte de Europa están ocultos...

Guardo las fotos en mi bolsillo. Me levanto del piso y comienzo a caminar de un lado a otro. James está con Carol en algún lugar de Europa y no sé sabe bien el paradero... Pero ¿y Nick? 

-¿Dónde está Nick? -pregunto y el mira uno de los monitores.

Comienza a teclear y un sin fin de cosas aparecen en el monitor. No sé qué está buscando o que trata de enseñarme.

-Aquí está -dice y me hace señales para que me acerque-. Hace unos cinco meses, saco de la cuenta que tiene...cincuenta mil dólares y desde ahí no a habido cambios en la cuenta.

Veo las cifras y aún quedan varios ceros en su cuenta. Así, nuestro padre nos dio cuentas con un millón de dólares a cada uno, hace tres años y no sé de dónde saco tanto dinero. Por que en total son tres millones, ya que solo nos dio a los mayores y a James no le dejo. Miro la ultima vez y efectivamente fue hace cinco meses.

-¿Dónde está? -pregunto y lo miro.

-No se donde esta, Kara...lo siento -dice y yo asiento.

Ahora pierdo esperanzas en que Nick siga vivo...pero se que James está asalvo y eso quito un peso de mi pecho. 

-Kara...-me llama Tom y volteo a verlo-. Tu apellido no es Thermopolis...

-¿Qué? -lo miro incrédula y el solo asiente.

-Tu apellido verdadero...es Evans -el vuelve a teclear y me muestra algo-. El verdadero apellido de tu padre a Evans... El cambio su apellido por el de tu madre y por ello ustedes eran Thermopolis.

Miro

el monitor y pongo una mano en mi frente. Son datos de mi padre...

-Mason Evans Martin.

12 de Febrero de 1965. Arizona, Nuevo México.

08 de Marzo del 2015. Nueva York, Ciudad de Nueva York.

Reclutado a la edad de quince años. Estuvo en la milicia diez años. Trabajo para el servicio secreto hasta su muerte: veinticuatro años. Casado veintiséis años con Samantha White Thermopolis. Viudo a la edad de cuarenta y nueve años. Padre de:

Nick Evans White. Veintiún años.

Kara Evans White. Diecinueve años.

Katherine Evans White. Diecinueve años.

James Evans White. Dieciséis años.

-¿De cuando son exactamente los datos? Porque este documento ya tiene nuestras edades cumplidas -digo y vuelvo a revisar el documento.

-Lo hice yo...y sí. Efectivamente está actualizado con sus edades cumplidas este año -dice y mete una USB en el monitor.

Tom teclea y pasa varios datos a la USB. Yo solo miró y mis nervios crecen... Esto es nuevo en mi vida... ¡Carajo! Todo en mi maldita vida a sido una puta mentira. Dios, estoy molesta con todo, con mi padre y conmigo misma. 

Pero quiero preguntar unas últimas cosas...

-¿Porque nos quieren matar? -pregunto y Tom suelta un suspiro.

-Por los archivos de tu padre...en verdad necesitas esa clave -responde y me entrega la memoria.

-¿Savez quienes son los que nos quieren muertos?-pregunto y tomó la USB.

-Lo siento...trato de averiguarlo pero no lo sé, lo siento Kara -dice y se pone sus gafas.

-¿Dónde puedo encontrar a Nick?-pregunto mientras guardo la memoria.

-No quise decírtelo pero Nick tiene un buscador dentro de su cabeza...Kate sabrá que hacer -dice.

Estaba apuntó de preguntar otra cosa, pero soy interrumpida por un pitido y luces rojas. Miro los monitores y aparecen varios hombres entrando al edificio.

-¡Oh mierda! -maldigo y miró frenética a mi alrededor. 

Tom aprieta varios botones y los monitores se ponen negros y comienza a escucharse un tic-tac. Mierda, a activado una bomba. 

-Tiene que salir de aquí en dos minutos...baja por las escaleras de incendios -dice y yo asiento.

-¿Qué harás? -pregunto y me detengo en la puerta.

El sonríe amargamente y me hace señales para que me vaya. Asiento y salgo corriendo hacia las escaleras. Bajo rápidamente las escaleras y apenas llegó al piso diez. Sigo bajando y escucho pisadas. ¡Joder! Me agachó antes de que una bala me atraviese el cráneo. Saco el revolver y disparó. Escucho un gruñido y recargo el arma. Y cuando iba a disparar, soy derribada y mi atacante se pone a ahorcadas sobre mi estómago. Un cuchillo está puesto en mi garganta y maldigo en ni mente... Y aquí termina mi vida. Levanto la vista para verle la cara a mi atacan y nuestros ojos se encuentran...

-¡¿TU?! -gritamos al unísono.

Oh mierda... Esto está aún peor que todo lo demás...

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Capítulo 19

Mis ojos no lo podían creer...ni yo misma lo creía. Sus ojos estaban abiertos como platos, como deben de estar los míos y en vez de tener ese brillo, sus ojos parecían vacíos...pero al verme estaba horrorizados y confundidos. Sentí unas inmensas ganas de salir corriendo pero no podía, ya que seguía a ahorcajadas sobre mí estómago y el inmediatamente retiro el cuchillo.

-¿Kara eres tú? -pregunto tomando mi rostro entre sus manos.

-No imbécil, es mi holograma el que está aquí -escupí enojada.

Y vaya que estaba enojada. Dan frunce el ceño y se quita de encima mío. Me da la mano, la acepto y de un tirón me levanta...¿Pero que hace aquí? Y la principal...

-¡¿Por que mierda me querías matar?! -grito y lo empujó.

El gruñe y mira arriba.

-Te tengo que sacar de aquí... Hay una bomba -dice y se agarra el hombro.

-Ya lo sé idiota -Si definitivamente estaba enojada.

El no responde. Toma mi mano y me jala para que lo siga. No pongo resistencia y corro con él escaleras abajo. Él se detiene en la planta de abajo y abre una puerta. Me arrastra junto a él y se detiene enfrente de una ventana que tiene vista a un pequeño lago ¿Que hacemos aquí? Me suelta, da media vuelta y toma una silla y camina hasta mi lado.

-¿Para que la silla? -pregunto confundida.

-Aléjate de la ventana -dice y toma impulso.

Brinco a un lago y Dan avienta la silla de metal contra la ventana. Esta se rompe y cubro mi rostro instintivamente.

-Vamos...solo quedan diez segundos -dice y toma mi mano.

-¿Ir a donde? -pregunto y frunzo el ceño.

-Afuera

-lo miro confundida -. Hay que saltar.

Y es ahí cuando quito mi mano de la suya y niego con la cabeza. Ni hablar, yo no saltare.

-Estas loco... Estamos en el noveno piso -digo y sigo negando.

-¿Tienes miedo a las alturas?-pregunta.

Apenas iba a responder cuando se escucha una explosión. Dan jala de mi mano y suelto un grito en el momento que él brinca fuera de la ventana, arrastrándome con él. El agua no tarda en cubrirme y estaba en shock me desespere. Me tomaron de la cintura y me llevaron a la superficie. Cuando saque la cabeza comencé a toser y trate de flotar. Escuche disparos y luego fui arrastrada de nuevo al fondo del agua. Abrí los ojos y vi a Dan enfrente de mí haciendo señas para que esperará. Sabía nadar, pero no contener la respiración, así que el aire se me fue rápido y cubrí mi boca con la manos. Dan apartó mis manos de mi boca, me tomo por las mejillas...y me beso. Fue un beso más o menos de tres segundos, pero fue suficiente para que me diera aire y resistir un poco más. Me tomó de la mano y comenzó a jalarme. Era hora de nadar. Dan nada lento, como si algo le molestara y me preocupe. Basta, el intento matarte idiota y tienes que pedir explicaciones. Me dijo mi subconsciente y seguimos nadan.

Unos cuantos metros más y salimos del agua. Dan gruñe y comienza a nadar a la orilla. Lo sigo y cuando salimos nos dejamos caer en el pasto, tratando de respirar nuevamente y recuperarnos. Cuando ya estaba calmada me puse a la defensiva.

-¿Por que demonios trataste de matarme? -pregunte, mientras me levantaba.

-Yo también te pregunto lo mismo -dice

y señala su hombro.

Esta sangrando...fue a él a quien dispare. No digo nada y él comienza a trotar ¿dónde va? Ni hablar, me debe explicaciones...aún que claro yo igual a él. Nos alejamos y dejamos la zona de construcción.

-¿Tienes auto? -pregunto en el momento que nos detenemos.

-Lo deje a una hora de aquí -dice y mira a todos lados.

¡Genial! No me agrada la idea de estar junto a él...pero me asusta dejarlo en su estado. Apesar de que trato de matarme y yo él. Miro a la derecha y me encuentro con varias motocicletas de diferentes modelos. No lo pienso ni un segundo y comienzo a correr hacia allí. Escucho pasos detrás de mi, se que es Dan y ni me molesto en verlo. 

Cuando llegó a una motocicleta, tomó los cables de corriente, saco un cuchillo y los corto. Hago un corto circuito, como me enseñó mi padre y la enciendo. Me doy vuelta y veo a Dan mirándome fijamente. El levanta una ceja y yo me encojo de hombros. El hace ademán de subirse a la moto para manejar la y lo detengo.

-No conducirás en tu estado-digo y señaló su hombro.

-¿Y tu si? -pregunta Dan en un gruñido.

Le duele la herida. No le respondo y subo a la moto. El se sienta detrás de mí, rodea mi cintura con un brazo y se pega a mi espalda. Arrancó la motocicleta y salgo disparada fuera del bar...de donde la robe. Si la robe, pero fue para una buena causa... El viento me golpea la cara y me da un horrendo frío de los mil demonios. Mierda, me voy a congelar. 

Aceleró y nos alejamos de ahí. Volteo hacia la izquierda y veo un edificio arder en llamas. Tom... ¿Abra

salido de ahí...? Recuerdo su triste sonrísa y unas lágrimas se escurren por mis mejillas. A muerto Kara. Me digo a mi misma, pero antes de ello me dijo sobre mis hermanos y un poco de explicaciones. El agarre de Dan se vuelve más débil y aceleró más. Esta perdiendo mucha sangre... No sé cuánto tiempo pasa, pero me pone nerviosa Dan...se que es un maldito por intentar matarme. Pero lo amo y me preocupa demasiado...

-Detrás de ese edificio -grita Dan en mi oído, pero su voz se volvió débil en la última palabra.

Rodeo el edificio y me encuentro con el Mini Cooper negro. Estacionó la motocicleta alado y la pago. Dan baja, pero cae de costado y inmediatamente baje para ayudarlo. Me arrodilló junto a él y tomó su rostro entre mis manos. Esta pálido...y tiene otro disparado en el costado. Esto no esta bien, el no está bien y yo tampoco. Revisó sus bolsillos y me encuentro con un preservativo... Pongo los ojos en blanco y sacó las llaves. Abro el auto, lo arrastró hasta la puerta de copiloto y abrocho su cinturón. Subo al auto, ni me molesto en ponerme en el cinturón y así arrancó a toda velocidad.

El límite de velocidad es de sesenta... ¡Al diablo el límite de velocidad! Miró de reojo a Dan, esta inconsciente y muy pálido... Dios, si lo llegó a perder me muero. Abra intentado matarme, pero eso no impide que me deje de importar y no me preocupe. Y de todas las personas en el mundo, tuvo que ser él y solamente él. Siento un cómo un hoyo se abren en mi pecho al verlo de nuevo...se ve muy mal y parece empeorar. Conduje media hora, ya que iba demasiado rápido

y sólo faltaban unos minutos...

-Kara...-susurro Dan.

El hoyo en mi pecho se volvió más grande aún y me dieron ganas de llorar. El no se puede morir. Dan tiene que vivir, no puede morir y abandonar a su familia. Veo el letrero de Twin falls y aumento la velocidad. Me importa un pepino llamar la atención. Conduzco directamente hacia su casa y levanto una capa de polvo al pasar por el sendero que lleva a su casa. No veo ningún auto, eso significa que no hay nadie en casa y estaremos solos. Mejor. Estacionó el auto y me bajo rápidamente de él. Abro la puerta de Dan, desabrocho su cinturón y el gruñe.

-Dan, tienes que ayudarme...no puedo llevarte a tu casa sola -digo y pasó un brazo sobre mis hombros.

El asiente y trata de ponerse de pie. Esta pálido y débil. Maldita sea, tengo miedo. Dan pone la mayor parte de su peso sobre mí cuerpo y comienza a caminar. Cuando llegamos a la puerta, él saca las llaves de su bolsillo y me las da. Abro rápidamente la puerta y entramos. No podré subirlo a su habitación, así que lo llevó a la sala y cuando llegamos se derrumba en el piso.

-¡Dan! -grito y me arrodilló junto a él.

El abre pesadamente sus ojos... Están oscuros y asustados. Tomo un cojín del sofá y lo colocó en su cabeza. Me levanto del piso, corro a la planta de arriba y comienzo a buscar la habitación de Sarah. Ella debe de tener lo que necesito. Cuando encuentro su habitación, entró en ella y corro al baño. Saco un botiquín grande y vuelvo a correr a la sala. Dan está ahora sentado en el sofá y hace muecas de dolor. 

-Quítate la camisa

-digo y el gruñe.

-Me duele el hombro -dice con voz ronca.

Me paro enfrente de él y el me mira con el ceño fruncido. Le quito la chaqueta con cuidado, tomó su camisa por el cuello y la parto a la mitad. El me mira sorprendido y yo solo lo veo más preocupada. Diablos, verlo así me dan ganas de llorar. Le quito la camisa rota y le señaló el sofá para que se acueste. Tomo el botiquín, rebusca en el y sacó lo necesario. Gasas, vendas, pinzas, alcohol, hilo e agujas. Me pongo de rodillas frente a él y limpio cuidadosamente la sangre de la herida. Dan gruñe y pone una mano en mi cintura. Tomo las pinzas y con cuidado saco la bala. 

-Te cuidado -dice gruñendo.

Pongo los ojos en blanco y sigo con lo mío. Salgo la bala y la dejo a un lado. Tomo el hilo y aguja, comienzo a darle los puntos y luego trato de vendarlo.

-Siéntate -le digo y el obedece.

Lo vendo y sigo con la del hombro. Hago el mismo procedimiento, mientras que Dan me toma de la cadera y cuando estaba sacando la bala, gruñe y me encaja los dedos. No le digo nada y terminó de hacerle los puntos. Lo arrecuesto y al instante se queda dormido. Me le quedó viendo y me entran ganas de llorar... El intento matarme y luego me saco de ahí. Estoy confundida al extremo. Tomo el botón de su pantalón y lo desabrocho. Quito con cuidado sus zapatos, calcetines y el pantalón. Dan queda en boxers y me le quedó viendo. Es hermoso...y letal. Igual que yo. 

Me muerdo el labio y una lágrima se escurre por mi mejilla. Esto está mal, el oculta algo y yo también. Intento matarme y yo a él. Me acercó a el

y pasó una mano por su cabello alborotado. Dios, porque tuvo que ser él y no otra persona. Tomo su ropa, la dobló y la dejo sobre otro sofá. Veo la manta que está en otro sofá y lo tapó con ella. Lo miro por última vez y salgo de la casa. Hoy...todo me paso hoy y el día había comenzado bien.

Salgo a la carretera y sigo caminando. Estoy mojada, pero sin un rasguño grave y lo único que está mal conmigo es mi corazón. Mi corazón duele por lo de Dan y a la vez esta feliz por lo de mis hermanos. Esto se lo tengo que decir a Kate. Meto la mano a mi bolsillo y sacó las fotografías. Están mojadas y maltratadas, pero se pueden ver las imágenes. Paso un dedo por una de las fotos y sonrió. En ella sale James sonriendo, con el cabello alborotado y sus lentes levemente caídos. Mi pequeño, no tan pequeño, ya es todo un adolescente y guapo además. 

Sigo caminando y vuelvo a guardar las fotografías. Tengo que buscar a James...y luego a Nick con ayuda de Kate. Un viento sopla y me dan escalofríos. Estoy cerca de casa y sólo rezó para que ella este en casa. Levanto la cabeza y miró el cielo oscuro. Creo que lloverá y espero que sea en otras horas. Mi caminata el corta y llegó a casa. Las luces están encendidas y eso significa que Kate está en casa. Espero que este sola.

-Ya llegue -digo y voy a la cocina.

Me sirvo un vaso con agua y me quito la chaqueta. Término mi vaso y me despojo de mi cinturón lleno de armas. Kate entra a la sala corriendo, enrollada en una toalla y con su cabello mojada. Acaba de bañarse.

-¿Qué pasó? ¿Estas bien?-dice.

Toma

mi rostro entre sus manos y lo inspecciona. Toca mis brazos y me hace girar.

-Estoy bien...es solo que...-digo y suelto un suspiro.

-Vamos a sentarnos -dice y me lleva a la sala.

Me sienta en la sala, prende la chimenea y sale de nuevo ¿dónde va? Cinco minutos después regresa con una manta y se sienta junto a mí.

-Ahora sí, dime -dice y me mira a sus ojos.

Sus ojos casi verdes me miran fijamente y un nudo se forma en mi estómago.

-Kate... Nick y James -digo y las lágrimas salen de mis ojos-. Están vivos.

Digo y sacó la fotografía de mi bolsillo. Ella la toma y la mira fijamente. Sus manos tiemblan y comienza a llorar. Me mira y se lanza a mis brazos.

-Están vivos...-dice entre un sollozo-. ¿Quien te lo dijo?

-Tom...-digo y tomó sus manos-. El murió, pero me dijo varias cosas y te sorprenderá saberlas.

-Dilo...y luego me dices -se calla-. Lo de Tom.

Asiento y respiro varias veces. Ok, aquí voy.

-Tom me dijo que James está con Carol en algún lugar de Europa -me mira confundida y yo suspiro-. El no sabía dónde están y cuando le pregunté por Nick, dijo que no sabía dónde estaba pero que está vivo y con un rastreador, con el cuál tendrás que ayudarme -ella asiente-. Otra pequeña cosa.

-¿Qué? -pregunta y frunce el ceño.

-Nuestros collares tienen un código -ella me mira confundida-. Ese código es la clave para abrir unos archivos...

-¿Qué archivos? -pregunta y yo pongo los ojos en blanco.

-Deja que termine -digo molesta-. Esos archivos los quieren las personas que tratan de matarnos, son sumamente importantes y lo malo es que papá los oculto muy bien -me levanto del sofá y me acercó a la chimenea-. Hay que encontrar a nuestros hermanos Kate.

-Te apoyo. Hay que buscarlos y buscar esos archivos lo más pronto posible -dice y peina su cabello.

Le habló sobre la muerte de Tom y comenzamos a llorar. Luego le cuento lo de Dan...y ella casi sale a matarlo. No le hizo gracia que Dan intentará matarme, pero luego le conté lo que hizo y se tranquilizó un poco. Cuándo terminamos de hablar, subimos a nuestras habitaciones y nos damos las buenas noches. Entró a mi habitación, me desnudo y entró al baño. Luego de media hora salgo, me pongo una pijama y me cuesto en la cama... Este día estuvo pésimo en verdad y sólo quiero dormir por varias horas. 

Estoy feliz por lo de mis hermanos y me siento fatal por lo de Dan. No sé con que cara lo veré ahora y no sé qué pasará con nuestra relación... Cierro los ojos y me dejo llevar por el sueño.

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Capítulo 20

Han pasado ya dos meses. Dos malditos meses desde la última vez que estuve con Dan. Desde que lo deje en su casa no e querido ver o hablar con él. Me mata no tenerlo cerca y me duele haberlo dejado aquella noche... Lo estuve evitando en la universidad, hasta estuve pensando en cambiar de horario y Kate me mando por un tubo. Me dijo que no le demostrará que me afectaba estar lejos de él y yo respondí "no es necesario demostrarlo, el lo sabe ya" Ella se quedó callada y no siguió con la mismo...

Noviembre, finales de Noviembre y seguíamos buscando pistas de Carol y James... De Nick, nada y seguimos buscándolo por la cuenta bancaria. Kate ponía todo su empeño en buscarlos, pero teníamos la universidad y no podíamos dejarla por mucho tiempo. Nos atrasamos un año y no era bueno retrasar otro años más. Estábamos en exámenes y ahora me encontraba saliendo del examen de Historia... Era Martes y mi humos andaba por los suelos. Tenía horribles dolores de cabeza y un maldito cansancio. Kate decía que era por estrés y yo la apoyaba. Estaba caminando en el pasillo hacia mí clase de Sociales... Cuando vi a Amber coqueteando le a un chico de último año. Cuando estaba cerca divise algo en su cuello...mi collar.

Pase rápidamente a su lado y entre en la clase. Lo que me faltaba...la muy zorra de Amber tiene mi collar y el collar tiene el código. Tendré que quitárselo pero ya, antes que la idiota lo pierda y no pueda hacer nada ya. Así, también tenemos una pista de donde pueden estar los dichosos archivos y sólo faltan los códigos... Saco mi celular y le mando un mensaje

a Kate.

-Amber tiene mi collar.

Envío el mensaje y contesta a los dos minutos.

-¿Qué? ¿Como diablos lo obtuvo? 

-No lo sé, pero sospecho de alguien y creo que si fue esa persona.

-¿Como lo recuperaras?

-Yo se como, tu trata de hallar a Nick y yo en recuperar el collar.

Mando el mensaje y guardo el celular. La clase transcurre como siempre y me encuentro saliendo de nuevo. Iba caminando rápido por los pasillos para terminar de una vez con este día de clases y buscar el collar. Cuando de nuevo chocó contra Amber...

-Idiota fíjate dónde tienes los ojos, zorra -dice y aprieta los puños.

-¿Como me as llamado? -pregunto.

¿Me a llamado zorra?

-Sí, maldita perra ¿pensabas que nadie se iba a enterar de que te acostabas con Logan y Dan a la vez? -escupe y me mira divertida.

-Aquí la única zorra eres tú, idiota -digo entre dientes.

Ella suelta una carcajada y yo cierro las manos en puños. 

-Las zorras aquí son tu y tu puta hermanita maldita perra -ladra y no soporto más.

Me abalanzó sobre ella dándole un fuerte golpe en la nariz y aprovecho para arrancarle el collar. Cuando se lo quito, rápidamente lo guardo en mi bolsillo y la sujeto del cabello. Ella chilla y me toma de mi cabello. Hasta aquí. Comienzo a mover su cabeza violentamente de un lado a otro y la maldita sabe defenderse. Alguien me toma de la cintura y me separa de Amber. Lanzó patadas y puños, pero sólo logró que el agarre sea más fuerte y más manos me tomen.

-¡Suelten

me, carajo! ¡Voy a matar a esa perra! -grito y me arrastran fuera del pasillo.

Veo que unos chicos del equipo de fútbol la están agarrando y que media universidad vio el espectáculo. Rasguño las manos que me están agarrando, pero ni eso hacen que me suelten y sigo lanzando patadas.

-¡SUELTEN ME! -grito y muerdo una de las manos.

-¡Joder! -escucho su voz y me quedo quieta.

-Suelta me -dije entre dientes.

Dan me soltó y me gire a verlo. Zack estaba junto a él y en sus manos se veían arañazos... Se los hice yo. Fulmine con la mirada a Dan y el me sostuvo la mirada. Zack disimuladamente se fue y me quede sola con Dan. Mire a mi alrededor y me encontraba afuera del edificio. Di media vuelta y comencé a caminar. Pero el muy imbécil de Dan me tomo del brazo sin hacerme daño y me giro para quedar de frente.

-Tenes que hablar -dijo en tono frío.

Vi sus ojos y parecían tristes. Pero también enojados.

-Tu y yo, no tenemos nada de que hablar -digo entre dientes.

-Tu sabes bien que sí -dice con voz suave.

-Tus malditos cambios de humor me estrezan -digo y me suelto de su agarre.

El me mira con ojos de arrepentimiento y el corazón se me parte en dos... No, tengo que ser fuerte y sostener mi palabra. Le doy una última mirada y comienzo a caminar a la clase en la que estoy retrasada. Cuando estaba entrando al edificio escuche un grito y no me moleste en mirar. Sabía que era Dan, estaba furioso y frustrado. Entre a la clase, con mi respectivo regaño y falta. Las clases terminaron lentamente y me dolió aún la cabeza. Pero estaba un

poco feliz por a ver conseguido el collar. Al terminar las clases fui estacionamiento a esperar a Kate.

-¡¿Qué te paso?! -grito en el momento que me vi.

Si...la perra de Amber me dejo un bonito rasguño en la mejilla y había roto mi blusa. Que era de tirantes, dejando un tirante y no tuve de otra más que tratar de arreglarla. Kim y Amy bien me vieron, pero los rumores vuelan y no demora en enterarse.

-Amber -digo y abro la puerta del auto.

-Esa hija de pu... -dice molesta.

-¡Hey! -la regaño-. Conseguí al collar.

Digo y entró al auto. Kate gruñe y entra también. Maneja en silencio hasta la casa y yo me duermo en el transcurso. Cuando llegamos ella sale corriendo del auto y yo frunzo el ceño ¿y a esta que le pasa? Apagó el auto, lo cierro y entró a la casa. Me voy a mi habitación hacer los trabajos de la universidad y así tener tiempo de dormir porque este maldito dolor me mata. 

Kate entra a mi habitación y se para enfrente de mí.

-Saldré... Regreso pronto.

Yo asiento, pero no volteo a verla y escucho mi puerta cerrarse. No sé cuánto tiempo pasa, pero terminó los trabajos y me quedo profundamente dormida. 

-Kara... Kara necesito decirte algo.

Escucho la voz de Kate y me levanto de inmediato. La miró y abro los ojos como platos.

-¿Qué pasa? -pregunto preocupada.

Esta roja, con los ojos hinchados y sorbe su nariz. Ella abre la boca y parte en llanto. Me levanto de la cama y la abrazo.

-¿Qué sucede Kate? -susurro y ella solloza.

-Kara... Estoy embarazada -dice en medio de un sollozo.

-Oh

mierda -digo y ella llora más duro-. Tranquila, tranquila.

Ella sigue llorando y yo la abrazo más suerte. Me alegra saber que seré tía...pero en este momento ahora peligra Kate y mi sobrino. Tengo que llevarla lejos de aquí y ponerla a salvo a ella...y a la criatura que lleva dentro. Pero... ¿Zack lo sabe?

-Kate...¿Zack lo sabe? -pregunto, mientras la llevó a la cama.

-No, no sé qué hacer Kara. Nuestra situación no es nada fácil y Zack no sabe nada -dice y solloza.

-Ve a hablar con él... ¿Y como supiste del embarazo? 

Eso si que lo quiero saber.

-Hace una hora fui a la farmacia y pedí una prueba... Regrese y la hice, salió positivo -dice y sorbe su nariz.

-Tienes que decírselo ahora mismo -digo y ella me mira.

-¿Qué le diré? -pregunta.

-Todo...-digo y ella abre los ojos como platos-. Dile todo Kate y si después de eso no quiere saber nada de ti... Nos iremos.

Ella asiente, limpio sus lágrimas y nos levantamos. La acompañó hasta el auto y ella se va. Esto...tampoco me lo esperaba. Entró a la casa y me preparo algo para comer. No soy buena en la cocina así que me preparo un sándwich de jamón. Me lo cómo, subo de nuevo a mi habitación y sigo con mi tarea. Me baño y me cambio por ropa más cómoda.

Ya han pasado tres horas y Kate aún ni llega. Creo que las cosas con Zack marcharán bien. Sino...me llevaré a Kate lejos de aquí y la pondré a salvo. Son las cinco de la tarde y no tengo sueño. Tomo mi cámara y empezó a imprimir las fotografías... Cuando terminó son casi las nueve, hasta me sorprende que haya estado tanto

tiempo haciendo eso y Kate aún no llega. Tomo mi celular y le mando un mensaje.

-¿Estas bien?

Su respuesta es inmediata.

-Me quedaré con Zack hoy, mañana te cuento todo.

Suspiro y dejó el celular en la.mesita de noche. Un escalofrío me da de la nada y tengo un mal presentimiento. Así que tomó mi celular, busco las.computadoras y las escondo. Si lo sé, estoy loca. Pero mis presentimientos nunca fallan. Abro la puerta del baño y tomó mi cinturón. Lo meto en una caja...pero me quedo con un cuchillo, el cual meto debajo de mi almohada y bajo a cerrar bien la casa. Cuando terminó apagó las luces y me acuesto en la cama. Cierro los ojos y dejó que el sueño venga a mí...

Una mano cubre mi boca y me despierto de golpe comenzando a luchar. 

-Shhhhht -dicen y miró sus ojos.

Un miedo tremendo me invade al ver a Dan cubriendo mi boca. Lucho más y trato de zafarme.

-No te are daño -susurra-. Hay personas dentro de casa.

Dejo de luchar al instante y asiento ¿otros matones? Dan me hace señales para que me levante. Lo cual no dudo en hacerlo y lo sigo. Se mete en mi armario sin hacer ruido y yo me meto junto a él. Sus ojos brillan de ese azul eléctrico y cubre mi mano de inmediato. Escucho que alguien entra a mi habitación e inmediatamente me aferró a la cintura de Dan. Parece que revisan y luego se van. El sigue cubriendo mi boca y lo ruidos se escuchan ahora en la parte de abajo. Luego el ruido de la puerta al cerrarse y Dan quita su mano de mi boca.

-¿Qué haces aquí? -pregunto y salgo del armario.

-Vine a verte y

vi las camionetas -se acerca a la ventana-. Se fueron.

-Y tu también te vas -digo y señaló la puerta.

-Ni hablar, no te dejaré sola -dice y me mira.

-No, te vas y me dejarás aquí en mi casa -digo y vuelvo a señalar la puerta.

-Ni una mierda. Te vas conmigo en este jodido momento -dice ya enojado.

-No me voy a ir a ningún lado y menos contigo -digo y me cruzó de brazos.

Dan se acerca a mí y toma mi rostro entre sus grandes manos.

-No me importa si me odias sin a verme escuchado... Pero no te dejaré aquí sola y me importa un carajo si te llevo arrastras a mi casa -dice suavemente.

Miro sus ojos que parecen preocupados y nerviosos ¿Ir con el? Lo miro de nuevo y el espera respuesta. 

-Tengo miedo -susurro con la verdad.

-Ven conmigo... Hay que hablar bambi -dice y besa mi frente.

Asiento y camino a mi armario. Saco una pijama y lo meto a una bolsa con mis converses negros. Dan toma mi bolsa y sale de mi habitación. Tomo mi celular y bajo para irme con Dan. El ya está afuera y yo salgo descalza al piso frío de afuera. No veo su auto por ningún lado y cuando apenas iba a preguntar él señala a la otra calle, ahí está el auto. Caminamos en silencio el pequeño trayecto y luego de llegar subimos al auto. Dan conduce en silencio y yo no me atrevo a hablar. Estacionó el auto fuera de su casa y bajamos. Los auto de Sarah y Kim estaban afuera... Espero no toparme con ellas.

-Vamos -dice Dan y entra a la casa.

Lo sigo y entró detrás de él. Su casa huele igual, vainilla y menta. Subimos la escaleras y vamos a su habitación. Dan enciende

la luz y se mete en el baño. Tomo mi bolsa, que Dan dejo en la entrada de la habitación y comienzo a cambiarme. Nunca creí que Dan reaccionará así..."No me importa si me odias sin a verme escuchado... Pero no te dejaré aquí sola y me importa un carajo si te llevo arrastras a mi casa" Parece que en verdad les importo y no espere que fueran de nuevo a mi casa. Esto no está bien... Nos tenemos que ir de Twin falls. Me hago una pequeña trenza y me siento en la cama. Dan sale y se para enfrente de mí.

-¿Por que intentaste matarme?-pregunto en un susurro.

Dan se arrodilla frente a mí y toma mis manos.

-Escúchame... Me llamaron diciendo que había alguien sumamente peligroso en ese edificio y que era de nivel ocho... El nivel es de lo peligroso que llega hacer-dice y yo me le quedó viendo-. Había revisado el edificio sin ser rastreado, luego escuche la activación de la bomba y baje las escaleras...

-Encontrándote conmigo -susurro y el asiente.

-No sabía que eras tú... Pero tienes buen tino -dice y sonrió tristemente-. Dijeron que tu eras una amenaza y tenía que matarte -me tenso y el aprieta mis manos-. No lo hice porque... Eras tu. Te amo Kara y nunca me atrevería a ponerte un dedo encima.

-Pero lo ibas a hacer -digo y bajo la cabeza.

-Tu lo dijiste en tiempo pasado... Tu y nadie más me importa en este maldito mundo, Kara. Te protegería hasta mi muerte, eres lo que me mantiene cuerdo y este tiempo sin ti me a vuelto loco en verdad... No puedo dormir y mi humor anda de lo peor. Eres mi vida y no sé tu pasado... Pero yo te amo en verdad -dice y toma mi cara entre sus manos.

-Yo también te amo Daniel... Este tiempo sin ti no fue bueno para mi... Me dolió dejarte ese día y no te quiero volver a dejarte jamás -digo y una lágrima se escapa de mis ojos.

-Nunca me abandones...por favor, no puedo estar sin ti un minuto más -susurra y limpia mis lágrimas.

Miro sus ojos que están arrepentidos y tristes. Una pequeña cosa... Daniel Colleman se volvió indispensable en mi vida y en verdad lo necesito. Dan pasa su pulgar por mis labios y yo los entre abro. Mira mis labios y yo los suyos.

-Besame...por favor -susurra con voz dulce.

No lo dudo un segundo y lo beso. El pone una mano en mi nuca y la otra en mi espalda. Yo pongo mis manos en su cuello y lo acercó más a mí... El beso es lento y dulce. Por Dios, como lo extrañe en verdad y ahora no sé qué are ¿debo quedarme o irme de aquí? ¡Maldita sea! No sé qué hacer y besar a Dan no me ayuda de mucho... O mejor si. Muerdo el labio de Dan, el gruñe y se levanta. Acostándome en la cama y el sobre mí... Tengo que hacerlo. Tengo que decirle la verdad ahora mismo. Dejo de besarlo y pongo mis manos en sus mejillas. El tiene los ojos cerrados y se apoya en sus codos para no aplastarme.

-Tengo que decirte todo... Ahora mismo -digo y él asiente.

Abre los ojos y se aparta para dejarme hablar. Nos sentamos con las piernas cruzadas, en medio de la cama y los dos de frente.

-Esto tardará... -digo y tomó su mano.

-Tengo tiempo -dice y sonrió.

En este momento le diré todo. Literalmente todo. Todo sobre mí vida pasada y mi secreto... Mi pasado.

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Capítulo 21. Liberada

-Mi vida era...perfecta. Tenía una gran casa en California, nunca nos faltó nada y siempre teníamos todo. Pero nos mudamos a Nueva York -Dan asiente y sigo hablando-. Era cumpleaños de Nick, mi hermano mayor, el saldría para celebrar y nosotras iríamos. Ese día no me sentía bien, así que nos quedamos y Nick se fue -trago saliva-. Esa noche hubo un ataque al bar donde estaba...y el desapareció. Dijeron que había muerto y toda mi familia quedó destrozada -una lágrima cae por mi mejilla-. Llegó septiembre y Nick no aparecía... El día de mi cumpleaños mi madre y James salieron...

Era de noche cuando ellos se fueron y nos quedamos en casa con nuestro padre. Cuándo iban de regreso... Un camión los impacto de frente a una fuerza elevada -digo y lágrimas caen de mis ojos, Dan me abraza y sigo hablando-. Pasaron unos tres minutos, cuando el auto y el camión explotaron... El accidente fue provocado, nos informaron ese mismo día..

-Kara...eso es horrible -dice Dan y besa mi cabeza.

-Eso no es todo Dan... 

Cuando ellos murieron, mi padre nos entrenó...para matar -digo y miró a Dan-. No sabíamos para que lo hizo, pero el siempre contestaba con que era para saber defendernos y le creímos... Hasta qué llegó un día en el que tuvimos que utilizar lo que nos enseñó...

Eran como las doce de la noche y estábamos durmiendo ya... Cuando entró mi padre a mi habitación diciendo que guardáramos silencio y nos dio armas... A mi los cuchillos y a Kate una pistola, mi padre nos reunió en la planta

de abajo y nos hizo ocultarnos en la sala de estar... -cierro los ojos y respiro hondo-. Entraron a la casa varias personas, pero nunca nos vieron y no sé movieron del living. Mi papá estaba en el living... Escuchamos voces, luego golpes y por último un grito -más lágrimas salen y Dan las limpia-. Luego se escucho la puerta cerrarse y saque mi cabeza de mi escondite. Y me encontré con algo que me traumo y horrorizo... Los cuerpos de las dos personas de servio estaban destrozados... Partes de cuerpo regadas y el cuerpo de mi padre estaba ahí... Me quedé paralizada y sólo escuchaba mi respiración. La cuál fue interrumpida por crujidos de huesos... Había un hombre rompiendo los huesos de las personas que estaban ahí muertas. Y no pude evitarlo y solté un grito llamando la atención del hombre. El me vio y corrió hacia mí...pero sólo estaba a un metro cuando se escucho un disparo y el hombre se derrumbó en el suelo...

-Kara, si no quieres -dice y yo niego con la cabeza.

-Kate le había disparado y no parecía ser ella... Kate quedó en shock, así que la jale hasta la puerta y esta se abrió de nuevo. Otro hombre entró, así que tome el cuchillo y se lo clave en el pecho... Cuando el se derrumbó, salí de la casa y corrí con Kate hacia el auto. Cuando entramos al auto, la casa explotó en llamas y otros autos comenzaron a llegar. Escapamos, nos alojamos en un motel y ahí nos quedamos hasta la mañana... En el auto había dinero y las tarjetas de crédito de las dos. Así que compramos unos boletos de avión a Arizona y vendimos el auto... Kate lloro por horas y yo solo

la calmaba. Llegamos a Arizona y tratamos de encajar. Conseguimos una casa, un auto y empleos. Había pasado tres meses desde lo de mi padre y nos encontraron... Es día matamos a diez hombres, Dan y no nos molestamos en ocultar sus cuerpos... Volvimos a irnos, pero ahora hasta Nueva Orleans y ahí nos quedamos por otros tres meses... Hasta qué nos volvieron a encontrar, pero esta vez salí herida, con un disparo en la pierna y Kate con un brazo fracturado. Nos quedamos en el hospital una semana y cuando pudimos salir nos fuimos de ahí... Cuando íbamos saliendo del hospital, un auto nos impacto y perdimos el control del auto. Dimos vueltas, cuando paramos saque a Kate y la arrastre hasta fuera del auto, regrese y tome nuestras bolsas... Compramos los boletos de avión y fuimos hasta Washington. Paramos ahí y esperamos unas cuantas horas en un hotel... Volvimos a comprar boletos de avión hasta llegar aquí... Y todo eso pasó hace dos días antes de llegar aquí...

-¿Eso era lo que ocultaban todo este tiempo? -pregunta Dan y yo asiento.

-Cuando te vi...me quise alejar de ti, pero era imposible y no lo hice. Levante muro tras muro para no enamorarme de ti...pero falle -digo y sonreímos-. Te oculte la verdad, porque si sabias esto ellos te buscarían y te matarían... Y eso me mataría a mi -susurro y una lágrima sale de mi ojo-. Ya nos encontraron...y fue el día en que te dije que intentaron robar. Fue mentira -digo y Dan pone una mano en mi mejilla-. Lo mate, me costo mucho trabajo matarlo y lo oculte antes de que llegarás tu a casa. Luego de que me dejarás

de regreso en casa, fui con Kate al bosque y lo enterramos ahí...

-Todo esto es... Wow -dice Dan y yo sonrió tristemente.

-Lo sé y esa es mi historia... O mejor dicho mi secreto -susurro y pongo mi frente contra la de él.

-Estas a salvo conmigo -dice y besa mi frente.

-Eso quisiera creer... -beso sus labios y me acuesto en la cama.

-¿Qué hacías en ese edificio? -pregunta Dan y se acuesta junto a mí.

-Fui a ver a mi tío...tenía información -susurro y giro a verlo-. Me dijo que mis hermanos están vivos...

-Esa es buena noticia, bambi -dice y pone una mano en mi mejilla.

-Pero no sabía dónde están ahora -digo y cierro los ojos-. Tengo que encontrarlos Dan.

-Los encontraremos -dice y abro los ojos.

Sus ojos azules parecen sinceros y me asusta. No sé si sea peligroso, se que se puede cuidar solo, pero me asusta y no dejaré que vaya conmigo...

-También descubrió que después de todo mi apellido es Evans -susurro y Dan abre los ojos como platos.

-¿En serio? -pregunta y yo asiento-. Vaya... Kara Evans de Colleman...

-Suena perfecto -digo y beso su nariz.

-Sí... ¿Bambi?

-¿Si, Dan? -pregunto y me acercó más a él.

-¿Te...quieres casar conmigo? -pregunta y yo abro los ojos como platos.

-Dan...estas delirando -digo y me siento en la cama.

El abre el cajón de su.mesita de noche y rebusca en el. Saca una pequeña caja roja y me la entrega.

-Abrela -dice en tono divertido.

Abro la caja lentamente y dentro de ella hay un anillo de oro. Miro a Dan y el me mira fijamente. Miro el

anillo de oro y tiene grabada la palabra "i love you" Es hermoso.

-Dan es hermoso...pero no podemos casarnos -digo y le entregó de nuevo la caja.

-¿Por que? -dice y frunce el ceño.

-Aún no terminó la universidad y tú tampoco... Hay que esperar.

-Pero quiero que luego lo uses -dice y vuelve a guardar la caja.

-De acuerdo -digo y me acuesto sobre su pecho.

-Bambi... 

-Mmm...

-Quédate aquí conmigo -susurra y pone sus manos en mi espalda.

-¿Y Kate? -pregunto y me abrazo a su cuerpo.

-Se puede quedar aquí... En la habitación para huéspedes o en casa de Zack -dice y besa mi cabeza.

-Aja -digo y me acurruco sobre su pecho.

-¿Tienes sueño?

-Mmm...

-¿No te vas a cambiar?

-Nooo... -digo pegada a su pecho.

-De acuerdo -dice Dan y ríe.

Siento que los párpados me pesan y me quedo dormida lentamente. Lo último que recuerdo es a Dan decir algo. Luego las luces se apagan y con ellas mi energía... Estoy cansada después de contarle toda la verdad a Dan. Me a propuesto matrimonio y yo dije que no.

-Kara...cariño. Es hora de levantarse.

Dan pasa su nariz por mi cuello y me provoca un cosquilleo. Abro los ojos y me encuentro con sus azules ojos.

-Tenemos que ir a la universidad -dice y besa mi nariz.

Sonrió y me estiró en su cama. Dan está desnudo de cintura para arriba... La boca se me hace agua y tallo mis ojos.

-¿Qué hora es? -pregunto y trato de peinarme.

-Temprano... Tienes que bañarte y cambiar de ropa -se pone una camisa blanca y revuelve su cabello-. Te llevaré

a casa.

Yo suspiro y me levanto de la cama. No sé hasta que hora dormimos... Pero tengo un sueño de los mil demonios. Me hago un moño alto y me pongo mis converses. Me acercó a Dan y enrollo mis brazos alrededor de su cuello.

-¿Tienes sueño? -pregunta y yo asiento.

-¿No quieres caminar?

Niego con la cabeza.

-¿Quieres que te cargue?

Asiento y lo siento como Dan ríe. Pasa un brazo por mi espalda y otro por mis piernas, me levanta y comienza caminar. Bajamos las escaleras y Dan gruñe.

-Me gusta cargarte...pero las heridas bambi -dice y yo abro los ojos.

Me bajo rápidamente de él y comienzo a pedir disculpas. El sonríe y toma mi mano. Bajamos las escaleras y nos vamos a su auto. El sol no sale y sigue estando oscuro... Creo que son las seis de la mañana y por lo que veo Sarah y Kim ya están en casa durmiendo. El camino a mi casa es corto, así que Dan decide quedarse y así ir juntos a la universidad. Cuando entró a mí habitación la veo igual, solo por algunas cosas movidas y mi cama desordenada. Veo mi cama y me arrojó a ella.

-Despierta me cuando falte una hora -digo y cierro los ojos.

Sentí como si apenas pasarán diez minutos, cuando Dan mueve mi pierna y besa mi hombro.

-Hora de levantarse bambi -dice y yo gruño.

-¿Seguro que ya pasó una hora? Sentí como si apenas diez minutos pasaron -digo y me doy vuelta.

-Tienes el sueño muy pesado... Pero tienes quince minutos para arreglarte -dice y besa mis labios.

Gruño y me levanto de la cama. Me desvisto y siento los ojos de Dan en mí. Camino al armario, saco una

falda café y una blusa blanca. Tomo mis zapatos blancos y me hago un moño alto.

-Lista -digo y me giro.

Dan sonríe negando con la cabeza. Yo sonrió y salgo de mi cuarto, Dan me sigue y bajamos. Voy a la cocina, tomó dos manzanas y un yogur de fresas. Le lanzó una manzana a Dan, él la atrapa en el aire y le da una mordida. Camino a la entrada y Dan toma mi mano. Juntos salimos y nos subimos a su auto. Dan y yo cantamos a gritos la canción de Bailando. Somos tal para cual... Llegamos a la universidad y cuando salimos todos nos observan... O mejor dicho a mí. El rasguño se ve, pero sólo de cerca y no de lejos. Dan pasa un brazo por mis hombros y yo por su cintura.

-Tranquila...-susurra en mi oído y besa mi mejilla.

Yo suelto un suspiro y me aferró a su cintura. Cuándo estábamos entrando a uno de losé edificios divise a Amber junto a Logan... Me abrace más al cuerpo de Dan y el beso mi cabeza. El también los vio. Pasamos junto a ellos y sentía sus miradas de enojo sobre nosotros, y yo solo levante la barbilla y en ningún momento solté a Dan. El me dejo hasta mi clase y luego lo vería por dos horas...

-Nos vemos más tarde -dice y me da un corto beso.

Le sonrió un poco y entró a la clase. De costumbre la clase va lenta y a mitad de ella me llega un mensaje. Saco el celular silenciosamente y leo el mensaje... Es de Kate.

-Lo encontré Kara, encontré a Nick.

Una alegría me inunda y siento ganas de gritar de emoción. Lo encontró... Respondo a su mensaje.

-¿Dónde? 

-Arizona, Nuevo México.

-Hay

que ir...

-Estoy yendo a tu clase, para irnos hoy mismo.

Guardo el celular y miró la puerta. No demora en llegar... Y irnos a buscar a Nick y Kate tiene que decirme que ocurrió con Zack. Los golpes en la puerta paran la clase y todos los ojos se van a ella. La puerta se abre y entra Kate... Vamos vestidas casi iguales, si no fuera por el cabello y los ojos no nos reconocerían. Ella habla con el profesor, este asiente y giran a verme.

-Señorita Evans, puede retirarse -dice el profesor.

Me levanto de un salto y me despido de Amy con la mano. Tomo mis cosas y bajo rápidamente las escaleras. Kate sale y voy tras ella. Cuando estábamos ya en el pasillo la tomó del brazo.

-¿Qué le dijiste? -pregunto y elevo una ceja.

-Qué nuestros padres estaban esperándonos, porque sucedió un improviso -dice y sonrió.

Es buena mintiendo. Salimos del edificio y subimos al auto. Kate arranca a toda velocidad y nos dirigimos al aeropuerto. 

-¿Qué sucedió con Zack? -pregunto y sacó mi celular.

-Le dije lo del embarazo y se desmayo... Luego de que despertará dijo que me apoyaría en todo y que no le importaba el pasado -dice y sonríe.

-Me alegro en serio... Porque si se hubiera negado, le iba arrancar las pelotas y luego lo castraría -digo y reímos.

Escribo un mensaje.

-Encontré a mi hermano... No sé cuando volveré y no me esperes, yo te buscare cuando llegue. Te amo imbécil.

Le mando el mensaje a Dan y responde al instante.

-Cuídate bambi, espero que llegues pronto y yo también te amo nena.

Sonrió y guardo el celular. Kate conduce lo más rápido que puede y en el transcurso me quedo dormida. Encontraremos a Nick y cuando lo hallemos creo que llorare y lo golpeare. No e visto a mi hermano desee hace casi dos años y en verdad extraño a ese idiota. Luego de encontrar a Nick, buscaremos a James y a Carol. La paz está volviendo a mí y sólo espero que siga la paz... Una idea viene a mi cabeza, un regalo para Dan y creó que le gustara. Me obligó a dormir y me dejo llevar por el sueño.

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Capítulo 22

Me despierto cuando Kate me dice que llegamos. Bajamos del auto y caminamos al aeropuerto. No sé cómo lo hace Kate, pero compro boletos de avión y también hizo que las alarmas de metales no sonarán por las armas. Subimos al avión y cuando estamos en el aire Kate saca su laptop y comienza a teclear algo en ella.

-¿Qué haces? -pregunto y trato de ver lo que hace.

Me muestra y aparece un mapa de Arizona. Veo un puntito rojo entre todas esas líneas, Kate teclea algo y aparece la foto de Nick señalando el puntito.

-Ese es Nick -dice y vuelve a poner la laptop en sus piernas.

-Vaya... Es impresionante ¿todo te lo enseñó Tom? -pregunto y ella asiente.

-Eso y hacer muchas más cosas -dice y cierra la laptop.

Yo asiento y sacó mi celular.

-Hola novio.

Escribo y le mando el mensaje a Dan.

-Hola hermosa ¿dónde estás?

-En un avión camino a Arizona.

-Cuídate nena.

-Lo haré. Te amo imbécil

-Te amo bambi.

Guardo el teléfono y me acomodo en el asiento. Son casi cuatro horas aproximadamente de aquí a Arizona... 

-Kara quiero hacerme un tatuaje -anuncia Kate.

Yo giro la cabeza como la posición de Emili Rose. Y la miró mal.

-¿Estas bromeando verdad?

-Lo digo en serio... Tu y yo nos aremos uno -dice y yo niego con la cabeza-. Por favoor Kara.

Lo pienso un segundo... Siempre quise uno.

-Ok, ok, ok. Me are el bendito tatuaje -digo y ella sonríe-. Ahora duerme un poco, que yo también lo are.

Me vuelvo a acomodar en el asiento y cierro los ojos.

Escucho a Kate teclear en su computadora y suelto un gruñido. Esta mujer nunca descansa en verdad. Vuelvo a cerrar los ojos y me quedo dormida. En verdad no sé cómo es que siempre tengo sueño, yo antes de dormía y los dolores de cabeza son más frecuentes.

-Damas y caballeros el vuelo 345 les da la bienvenida a Nuevo México -dice la voz de la azafata y me despierto.

Estiró las extremidades y bostezo. Kate se levanta y yo la sigo. Salimos de avión, pasamos por la revisión y salimos de ahí. Caminamos hasta el departamento de renta de autos, tramitamos el papeleo y salimos en busca de Nick. El rastreador indica que esta en movimiento, pero parece que va a pie y no en un vehículo. Yo conduzco y Kate ve el rastreador. Me dice que tengo que ir a un pueblito a unas seis horas... Mierda. 

-¿Qué hora es? -pregunto y Kate saca su celular.

-Son las dos de la tarde -responde y vuelve a guardar el celular.

-Llegaremos ahí a las ocho de la noche aproximadamente -digo y gruño.

Tengo que conducir yo. Genial. Conduzco el trayecto y se siente un maldito calor insoportable. Así que paramos unos minutos y rompo mi camisa haciendo que quede sin mangas. Volvemos a ponernos en marcha y pasamos algunos pueblitos. Pasan las horas y sigo conduciendo hasta que entramos en el pueblo que me dijo Kate. Ella ahora está con su celular y este comienza a pitar.

-El está aquí -dice y asiento.

Estacionó el auto enfrente de una casa que es de la mejores que se ve... Por que sinceramente el pueblo de noche parece de mala muerte. Meto la pistola detrás de mi falda, tomó la chaqueta y dentro oculto algunos

cuchillos. Kate hace lo mismo y salimos del auto. Kate con celular en mano y yo con un cuchillo detrás de mi muñeca comenzamos a caminar. El celular sigue marcando la señal hasta una casa abandonada. 

-¿Esa cosa es segura? -pregunto y miró el celular.

-Más segura que tu...así que hay que entrar -dice y suspiro.

-Pero hay que ir por atrás -digo y ella asiente.

Rodeamos la casa y cuando intento abrir la puerta está no abre. Miro Kate y ella niega. No podemos disparar... Empuño el cuchillo y comienzo a forcejear la cerradura. Escucho un click y miró a Kate y esta asiente. Le doy una patada a la puerta y esta se abre de golpe. Pongo la linterna en mi celular y entramos a la casa. Kate quita el seguro del arma y comenzamos a caminar. La casa esta llena de polvo y estamos en la parte de la cocina. Paso el dedo por la pequeña mesa y este se llena de polvo. 

-Se ve que hace tiempo nadie vive aquí -digo y escucho ruido.

-Arriba -dice Kate y asiento.

Dejamos la cocina atrás, pasando el comedor y lo que parece ser la sala. Encontramos las escaleras y yo subo primero. Las escaleras rechinan con cada paso que damos y yo maldigo en voz baja. Escucho el ruido detrás de una puerta y le hago señales a Kate. Las dos nos ponemos a cada lado de la puerta, yo con cuchillo y celular y Kate con el arma y también con el celular.

-1...2... ¡3! -grito y pateamos la puerta.

La puerta cae y un gato pasa por nuestros pies.

-Fue solo un estúpido gato... Tu aparato está mal-acusó al aparato y Kate pone los ojos en blanco.

-Hay que salir de aquí

-dice y asiente.

Salimos por la parte de atrás y ella empieza a darle golpecitos a su celular.

-Esto no debe de fallar...la señal apunta aquí -dice frustrada.

-Ya... Hay que regresar por la laptop -apuntó con mi dedo el callejón para no dar tanta vuelta.

Comenzamos a caminar y el celular de Kate enloquece. Comienza a pitar y a indicar el punto rojo. Le arrebato el celular de la mano y lo apagó.

-Señorita ¿no quiere darme una moneda? -dice un vagabundo.

Apenas iba a decirle que no, cuando veo sus ojos y me quedo con la boca a abierta. El vagabundo se levanta y me abraza.

-Aléjate de ella o no respondo -dice Kate, que lo apunta con el arma.

-Kate tranquila...baja el arma -digo y ella obedece.

Me apartó de él y lo miro fijamente. Limpio un poco su cara con la chaqueta y aparece su lunar alado de su labio.

-Nick... -susurro y comienzo a llorar.

-¿Quién? -pregunta Kate y se acerca.

-Hola hermanitas -dice Nick y me abalanzó sobre él.

Envuelvo mis brazos en su cintura y rompo en llanto. Escucho a Kate sollozar y luego lo abraza también. Dios...lo encontramos. Encontramos a Nick. Todo este tiempo el maldito aparato estaba bien y no indicaba la casa...indicaba el callejón.

-Hay que irnos de aquí -dice Kate y asentimos.

Limpiamos nuestras caras y volvemos al auto. Yo al volante Nick de copiloto y Kate comprando boletos de avión.

-Toma -Kate le pasa una bolsa a Nick.

-¿Qué hay dentro? -pregunta Nick.

-Lo necesario para que vuelvas hacer guapo -respondo y sonrió.

Nick y Kate

ríen. Extrañaba este tipo de cosas... Los tres juntos riendo, pero falta James y tenemos que encontrarlo también. Conduzco y veo de reojo a Nick limpiarse la cara. Saca la ropa y me mira.

-No veas -dice y sonrió.

-Ni que estuvieras tan bueno-respondo y Kate ríe.

-Se nota que lo extrañas -dice Kate y yo suspiro.

-¿A quien? -pregunta Nick.

-Nadie -respondemos Kate y yo al unísono.

Nick resopla y comienza a quitarse la ropa. Queda en calzoncillos y nos mira de reojo.

-Para -dice.

-¿Qué? -pregunto.

¿Qué acaba de decir? 

-Para el auto. Necesito cambiarme bien -responde y paro el auto-. Ahora salgan.

Las dos le ponemos mala cara y bajamos del auto. Kate y yo le damos la espalda al auto. Luego de cinco minutos Nick toca en la ventanilla y volvemos a entrar. Miro a Nick con ropa lavada y un poco peinado. Tiene un poco de barba. La ropa de Dan le queda bien... Si supiera de quien es la ropa y quien es Dan creo que me regañaría. Sonrió y sigo manejando. Cuando llegamos al aeropuerto son casi las dos de la madrugada y el vuelo dura cuatro horas. Llegaríamos a las diez de la mañana a Twin falls. 

Después de tomar el avión, bajamos y fuimos a recoger el auto. Nick quiso conducir, Kate se fue se copiloto y yo me arroje a los asientos traseros a dormir. Estaba en verdad cansada y necesitaba dormir más... Ya había dormido todo el transcurso del avión, pero seguía cansada y me dolía la cabeza. No sé cuánto tiempo pasó, pero el auto se detiene y abren una de las puertas.

-Llegamos -dice Kate

Gruño y me

levanto del asiento tomando mi cabeza. Nick me mira preocupado y yo le sonrió. Salgo del auto y con ayuda de Nick entró a la casa. Me lleva hasta mi habitación y me deja sentada en la cama.

-Ya...estoy bien Nick -digo y le sonrió-. Debes de ir a comer algo.

-Tu también -dice y asiento.

-Ve al pueblo y tráeme algo por favor -digo y el asiente. 

Me dejo caer en la cama y suspiro. Saco mi celular y escribo un mensaje.

-Ya estoy en casa. 

Le mando el mensaje a Dan y el responde al instante.

-Te veo en la noche nena.

Sonrió y bajo de nuevo. Voy a la cocina encontrando a Kate y Nick que están hablando de no sé qué y parece ser serio. Me acercó y Nick me señala un taburete para sentarme.

-Nick tiene los archivos -dice Kate y me giro hacia Nick-. Los archivos estaban en la computadora de Arizona.

-Si... Cuando desaparecí fui a Washington y estudie la universidad un año ahí... Luego me hallaron y tuve que dejarla y huir como uestedes -dice y mira a Kate.

-Hay que entregar los archivos al servicio secreto, ya que en ellos hay información importante para encerrar a un mercenario -dice Kate y yo asiento.

-Hay que hacerlo cuanto antes -digo y luego recuerdo algo-. ¿Como supiste la clave?

-Fácil... 06191917 -dice y levantó una ceja-. El código son los días de nuestro cumpleaños de mayor a menor y lo supe hace un año. Por eso me ocultaba en Arizona -terminó y asiento.

Un celular suena y Kate contesta.

-Si, Zack...Salí con Kara a buscar a alguien... No empieces con tu celos -pone los ojos

en blanco, yo río y Nick frunce el ceño-. Te veo en la tarde... No, quedate en clases... Yo también te amo.

Cuelga y Nick la mira mal. Yo suelto una carcajada y miró la escena. Hasta qué me tengo y miró a Kate... Oh mierda...

-Kate dile de una vez -digo y esta palidece.

-¿Decir que? -pregunta Nick.

-Estoy embarazada -dice Kate.

Ella cierra los ojos y yo me cubro la cara con las manos. Nick comienza a gritar y decir que lo va a matar... Sigue así por casi quince minutos, hasta que lo calmo y el sigue molesto. Así que los saco de casa y los llevó a desayunar al pueblo. En toda la tarde Nick nos habla sobre cómo a vivido estos dos años y me sorprende saber que mi padre también le enseñó a luchar y cosas de computación. Nos dijo de la primera vez que lo encontraron que fue exactamente el día que retiro dinero de la cuenta bancaria.

Luego de hablar, pasan las horas y volvemos a comer. Kate y yo vamos a una tienda de tatuajes acompañadas de Nick...y cuando supo que nos tatuaríamos casi pega el grito en el cielo. Pero se rindió y nos dejó en paz. Y así se nos pasan las horas hablando entre hermanos hasta que llega la noche y Kate sale de escondidas de la casa por Nick y se va a cenar con Zack. Así que yo me quedo con el imbécil de Nick. Ya que ninguno sabe cocinar, nos rendimos y comemos cereal. Luego de eso nos vamos a mi habitación y seguimos contando anécdotas de cuando éramos niños. Luego me levanto para cambiarme y veo a Nick profundamente dormido en mi cama. Tomo mi cámara y le tomó una fotografía. Vuelvo a guardar la cámara, cubro

a Nick con las sábanas y apagó las luces. Entró al baño y comienzo a cambiarme, lavar mis dientes y mi cara. 

-¡Kara! -escucho dos voz en mi habitación.

Y las dos voces son masculinas. Oh mierda... Salgo rápidamente del baño y veo a Nick apuntando con un arma a Dan, mientras que Dan tiene cuchillo en mano y listo para lanzar lo. Los dos se ven como animales salvajes y cuando me escucharon salir voltearon rápidamente, pero sin dejar de apuntarse.

-¿Quién diablos es él? -pregunta Nick.

-¿Qué hace él en tu cama? -ahora habla Dan.

-En primer lugar dejen las armar y segundo. Tu -apuntó a Nick-. él es mi novio y tú -ahora apuntó a Dan-. Es mi hermano y tiene tanto derecho como tú de estar en mi cama.

Los dos me miran y luego a ellos mismos. A ninguno le gusta mucho las respuestas pero me da igual. 

-Yo me voy a mi habitación -anuncia Nick y luego me apunta con el dedo-. Tu y yo hablaremos mañana.

Yo solo pongo los ojos en blanco y Nick sale de mi habitación. Me voy a la cama y me siento en el borde, prendo mi lámpara de noche y Dan apaga la luz. Se acerca y se sienta junto a mí. 

-No sabía que era tu hermano -dice y besa mi mejilla 

-Si...me di cuenta -digo y lo miro-. Te extrañe.

-Y yo a ti -responde y me besa.

El beso empieza lento y luego se vuelve más apasionado. Como casi siempre terminó haciendo el amor con Dan y cuando estábamos llegando al clímax cubrió mi boca con su mano y yo con mis dos manos la suya... Si, éramos unos malditos escandalosos. Dan se levanta de la cama desnudo, se mete al baño

y se quita el preservativo. Regresa y me enrolla en sus brazos.

-Me había preocupado por ti-susurra pegado a mi nuca.

-Dan...se cuidarme sola -digo y me pego a su pecho.

-Lo sé... Pero aún así me preocupó por ti-dice y sonrió.

Recuerdo su regalo y me estiro, abro el cajón de mi mesita de noche y sacó la cajita negra. Me siento en la cama, cubro mis pechos con las sábanas y le entregó la caja.

-Toma -le entregó la caja y el la ve con curiosidad.

La abre sin apartar lo ojos de los míos y luego los baja al objeto dentro de la caja. Dentro está un anillo de oro que tiene grabado "i know" El levanta la vista del anillo y me mira. Una gran sonrisa se dibuja en su rostro, sus ojos brillan y se abalanza sobre mí, atrapándome en su brazos.

-Gracias -dice y me besa.

Río y saca el anillo de la caja. Se lo coloca y luego sonríe. Parece un niño pequeño cuando le dan su regalo de navidad y me encanta verlo así. Observó a Dan...cada parte de él. Esta desnudo completamente, pero es cubierto de sus caderas para arriba por las sábanas y casi babeo. Sus pectorales están marcados al igual que sus brazos y tal vez no se le formen los famosos cuadros...pero su la "V" Tengo que decirlo...tengo un novio jodidamente sexy.

-Vas a babear -dice Dan y golpeó su hombro.

-Cállate...-lo regaño y el ríe

-Vamos...se que te gusta verme desnudo -dice y siento mis mejillas arder.

-Yo...yo... Cállate -respondo nerviosa y el suelta una carcajada.

Luego de eso le conté a Dan como encontré a Nick. A él le hizo gracia lo del

gato y yo lo fulmine con la mirada. Luego de unas dos horas, literalmente corro a Dan de mi casa, es tarde y necesito hablar con Nick. Kate aún no llega y eso significa que dormirá en casa de Zack... Me pongo mi pijama, salgo de mi habitación y voy a la habitación de huéspedes. Toco tres veces y escucho la voz de Nick. Entró y lo encuentro mirando mis fotos regadas en el piso y él sentado en el piso.

-Deberías estudiar fotografía y no turismo -dice y me enseña una foto- No quiero preguntar por esta foto -dice, me entrega una foto y luego más-. No quiero ver como derraman miel.

Me acercó a él y me siento enfrente. Tomo las fotos y las revisó, todas son mías con Dan y la primera es donde Dan está con el trasero al aire. Sonrió y miró a Nick, que está sumergido mirando las otras fotos.

-Pensaré eso de la fotografía -digo y lo miro-. ¿Qué piensas? 

-Qué tenemos que irnos de aquí -dice y yo lo miro confundida-. Kara...nuestras cabezas tienen precio. Por eso varias personas intentaron matarnos.

-¿Irnos? -pregunto sin poder creerlo.

No puede estar hablando en serio. El no responde y sigue viendo las fotografías. ¡Diablos, es verdad!

-Habló muy en serio... El novio de Kate puede irse con nosotros y así tu y yo iríamos a Europa a buscar a James -dice y me mira por fin-. Se en los lugares que han estado y donde pueden estar ahora...

¿El sabe donde esta James? ¿Siempre lo supo? Quiere que nos vayamos de aquí, pero ¿irnos? No quiero dejar a Dan y el no querrá dejar a su familia... Pero yo tengo que buscar a mi hermano y tenemos que poner a salvo a Kate y a mí sobrino (a) Cuando Dan sepa de los planes de Nick, el pegara el grito en el cielo y sólo rezó para que no haga la idiotez de querer matar a mi hermano. Después de lo que dijo Nick me fui a mi habitación, me encerré con llave y me deje caer en la cama. Necesito pensar y aclarar lo que quiere hacer Nick. Es tan estresante... Cierro los ojos y me obligó a mi misma a dormir

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Capítulo 23

Había pasado una semana desde que encontramos a Nick, el cual sólo salía con nosotras y se la vivía encerrado en su habitación con mi laptop en sus manos. El insistía que era tiempo de irnos, le dijo a Kate y ella acepto y también le diría a Zack. Yo por otra parte pensaba en la mejor manera de tocar el tema con Dan, pero también tuve una sorpresa...Zack acepto irse con nosotros con tal de estar cerca de Kate y su hijo. Yo había salido con Kim y Amy... Si, las abandone.. pero verdad es que e estado un poquitin ocupada en estos momentos y la universidad me atarea más. Dan me a llevado a clases y se a puesto bastante cariñoso conmigo. Lo amo, definitivamente estoy amando a ese chico que me vuelve loca y me hace sentir estúpida.

Era sábado y estaba normal. El cielo nublado, un poco frío y sin una pizca de sol. Kate estaba hablando con Nick sobre la ubicación de James... Han estado en ello durante toda la semana y al parecer se acercan al lugar exacto. Mis cansancios siguen, los dolores de cabeza igual y bueno mi humor normal. Eran las cuatro de la tarde aproximadamente, así que llame a Dan y le dije que nos viéramos en la casa abandonada en diez minutos, el acepto y yo me cambie de ropa. Me puse unos jeans oscuros, un suéter rosa con rayas cafés y caderas cafés, y mis zapatos también cafés. Me hice una coleta alta, tome la cámara, el celular y llaves, baje y vi a Nick sentado en el sofá de la sala con la laptop en sus manos, escuchaba las teclas ser oprimidas rápidamente y luego escuche a Kate bajando las escaleras detrás de mí.

-Iré a casa de Kim...

Comeremos y luego ese idiota -señala a Nick-. Me alcanzará aya, mientras que tu das un paseo con tu novio y nosotros comemos.

Asiento y escucho a Nick gruñir. A él no le gusta salir y menos ahora. Salimos de casa, dejando a Nick solo y subimos al auto. Dejo a Kate en casa de Dan y conduzco a la casa abandonada. No e visto tampoco a Amy, me pregunto ¿como estará? La llamaré luego. Solo quiero pasar una tarde tranquila con Dan y tomar más fotos. Cuando llegó veo el auto de Dan, estacionó el auto y bajo. Comienzo a caminar y luego de unos pocos minutos llegó al puente dónde caí al agua borracha. Sonrió al recordarlo. En ese momento apenas me estaba enamorando de Dan... Me acercó a el y lo abrazo por la espalda.

-Te extrañe -dice y río.

-Solo han pasado dos horas -digo y me lo imagino sonriendo.

-No puedo pasar mucho tiempo sin estar junto a ti, mi pequeña bambi -dice y se gira.

Queda enfrente de mí y me besa en los labios. Lentamente acaricia mis labios de una manera que me sorprende cual dulce puede besar. Lo abrazo de la cintura y el rodea mi cuello con sus brazos. Un sonido nos hace despegarnos y Dan gruñe. Sonrió y busco lo que suena. Mi celular. Lo saco y contestó la llamada.

-¿Hola? 

-Kara...-es Kate-. Tienes que volver a casa.

Su tono de voz me preocupa y me alejo de Dan. Le doy la espalda, mirando hacia el lago y siento sus ojos clavados en mí.

-La loca de Amber vino a casa de Kim con un arma y comenzó a gritar tu nombre -dice y escucho voces-. Me confundió contigo, entonces me apunto con

el arma y Nick llegó justo a tiempo. La inmovilizo y llamó a la policía.

-¿Y Kim? -susurro para que Dan no escuche.

-Está llorando...aparte de que acaba de terminar con Mike, esta asustada y no para de llorar -hace una pausa-. Nick la está abrazando.

-No te preocupes...-digo

-Kara...-Dan me interrumpe.

-Cuelga ese teléfono -dice una voz y me giro.

Logan está enfrente de nosotros...apuntándonos con un arma. Escucho la voz de Kate al otro lado y lo último que escucho es que Amber escapó antes que llegara la policía. Guardo el celular en mi bolsillo lentamente y doy un paso adelante para estar junto a Dan.

-No te muevas...-dice y me paro en seco-. Quién lo diría... eres Kara Evans. Hija de Samantha White -hace una pausa y una sonrisa se dibuja en sus labios-. Yo mate a tu mami...

Una irá me inunda y tengo ganas de matarlo ¿el mató a mi madre? Eso si que es pasarse de la raya... Siento mi cara teñirse de rojo de la rabia y veo de reojo que Dan retrocede un paso.

-No te muevas imbécil. Sabes al principio quería a tu novia...ahora me entero que su cabeza tiene precio y más ganas me dan de quitártela -dice y avanza un paso-. Siempre fuiste un maldito ¿lo sabias querida? -me habla y me da asco como lo hace- Él fue un maldito hijo de perra, se acostó con mi hermana y por eso te quería para mí -me apunta con el arma-. No sé si matarte o no.

-Dispara me a mí a ella déjala en paz -dice Dan y me cubre con su cuerpo.

-Dan, no -susurro y salgo de detrás suyo.

-Esto me conmueve...pero vales más viva que muerta

-dice y apunta a Dan-.Ven conmigo, me darán mucho dinero por ti.

Doy un paso y Dan sujeta una de mis muñecas. Me mira a los ojos rogando que no lo haga y yo estoy muerta de miedo. Logan puede dispararnos a cualquiera de los dos. 

-Oh por favor... Demonos prisa, no tengo su tiempo y no me hagas herirte -dice y me zafó del agarre de Dan.

Camino dos pasos y me detengo al escuchar que gritan mi nombre. Logan abre los ojos y yo me giro hacia Dan. El saca una pistola y yo me giro rápidamente. Logan apunta y miró a Dan...

-¡NOOOOOOO! -un grito desgarrador sale de mi garganta.

Todo sucede en cámara lenta. Logan jala el gatillo y veo como Dan cae de espaldas. Logan es derribado por Nick y yo corro alado de Dan. Su camisa blanca se tiñe de rojo y tiene los ojos muy abiertos. Mis manos tiemblan cuando pongo su cabeza en mi regazo y acarició su mejilla. La bala perforó su pecho y esta perdiendo mucha sangre.

-Dan...-susurro y las lágrimas corren por mis ojos.

-Bambi...-dice, mete una mano en su bolsillo y saca una cajita-. Úsalo... Te amo Kara.

-No, no digas eso Dan -susurro con voz ahogada.

-Te amo -susurra y cierra los ojos.

-No, no, no, no ¡No! -grito y le pegó bofetadas para hacerlo abrir los ojos-. No me puedes dejar... Tu no me puedes dejar Dan Colleman... Yo te amo.

Escucho ruido a mi alrededor pero yo solo me centro en la persona que tengo en mi regazo. El está pálido como una hoja y mis lágrimas caen en su rostro. Escucho decir mi nombre pero no les presto atención, yo solo me aferró al cuerpo de Dan y niego con la cabeza. Me toman

de los hombros y me levantan.

-¡NOOOOOOO! ¡Tengo que estar con el! -grito y unos brazos se enroscan en mi cintura.

-¡Cálmate Kara! Dan estará bien. Lo llevan al hospital -dice esa voz tan conocida.

Comienzo a llorar y observó como Dan es llevado de urgencia al hospital. Nick me abraza y me aferró a él. No... Esto debe de ser un mal sueño, Dan no puede morir y no lo hará. Prometió quedarse junto a mí para siempre...el no se rendirá. Tiene que luchar por su vida. Nick me sube a un auto y conduce rápidamente hasta el hospital. Yo solo me hago bolita en el asiento. Abrazo mis piernas a mi pecho y hundo la cabeza en medio de mis piernas. Que este bien, que este bien, que este bien, que este bien, que este bien... Dios no lo dejes morir, tiene que vivir...conmigo o sin mí. No te lo lleves aún. No me doy cuenta que llegamos al hospital hasta Nick abre mi puerta y me ayuda a bajar del auto. Salgo disparada y corro hacia la recepcionista. 

Luego que nos dicen el piso dónde está, corro hasta el elevador con Nick a mi lado y subimos al tercer piso. Dan está en urgencias y yo solo rezo para que este bien. Me siento en uno de los sillones en la sala de espera y vuelvo a mi posición. Escucho voces pero yo solo tengo una en mi mente... La de Dan. "Eres demasiado buena para mi" "Me gusta tu nombre Kara y toda tu persona" "nunca me perderás" "Eres hermosa Kara" "Te amo nena" "Te amo bambi" "Yo también te amo" "Te Amo"....

-¿Cuanto tiempo lleva así?

Escucho una voz... Pero muy lejana en este momento y no me muevo de mi lugar.

-Desde

que llegamos una hora más o menos -esa es la voz de Nick.

-Dios...esto está mal -ahora escucho la voz de Amy.

-¿Quién le disparó? -Kim

-Logan... Estaban dando un paseo por el bosque, luego apareció y Nick fue a buscarlos -Kate.

-Dios, no te lo lleves -escucho la voz de Sarah y más ganas me dan de llorar.

Más lágrimas salen de mis ojos y un sollozo irreconocible sale de mi garganta... Siento que me voy a morir ¿que are si lo pierdo? No, no debo de pensar eso. El no morirá...

-Kara...

Tocan uno de mis brazos y levanto la cabeza. Me encuentro con los ojos casi verdes de Kate, los cuales están preocupados y cuando me mira se ponen cristalinos.

-Tienes que ir a casa...-dice y niego con la cabeza-. Dan lleva una hora ahí dentro, tendremos noticias de él en otras horas -vuelvo a negar-. Tienes que comer algo y cambiarte de ropa...

Dejo de abrazar mis piernas y ne siento bien. Bajo la mirada a mi suéter...lleno de sangre y tierra. Miro a Kate y me ruega con la mirada que vaya. Me levanto de la silla con las piernas temblorosas y miró a mi alrededor. Kim abraza a Sarah, Zack y Nick están hablando en una esquina. Kete me toma del brazo y me conduce hasta fuera del hospital. Ni siquiera tengo ganas de hablar solo pienso en Dan.

Kate me abre la puerta del auto, entró y nos vamos a casa. Deje de llorar, pero sigo nerviosa por Dan y su estado. Lleva casi dos horas ahí dentro y siento que la cabeza me va a explotar. Necesito en verdad descansar...pero no lo are. Miro por la ventanilla y Kate sigue conduciendo. Cinco minutos después

estamos entrando a la casa.

-Te espero aquí abajo -dice Kate y camina a la sala.

Yo me ordenó caminar y subir las escaleras. Pie izquierdo, pie derecho, izquierdo, derecho, izquierdo, derecho y escalón. Subo las escaleras pesadamente, llegó a mi habitación y abro la puerta. Mi habitación está oscura, no huele a nada y me parece gris. Camino a mi armario, saco unos jeans, una sudadera de Dan y mis converses negros. Salgo de mi habitación y cuando iba bajando las escaleras, unas manos me empujan y pierdo el equilibrio. Suelto un grito mientras caigo por las escaleras, me golpeó varias partes del cuerpo y cuando llegó al final veo a Amber parada en las escaleras. Tiene una sonrisa en su rostro y luego todo se vuelve negro...

Escucho voces y un bip, bip, bip. Abro los ojos poco a poco y la luz me siega por unos instantes. Parpadeo y me acostumbro a la luz. Miro la habitación y me encuentro con los ojos de Nick. El sale por una puerta y yo trato de incorporarme. Veo la habitación...de hospital. Estoy en una camilla, con una bata, conectada a un aparato y siento el cuerpo molido. Kate entra acompañada de Nick y un doctor.

-¿Qué me paso? -pregunto y Kate toma una de mis manos.

-La psicópata de Amber te empujó por las escaleras...-dice Kate.

-Kara...abortaste -dice Nick y el doctor asiente.

-¿Qué yo que? -pregunto y miró a Kate.

Kate asiente, me giro a Nick y este se pasa las manos por la cara y el cabello. Yo aborte..

-¿Está diciendo que estaba embarazada?

-pregunto atónita.

-Sí...de ocho semanas -dice el doctor y yo cierro los ojos-. Cuando caíste por la escaleras, sufres varios daños y eso provocó que perdieras el bebé.

Miro un punto fijo en la habitación y trato de procesar lo que acaban de decirme. Yo acabo de perder un bebé de Dan... Un bebé de Dan y mío. Una lágrima sale de mi ojo derecho y pongo las manos instintivamente en mi vientre. Amber me empujó por la escaleras y lo perdí. Escucho la puerta cerrarse y miró a Nick.

-Nos vamos -dice y asiento-. Mañana en a primera hora.

-¿Cuanto tiempo estuve inconsciente? -pregunto y miró a Kate.

-Cuatro horas -dice y abro los ojos de par en par.

-¿Dan ya salió? -pregunto.

-Sí, hace una hora aproximadamente -dice Nick y trato de levantarme-. Descansa un poco y lo verás...antes de irnos. 

-Dan tenía esto en su bolsillo-dice Kate y me entrega la cajita del anillo.

La abro y me lo pongo. Nunca me lo quitare. Trato de levantarme y esta vez me ayudan. Nick me acompaña hasta una habitación, abre la puerta y me deja dentro de ella. Miro la cama y el cuerpo de Dan. Nick dijo que estaba inconsciente y no sabían cuando despertaría. Me acercó a él, me siento en la cama y tomó su mano. Esta fría y pálida.

-Dan...-susurro y el parece querer abrir los párpados-. Se que me escuchas...te tienes que recuperar. Dan, yo me iré -digo y el mueve su mano-. Me iré de aquí... Estaba embarazada ¿sabes? De ti...y lo perdí hace unas horas. Te tengo que dejar, yo tengo que entregar la información y encontrar a mi hermano pequeño. Tengo

que dejarte...estar conmigo es peligroso y ya estuviste al borde de la muerte y si yo te pierdo...-digo y un sollozo se me escapa-. Te amo, te prometo jamás quitarme el anillo que me distes y en verdad me duele irme... Pero tengo que hacerlo, espero verte en unos años y poder... no lo sé vernos de nuevo. Esto es difícil para mí y se que no te lo tomarás bien -digo y unas lágrimas empapan mis mejillas-. Me enamoraste, imbécil y ahora te amo como nunca lo e hecho. Amo tu sonrisa, tus ojos, tu voz, tus manos, tu cabello...y toda tu persona Dan. Eres lo mejor que me a pasado en mi vida. Te amo Dan.

Suelto un sollozo y limpio mis lágrimas. Veo el rostro de Dan y por sus mejillas se escurren lágrimas. Me agachó y beso sus labios dulcemente. Aprieto los ojos y me separó de él. Lo miro por última vez...y salgo de ahí. Nick me abraza y yo envuelvo mis brazos en su cintura. Lloro como nunca lo e hecho... Por mi bebé, Dan y todo lo sucedido. Cuando me calmo un poco regreso a mi habitación y me quedo dormida por varias horas. En la madrugada Kate me despierta, me ayuda a vestirme y nos vamos del hospital. Zack está al volante, Kate de copiloto y Nick y yo en los asientos de atrás. Yo estoy sentada en el regazo de Nick, el me abraza y me deja dormir. Extrañaba sus fuertes brazos rodeándome y dándome calor. Llegamos al aeropuerto, subimos al avión y nos dirigimos a California.

Nick había arreglado todo para que nuestras cosas lleguen ahí. Habíamos quedado de acuerdo en vivir en nuestra antigua casa, la casa es bastante grande como para diez personas y sólo somos cuatro. Extrañare Twin falls y a Dan... Me dolió dejarlo, pero no tuve opción y me arrepiento de a verlo hecho. Pero no hay marcha atrás y ya es demasiado tarde para arrepentirme. Solo espero que algún día me perdone y me entienda..

 Luego de unas horas, bajamos del avión, compramos un auto y nos vamos directamente a nuestra antigua casa. 

La casa esta enfrente de las playas. Aún está en buen estado y sigue hermosa. Estará un poco llena de polvo, pero podremos limpiarla y arreglarla un poco... Después de a ver arreglado un poco las habitaciones, subo y me acuesto a dormir. Cuando cierro los ojos las lágrimas regresan y lloro hasta quedarme dormida otra vez. Los dolores de cabeza y cansancio era por el embarazo... Un agujero se abre en mi pecho y me dan ganas de gritar de desesperación. Pasan las horas y me quedo dormida aún con lágrimas en mi rostro.

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Capítulo 24

Había pasado ya once días desde que deje a Dan... Desde entonces lloro en las noches y en el día ayudó a buscar a James. Ahora mismo me encontraba abrazando a Nick de la cintura, mientras el conduce una motocicleta y rebasa autos. Estábamos en Roma, Italia. Si, James se encuentra en algún lugar de Roma y al parecer Nick ya sabe su ubicación. Kate se había quedado en California con Zack, ella no podía venir con nosotros por las siguientes razones.

1. Esta embarazada.

2. Podía ser peligroso venir.

3. Nick y Zack le contestaron con un rotundo "No"

Esas tres razones bastaron para dejarla en casa. Nick acelera y pasamos alado de un autobús. Si...a Nick le gustan las motos tanto como a mí. Escucho las bocinas de los autos y a Nick gritar una zarpa de palabrotas. Río y me aferró a su cintura. Cuando giro la cabeza veo que pasamos por el Coliseo y sonrió. No es la primera vez que vengo a Roma... Es la segunda y es el único lugar de Europa que e venido... Es bellisimo, si tan solo Dan estuviese aquí todo sería perfecto... 

Siento el agujero en mi pecho y cierro los ojos fuertemente. Kate habló con Kim preguntando por él... Ella dijo que se recuperó, pero que estuvo fuera por todo él día. Y eso fue tan solo hace dos días. Si, Dan estuvo inconsciente casi diez días y todo eso me lo dijo Kate hoy en la mañana. Habíamos llegado ayer en la tarde, solo dormimos un poco y salimos. Llevábamos casi cuatro horas buscando, pero era de noche y regresamos al hotel. En la mañana desayunamos y salimos de nuevo. Ahora mismo creo que son las seis de la tarde.

-¡Fíjate por donde vas imbécil! -grita Nick cuando frena de golpe.

Un auto salió de nada y gracias a Dios, Nick conducía y no yo. Nick vuelve a arrancar y luego de unos minutos nos alejamos de la ciudad. Estamos subiendo una colina y hace un poco de frío, agradezco a mi hermano por a verme dado su chaqueta y el se puso otra. Nick baja la velocidad y yo me despegó de su espalda. Observó las casa de mi alrededor...lindas y de tamaño normal. Este según Nick es un barrio de clase media.

-A dos cuadras está la casa-dice Nick y asiento.

Según las sospechas de Nick, James y Carol vivían este barrio. También había investigado la ubicación de la casa, porque bueno ¿como demonios íbamos a saber cuál es la casa, si hay casi ochenta en este barrio? Nick a los dos minutos estaciona la motocicleta enfrente de una casa de estilo clásico, rodeada de flores y con una pequeña moto estacionada alado de un auto también clásico. Bajamos y quitamos nuestros casco, le entregó el mío a Nick y miró la entrada... Tengo nervios. Nervios de que después de un año por fin vea de nuevo a mi hermanito. Nick se para alado de mí y toma mi mano.

-¿Lista? 

-Lista -afirmó, asintiendo con la cabeza.

Comenzamos a caminar tomados de la mano está la entrada. Respiro hondo, suelto la mano de Nick y doy unos suaves golpes en la puerta. Escucho un grito... Creo que significa "un momento" o algo así según Nick. Lo miro y me guiña un ojo. Muerdo mi labio y vuelvo a mirar la puerta. La puerta se abre y aparece una mujer de unos cincuenta años hablando italiano y se detiene

de golpe al vernos. Primero ella se pone pálida, sus ojos se cristalizan y luego lágrimas caen.

-¿Nick? ¿Kara? -pregunta con voz estrangulada.

-Hola, abue -digo y la abrazo.

Sip, ella es mi abuela Carol. Carol tiene cincuenta y tres años...y aparenta tener cuarenta. Su cabello negro está lleno de unas pocas canas, sus ojos marrones un poco cansados y con unas pequeñas arrugas en su cara, Carol mide al menos 1.72, un poco delgada y también llena de vida. A los tres segundos siento los brazos de Nick pasar por mi cuerpo y abrazarnos a las dos juntas. Nos dejamos de abrazarnos y ella nos mira con una gran sonrisa...

-¿Pero como...? -empieza a decir.

-Mejor sentémonos -la interrumpe Nick.

Ella asiente y nos deja entrar. La casa huele a flores recién cortadas... La decoración es igual que las casa de aquí. Carol nos conduce hasta la parte trasera del jardín. Veo una mesa, sillas y un pequeño árbol cerca. Caminamos hasta ahí, tomamos asiento en las sillas y comenzamos a relatar desde la desaparición de Nick. Carol nos escucha atentamente y llora cuando le cuento lo de mi padre, el encuentro con Nick y el embarazo de Kate. Al principio no se la creía que Kate estuviera embarazada, luego nos cree y seguimos hablando hasta que terminamos en la parte que llegamos aquí.

-Pasaron por mucho en un año -dice y asentimos.

-Pero hay algo que quiero que me digas Carol...-digo y ella asiente-. ¿Como fue que James terminó estando contigo en el accidente de mi madre?

Esa pregunta la quería hacer desde el momento en que la vi. Desde que supe

la verdad desee saberlo y ahora tengo la respuesta frente a mí. Carol traga saliva y respira unas cuantas veces. Se que es difícil contarnos esto...porque mi madre era su hija. Y ahora ya no tiene ni a Tom ni a mi madre. Mi abuelo murió cuando yo tenía seis años y departe de mi padre ningún abuelo. Sus padres habían muerto cuando el tenía quince años. Por eso a esa edad comenzó en la milicia. 

-El día de su cumpleaños había quedado con Sam de vernos para darles una sorpresa a ustedes -dice y recuerdo ahora.

Carol estaba fuera del país en un viaje por el mundo y llevábamos casi tres años sin verla.

-Quedamos de vernos en un lugar y cuando la vi... Estaba asustada, hasta temblaba y el pobre de James no sabía que sucedía. Así que tu madre le ordenó a James que se quedara conmigo, que todo estaría bien...y que regresaría por ustedes. Pero cuando le pregunté la verdad -dice y cierra los ojos-. Me dijo que los estaban buscando, que los iban a matar a todos y que cuidará a James. Dijo que ustedes estaban bien con su padre y le creí. Cuando pasó el accidente...nosotros lo vimos todo -lágrimas caen de sus ojos-. James lloraba y quería correr hacia el auto en llamas. Pero me lo lleve de ahí a arrastras y lo traje aquí.

Termina y limpia sus ojos. Yo me quedo callada observándola... Cubro mi boca con mis manos y cierro los ojos. Por Dios...James vio la muerte de nuestra madre. Un adolescente de quince años presenció la muerte de su madre. Esto está peor de lo que jamás imagine en mi vida..... Hago mentalmente un resumen de lo que a pasado en mi vida...

Mi

nombre es Kara Evans White y tengo diecinueve años. Estoy perdidamente enamorada de Dan Colleman, el cuál amo y lo abandone por su seguridad.Tengo una hermana gemela que se llama Katherine, ella está embarazada de su novio Zack. Kate y yo encontramos a mi hermano mayor que estaba perdido, su nombre es Nick. Aborte un bebé de Dan y mío. Logan disparo a Dan. Amber fue la causante de mi aborto. Logan mató a mi madre Samantha White. Mis padres están muertos, mi hermano pequeño estaba desaparecido con mi abuela Carol. Nick y yo encontramos a Carol y James. Tom murió, pero me reveló muchas cosas. 

Todo me lo digo a mi misma de una manera desordenada y me golpea fuertemente todo. 

Encontré a mis hermanos y a Carol... Miro a Carol y esta me mira fijamente..

-Eres igual a ella -dice y sonrió un poco-. Pero también tienes parte de tu padre en tu forma de ser.

-Carol...¿Dónde está James?-pregunta Nick. 

-No tarda en llegar -dice y asentimos.

Nick le hace preguntas a Carol de cómo pudieron persuadirnos. Ella simplemente respondió "soy vieja y con mucho conocimiento y experiencia. Sabía la forma en que tu padre les enseñó" y eso respondió todas sus preguntas, ya que se quedó callado y luego Carol bombardeo a Nick con preguntas. El solo trataba de responder y yo seguí pensando en él...en Dan.

Lo extraño. Lo extraño tanto, sus ojos azules eléctricos mirándome fijamente, sus dulces labios sobre los míos, sus manos... ¿A quien engaño? Extraño todo de él. Había evitado contestar el teléfono de casa por temor de hablar con él y siempre terminaban

contestando Kate, Nick o Zack incluso. Cuando sentía ganas de volver a verlo, tomaba las fotos que le había tomado y las miraba por horas... Duele, duele y mucho a verlo dejado en su estado. Pero se que ahora está bien y que cuando le hable por última vez me escucho... Recordar la última vez que sus brazos me rodearon me entran más ganas de llorar, ya que fue el día que le dispararon, yo perdí el bebé y lo deje. 

Es extraño no despertarse sin sus besos o verlo por la tarde...casi noches. Bajo la mirada a mi anillo y sonrió tristemente. Hice una promesa y la cumpliré. Aún llevó puesto sus regalos...la cadena, el anillo e incluso la lencería. Extraño ver su sonrisa maliciosa cuando me veía en ropa interior...era un pervertido y siempre decía lo sexy que era él (en pocas palabras era un creído que le gustaba aumentar su ego) pero con todo eso lo amo... Lo sigo amando y no creo poder dejarlo de amar... La puerta al abrirse y una voz me saca de mis pensamientos.

La voz hablaba en italiano, no sé qué rayos decía y estaba segura que era de un chico. Carol sonrió, se levantó del la silla y le abrió los brazos a un chico. Abrazándolo cariñosa mente... Un chico de aproximadamente dieciséis años, pelo castaño, un poco alto, delgaducho y con unos anteojos cuadrados estaba junto a Carol. Nick se levantó y también lo abrazo. Yo me quede petrificada en mi lugar mirando fijamente al muchacho que abrazaba fuertemente a Nick. Luego que se dejarán de abrazar, vi que los dos lloraban y luego Nick dijo algo. El chico volteo en mi dirección, sonrió y más lágrimas salieron de sus

preciosos ojos verdes.

-Kara...-dijo acercándose a mí.

Me levante de un salto de la silla y corrí a abrazarlo...

-Te e extrañado tanto -susurre pegada a su cuello.

-Y yo a ti cosa número uno -dice y me abraza más fuerte.

No resisto más y las lágrimas corren por mis mejillas, mojando su polo rosa y soltando un gran sollozo. Después de tanto tiempo...al fin lo vuelvo a tener entre mis brazos... Mi pequeño James. Ya no es tan pequeño ahora, es un poco más alto que yo a su dieciséis años y es más guapo que hace un año. Un año creyendo que estaba muerto. Un año sin verlo. Un año sin tenerlo entre mis brazos... Y todo este tiempo pareció una eternidad. Las lágrimas siguen cayendo de mis ojos y me apartó de él. Sus enormes ojos verdes están llorosos y tiene una gran sonrisa en su cara, como yo la debo de tener en este momento y nos volvemos a abrazarnos. Luego de un rato nos separamos y sorbo mi nariz.

-Ya no eres tan pequeño -digo y limpio mi cara.

-Y tu cosa número uno, estas más sentimental -dice y golpeo su hombro levemente.

-Es hora de que regreses a casa -dice Carol y James asiente-. Prepara tus cosas cielo.

James nos sonríe y entra a la casa. Miro a Nick y este me sonríe. Por fin estaremos juntos los cuatro... Nick se acerca a mí, pasa un brazo sobre mis hombros y me estrecha contra su cuerpo.

-Tienes que regresar con nosotros a California -dice Nick y yo asiento.

-No...yo quiero quedarme en mi país -dice y nosotros entendemos.

Se me olvidaba mencionar que hace unos días descubrí que la familia de mi madre es

italiana... Mi padre era Estadounidense hasta donde sabíamos, también que después de todo el nombre de la madre de mi padre era Mara... Por eso Tom nos dio esas identificaciones y ahora también descubro que la hermana de Carol se llamaba Maya... Qué sorpresa ¿no? Luego de casi media hora empieza a oscurecer y entramos a la casa. James baja con dos maletas, Nick lo ayuda a subirlas al auto, que Carol generosamente nos dio y regresan al instante.

-Buena suerte -dice y sonríe.

Le devuelvo la sonrisa. Carol se queda paralizada, abrió muy bien sus ojos y luego cae. Me horrorizo al instante que noto...que una bala fue disparada en su cabeza. Todo a mi alrededor se detiene y sólo veo a Carol tendida en el piso. No, no, no ella también no. Alguien me toma del brazo y jala de él. Pero es inútil estoy como una piedra, no puedo moverme y me falta el aire. Siento como toman mis piernas y me cargan como un costal de papas. 

-¡Kara! 

La voz de James me saca de mi trance y veo que el que me esta cargando es Nick. Me deja en el piso y entra rápidamente en el auto, yo lo imitó y James se arroja dentro de las asientos traseros. Nick arranca a toda velocidad, haciendo chirriar las llantas y escucho disparos. Por instinto me agachó y cubro mi cabeza. Con la cabeza gacha miró a los asientos traseros.

-¡James agáchate! -grito y el obedece. 

Veo que el también está llorando y pasan unos tres minutos más largos de mi vida, hasta que nos alejamos más de la casa. Mi corazón late muy deprisa, mi respiración está acelerada y ya no estoy llorando. Carol no tenía

que morir así y menos enfrente de nosotros. Tengo que ser fuerte como Nick y calmarme. Luego de un rato llegamos al hotel, ni James y yo bajamos del auto, así que Nick va por nuestras mochilas. Miro a James y le indicó que se mueva. Me paso a los asientos traseros y nos abrazamos. 

-¿Qué pasará ahora? -dice James en un susurro.

-No lo sé...pero hay que volver a casa -respondo y pongo mi cabeza en el hueco de su cuello.

-Ya quiero ver a la cosa número dos -dice y sonrió levemente.

James siempre nos llamó a Kate y a mí cosa número uno (yo por ser la mayor, supongo) y cosa número dos (esa es Kate por ser menor que yo) Me sorprende que nos diga así, ya que nos puso los apodos el día que vio el Gato con sombrero... Eso fue cuando tenía cuatro años y ahora tiene dieciséis. James tiene un brazo rodeando mis hombros y con el otro mi cintura. Yo tengo los brazos enrollados en su cintura igual y mi cara hundida en su cuello. Es raro estar así, porque la última vez que estuvimos abrazarnos así, fue el día en que Nick había desaparecido y James me abrazo igual que ahora. Solo que el motivo cambiaba... El volvernos a encontrar, la muerte de Carol y el susto de muerte de hace unos minutos.

-¿Como está Kate? -pregunta y sacó la cabeza de mi escondite.

-Embarazada...-digo y el me mira horrorizado-. Por Dios James, debes de alegrarte un poco y no verme con esa cara.

-Es solo que...-dice y me mira a los ojos-. Creí que serias tu la que terminaría embarazada.

Y es ahí. En ese preciso momento es cuando recuerdo el bebé que perdí y a ver dejado a Dan. Lo miro atentamente a los ojos y se lo cuento todo. Claro, se puso pálido en la parte en la que le dije las veces que estuve apuntó de morir...y su rostro se volvió triste cuando le dije lo de mi embarazo. Pasan dos minutos y Nick regresa justo en el momento que terminó de hablar.

-Eso...eso es horrible -dice y hace una mueca-. En verdad te tengo respeto.

Dice y sonrió aliviada. Creí que me haría un escándalo cuando le dijera esto ¿Pero quien se imaginaria que mi hermano pequeño me regañaría por a verme emborrachado? Ni yo me la creí. Nick conduce hasta el aeropuerto, compra los boletos de avión y esperamos una hora en los asientos de espera. Nick vendió el auto de Carol y aún razonable precio hace media hora, lo vendió a una señora de unos treinta años y después con el dinero compro los boletos. Subimos al avión. El vuelo duraba casi siete horas y eso para mí significa dormir. Pero antes de todo mando un mensaje del teléfono de Nick.

-Estamos de regreso con James, nos vemos en el aeropuerto a las cinco de la mañana.

Le envió el mensaje a Kate y responde al instante.

-Ahí estaré esperando a ese mocoso y a ustedes dos, claro. Besos y cuídense.

Sonrió al ver el mensaje y le devuelvo el celular a Nick. De ahora en adelante muchas cosas van a cambiar, pero el hueco en mi pecho no lo ara y no creo que lo haga en un buen tiempo. Inclinó el asiento y veo de reojo a los dos hombres que conozco de toda la vida. James está dormido con sus audífonos puesto, Nick está mensaje ando y debes en cuando sonríe... Este está hablando con una chica y espero que sea linda, de la forma amable y no una barbie plástica. Eso me recuerda a Amber y inmediatamente borro ese pensamiento. Pensar en ella me pone mal. Cierro los ojos y trato de imaginarme a mí con él... Lo dos abrazados en medio del bosque y el susurrando un dulce Te amo en mi oído....

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Capítulo 25

Dos años después...

El tiempo pasa volando y el dolor sigue clavado en mi pecho. Han pasado dos años...dos jodidos años desde la última vez que vi a Dan y desde entonces sólo pienso en él. En estos dos años pasaron muchas cosas, hasta las puedo enumerar si es necesario.

Logan fue encerrado en la cárcel por numerosos delitos. Amber fue hallada muerta dos meses después de que me fuera. Entregamos los archivos que Nick había metido en una memoria y luego entregamos la memoria al servicio secreto. Los cuales supimos que contenían pruebas para encerrar a numerosos delincuentes y mercenarios. Cuando los capturaron, al instante dejaron de ponerle precio a nuestras cabezas y dejaron de casarnos.

El nacimiento de mis dos preciosos sobrinos... Sí, Kate tuvo gemelos y unos preciosos. Mason y Mara. Los dos eran idénticos a sus padres, claro Mason con ojos grises y Mara con ojos verdes, ahora en esta fecha están cumpliendo dos años y son enormes. Por otro lado Kate estudiaba los fines de semana, ya que tenía que cuidar a los gemelos y no tenía el tiempo para la universidad. Zack terminó de estudiar y consiguió trabajo en una de las constructoras más importantes de California. Claro, ellos dos vivían aún en la casa con James y yo. Pero me gustaba tenerlos cerca, porque así ayudaba a Kate en las mañanas con mis hermosos sobrinos y en las tardes iba a la escuela de fotografía.

Sí, termine la universidad hace unos meses y exactamente como dijo Nick, estudie fotografía y ahora trabajo para una empresa publicitaria tomando fotografías a animales y paisajes. No me podía quejar, ganaba

muy bien. Por otro lado James ya estaba en la universidad y por eso más les rogué a los chicos quedarse en casa para no sentirme sola en esa enorme casa y ellos encantados aceptaron. James es buen estudiante y ahora está enorme, más alto que yo y ya dejó de usar anteojos. Tengo que admitir que mi hermanito es muy guapo. Y Nick...bueno él se fue a Nueva York y ahí conoció a una chica. El mundo es muy pequeño, ya que esa chica terminó siendo nada más y nadie menos que Kim.

Nick al terminar la universidad se mudo a Nueva York y ahí se reencontró con Kim. Ellos ahora vivían juntos y por lo que escuche le propondría matrimonio hoy. Sip, hoy era el cumpleaños de mis sobrinos y todos estaban invitados, incluso él... Pero siguiendo con los eventos sucedidos, Nick es profesor de una escuela y Kim también. No me sorprendió saber que era ella, ya que el día del accidente de Dan ellos estaban abrazados y sinceramente tenía sospechas de que esos dos terminarían juntos y así pasó. Ahora viven en un departamento en Nueva York. Me encanta que Kim sea la novia de mi hermano y hacen muy linda pareja.

Había hablado con Kim hace unos semanas y me dijo que cuando me fui él terminó la universidad y se marchó de Twin falls con Kim a Nueva York. Sarah no estaba de acuerdo en que ellos se fueran, pero terminó aceptando y debes en cuando los iba a visitar. Claro saber de Dan me ponía mal y a la vez feliz. Pero me rompió el corazón saber que lloro por mí... Cuándo Kim me contó eso, sentí que el agujero en mi pecho volvía a regresar y me trague las lágrimas. Dan terminó estudiando

medicina y ahora creo que se muda de ciudad a no sé dónde y sigue estudiando, porque esa carrera requiere al menos seis años. Pero me alegra que este bien y haya salido adelante. Como dije antes él tiene que vivir conmigo o sin mí. También supe que Amanda (ya no le gusta que le digan Amy) terminó su relación de cuatro años con Alex y ahora estaba saliendo con un chico ¡un chico! Ella seguía en Twin falls y por lo que se no piensa mudarse. 

Y volviendo al presente como dije hoy es el cumpleaños número dos de mis sobrinos y la casa estaba llena. Kim y Nick vinieron a quedarse una semana por la celebración. Amy (Amanda) también venía y sólo estaría aquí unos días porque tenía que volver al trabajo. Y él...también vendría y los nervios me comían. Cuando nacieron Mason y Mara él vino, pero sólo un día y ese día yo estaba en la otra punta del país haciendo un trabajo sumamente importante. Claro, me fui un día después que nacieran ellos y él fue tres días después. Así que...no nos vimos y no nos hemos visto desde hace dos años.

-¡Kara ayúdame a vestir a Mason! -grita Kate.

Termine de peinarme, me puse mis zapatos de color amarillo y sali de mi habitación. Era la fiesta y mi atuendo era muy cómodo. Un short negro con lunares blancos, una blusa y zapatos amarillos. Tenía el cabello recogido en una coleta y sólo tenía puesto rimel y labial rosa pálido. Camine al otro lado del pasillo y entre en la habitación pintoresca de los gemelos. Una pared era azul con autos y trenes y la otra mitad de la habitación era rosa con flores y muchas mariposas. 

-Kara

ayúdame por favor... Aún tengo que vestir a Mara-dice todo amontonado.

Río y me acercó a la cosita hermosa que está acostado en el cambiador.

-Hola mi pequeño Mason...es hora de vestirse -digo y sonrió.

-Tita -dice Mason con esa voz con dulce.

Hable con esa voz con la que aveces haces sin darte a los bebés. Mason sonríe y tomó su atuendo rojo de cosa número uno. Sí...yo di la idea de vestirlos así. Término de subir su cierre y miró mi obra de arte. Mason hace un puchero y luego sus ojitos de ponen llorosos.

-No, no, no -digo y lo cargo en brazos cuando rompe en llanto-. Ya, ya...

-No quelo la lopa -dice pegado a mi hombro.

-Solo resiste hasta la noche -digo y el niega con la

cabeza-. Mira, si te dejas la ropa...yo te daré dulces.

Susurro en su oído y me mira. Sus pequeños ojos grises, luego una sonrisa se forma en su redonda carita y asiente. Beso su nariz y lo bajo al piso. El sale casi corriendo y es atrapado por James.

-¿A donde crees que vas? -dice antes de hacerle cosquillas.

Mason chilla y yo sonrió. James es buen tío.

-Tita...

Siento unas manitas jalando de mis short's y bajo la mirada. Mara jala de ellos y me sonríe. La cargo en mis brazos y beso muchas beses sus mejillas. Mara ríe y veo a Kate negar. Luego que las risas pararán, bajamos al jardín y nos reunimos con los demás. Invitamos pocas personas. En total somos quince adultos y unos veinte niños corriendo por el jardín y subiendo a los juegos. Kim y Nick aún no llegan, pero si divisó a Amy y me acercó a ella.

-Hola -digo y

sonrió.

-¡Hey! -dice y me abraza-. ¿Como estás?

-Yo muy bien ¿y tu Amanda? -pregunto luego de separarnos.

-Super... Mi relación Gerard va bien -dice y asiento.

-En verdad me alegro por ti, Amanda -digo y ella niega.

-Dime Amy, mujer... ¿Ya lo vistes? -pregunta y pone cara interrogante.

-Aún no...-digo y ella

asiente-. No sé si venga.

-Sabes bien que vendrá...adora a los gemelos -dice y sonrió.

-Es cierto...-miró al frente y veo a Kate haciendo señas para que me acerque-. Bueno hablamos más tarde...el monstruo me llama.

Digo y me alejo escuchando la risa de Amy. Me acercó a Kate y sonrió al escuchar las risas de los niños. Al llegar junto a ella me toma de los hombros...

-Por favooor... ¿Tomarías tu las fotografías? -dice y frunzo el ceño-. El fotógrafo no podrá venir. 

-De acuerdo...-digo y ella sonríe.

Doy media vuelta y regreso a la casa. Paso la cocina y camino hacia las escaleras. Las subo y voy a mi habitación. Al llegar busco mi cámara, al encontrarla vuelvo a bajar y comienzo con el trabajo. Tomo fotografías a los niños, los adultos y terminó con el pastel. Ya está atardeciendo y la vista hacia el mar es la mejor... Me escabullo de la fiesta, subo a la terraza y miró la vista. Nunca me cansare de ver esta vista tan hermosa del mar...

-Te vez hermosa...-dice a mis espaldas y me giro a verlo.

-Y tú ridículo con ese sombrero... En serio, Chuck ¿Cuantos años tienes? -pregunto sonriendo.

Chuck es mi compañero de trabajo y es uno de los mejores amigos que e tenido hasta

ahora. Cuando nos conocimos me pidió una cita...yo lo rechace por que aún amo a Dan. Pero ahora tiene un ridículo sombrero rojo con rayas blancas o ¿era blanco con rayas rojas?

-Los años suficientes para saber como darles placer a las mujeres -dice y muerde su labio.

-Eres un idiota -río y tomó mi cámara.

-Y tú una mandona -dice y se acerca a mí.

-Lo soy -respondo y comienzo a tomar fotos.

Tomo fotografías y paro en cuento siento unas manos en mi cintura. Chuck pone su cabeza en su hombro y yo bajo la cámara. 

-¿Lo extrañas? -susurra.

-Y mucho...-respondo y suspiro-. Más de lo que jamás imagine

-Creo que...-iba a responder pero es interrumpido

-Vaya...ya me dejaste de querer por lo que veo -dice una voz y se me corta la respiración.

Chuck deja de tocarme y se gira. Yo cierro los ojos y trato de volver a respirar. Mi corazón late muy deprisa y creo que llorare... Respiro hondo, me giro y abro los ojos. Y el esta ahí...justo enfrente de mí vestido con una polo negra, jens oscuros y zapatos negros. La polo se le pega al cuerpo marcando sus pectorales y sus fuertes brazos. El cabello lo lleva despeinado, sus ojos están oscuros y se ve malditamente sexy. Respiró una última vez antes de responder.

-Qué nos alejemos de las personas que más queremos no significa que los dejemos de querer.

El me mira y se acerca lentamente a mí. Yo me aferró a la barandilla y trato de volver a respirar. Miró a Chuck y veo que ya no está... Mierda. Dan queda parado a centímetros de mi cuerpo y me mira fijamente. Siento que mis ojos pican

y trago saliva. Ya no quiero llorar. No enfrente de él.

-¿Me quieres? -pregunta y pone sus manos a cada costado de mi cuerpo.

-No...-trago saliva y miró sus ojos-. Yo no te quiero...te amo.

Sus ojos se dulcifican y toma mi rostro entre sus manos.

-En todo este tiempo jamás te deje de amar...por favor...besame -susurra y cierra los ojos.

Cierro mis ojos, pongo mis manos en la cinturilla de su pantalón y acortó la distancia que nos separa. Uno mis labios a los de Dan y él suelta un suspiro. Extrañaba tanto sus besos y sus labios. Me toma de la cintura, me levanta y me sienta en la barandilla. Yo enrollo mis brazos en su cuello atrayendo lo más a mí y el se pone en medio de mis piernas. Muerde mi labio superior haciendo que jadee y abra más la boca. Su lengua hace aparición en mi boca y comienza a bailar con la mía. Hondo las manos en su cabello y lo comienzo a besar con ganas. 

Dan me pega más a su cuerpo y siento su pulso dispararse al instante que lo tomo del trasero atrayendo lo más a mí. Siento que el aire me falta y dejó de besarlo. En el momento que veo sus ojos eléctricos mirándome fijamente rompo en llanto. El toma mi rostro entre sus manos y me hace verlo.

-No me gusta verte llorar.

-Y a mí no me gusta llorar -respondo y pongo mis manos en su rostro-. Perdoname.

-¿Por que? -susurra y pone sus manos en mi cuello de una manera delicada.

-Por dejarte...por hacerlo en en el estado en el que estabas y no buscarte antes-digo y la lágrimas caen de mis ojos.

-Te perdone en el momento que me dijiste las razones de porque lo hiciste -dice y

limpia mis lágrimas-. Me rompió el corazón saber que llevabas a alguien aquí dentro -dice y pone las manos en mi vientre-. Una personita estaba creciendo aquí...y me dolió que me dejarás lo admito. Pero tenías que buscar a tu hermano...

-Gracias -susurro y cierro los ojos.

-De nada...y sino te importa me gustaría hundirme dentro de ti -dice y río.

-Eres un pervertido -digo riendo.

-Extrañaba sentir tu piel y escucharte gemir -dice y me pongo roja.

-¡Dan! -lo regaño y el sonríe.

Su sonrisa me derrite el corazón. Se aleja de mi, me ayuda a bajar y toma mi mano. Comienza a caminar y me arrastra con él.

-¿Dónde me llevas? -pregunto confundida.

-A terminar lo que empecé -responde y me mira de reojo.

¿Terminar con lo que...?

-Dan hay niños en la casa -digo y lo escucho reír.

-Eso lo hace más excitante -dice y entramos a la casa-. ¿Dónde está tu habitación?

-A la derecha, al fondo del pasillo -respondo y salimos corriendo ahí.

Corremos por el pasillo y cuando Dan abre la puerta veo a Mara dormida en mi cama.

-Diablos...-susurra Dan y cierra la puerta.

-A la derecha, la puerta de la izquierda -digo mecánicamente y Dan sonríe.

Toma mi mano y volvemos a correr por el pasillo. Abre La puerta aprisa y entramos al baño. Enciendo la luz y miró a Dan fijamente. Él me mira con lujuria, siento que mis músculos se contraen y muerdo mi labio. Dan gruñe y se abalanza sobre mi. Impacta sus labios contra los míos, besándome apasionadamente y coloca mis manos sobre mi cabeza. Me inmoviliza contra la pared y me sigue besando. Luego deja

de retener mis manos y las pone en mis muslos. Me levanta, enrollo las piernas en sus caderas y hundo mis manos en su cabello.

Comienza a caminar y mi trasero choca contra el tocador. Me baja y se arrodilla frente a mi. Baja mi short y mis bragas de un tirón y me sube al tocador. Se pone en medio de mis piernas y volvemos a besarnos. Desabrocho sus pantalones, bajo la cremallera y vuelvo a rodear su cuello con mis brazos. Ahogo un grito cuando Dan me embiste brutalmente y el gime fuertemente. Besa mi cuello y yo hecho la cabeza para atrás. El suelta un jadeo demasiado alto seguido de un gemido.

-Tenemos...que...¡Ahh! -grito y Dan sonríe.

-Calla. Hay niños en la

casa -dice con los dientes apretados.

Volvemos a besarnos y muerdo su labio cuando ahogo otro grito. El acelera las embestidas, se queda quito y dejamos a besarnos.

-Te amo...-susurra cerca de mis labios.

Y con esas dos simples palabras exploto. Mi cuerpo se estremece y suelto un suspiro. Pegó mi frente junto a la de Dan y trato de volver a respirar. Abro los ojos y me encuentro con los suyos. Los dos sonreímos, cierro de nuevo los ojos y dejó caer mi cabeza en su hombro.

-Bambi...

-¿Mmm?

-Cásate conmigo...

Abro los ojos de golpe, levantó la cabeza y lo miro fijamente. En su rostro no hay ningún tipo de broma...esta hablando en serio ¿casarme con Da?

-Acepta por favor...-me ruega con los ojos-. Quiero estar cerca de ti.

-Estas dentro de mí...literalmente -respondo y el ríe-. Sí, si quiero casarme contigo.

El sonríe y me abraza de la cintura...muy fuerte.

-Dan...-digo con un hilo

de voz-. N..no puedo res..

El me suelta y me besa. Me toma por sorpresa su beso y luego me acostumbro. Su beso es suave...lleno de amor y dulzura. Nos separamos en el momento que nos falta el aire y besa mi frente.

-Me has hecho el hombre más feliz de la existencia -dice y río-. Lo tengo que gritar a los cuatro vientos...

-Dan, tenemos que volver. Se van a preguntar dónde estaremos -digo y el asiente sonriendo.

-Tienes razón, pensaran que te e secuestrado y tus hermanos de seguro me arrancarán las pelotas por hacerlo -dice y suelto una carcajada.

Tiene razón, mis hermanos no durarían en hacerlo y Nick sería el primero en buscar a Dan. Sale de mí, se agacha, toma mi ropa y me la entrega. Dan se abrocha el pantalón, me ayuda a bajar y me arreglo. Trato de acomodar mi cabello y Dan ríe.

-¿De que ríes? -pregunto y me miró en el espejo.

Soy un desastre. El labial corrido y tengo el cabello hecho un desastre.

-Tu cabello...-dice y lo veo en el espejo-. Nos delata. Dice a gritos "tuve el mejor sexo de mi vida con un Dios de la cama"

No aguanto más y rompo en carcajadas. Es cierto. Trato de peinarme, abotono su camisa y mi short. Me miró una última vez en el espejo y me giro a verlo. El se deja el cabello todo alborotado por mí y me sonríe de lado. Me sonrojo. Hay Dios...este hombre me vuelve loca. Toma mi mano y salimos del baño. 

-Demonios...-susurro y suelto su mano.

-¿Qué ocurre? 

-Deje mi cámara en la terraza, te alcanzó en el jardín -digo y el asiente.

Salgo disparada a buscarla, cuando la encuentro bajo las escaleras y camino hasta el jardín. Cuándo salgo, los gritos de los niños me inundan y sonrió. Amo los niños. Cuando busco a Dan con la mirada, lo encuentro hablando con Nick...y al parecer los dos están muy serios. Luego se abrazan y siento que el aire vuelve a mis pulmones. Y cuando doy un paso soy envuelta en unos delgados brazos. Kim.

-Hola cuñada...-dice y me guiña el ojo.

-¡Hola!...¿De que hablan esos dos? -pregunto y señaló a los chicos que ahora hablan tranquilamente.

-Ah...Nick le pidió mi mano a Dan y....Dan hizo lo mismo -dice y suelta un grito-. Ya regresaron.

-Sí -respondo sonriendo.

Kim comienza a atacarme con preguntas y respuestas. Yo solo asiento y pongo la vista en los chicos. Luego de hacer una maniobra para que Kim dejará de hablar me acercó a los chicos. Cuando llegó Nick me guiña el ojo y se va. Miró a Dan y este sonríe.

-¿De que hablaron? -pregunto y tomo su mano.

-Le pedí tu mano...¡y dijo que sí! -dice y me rodea con sus brazos-. ¡Me voy a casar con esta hermosa mujer!

Grita a todo pulmón, yo hago una mueca riendo y los demás aplauden. Yo solo río u niego con la cabeza. Luego nos felicitan y Kate...bueno ella da el grito en el cielo. Literalmente grito también. James nos abrazo y Nick amenazó a Dan. Lo que me puso como tomate fue que James dijera que acababa de tener sexo. Dan lloro de la risa y yo lo fulminaba con la mirada. Luego el me abrazo y seguimos hablando con los demás mientras los niños jugaban y gritaban. Miro a Dan que sonríe de oreja a oreja y yo también sonrió. Me casare con él. Después de dos años estaré junto a él el resto de mi vida. Lo amo, en verdad lo amo y nunca lo dejaré de amar...

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Epílogo

Los meses pasan volando y ahora estoy enfrente de un espejo viendo mi reflejo. La chica que tengo enfrente tiene los labios rosados, las mejillas sonrosadas, el cabello largo ondulado con un vestido blanco largo y sus ojos cafés brillan. Esta soy yo. Kara Evans White de veintidós años, apuntó de casarse y ser madre. Inmediatamente me llevo las manos a mí enorme barriga al sentir las pataditas de Suzanne y sonrió, quede embarazada hace ocho meses...exactamente el día que me reencontré con Dan y ahora tengo ocho meses de embarazo.

Cuando nos enteramos del sexo del bebé hace dos meses, no sabíamos que nombre ponerle, ya que Dan pedía a gritos mi nombre y yo me negué. En estos meses Dan descubrió el nombre de su madre biológica. Suzanne. El nombre me enamoró y cuando le dije a Dan que la quería llamar así a nuestra hija...lloro de la felicidad. Suzanne Colleman Evans. Sonaba perfecto y amaba a mí pequeña Suzanne. Tener a una personita dentro de ti era lo más hermoso que jamás había sentido en mi vida. Esta pequeña criatura dentro de mí es un símbolo del amor incondicional que nos tenemos Dan y yo. 

Si me hubieran preguntado hace tres años como seria mi vida...les hubiera respondido que no tenía ni una maldita idea. En ese momento estaba tratando de salvar mi vida y la de Kate. Muchas personas muy importantes para mí murieron intentando protegernos a mis hermanos y a mí. Mis padres, Tom y Carol... Recordarlos me entristece mucho, pero trato de recordar los buenos momentos y eso me hace sonreír. No estarán conmigo pero tengo a los demás que siempre están ahí...

Kate, James, Nick, Zack, Kim, Amy, Dan y ahora Suzanne. Haber perdido a mí primer bebé fue un golpe duro y cuando supe que estaba embarazada...me aterre. No sabía si mi embarazo iría bien por el daño que sufrí en el pasado. Pero me dijeron que todo marchaba bien y estaba feliz.

Nick y Kim se casan en diciembre y faltaban cinco meses para eso. Es julio y la boda la celebraremos en la playa y luego vendremos a la casa. Kate y Zack se mudaron a unas cuantas casa de aquí. James seguía viviendo con nosotros. Si, Dan vive conmigo en la casa y me lleve una sorpresa al saber que se había mudado a California por mí. Ahora es un gran Doctor, trabaja en uno de los hospitales más importantes de la ciudad y me alegraba mucho que logrará sus metas. Yo por otra parte tuve que dejar de trabajar hace dos meses por mí gran barriga.

Ahora me miró por última vez y sonrió. Todo pasa por alguna cosa, para bien o para mal. Todo los sucesos me han traído hasta aquí. El día de mí boda con el amor de mi vida. Tomo mis artes, me los colocó y me pongo mi anillo que me regaló Dan hace casi dos años. Suzanne se mueve otra vez y sonrió dulcemente.

-Hola pequeña... ¿Ya despertaste? ¿Ya quieres escuchar a papá? -digo y recibo como respuesta una patadita-. Ya te quiero tener entre mis brazos, mi pequeña Suzanne.

-Te vez hermosa -dicen a mis espaldas y me giro.

Kate está parada en la entrada de mi habitación con su vestido azul aquamarin de dama de honor. Lleva el pelo recogido en un moño, sus labios rosados y sus ojos verdes brillan. Le sonrió y ella se acerca a mí.

De camino toma la flor blanca que debo de llevar y se para enfrente de mí. Me besa la mejilla y pone la flor detrás de mi oreja.

-Ahora estas más hermosa -dice y le sonrió más.

-Gracias...tu no estas nada mal -digo y ella ríe-. ¿Y mis sobrinos? 

-Con su padre y abuelos -dice y asiento.

Los padres de Zack han venido por la boda y se quedarían con ellos. Escucho el sonido de pasos y luego un chillido.

-¡Qué hermosa estas! -grita Kim y se acerca a mí-. Qué suertudo es él idiota de mi hermano.

-La suertuda soy yo -digo y ella pone los ojos en blanco.

-Estas más hermosa que nunca y más con la pequeña Suzanne aquí -dice Amy y pone sus manos en mi barriga-. ¡Oh Dios! Se a movido. 

-Sí, lleva días moviéndose mucho -digo y miró mi barriga. 

-Y más si los papás tienen actividad -dice Amy y todas reímos.

-Bueno es hora que nosotras bajemos...te vemos abajo en cinco minutos -dice Kate y las demás suspiran.

Las despido con las manos a las chica y ellas bajan a regaña dientes. Río y vuelvo a mirarme en el espejo. Estar con ellas es lo mejor de todo. Pongo mis manos en mi barriga, sintiendo a Suzanne y cierro los ojos. Amo sentir como se mueve ella dentro de mí. Siento una respiración en mi oído y sonrió con los ojos cerrados.

-Es de mala suerte ver a la novia -digo y lo siento sonreír.

-Si, pero era muy tentador ver a mi sexi futura esposa sintiendo a nuestra hija -dice Dan pegado a mi cuello.

-Sí te descubren las chicas aquí te van a matar-digo y pone las manos en mis caderas pegándome a su entrepierna.

-¿Ya

te dije lo sexi que te ves?

-Ya lo has dicho los últimos cinco meses.

-Sí...pero sabes la ventaja del embarazo -pregunta y abro los ojos.

-No...¿cual es?

-Está -dice y pone las manos en mis pechos, provocando que de un respingo-. Son más grandes, redondas y malditamente tentadoras.

-Y si ya terminaste de manosear mis tetas, me gustaría besarte una última vez como tu novia -digo y me giro.

Entrelazo mis dedos detrás de su cuello atrayendo lo a mí y pegando mis labios a los suyos. El beso es lento, lleno de promesas y amor. Su lengua acaricia mi labio inferior y me hace jadear. Lo tomo por el cabello y lo beso con más ganas aún.

-Sino paramos...no podremos bajar a la boda-dice pagado a mis labios.

Nos separamos y el me da un último beso en los labios y sale. Me aliso el vestido y suelto un suspiro. Ahora de bajar y ser la esposa de Dan Colleman. Bajo las escaleras poco a poco, para no tropezar y caer. Camino hasta el jardín y veo a Nick vestido con su camisa rosa pálido y me sonríe.

-Te vez hermosa...¿lista?

-Lista -respondo y sonrió.

Caminamos fuera del jardín de la casa y bajamos los escalones que dan a la playa. Caminamos unos metros más y veo las sillas y las personas sentadas en ellas. Respiro hondo y sigo caminando. Cuando nos acercamos más, los demás se levantan y sonríen. Sonrió y levanto la mirada encontrándome con los ojos de Dan. El me sonríe con dulzura y yo le respondo igual. Dan está vestido igual de blanco y se ve tan guapo así. Cuando llegó Nick le entrega mi mano a Dan y luego mi hermano besa mi mejilla

y se pone en su puesto. Dan mueve sus labios formando la palabra te amo y yo le respondo con un yo más. La brisa del mar alborota mi cabello y llena mis pulmones. Es la boda de mis sueños.

Al terminar la ceremonia regresamos al jardín y yo voy de la mano con mi esposo. Es tan lindo decir que Dan es mi esposo. La fiesta es alegre y divertida. Me e reído como nunca en mi vida y debes en cuando le lanzó miradas a Dan. El me sonríe y me aprieta la mano. Cuando veo la melena rubia de Sarah le digo a Dan que iré con ella y el me dice que quiere hablar más tarde con mi hermano. Antes de llegar a Sarah veo a James. El esta perdido con la vista al mar y me acercó a él.

-Estarían orgullosos de ti y Kate -dice en cuanto llegó a su lado.

-Y de ti también -respondo y el se gira a verme-. También los extraño.

El sonríe y me abraza. En verdad los extraño, pero es reconfortante tener a mis hermanos junto a mí. Un dolor me hace gruñir y alejarme de James. El me mira desconcertado y yo me llevo las manos a mí barriga. El dolor vuelve y no puedo evitar soltar un grito. 

-¿Estas bien? -pregunta y yo medio que asiento.

De nuevo otro dolor y hago una mueca. Siento como algo se desliza por mis piernas y luego siento agua en mis pies.

-James...llama a Dan -digo y el sale corriendo a buscarlo.

Dan viene corriendo hasta mí lado y pone una mano en mi cintura.

-¿Qué ocurre? -pregunta y yo me agarro de uno de sus hombros.

-Suzanne ya viene...-digo y muerdo mi labio

-¿Qué? ¿ahora?

-¡Si ahora, pedazo de idiota! -grito haciéndolo saltar.

Todos

voltean a vernos y Dan se pone pálido. No...ni se le ocurra... Cae al piso inconsciente. Mierda, lo que me faltaba.

-¡Kate! ¡La bebé ya viene! -grito y ella corre hacia mí.

Ella llega hasta mí y me toma del brazo. Yo trato de no gritar...porque esto verdaderamente duele. Carajo.

-¡Nick! -grita y este llega rápidamente a mí lado-. Carga a Kara hasta el auto.

Nick me levanta y yo hago otra mueca de dolor. 

-James despierta a Dan -le ordena Kate a James-. Nosotros llevaremos a Kara al auto...no tarden -luego me mira-. ¡Zack cuida a los gemelos! ¡Nick vayámonos!

Nick sale corriendo conmigo en brazos y Kate detrás. Yo solo gruño y pongo las manos en mi barriga ¿es en serio Suzanne? ¿Precisamente hoy tenías que nacer? Y tú padre se acaba de desmayar. Nick entra a la casa y pasa como una bala hasta la entrada, y sigue cargándome. Escucho a Kate llamar a alguien y luego salimos de la casa. Me llevan hasta la camioneta de Dan, Nick me sube con cuidado y se pone al volante. Kate se sienta junto a mi, tomando mi mano fuertemente. Hago las respiraciones que me enseñaron y miró por la ventanilla. Veo a Dan y James correr como locos hacia acá. James se arroja al asiento de copiloto y Dan sube junto a mí. 

-Todo estará bien -dice y toma mi mano-. ¿Te duele mucho?

-Qué no esté gritando como en las películas, no significa que no duela ¡idiota! -respondo con los dientes apretados.

Nick conduce lo más rápido que puede al hospital, cuando llegamos Dan me carga en sus brazos y me lleva hasta dentro del hospital, donde me ponen en una silla

de ruedas. Nos detenemos en recepción dónde mi doctor llega rápidamente.

-Alguien debe de entrar con ella -dice y todos los ojos se van a Dan.

-¡Yo! -grita y se pone a mí lado.

Una enfermera llega y comienza a llevarme a la capilla de partos. Tengo tanta suerte que el parto será natural, ya que estoy muy dilatada y no podré recibir la epidural. Joder. Me acuestan en un camilla, me quitan el vestido, poniéndome una bata y poniendo mis piernas en posición. Dan se pone a mi lado, tomando mi mano y yo la aprieto fuertemente. Dan no dice nada por la fuerza que estoy ejerciendo en su mano...se que le estoy haciendo daño. Pero me importa un carajo, esto duele en verdad y mucho. 

-Puje señora Colleman -dice el doctor y obedezco.

Pujo con todas mis fuerzas y escucho a Dan decir que lo hago bien... Si, claro.

-Ya casi -dice Dan y yo gruño.

Vuelvo a pujar y el dolor me recorre todo el cuerpo. Y Dan vuelve a decir que lo estoy haciendo muy bien.

-¡Maldita sea, cállate Dan! -grito y vuelvo a pujar.

-Ya salio la cabeza...ya falta poco -dice el doctor y vuelvo a tragar aire.

Pujo una vez más, siento el dolor punzante y luego un gran alivio. Me desplomó en la camilla cerrando los ojos y escucho el llanto de mi bebé. 

-Felicitaciones es una niña -dice el doctor.

Eso ya lo sabía. Digo en mi mente y abro los ojos. Veo a Dan sonríe con lágrimas de felicidad y luego dejó de sentir su mano. Luego veo con una cobija rosa entre sus brazo y un llanto proviene de ella. El sonríe y me mira con ojos brillantes. Sus ojos se ven más eléctricos

y al verlo cargando a nuestra hija las lágrimas de felicidad salen y sonrió.

-Mira Suzanne, aquí está mamí -dice Dan y pone a Suzanne en mis brazos.

Cuando la tengo en mis brazos mi sonrisa se expande y sollozo. Es hermosa, es tan pequeña y es nuestra.

-Es perfecta -susurro y miró a Dan.

-Igual que su madre -dice y besa mis labios.

Me e vuelto la mujer más feliz del mundo en este momento. Tener a mí pequeña en mis brazos y a mi lado al amor de mi vida es lo mejor de todo el mundo. No puedo pedir más. El dolor a válido la pena al tener a mi Suzanne entre mis brazos. Es el mejor regalo que una mujer podría tener y agradezco a Dios por que haya nacido bien. La miró por última vez antes que se la lleven y beso su frente.

-Bienvenida al mundo mi pequeña Suzanne -susurra Dan y me sonríe dulcemente.

______________________________

Años después...

-¡Mami! ¡Mami! -grita esa linda vocesita

Los gritos provienen de arriba y me levanto del sofá sin ninguna prisa. Se que sus gritos no son por llanto. Cierro el libro y salgo de la sala. Camino hacia las escaleras y mi pequeño viene corriendo hacia mí. El cabello negro azabache brilla al igual que sus enormes ojos azules. 

-¡Mami! -chilla y pone sus manitas en mis piernas-.¿Es cierto lo que dijo Susi?

Me agachó un poco y tomó su rostro entre mis manos. Su lindo rostro parece curioso y sus ojos azules igual que a los de sus padres se ven ansiosos. Mi pequeño de grandes ojos azules tiene tres años y es igual a su padre. 

-¿Qué te dijo

Suzanne? -pregunto y frunzo el ceño.

-Dijo que te comités una sandía -dice y señala mi barriga-. ¿Es cierto?

-No amor...-digo y despeino su cabello.

Escucho la puerta abrirse y mi pequeño chilla de alegría y corre hacia ahí. Dan entra a la casa y cuando cierra la puerta Dom se avienta a sus brazos sonriendo. Amo ver esta escena todos los días.

-Hola campeón...-dice y besa su mejilla.

Dom susurra algo en el oído de Dan y luego Dan ríe. Luego su papá le susurra algo a él y veo como el rostro de Dom se horroriza. Luego frunce el ceño y me mira ¿de que hablan? Dan baja a Dom y este corre de nuevo a mi lado.

-Mamí.... ¿Es cierto que te comités a un niño? -pregunta y vuelve a señalar mi barriga.

Alzó la vista y miró a Da. Le pongo cara de pocos amigos y el se encoje de hombros sonriendo. Vuelvo a poner los ojos en mi pequeño.

-No, Dominic...-digo, tomó su manita y la pongo en mi barriga-. No me comí a nadie... Aquí dentro están tus hermanitos.

Digo suavemente y el junta más sus negras cejas. Estoy embarazada...de nuevo. Tengo siete meses y es suficiente para que los gemelos se muevan y pueda sentirlos. Sip, estoy esperando gemelos y mi intuición dice que serán niñas. Dom sonríe poco a poco y pone su oreja en mi vientre.

-No escucho nada...pero si sentí que se movían -dice pegado a mi vientre-. Susi me mintió.

Dice y se aleja. Miró a Dan y este sonríe ¿Como es posible que le diga a nuestro pequeño que me comí a un niño? Es un imbécil. Dom sale disparado hacia las escaleras gritando a su hermana mayor. Suzanne

ahora tiene seis y le gusta jugarle bromas a su hermano. Dan se acerca a mi y besa mis labios apasionadamente que hasta me sorprende que lo haga... Algo quiero o hizo algo.

-¿Qué quieres o más bien que hiciste? -pregunto cuando deja de besarme.

-¿No puedo besar a mi hermosa esposa? -dice y levanto una ceja-. Ok, invite a los demás a pasar navidad aquí.

-Eso no me molesta...-digo y beso sus labios-. Me molesta que apuestes con Zack, James y Nick sobre el sexo de nuestros bebés.

-Sabes bien que van hacer niñas y ellos dicen lo contrario...bueno James me apoya -dice y pone sus manos en mi barriga.

-Bueno...ya es de noche y los niños tienen que dormir -digo y el no me presta atención.

Dan está ido viendo mi barriga y luego sonríe. Me mira con un brillo malicioso en sus ojos y yo retrocedo.

-Dan...no. Los niños están despiertos -digo y el hace un puchero.

-No por mucho -besa mis labios rápidamente y sale disparado hacia las escaleras.

Río negando con la cabeza. Nunca cambiará. Pienso en que sólo falta tres días para navidad y la casa estará llena. Amy vendrá con su novio y su hija Emma. Kate, Zack, Mason y Mara vendrán ese día. Pero ellos no se quedarán porque viven a tres casas de aquí. Kim, Nick y el pequeño Jeremy se quedarán. James vendrá con su nueva novia Gemma (creo que así se llama) también vendrán y no sé si Sarah vendrá.

Estos seis años han sido de los mejores, tuve a mi pequeño Dominic, Dan fue acendido y yo también. Sigo trabajando para la empresa publicitaria y amo mi trabajo. En estos años James

se graduó en literatura inglesa, ahora es escritor y vive en otra ciudad de California. Nick y Kim se casaron en Nueva York , tuvieron al pequeño Jeremy hace un año y siguen viviendo felizmente en Nueva York. Amy se casó tres meses después que yo, se divorcio hace cuatro años, tiene a su hija Emma de cinco años y ahora está en una relación de casi tres años, vive en Washington y sigue trabajando como Chef. Kate y Zack nos visitan casi a diario con los gemelos de ya ocho años, están muy grandes y Mara siempre viene a jugar con Suzanne.

-Mami...

Escucho la voz de Suzanne y me giro a verla. Esta con su pijama rosa de mariposas, su cabello negro trenzado y sus ojos azules están somnolientos. Le sonrió y subo las escaleras. Me toma de la mano y me lleva hasta su habitación. Cuando entró veo a Dom dormido en su alfombra y río bajo.

-Se quedó dormido -dice Suzanne y asiento-. ¿Dónde está papá?

-Eso es la que voy averiguar -digo y salgo de nuevo.

Camino hasta nuestra habitación y lo encuentro en boxers. Lo miro de pies a cabeza y me acercó a él lentamente. Cuando llegó recorro con mi dedo índice su tatuaje y el se estremece.

-Dom se quedó dormido en la alfombra de Suu -digo y él se gira-. Aún que está vista no está nada mal.

El ríe, se gira a verme y me da un corto beso. Toma mi mano, busca mi tatuaje y lo besa delicadamente. 

-Eres una sucia -dice y yo abro la boca.

-¿Sucia yo? -pregunto ofendida.

-Si, tu -dice y se gira.

Camina hasta un de los cajones, lo abre, saca un pantalón de dormir y una camisa grande.

Se pone el pantalón y me lanza la camisa. Dejó la camisa en la cama y caminamos a la habitación de Suu. Dan ríe al ver a Dom dormir plácidamente en la habitación de su hermana. Lo toma en brazos y sale con él dormido. Busco a Suu y ni rastro de ella. Creo saber donde esta. Salgo de la habitación y voy a la de Dom. La habitación de Dom tiene animales pintados por doquier y su cama tiene estampado de animales. Veo a Dan dejarlo con cuidado en su cama, lo arropa y besa su frente. Me acercó a él y lo imitó.

-Dulces sueño Dom -susurro y apagó su lámpara de forma de jirafa.

Camino hasta la puerta con Dan detrás de mí y apagamos la luz de su habitación. Entrecierro su puerta y suelto un suspiro.

-Hay que ir por Suu -digo y Dan asiente.

Entrelaza nuestros dedos y bajamos las escaleras. Caminamos por un pasillo, abro lo puerta y ahí está. Suzanne duerme profundamente en un sillón con un libro en sus piernas. Me acerco a ella, tomó el libro y lo leo. Astronomía. Guardo el libro en la repisa y veo como Dan la carga. Suu dice algo y su padre la arrulla. Dan es un gran padre desde el momento en que la tuvo entre sus brazos. Salimos de la habitación, subimos la escaleras y entramos a su habitación. Dan la deja en su cama y yo me acercó para arroparla. Beso su mejilla y camino hasta la puerta.

-Dulce sueños princesa -susurra Dan y sonrió.

Salgo de la habitación y camino hasta la nuestra. Dan entra segundos después que yo y suelta un suspiro. Yo me quito la ropa, quedando solo en bragas y me pongo su camisa. Me queda bien y huele a él. Dan apaga la luz y nos acostamos en la cama. Yo pego mi espalda a su pecho y Dan pone uno de sus brazos debajo de mi cabeza y el otro rodeando mi cintura. Besa mi cabello y yo me acurruco junto a él.

-Te amo bambi...-susurra pegado a mi nuca.

-Te amo Dan -respondo susurrando

Y todo queda en silencio con esas hermosas palabras que salen de su boca. Nunca me canso de escucharlas todo el día. Estar casada con Dan es lo mejor, pasar el tiempo con él y los niños me hace olvidar el pasado lleno de pérdidas y me hacen ver un futuro. Aunque me encantaría tener a mis padres se que ellos están cuidando de mis hermanos y yo en algún lugar de haya arriba. Fue un camino largo y difícil, lleno de lágrimas y risas pero el final es hermoso. Tengo una familia hermosa, unos hijos adorables y sin contar a mi sexi esposo que todos los días me dice lo hermosa que soy...claro que lo dice más cuando quiere sexo. Pero nunca de los nunca me canso de escucharlo decir cuanto me ama. Dan es todo para mí, no tengo palabras para decir cuanto lo amo y se que todos los días me enamoró más de aquel chico de ojos azul eléctrico y de su carácter. Cada momento con él me hace sonreír, el día que lo conocí, cuando me tuvo que curar por mí caída de borracha, nuestra primera vez, nuestra boda, el nacimiento de Suzanne, nuestro aniversario, el nacimiento de Dominic y muchos más recuerdos que nos faltan por vivir. Amo a mis hermanos. Amo a mis hijos y amo con locura a Daniel Colleman con toda mi alma.

 El pasado quedó atrás y sólo queda el presente junto a mí bella familia.

Fin.